Una separación necesaria

Una separación necesaria

sábado, 17 de junio de 2017

CAPÍTULO 84

                               
                
                                  INTROMISISONES


Tristán entra en la gran sala mostrando dos cigarros puros a  Clark.
- ¿De la Habana?- Pregunta  tomando uno de la mano de Tristán.
- ¡Sí! Los traigo especialmente desde Cuba.-  Le comenta  y apunta hacia las puertas francesas que llevan a la terraza.
- Nada va mejor con un buen puro que un vaso de Jerez.- Clark afirma con un gesto de entusiasmo. Tristán piensa por un momento.
– En el estudio, lo  hallará en la bandeja, por el pasillo y a su izquierda, nos encontraremos fuera, la cena se servirá en unos treinta minutos.- Le informa. Clark se dirige por el pasillo y al entrar en el estudio escucha voces, se asoma por la rendija abierta en la puerta y se queda paralizado al ver a dos mujeres aferradas en un fuerte abrazo.  
– Rebecca, realmente no debería.-  Ella le ordena en voz baja. Rebecca empuja a Marlene más hacia a la mesa.
- ¿Por qué no? Estamos solas.-  Ella intenta un beso.   
- Alguien puede vernos, de verdad, déjalo.-  Marlene le vuelve a ordenar.
- Yo no quiero parar.- Protesta. Clark siente que se le aceleraba el ritmo cardíaco.              
- Podríamos quedar atrapadas y sería vergonzoso.- Marlene intenta liberarse cuando Rebecca intenta desabrocharle la camisa. Agarra la mano con fuerza para detenerla. Rebecca se echa hacia atrás.
- Podríamos ir a divertirnos, escapar de aquí sin que se note.-  Ella la besa suavemente.
– De ninguna manera, no creo que sea una buena idea. ¿Cómo vamos a explicarlo?-  Marlene intenta ser razonable. Clark apenas puede respirar por temor a que pudieran oírle, retrocede gira y regresa por el pasillo y pasa entre la gente.
-Tristán está esperando en la terraza por usted.- Emily le dice tocando su hombro. - Sí, se me olvidó donde está.- Él ha salido a la terraza.
- ¿No te estabas sirviendo un jerez?-  Mira a Tristán con una tímida sonrisa.
- ¡Lo siento! Me he metido en el servicio y me olvidé del jerez.- Tristán le devuelve el cigarro.
– ¡Bueno! Entonces…- Encienden sus cigarros saboreando el humo que enfría sus gargantas.
- ¿Cuáles son tus intenciones con Helena?- Tristán le cuestiona de forma intencionada.
- ¿Qué quieres decir?- Clark responde.
- Mi hermana no ha tenido un buen historial en lo que concierne los hombres. Ella ha sido herida y defraudada en el pasado. Es mi hermana gemela y me preocupa.- Él le habla completamente en serio.
- Me preocupo profundamente por Helena, ella es hermosa e inteligente y nos llevamos bien.-  Responde inhalando otra bocanada de su cigarro.
– Excúsenme, les cuento.- Justus habla desde la puerta abierta. - La cena está lista para ser servida.-  Tristán mira por encima del hombro de Clark.
- Vamos en breve, gracias Justus.- Inclina la cabeza y cierra la puerta.
- Como iba diciendo, yo me preocupo por Helena y su bienestar.  Espero que su devoción y dedicación a ella sea real.-  Comenta con franqueza.
- Yo te puedo asegurar que realmente me preocupo por ella, tenemos una buena relación, no tengas reparos.- Tristán parece cómodo con sus explicaciones.
- ¡La cena!- Le dice tocando su hombro y caminan de regreso y se sientan.
- ¡Rebecca!- Helena agarra a Rebecca con un gran abrazo.
- ¡Qué alegría verte de nuevo Helena! Tenemos mucho de qué hablar.-  Ellas toman sus lugares en la mesa.
- ¿Usted debe ser Clark?- Se presenta con un apretón de manos.
- Soy Rebecca, la hermana menor de Helena.-  Él sonríe apretando su mano con fuerza.
- ¡Ah¡ Sí, encantado de conocerte.- Marlene llega detrás de ellos.
- ¿Clark?-  Ella muestra su sonrisa y le estrecha la mano.
– Yo soy Marlene.- Él asiente con la cabeza. Se  sientan y les sirven la cena. Mientras comen, conversan de forma indiscriminada.
- Por Emily y Tristán.- Helena levanta su copa haciendo un brindis por ellos, las  copas de vino se alzan en la sala.
- Que tengáis años de felicidad.- Rebecca añade contenta. Ella desliza su mano debajo de la mesa para tocar la pierna de Marlene  haciendo que se estremezca  y mirarla con recelo. – ¡Rebecca!- Susurra en voz baja. Rebecca ladea la cabeza y le da una sonrisa sensual al mirar. Termina la cena y se desplazan todos a la gran sala para las copas.
– ¿Nos vamos a casa?- Rebecca se acerca por detrás de Marlene y Tanja.
- ¡Rebecca! ¿No quieres hablar con tu hermana?- Pregunta Tanja. - Tengo un montón de tiempo para verla, además, está ocupada con su nuevo galán, Emily y Tristán.-  Murmura.
- ¡Es guapo!-  Expresa  Tanja relajada mirando a su rostro y delgado físico cuando Marlene le da un codazo.
- ¡Tanja!-  Exclama recriminando sus actitud.
- Marlene tú estarías de acuerdo en que es muy guapo y robusto.-  Ella se ríe con picardía. Marlene presta su atención sobre Clark para decir.
- Sí que es guapo y encantador, y Helena parece muy feliz al igual que él.- Viendo a los dos hablando con Tristán y Emily.
- ¿Dónde está Sebastian?-  Rebecca interrumpe con una pregunta.
- Jugando al billar.- Ella responde mirando a Clark por encima. Marlene asiente a Rebecca. 
- Supongo que deberíamos ir a casa, tengo un día difícil mañana.- Le expone.
– Está bien Rebecca.- Tanja la mira cruzando los brazos.
- Supongo que te irás a dormir temprano.- Rebecca le corta con una mirada mientras ella y Marlene se alejan.  
- De alguna manera creo Tanja tiene deseos sobre Clark.- Rebecca murmura sentada en el borde de la cama y quitándose la ropa.
- No seas lela, ella sólo coquetea.- Marlene contesta mientras cuelga la camisa y los pantalones de nuevo en la percha.
- ¡Ven a la cama!- Rebecca le pide mientras cubre su cuerpo desnudo con las sábanas.
- No esta noche, estoy cansada y tendré una mañana ocupada, además  tenemos que hablar de mi entrevista de trabajo.- Rebecca se anima y sonríe a modo de disculpa. - Se me olvidaba, lo siento.- Ella palmea la colcha con la palma de la mano y con una sonrisa le pregunta de nuevo para que acuda a la cama. Marlene se desliza entre las sábanas tumbándose frente a Rebecca. - Bueno, dime.- Ella le pide en voz alta, Marlene se ríe entre dientes.
- Me han planteado una oferta maravillosa, aunque debo tomarme unos días para pensar en ello.- Rebecca sigue escuchando. - Tienen una guardería en el recinto, donde los padres pueden estar con sus hijos, cuando y cada vez que quieran, yo tendría mi propia oficina con un asistente y mi horario sería de mañana con una sola clase la tarde de los miércoles.- Dice con mucha confianza. Rebecca agarró un mechón de su cabello y suavemente lo retorció en su dedo índice.
- Te amo y estoy muy orgullosa de ti y tus habilidades.- Ella le susurra.
-Tengo mucho que pensar, no quiero saltar a algo que no haya pensado bien.- Explica con una mueca jocosa, allí los labios se encuentran.
– Y yo te apoyo con la decisión que tomes, lo que quiero es que seas feliz Marlene.- Ella le dice con cariño. - Pero ¿Qué pasa con el bebé? Seguramente saben que no podrás trabajar antes de que termine el semestre. -  Rebeca expone con razonado pensamiento.
– Discutimos ese mismo asunto y el Profesor Schumer sugirió que instruya a mi asistente mientras yo estoy de baja por maternidad. Debería empezar a trabajar en torno a la primera semana de agosto, las clases comienzan en el veinticinco y  que me daría tiempo para entrenar a alguien. -  Ella expone el contenido de la entrevista.
- Estoy detrás de ti con lo que decidas.- Le comenta besando sus labios de nuevo.

Helena se pone su pijama para meterse en la cama y coge un libro de la mesita de noche y se acuesta.
- ¿Estás despierta?- Clark le toca en la espalda y ella se da la vuelta.
- Sólo descansando mis ojos.- Se sienta a su lado, ella abre las páginas de su libro.
- Fue una noche agradable, tu familia parece maravillosa y aceptan mí presencia sin dificultades. Tristán estaba un poco preocupado por nosotros.- Helena pone el libro a encima de su estómago.
- ¿Tristán preocupado por nosotros?- Ella le mira con sorna.
- He aliviado sus tensiones, no te preocupes.-  Él se acerca a besarla.
- Tu hermana Rebecca…- Él empieza a hablar de nuevo.           
- ¿Qué pasa con ella?- Ella muestra curiosidad por su pregunta.
- ¡No sé! ¿Me dices algo acerca de ella?- Él pregunta encogiéndose de hombros.
- Ella es diseñadora de moda con mucho talento, inteligente, completamente volcada en su trabajo y tiene una esposa de la que está enamorada. ¿Por qué?- Ella le habló mirando.
- ¡No sé! Parece un poco distante.- Él sonríe.
- Ella es joven y muy tenaz. ¿Es algo que te molesta?- Ella interrogó él parecía perplejo.
- ¿Así que ella está casada?- Su pregunta atrapa a Helena por sorpresa, ella se ríe. - ¡Sí! Sí lo está.- Clark la mira extrañado.
- ¿Tiene su esposo conocimiento de que ella está teniendo un romance con una mujer que está muy embarazada?-  Él  declara  sin freno en sus pensamientos.
- ¿Qué?-  Ella le grita. - ¿Qué estás diciendo? Estoy confundida, la mujer que está embarazada es Marlene, su esposa.-
Ella le da un codazo en las costillas, se reía a carcajadas. Clark se siente avergonzado.
- ¿Así que tu hermana está casada con la rubia?- Le pregunta de nuevo.
- ¡Sí! Tienen una historia tan…- Ella le responde. - Probablemente sea la razón por la que Tristán te acorraló.- Ella argumentó en voz baja.
- ¿Qué significa eso?- Él parece perdido por lo que ha escuchado. Helena pone el libro en la mesita de noche.
- Marlene y Tristan iban a casarse, mi hermana estaba enamorada de ella, fue una situación difícil, complicada y prolongada. Marlene luchó contra sus sentimientos por Rebecca, pero no pudo huir del hecho de que ella estaba enamorada también. Dejó a Tristán en día de la boda y admitió sus sentimientos a Rebecca. Tristán sacó de si lo más negro de su personañidad, literalmente, se sintió devastado y fuera de control. Él tiene un lado oscuro y puede ser muy cruel.- Ella  le expresa con sinceridad.
- Así que ella le dejó el día de la boda, no puedo imaginar lo que debe de sentir sabiendo que ella era el amor de su vida.-  Clark gruñó en voz alta.
- Fue desafortunado si, ella podía heberlo llevado a cabo antes de la boda. Me enfrenté a mi hermana al respecto, pero ella también estaba sintiendo ese daño y me sentí mal por las dos.-  Le dice.  
- Lo siento por Tristán.- Helena frunce el ceño.
- ¿Por qué?  Ha conocido a una mujer que se dedica a él y lo ama con todo su corazón, no estaba destinado a estar con Marlene.- Clark la miró.
- Parece que Rebecca fue como un ladrón en la noche que entra y le robó su mujer.-  Helena percibe por lo que acaba de decir, por su tono de voz, que él tiene un problema con Rebecca.
- Se necesitan dos Clark, no se puede culpar de todo a Rebecca, Marlene tenía una mano en ella también. Marlene no amaba a Tristán, Rebecca era su destino y su apoyo.- Responde ella y apaga la lámpara. - Rebecca es mi hermana y debe ser respetada.- Ella se cubre con las mantas hasta los hombros.
- ¡Buenas noches!- Se frota el brazo.
- ¡Buenas noches!- Ella le susurra. Clark pone sus manos detrás de la cabeza y mira hacia el techo.      
- Éste va ser un verano interesante.- Habla para sí mismo.

- ¿Te vas a quedar en casa hoy?- Rebecca pregunta a Marlene con un bostezo mientras sale de la cama.
- ¡Sí! Tenemos una cena esta noche o ¿Lo has olvidado?- Le pregunta desde el vestidor.
- ¡No! No lo olvidé.- Ellas se tropiezan en el cuarto de baño.
- ¿Vas a ir a LCL hoy?- Marlene preguntó a pie de puerta.
- ¡Sí! Un rato, tengo algunos informes para entregar a Tanja y un informe de gastos para dejar a Elisabeth esta mañana.-  Le informa.
- No vuelvas demasiado tarde, tengo cosas que debes hacer.-  Rebecca termina de vestirse, se sienta a desayunar y abre el periódico.
- ¿Revueltos o fritos?- Pregunta Ruth.
- Fritos, resulta más fácil, por favor.-  Ella toma un sorbo de su café.
- Tengo una cita con los médicos la próxima semana.- Ella le recuerda a Rebecca.
- ¿Qué día?- Pregunta mirando por encima del periódico.
– ¡El Jueves! ¿Vas a estar en la ciudad?- Le pregunta.
- ¡Sí! Iré a Amsterdan el martes,  un viaje de un día. Tanja quiere que asista a un seminario para nuevos reclutas de la moda.-  Marlene agita su té.  
- ¿Ella asistirá también?- Rebecca se encogió de hombros.
- ¡Sí! Saldremos la noche del lunes.- Marlene mira con gesto distendido.
-Te veré más tarde.- Rebecca dobla el periódico, toma su último bocado del desayuno, besa a Marlene con mirada cariñosa.
- ¡Te quiero!- Y se apresura hacia la puerta para dirigirse al castillo. Rebecca encuentra el castillo bastante solitario. Entra en el estudio.
- ¡Rebecca!- Elisabeth se acerca a ella en la puerta.
- ¿Vas a unirte a nosotros para el desayuno?- Le pregunta al recoger un cuaderno y sus gafas de lectura.
– Solo un café, he desayunado, gracias.- Le responde mientras caminan juntas hacia el comedor.
- ¡Rebecca!- Helena levanta la mirada.
- ¿Vienes a desayunar con nosotros?-  Rebecca se sienta junto a su hermana.
- ¡Clark!.- Le saluda con un movimiento de su cabeza.
- ¡Buenos días Rebecca!-  Él se hace eco.
- Tengo el informe de gastos del mes de mayo  preparado para dártelo.- Ella abre su portafolios y le entrega unos papeles a Elisabeth, se coloca sus gafas de lectura y lo miró por encima.
- ¡Tanja, Sebastián!- Helena saluda cuando entran y se sientan.
- ¡Buenos días a todos!- Tanja responde. 
- ¿Café Condesa?- Justus comienza a servir  las tazas.
- ¡Gracias  Justus!-  Rebecca expresa volviendo su atención hacia Tanja.
- ¿Vas a venir a LCL esta mañana?- Tanja preguntó.
- ¡Sí! Tengo esos informes listos, debemos discutir lo de Amsterdam y tengo que ver qué tanto ha avanzado Sophia con su colección.- Ella aborda directa el tema.
- En realidad lo está haciendo bastante bien y estoy impresionada con lo bien que lo está haciendo Natasha. Debería decir que no hemos tenido un equipo de diseño tan bueno desde hace tiempo.- Rebecca sonríe.              
- Natasha ha sido un sueño descubrirla.- Expresa satisfecha.
- ¡Buen trabajo Rebecca.- Elisabeth interviene. Rebecca se aclaró la garganta.
- Marlene y yo estamos muy contentas de que todo el mundo venga a la cena en nuestra casa esta noche.- Expresa a todos. Helena habla con algo de sorpresa.
– Me han dicho que ella está entusiasmada con la cocina.-  Le dice dejando su taza de café en el plato.         
- Es una excelente cocinera y ha trabajado muy duro para aprender. He de decir que cuando nos casamos no pensé que podría hacerlo, pero me ha demostrado  lo equivocada  que estaba.- Afirma consiguiendo una risa de Tanja. - Ahora bien, si todos ustedes me disculpan, tengo mucho que hacer. Hoy me han dado la orden de estar en casa pronto.- Expresa en tono de ironía.  - Os veré esta noche.- Bebe el último trago de su café y se ausenta.

Sophia corta los patrones mientras Natasha saca muestras de material para su colección.
- He oído decir a Tanja que las cosas van bien por aquí.-  Rebecca sorprende a ambas.
- ¡Buenos días!- Sofía se detiene, Natasha sonríe.
- ¿Cómo han ido las cosas en Roma?-  Le pregunta poniendo sus muestras de material en la mesa.  
– Bien. Roma está hermosa en esta época del año, aunque yo no pude ver mucho.- Añade con una sonrisa.
- Abby y yo estamos planeando un viaje de otoño allí.-  Ella sonríe sabiendo lo que Rebecca siente por Abby.
- ¡Bien! Eso es bueno.- Ella le responde.
-Tal vez podrías dejarla allí.-  Ella comenta en voz baja. Sophia la mira extrañada.
- Voy a guardar el resto de esos rollos de material.-  Comenta Natasha.   
- ¿Qué fue eso? Abby parece agradable.- Sofía interrumpe con una mirada dura.     
– En realidad es una perra.- Rebecca no se corta y hace una mueca.  
- ¡Oh! Pues ella ha sido más que agradable conmigo.- Ella responde con asombro.
- Tú no tienes lo que ella quiere.- Las palabras de Rebecca son abrasivas. Sabe que está con Natasha. Sophía le echa una mirada seria y continúa hablando.
- ¿No me digas que ella está celosa de su relación de trabajo con Natasha? - Sophía pregunta perpleja. 
- No tiene nada que ver con Natasha y todo que ver con Marlene, pero eso es para otro momento, tengo una cita con Tanja.-  Ella comenta recogiendo pedazos de material y arrastrando los pies por encima de ellos.
- Te enseñaré el diseño de verano que estoy trabajando.-  Saca un pantalón y una camisa a conjunto colocándolos delante de ella y lo coloca en un maniquí.
- ¡Me gusta!- Rebecca sonríe.
- Me gusta que hayas decidido hacer una línea de ropa más informal.- Ella comentó. - He decidido dejar la ropa de noche a Emily mientras yo me puedo centrar en este estilo. Natasha está ansiosa y aprende rápido.-  Ella refuerza su comentario con una sonrisa.           
- Cómo van las cosas, he estado muy ocupada, mi agenda de viajes de este verano no me va dejar demasiado tiempo para sentarme y diseñar un poco contigo. - Sophia se siente eufórica.
- Tendremos oportunidad en algún momento.- Su mano toca el hombro de Rebecca que la mira pensando en que debería irse a la oficina de Tanja para esa reunión. Retira la mano y aparta los ojos de Rebecca.
- ¡Sí! Puedes, te veré pronto.-  Rebecca traga saliva y se aleja pensando en el beso que compartieron. Arrastra su mente a una crisis de la verdad sin resolver. Comienza a pensar otra vez que tenía que confesarlo con Marlene. Niega con la cabeza y se dirige hacia la oficina de Tanja, saca los informes de su maletín, los pone sobre su escritorio y  toma asiento mientras Tanja los examina.
- He pensado que tenías razón, no voy a enviar Kim a Ankara después de todo.- Comenta después de leer y dejar los informes en la mesa. 
- Ella estará en Salzburgo la semana que viene unos días y luego irá a Bangkok.- Rebecca le señala y anota en su agenda, mira hacia ella.
- Creo que es una buena decisión.- Le responde.
- Necesito que estudies esos folletos con Kim. Sebastián y yo estamos listos para comenzar las obras en Madrid.-  Ella le dice con entusiasmo.
- ¿Supongo que ya  has elegido una ubicación allí?-  Rebecca le pregunta.
– La tenemos y Sebastián se entrevistará con los contratistas la próxima semana.-  Rebecca escribe un par de notas más en su agenda. Tanja pensó por un momento.
- Elisabeth planifica la creación de una conferencia con nosotros la siguiente semana. Vamos a tratar de dar nombres permanentes a todas las colecciones de LCL.-  Ella se detiene brevemente. Rebecca arquea una ceja.
- ¿No era que, esa obra está hecha ya? Me refiero a la línea de ropa interior y recogida matiz de Emily, junto con la línea de los adolescentes tendrán nombres permanentes.- Rebecca pone una mirada de confusión en su rostro.
- Con el negocio expandido a otros países y mercados, debemos racionalizar las colecciones y continuar añadiendo a ellas nuevas líneas, frescas como la que Sofía está trabajando que se necesitan para inyectar nueva vida a LCL, hemos tenido grandes colecciones en el pasado que son marcas comerciales de LCL. ¿Por qué no usarlas a nuestro favor?-  Rebecca se queda sin habla, pero toma la situación con calma.
- ¡Ya veo! ¿Así que es lo que estás pensando? Estamos en pleno verano y casi listos para prepararnos para Riga.-  Ella le recuerda.
- Quiero renovar la colección de fantasía húmeda, añadir nuevos trajes de baño para todas las edades, este será el punto culminante de nuestro show de primavera.-  Rebecca protesta.
- Fantasía húmeda ha sido buena para nosotros en versión adulto pero nunca he pensado en extenderlo a los niños, ya que era una colección de adultos con temas adultos. ¿Cómo propones que lo introduzcamos para que los vistan niños y adolescentes? - Rebecca parece molesta cuando le pregunta. Tanja sonríe con picardía,
- Estoy segura de que tú y Sophia podéis poner vuestras cabezas para llegar a una idea.- Le comenta con astucia dejando a Rebecca con sensación de inseguridad.

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