tag:blogger.com,1999:blog-71895879687032711482024-02-19T17:27:02.828+01:00¿Que fue de Marlene y Rebecca?(Sólo estrictamente para fines de entretenimiento)
Un nuevo relato con dos personajes diferentes que nada tienen que ver con M&R. Es una historia surgida de una idea inicial que leí en un post hace tiempo. Francisco Freijaneshttp://www.blogger.com/profile/07136887969142331609noreply@blogger.comBlogger189125tag:blogger.com,1999:blog-7189587968703271148.post-36150681816733393232023-05-10T17:52:00.000+02:002023-05-10T17:52:52.393+02:00<p> </p><p class="MsoNormal"><b style="mso-bidi-font-weight: normal;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS"; font-size: 14.0pt; line-height: 115%;">Te
quiero. Pero no a mi lado.<o:p></o:p></span></b></p>
<p class="MsoNormal"><b style="mso-bidi-font-weight: normal;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS"; font-size: 14.0pt; line-height: 115%;">9.</span></b><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS"; font-size: 14.0pt; line-height: 115%; mso-bidi-font-weight: bold;"> Algo indeseado<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">Pasan los días, para Laura y Marian es como
estar de luna de miel. Después del trabajo vuelan a meterse en la cama de
Marian y hacer el amor. Laura consiente en quedarse alguna noche a dormir con
ella. Se busca una disculpa con sus padres y acude a su encuentro. Desnudas,
pero arropadas en la cama, se miran con pasión mutua y las miradas encendidas. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">- <i style="mso-bidi-font-style: normal;">¿Te
imaginas que esto fuese para siempre? - </i>Comenta Marian. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">- <i style="mso-bidi-font-style: normal;">¿Me
estás proponiendo que vivamos juntas? - </i>Le pregunta interpretando la frase
anterior. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">- <i style="mso-bidi-font-style: normal;">¡Ya
me gustaría! Pero creo que eso todavía no es posible. ¿Verdad? - </i><span style="mso-spacerun: yes;"> </span>Pregunta mirando con delicadeza a sus ojos. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">- <i style="mso-bidi-font-style: normal;">¡Sí!
Debo tener en consideración a mis padres. No creo que lo entiendan. Irme a
vivir a un piso en el casco viejo y con una mujer. Debería de ser muy
convincente. Aún no saben que amo a una mujer maravillosa, me resultará muy
complicado explicarlo. - </i>Relata en un tono un poco triste, mientras
recoloca el pelo de Marian. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">– <i style="mso-bidi-font-style: normal;">Algún
día tendrás que hacerlo. Se merecen que seas honesta con ellos y… contigo
misma. -</i><span style="mso-spacerun: yes;"> </span>Marian habla con sabiduría.
Laura entiende la importancia del mensaje. Pero le resulta duro pensar en decir
a sus padres que ha descubierto que es gay y que está enamorada de Marian. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">– <i style="mso-bidi-font-style: normal;">Me
gustaría saber cómo se hace, y al mismo tiempo, evitar el sufrimiento, si no
les gusta. <span style="color: #0f0101;">No creo que mis padres me rechacen, y espero
que no sea una catástrofe, no voy a hundirme si eso sucede, pero no quiero
hacerles daño y tampoco pienso en apartarme de ellos. Intentaré hacer lo
posible para que me acepten, pero si a pesar de todo no lo hacen, será una
decisión muy dura a tomar, yo quiero seguir con mi vida buscando lo mejor para
mí.</span></i><span style="color: #0f0101;"> – Laura trata de decir que, muchas
de las cosas que consideramos terribles e insoportables, no lo son en realidad
y podemos soportarlas, superarlas y ser felices a pesar de ellas.<span style="mso-spacerun: yes;"> </span></span><i style="mso-bidi-font-style: normal;">-
Lo hablé con mi hermano Paco, es el único que conoce mis sentimientos por ti.
Me sorprendió. Me dijo que no te dejara ir, que un amor así no se puede dejar
pasar, igual me arrepentía toda mi vida. Mis padres no sé cómo decírselo y cómo
responderán, no quiero que se sientan mal por mí. - <span style="mso-spacerun: yes;"> </span></i>Reflexiona en voz alta. Marian la mira y
con cariño. <span style="color: #0f0101;"><o:p></o:p></span></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">– <i style="mso-bidi-font-style: normal;">El
momento llegará, lo sabrás porque, ese momento te encontrará a ti y yo estaré a
tu lado para apoyarte. - <o:p></o:p></i></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><i style="mso-bidi-font-style: normal;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">- Eres un amor.
¿Sabes? Tenía un pánico tremendo con este sentimiento. Huía de tu lado, tenía
mucho miedo y ahora no puedo separarme de ti ni un instante. - </span></i><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">Laura se siente relajada al
lado de Marian. Se ha enganchado a su amor y vive feliz en su compañía. Ha
perdido casi todos sus miedos, y se siente más a gusto. Marian disfruta de una
paz que hacía tiempo no percibía. Laura colma sus expectativas sentimentales.
Constantemente se planteaba que su vida seguiría el camino de las compañías
intermitentes. Unas que se van y otras las sustituyen. Con Laura ha cambiado la
perspectiva de su existencia. Cree que nada romperá ese amor que las vincula.
Que un día podrán casarse, como sus amigas Carmen y Paloma y la idea de ser
madres también podría cuajar. De repente vuelve a la realidad. Laura duerme
apoyada en su hombro y abrazada a su cintura, ha descubierto la felicidad. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";"><o:p> </o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">Una tarde después de darse una
reconfortante ducha, Marian coge un paquete que tenía en una repisa del cuarto
de baño y se lo entrega a Laura con una sonrisa. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><i style="mso-bidi-font-style: normal;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">- ¿Para mí? ¿Qué
es? - </span></i><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">Pregunta
nerviosa.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><i style="mso-bidi-font-style: normal;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">- Ábrelo y lo
sabrás. - </span></i><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">Marian
juega a las adivinanzas. Es una caja de cartón envuelta en papel de regalo con
una etiqueta que tiene escrito “<i style="mso-bidi-font-style: normal;">Con todo
mi amor”. </i>Laura rompe el papel y retira la tapadera. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">–<i style="mso-bidi-font-style: normal;"> ¡Un
albornoz! Amarillo clarito, ¡Me gusta mucho! - </i>Rápidamente se lo pone y se
mira en el espejo coqueteando con su figura.<i style="mso-bidi-font-style: normal;">
<o:p></o:p></i></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><i style="mso-bidi-font-style: normal;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">- ¡Hay algo más!
- </span></i><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">Le dice
Marian. Laura mira en el interior de la caja que la ha tirado al suelo y
encuentra una bolsita de tela. La recoge y la abre, en ella hay unas pantuflas
de tela muy apropiadas para el baño y a juego con el albornoz. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">-<i style="mso-bidi-font-style: normal;">
¡Como me gusta! Eres un cielo. -<span style="mso-spacerun: yes;"> </span></i>Laura
se expresa muy contenta y besa sus labios.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><i style="mso-bidi-font-style: normal;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">- Así te
encontrarás como en tu casa. Solo te falta el pijama y el cepillo de dientes. <o:p></o:p></span></i></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><i style="mso-bidi-font-style: normal;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">- El pijama
puede esperar, nunca lo uso y a tu lado no me va a hacer falta. - </span></i><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">Le dice con un tono socarrón.
- <i style="mso-bidi-font-style: normal;"><span style="mso-spacerun: yes;"> </span>Mañana
me traigo un cepillo de dientes y un frasco de mi perfume. - </i>Le dice
expresándose con agrado.<i style="mso-bidi-font-style: normal;"><span style="mso-spacerun: yes;"> </span><o:p></o:p></i></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";"><o:p> </o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">El trabajo en la empresa sigue su curso
natural. Cada cual con su cometido sin interferencias notorias. De vez en
cuando el gerente pasea por los pasillos con el gesto malhumorado de siempre,
alguien piensa que debe tener una úlcera de estómago y acidez continua. Todos
sin excepción piensan que está amargado desde que su mujer e hijos le
abandonaron. Nadie sabe la causa, pero se la suponen. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">Desde el incidente en el despacho, Laura ni
le mira a la cara cuando se cruza con él o acude a la recepción en busca de
alguna cosa. Marina y Marian han decidido que a la hora de despachar debe
hacerse a la luz de todos. Marina se lo exigió un día que se puso muy bronco y
grosero con ella, incluyendo en la medida a Marian, ellas dos son las únicas
que gestionan asuntos con él, en un día y hora señalada de la semana. Cualquier
otra cosa que deban atender será por medio de su secretaria. Así que Don
Fernando cuando se sienta en su mesa está solo, hasta su secretaria deja la
puerta abierta cuando él la llama, o debe entrar con algún papel o expediente.
La conducta irracional que despliega en su entorno le hace odioso a los ojos de
todo el elenco de empleados. Parecía suficiente castigo para él, tener que
sujetarse a las normas impuestas por los trabajadores, pero la paz no dura
siempre, por un motivo u otro la estupidez y la maldad florecen de nuevo para
complicarle la vida a todo su entorno.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">A primera hora de la tarde Laura escribe
algo en el ordenador tranquilamente cuando el gerente aparece por la entrada
con signos de haber bebido algo más de la cuenta. Sin mediar palabra golpea
bruscamente con la mano sobre el mostrador de recepción asustando a todo el que
estuviera cerca. Por supuesto Laura la que más, había apartado la vista cuando
él entraba. - <i style="mso-bidi-font-style: normal;">¡Don Fernando! Me ha
asustado. - </i>Le grita con la voz atemorizada. Él se ríe con sarcasmo, como
si de una broma se tratase. Marian sale de su pecera al pasillo - <i style="mso-bidi-font-style: normal;">¡Es usted un estúpido malintencionado! - </i>Laura
continúa gritando y con los nervios a flor de piel. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">- <i style="mso-bidi-font-style: normal;">¿Qué
me has llamado? - </i>La increpa, ella está a punto de empezar a llorar. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><i style="mso-bidi-font-style: normal;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">– Le ha llamado
estúpido malintencionado. - </span></i><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";"><span style="mso-spacerun: yes;"> </span>Le habla Marian.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">- <i style="mso-bidi-font-style: normal;">Al menos
eso no es una mierda como ser bollera. - </i>Espeta con brusquedad.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><i style="mso-bidi-font-style: normal;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">- ¿Por qué es
tan grosero? - </span></i><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">Le
pregunta.<span style="mso-spacerun: yes;"> </span><o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><i style="mso-bidi-font-style: normal;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">- ¡Bahh!
¡Déjadme en paz! - </span></i><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">Le
dice haciendo aspavientos con los brazos y se esconde en su despacho. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">- <i style="mso-bidi-font-style: normal;">¿Estás
bien? - </i>Marian le pregunta a Laura, ella se sienta con las manos temblando
y casi llorando. Cierta palidez asoma en sus mejillas. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><i style="mso-bidi-font-style: normal;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">– Me ha puesto
muy nerviosa. - </span></i><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";"><span style="mso-spacerun: yes;"> </span><o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">-<i style="mso-bidi-font-style: normal;"> ¿Te
preparo una tila? - </i>Marian se ofrece. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">- <i style="mso-bidi-font-style: normal;">¡Sí!
¡Por favor! - </i>Marina se acerca. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><i style="mso-bidi-font-style: normal;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">- Yo lo haré.
Cuida de ella. - </span></i><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">Y
se va al cuarto del café.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">- <i style="mso-bidi-font-style: normal;">¡Gracias
Marina! ¿Mejoramos? Respira hondo y despacio. -</i> Marian toma su mano derecha
con fuerza y Laura la aprieta igualmente. Con la respiración controlada
consigue relajarse. Aparece Marina con la Tila caliente y se la ofrece. Laura
recoge la taza. Marian puede comprobar que el temblor de sus manos casi ha
desaparecido. Laura le da un sorbo y hace un gesto de desagrado. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">- <i style="mso-bidi-font-style: normal;">¿No
tendrías mejor un whisky? No me gusta nada este brebaje. -<span style="mso-spacerun: yes;"> </span></i>Las tres ríen de buena gana. Se toma la
bebida caliente y el calor interno la hace reaccionar positivamente. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">- <i style="mso-bidi-font-style: normal;">¿Por
qué me tienen que tocar siempre individuos de esta especie? </i>– Se pregunta
Laura. Marina ha regresado a su despacho y Marian escucha el lamento de su
novia. –<i style="mso-bidi-font-style: normal;"> Es un botarate y un infeliz,
nunca ha sabido arreglar sus problemas y es así, un insatisfecho.</i> – Le
responde Marian. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">– <i style="mso-bidi-font-style: normal;">No
soporto a esta clase de gentuza. Dejé de ser modelo por eso. Me acosaban
continuamente. Me hacían sentirme mal cuando algún necio se me acercaba con
esas pretensiones. Siempre me encontraba sola en esas circunstancias. Era una
sensación de lo más desagradable. </i>– Laura cuenta algo de su pasado que no
quiere recordar.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">-<i style="mso-bidi-font-style: normal;">
Ahora me tienes a mí, estoy aquí para ayudarte. ¿Tan difícil era ese mundillo? </i>–
Le pregunta con inocencia. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">–<i style="mso-bidi-font-style: normal;"> Ni
te lo puedes imaginar. Un modisto muy famoso me acorraló en un vestuario,
mientras me cambiaba de traje en medio de un desfile, estaba desnuda, no te
imaginas la vergüenza. Intentó sobarme y me lie a bofetadas con él hasta
sacarlo al pasillo a empujones. Después de aquello me desmayé. Afortunadamente
mis compañeras me protegieron y no pasó nada. Me lo hizo pasar muy mal. Fue la
gota que colmó el vaso. – </i>Marian la mira atónita. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">-<i style="mso-bidi-font-style: normal;">
¿Fue entonces cuando decidiste dejar aquel trabajo? </i>– <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">-<i style="mso-bidi-font-style: normal;">
¡Sí! </i>– Responde con contundencia. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">-<i style="mso-bidi-font-style: normal;">
¿Por eso te has mareado antes? Percibes mal la violencia, aunque sea verbal. ¿Y
el otro día? ¿Qué te pasó? Perdiste el conocimiento…</i>- <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">-<i style="mso-bidi-font-style: normal;"> Ni
una palabra a nadie, solo fue una broma de Manolín. Intentó agarrarme por el
brazo y respondí de forma violenta dándole una bofetada. No lo hizo con mala
intención, quizás mi respuesta fue exagerada. Después me pidió disculpas, es un
poco brutito, ya sabes, pero es buena persona. </i>– Le cuenta pidiendo que lo
mantenga en secreto. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">- <i style="mso-bidi-font-style: normal;">¡Está
bien! </i>-<i style="mso-bidi-font-style: normal;"><span style="mso-spacerun: yes;"> </span><o:p></o:p></i></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">Marian regresa a sus tareas, por el pasillo
se encuentra a Marina que le comenta que deberían hacer algo con este hombre. <i style="mso-bidi-font-style: normal;">- No está en sus cabales. -<o:p></o:p></i></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><i style="mso-bidi-font-style: normal;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";"><o:p> </o:p></span></i></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">Laura recoge a Marian en la puerta de su
casa. Acuden a un concierto en la Plaza de María Pita de la Orquesta de Galicia
con un programa sugerente.<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>Es Laura la
más melómana de las dos, Marian va aprendiendo a su lado como vivir este tipo
de música que, aunque no le llama especialmente la atención, si suele disfrutar
de ella. Laura la guía con las melodías y los compositores, le habla de los
grandes clásicos y lo que ha supuesto la música para ella. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">Van caminando, casi corriendo. Entran en la
plaza y buscan un asiento. El Sol aún no se ha puesto y está presente en los
soportales. Encuentran dos sillas en el ala izquierda de la plaza y se sientan.
<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">El concierto resulta muy agradable y
entretenido. A Marian le ha gustado mucho, no sabe si por la música o por estar
con ella. Se levantan y le pregunta. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">- <i style="mso-bidi-font-style: normal;">¿Y
ahora qué hacemos? - </i>Dice Marian. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">– <i style="mso-bidi-font-style: normal;">Irnos
a cenar. - </i>Responde Laura. – <i style="mso-bidi-font-style: normal;">Conozco
un sitio aquí cerca que, aunque esté lleno, consigo una mesa. - </i>Caminan por
unas callejas del casco viejo hasta un bar existente en una esquina. Entran y está
completamente lleno. Es de esos locales de poca fachada y mucho fondo, dos
pisos de comedores y mucho bullicio. Laura se dirige a la barra y se da dos
besos con alguien que parece el encargado. Por como gesticulan, a Marian le
parece que no ha lugar. Regresa Laura con cara de circunstancias. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">- <i style="mso-bidi-font-style: normal;">¿Qué
pasa? – </i>Pregunta intrigada. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">– <i style="mso-bidi-font-style: normal;">No
hay nada de momento. - </i>Le cuenta que está esperando a un grupo de siete personas
y que es la única mesa que tiene vacía. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">– ¿<i style="mso-bidi-font-style: normal;">Tomamos
algo y esperamos a ver qué pasa? - </i>Propone Marian. En ese momento se abre
la puerta y aparece Paco, el hermano de Laura, con su mujer y tres amigos más,
también conocidos de Laura. Después de los saludos protocolarios, es el turno
de Laura que presenta a Marian como amiga y compañera de trabajo. En un momento
dado Paco le pregunta a Laura en un aparte y en voz baja. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">- <i style="mso-bidi-font-style: normal;">¿Es
ella? - </i>Lo dice como a escondidas. Laura ríe, mira hacia Marian y luego a
su hermano. Con gesto serio pero la cara iluminada, responde. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">- <i style="mso-bidi-font-style: normal;">¡Sí!
- </i>Enfatizando. Paco hace un gesto de satisfacción. Propone a Laura que se
queden con ellos, que ha fallado un matrimonio amigo y hay dos sitios
disponibles. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">– <i style="mso-bidi-font-style: normal;">Debo
consultarlo con Marian. - </i>Marian no pone ningún problema y deciden
quedarse. Cree que es un buen momento para conocer algo del entorno de Laura.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">Acabada la velada salen a la calle y
comienzan a caminar todos juntos, poco a poco se van espaciando entre ellos.
Marian va platicando con dos de los chicos y Laura con Paco. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">- <i style="mso-bidi-font-style: normal;">¿Has
hablado con Papá últimamente? - </i>Pregunta Paco a su hermana.<i style="mso-bidi-font-style: normal;"> <o:p></o:p></i></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><i style="mso-bidi-font-style: normal;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">- ¿De qué tengo
que hablar? - </span></i><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">Cuestiona
Laura.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><i style="mso-bidi-font-style: normal;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">– Veo que no.
Tendrás que hacerlo un día de estos. Se ha fijado en tus cambios de humor y por
lo que me ha parecido, también has cambiado de rutina. Pasas noches fuera. Se
ha dado cuenta de esos cambios y está intrigado. Se preocupa poco porque te ve
contenta, que por cierto podrías haberme dicho algo. - </span></i><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">Le argumenta con seriedad. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><i style="mso-bidi-font-style: normal;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">- ¡Lo siento, me
he olvidado de todo! Desde que estoy con ella el mundo no es lo mismo. Creo que
he descuidado a la familia por lo que veo, no me he dado cuenta. Ahora, todo
gira en torno a Marian y lo demás es como si no existiera. ¿Me entiendes? - </span></i><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";"><span style="mso-spacerun: yes;"> </span>Paco la mira asombrado.<span style="mso-spacerun: yes;"> </span><o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">– <i style="mso-bidi-font-style: normal;">Todas
las enamoradas sois iguales. Esta no es mi hermana, es otra persona. ¿Qué has
hecho con ella? - </i>Bromea con Laura que acusa la gracia. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">- <i style="mso-bidi-font-style: normal;">¡No
seas así! No he cambiado solo estoy enamorada, sigo siendo la misma ¡Tonto! - </i>Ambos
estallan en sendas carcajadas.<i style="mso-bidi-font-style: normal;"> </i>Marian,
que camina unos metros por delante, se detiene a esperar a los hermanos que
parece se lo están pasando en grande por las risas. Se acercan a ella
lentamente. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">- <i style="mso-bidi-font-style: normal;">¿Os
veo muy contentos? - </i>Laura besa su frente. -<i style="mso-bidi-font-style: normal;"> Me vengo aquí porque allí han empezado a hablar de futbol y es algo
que no me interesa. - </i>Comenta poniéndose al lado de Laura.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">– <i style="mso-bidi-font-style: normal;">Mi
hermano me regañaba porque dice que he cambiado. Y yo le digo que no, solo
estoy enamorada, es el único cambio en mi vida. - </i>Lo dice mientras le va echando
el brazo por el hombro a Marian, ella la mira con algo de asombro y la abraza
por la cintura. Laura ya acepta que esa forma de ir juntas no es algo que llame
la atención y lo hacen con naturalidad.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">– <i style="mso-bidi-font-style: normal;">Espero
que sea para bien. Ser feliz es difícil, siempre hay piedras en el camino y el
vuestro es de esos caminos complicados, encontraréis muchas dificultades. - </i>Hay
sabiduría en las palabras de Paco. Marian escucha complacida porque, de alguna
manera, él está facilitando el camino a su hermana. Le percibe como cómplice.
Ella sabe de esas dificultades que comenta Paco, las ha vivido en su familia.
Por eso no fuerza a Laura, no quiere provocar una situación que le pueda
resultar desagradable.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">Pasa
el tiempo después de salir del armario y finalmente vives la vida libre, sin
complicaciones, sin tener que esconderte, pero, no todo es miel sobre hojuelas…
Tener la confianza de confesar quién se es en realidad y decidirse a ser uno
mismo, conlleva un montón de ideas retrogradas e incomprensiones que están en
el entorno social y que a primera instancia no te importan, pero contempladas
en una observación a fondo, llegan a ser una verdadera molestia. <o:p></o:p></span></p><p class="MsoNormal"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">Laura
no ha sido fustigada con el desprecio de sus padres, algo que se hace muy duro,
sobre todo siendo muy joven como le pasó a Marian. No quiere pensar que le
suceda algo similar, esa visión de las relaciones paternas, siguen siendo
complicadas para su mente.<o:p></o:p></span></p><p class="MsoNormal"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";"> </span></p><p class="MsoNormal" style="background: white; margin-bottom: 0cm; vertical-align: baseline;">
</p><p class="MsoNormal"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">Don
Fernando aparece, como siempre, con cara de malos amigos. Sin mediar palabra,
ni decir buenos días, entra como un burro por la puerta. Pocos minutos después
su secretaria se acerca a Laura <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">– <i style="mso-bidi-font-style: normal;">El
jefe quiere verte. - </i>Le dice. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">- <i style="mso-bidi-font-style: normal;">Pues
como no venga él aquí. Yo no pienso quedarme a solas con él. -</i> Expone con
firmeza. Cristina, que así se llama la secretaria, no se extraña de la
respuesta y se da la vuelta de regreso. Al minuto reaparece el gerente con un
gesto agresivo en la cara. En un tono grotesco se enfrenta a Laura que
permanece sentada con la vista en el ordenador y dando la impresión de no
hacerle caso.<span style="mso-spacerun: yes;"> </span><o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><i style="mso-bidi-font-style: normal;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">– Aquí cuando yo
digo una cosa se me obedece sin rechistar. ¿Entiendes bollera de mierda? - </span></i><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";"><span style="mso-spacerun: yes;"> </span>Laura sigue sin responder y continua en
apariencia con su tarea. Las voces llaman la atención de los de alrededor. - <i style="mso-bidi-font-style: normal;">¿Me estás escuchando? ¡Contesta! - </i>Laura
levanta de forma leve la ceja derecha y le mira de reojo. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><i style="mso-bidi-font-style: normal;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">– Cuando me gritan,
tengo la costumbre de no entender lo que me dicen. - </span></i><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">Responde y devuelve la vista a
su tarea. El jefe se enfurece, por encima del mostrador echa la mano e intenta
cogerla del pelo inclinándose hacia ella. La respuesta de Laura es inmediata y
sin pensarlo se levanta hacia atrás y le sacude un bofetón que da de lleno en
la cara de aquel hombre iracundo. Espantado pone una expresión de cólera y la
mira estupefacto. En ese momento llega a su altura Marian que ha acudido al oír
el alboroto. El gerente hace un gesto agresivo de querer devolver el golpe,
pero es parado por Marian. Laura rápidamente retrocede dando un paso atrás
queriendo salir de su rincón, tropieza con la silla y cae golpeándose en la
cabeza con el borde de la mesa. Al llegar al suelo ya ha perdido el
conocimiento. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><i style="mso-bidi-font-style: normal;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">– ¡Estás
despedida, maldita tortillera! -</span></i><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";"> Brama el gerente sin percatarse del estado de la
recepcionista. Marian quiere golpearle sin piedad, pero es detenida por Esther
y Marina que llegan en ese momento, Adela y Susana son testigos mudos de la
escena. Marian se acerca rápida a Laura, que permanece inmóvil en el suelo. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">- <i style="mso-bidi-font-style: normal;">¡Llamad
a una ambulancia, por favor! - </i>Grita desesperada. Se da cuenta que Laura no
da ninguna señal de consciencia y el golpe en la frente muestra un aspecto poco
agradable. – <i style="mso-bidi-font-style: normal;">Cariño estoy aquí. Dime algo
por favor, abre los ojos. No me dejes. - </i>Expresa llorando y desesperada. A
los pocos minutos entra un equipo de Urgencias que la estabilizan y se la
llevan al Hospital. Marian la acompaña con la desesperación estampada en su
rostro, como así refleja su mirada. Llegan al Hospital e inmediatamente la
ingresan en la Unidad de cuidados intensivos. Marian debe quedarse fuera. Laura
está sin conocimiento, no reacciona y ella se muere de impotencia. La primera
media hora es desmoralizante, nadie le da ninguna explicación de lo que le pasa
a su amada. Poco rato después aparecen los padres de Laura. Marina les ha
llamado desde la empresa cuando se la llevaron en la ambulancia. Marian solo
acierta a contar que se ha golpeado la cabeza al caer al suelo por un tropezón.
Don Luis le agradece a Marian su interés y le dice que ya se hacen cargo ellos,
que puede regresar a su trabajo. Marian le mira con gesto angustiado y le ruega
que le permita esperar hasta tener alguna noticia. Que es su amiga más querida
y que no se irá hasta que sepa lo que pasa. La madre de Laura capta el
desespero de Marian y con un gesto hace ver a su marido que debe consentir.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">Pasea muy inquieta por las cercanías de la
puerta de intensivos. Aparece Paco y al rato un médico pregunta por la familia.
Los cuatro se acercan con nerviosismo, él los tranquiliza. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">– <i style="mso-bidi-font-style: normal;">Laura
está estabilizada. Tiene un fuerte golpe en la cabeza y aún continua
inconsciente. Le haremos un escáner en cuanto tengamos un hueco. No corre
peligro, de hecho, no ha sido necesario intubarla, respira espontánea, pero aún
no reacciona. Debemos esperar, las primeras veinticuatro horas son importantes
para ver cómo evoluciona. No hay fractura aparente del cráneo, pero es posible
que tenga una contusión cerebral importante. -</i><o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">Dicho esto, el facultativo se introduce de
nuevo por la puerta que había salido, Don Luis se dirige a Marian. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">- <i style="mso-bidi-font-style: normal;">Muchas
gracias señorita. Ya ha oído, debemos esperar. Su presencia aquí ya no es
necesaria. - </i>Le dice con crudeza. Marian asiente sin decir palabra, mira a
Paco, se da media vuelta e inicia el camino hacia la salida. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><i style="mso-bidi-font-style: normal;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">– Espera Marian.
- </span></i><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">Le grita
Paco. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">- <i style="mso-bidi-font-style: normal;">Voy
a llevarla. Es lo menos que puedo hacer. Vuelvo en un rato. -</i> Le dice a su
padre que asiente de buena gana. Acto seguido coge a Marian del brazo y juntos
bajan la escalera.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";"><o:p> </o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";"><o:p> </o:p></span></p>
<p class="MsoNormal"><span lang="ES-TRAD"><o:p> </o:p></span></p>Francisco Freijaneshttp://www.blogger.com/profile/07136887969142331609noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-7189587968703271148.post-34210038688419928602022-05-26T19:32:00.000+02:002022-05-26T19:32:13.387+02:008. Todo sale a la luz<p> <span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS"; font-size: 14pt; line-height: 115%;">- </span><i><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">¿Ya
te has recuperado? - </span></i><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">Pregunta
Marina dos días después de la lipotimia de Laura. Ha descansado veinticuatro
horas y ya está en su puesto de trabajo. Marian sonríe con satisfacción al
verla de nuevo al otro lado de la cristalera. La jornada pasada sin ella en la
oficina le ha parecido eterna. No poder ver su sonrisa a través de los
cristales, cada vez que levantaba la mirada, ha sido como un ataque de
nostalgia. La tarde anterior se acercó a su casa para estar a su lado. En la
mañana la llamó por teléfono y hablaron un rato. Y por la noche hablaron como
todos los días. Ahora está cerca de nuevo y es una satisfacción para ambas ese
contacto.</span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">Manolín se acerca a ella con expresión
compungida. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">- <i style="mso-bidi-font-style: normal;">¿Qué
quieres Manolín? Estoy muy ocupada. - </i>Le dice en un tono seco y distante. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">– <i style="mso-bidi-font-style: normal;">Quiero
pedirte disculpas por lo del otro día. No pensé lo que hacía y después, lo que
te pasó… me siento mal. Ya sabes que soy un poco burro… estaba de broma.- <o:p></o:p></i></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><i style="mso-bidi-font-style: normal;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">- ¡Siempre estás
de broma! Tienes que aprender a calcular esas bromas, un día tienes un disgusto
serio. - </span></i><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">Laura
acepta la disculpa con la promesa de no repetir burlas de ese tipo con ella. – <i style="mso-bidi-font-style: normal;">Y lárgate ya, que tienes el reparto con
retraso. -<o:p></o:p></i></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">Con un gesto de casi reverencia, Manolín
sale disparado hacia el muelle de carga para hacerse cargo de su furgoneta y
comenzar el recorrido por las farmacias de la ciudad. Durante el día los
compañeros se van acercando para interesarse por ella, gesto que agradece con
una sonrisa.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">Al día siguiente el gerente llama a su
despacho a Laura. De muy malos modos le dice que tiene una falta grave por
ausentarse del trabajo durante dos días sin avisar. Laura responde que ha
traído los justificantes reglamentarios y que no tiene que llamarle la atención
por eso. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">– <i style="mso-bidi-font-style: normal;">Tendría
que ser más educado, primero no me hable a gritos, no insulte y mantenga un
poco de respeto conmigo. No soy su criada ni su esclava. Soy una trabajadora y
cumplo con mis obligaciones.- </i><span style="mso-spacerun: yes;"> </span>El
gerente embutido de soberbia trata de rebatirla. <i style="mso-bidi-font-style: normal;">– Aquí eres la recepcionista, el empleo más bajo de la empresa. Y te
diré lo que me dé la gana, cuando me dé la gana. Para eso soy el que manda
aquí. ¿Me entiendes bollera de mierda?- </i>Laura se enerva y el rostro se le
llena de ira. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><i style="mso-bidi-font-style: normal;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">- ¿Qué me ha
llamado? Repita eso que no lo he oído bien.- </span></i><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">Le espeta cargada de furia. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><i style="mso-bidi-font-style: normal;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">– Te he llamado
bollera. ¿O es que no sabes que aquí todo el mundo está enterado que tú y esa
pelirroja os morreáis por la ciudad? -<span style="mso-spacerun: yes;"> </span></span></i><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">Laura está por golpearle
repetidamente. Indignada sale del despacho, llega al mostrador, se sienta en su
silla en la recepción y rompe a llorar. Marian no está en su sitio. Esther oye
los sollozos y abre la puerta del despacho de administración y se acerca. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">- <i style="mso-bidi-font-style: normal;">¿Qué
pasa?- </i>Le pregunta inquieta. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><i style="mso-bidi-font-style: normal;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">- Ese hijo de su
madre. Es un perfecto canalla. ¿Cómo se puede ser tan hijo de…?- </span></i><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">Esther no entiende muy bien,
pero se compadece de Laura porque en otras ocasiones ha sido ella la víctima de
las iras del gerente. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">– <i style="mso-bidi-font-style: normal;">No
sé qué decir, a mí me lo hace pasar mal también.-</i> En eso Marina sale
también al pasillo y contempla la escena. Pregunta que ha pasado. Laura le dice
que ha tenido una bronca con el jefe, pero obvia los epítetos alusivos a su
sexualidad. Inmediatamente se da la vuelta y se dirige al despacho del gerente.
Entra sin llamar. - <i style="mso-bidi-font-style: normal;">¿A ti que te pasa?- </i>Le
increpa desde la puerta. - <i style="mso-bidi-font-style: normal;">¿Tienes que
amargarle la existencia a todo el que se te antoje? - </i>No responde. - <i style="mso-bidi-font-style: normal;">¿Qué te ha hecho Laura para que esté en un
mar de lágrimas? ¿Qué le has dicho para dejarla en ese estado? El otro día se
desmayó y su salud es delicada. ¿No conoces la consideración y el
respeto?-<span style="mso-spacerun: yes;"> </span></i>Él, con gesto despectivo
se incorpora de su silla. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">– <i style="mso-bidi-font-style: normal;">Me
toca los cojones la bollera esa y su amiga la pelirroja. Son inmorales y
viciosas. En cuanto pueda me las cepillo y las mando a la puta calle.-<span style="mso-spacerun: yes;"> </span></i>Espeta soltando los consabidos perdigones
de saliva al hablar. Marina se enfurece. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><i style="mso-bidi-font-style: normal;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">– Así que esto
es porque, en una borrachera hicieron algo censurable según tú.- <o:p></o:p></span></i></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><i style="mso-bidi-font-style: normal;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">- ¡No solo eso!
Pregúntale a Adela. Ya verás que no es producto de una juerga solamente.- </span></i><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">Marina pone cara de sorpresa. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">- <i style="mso-bidi-font-style: normal;">¿Qué
tiene que ver Adela en esto?- </i>Pregunta con asombro. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">– <i style="mso-bidi-font-style: normal;">Pregúntale
a ella que las ha visto dándose el lote en plena calle. - <o:p></o:p></i></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><i style="mso-bidi-font-style: normal;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">- Y a ti te
parece que eso es motivo para montarle un espectáculo como el de ahora. Eres un
impresentable y un insensible.- </span></i><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">Da media vuelta y sale de la habitación encolerizada. Se
acerca a Adela la mete en su propio despacho y habla con ella gesticulando en
forma de amenaza. Vuelve al pasillo y se acerca a Laura que ya está más serena.
En su cara se aprecia el enfado y el disgusto. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">- <i style="mso-bidi-font-style: normal;">¿Dónde
está Marian?- </i>Le pregunta en un tono un poco seco. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">– <i style="mso-bidi-font-style: normal;">En
el almacén con Quique. - <o:p></o:p></i></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><i style="mso-bidi-font-style: normal;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">- Quiero veros a
las dos en cuanto vuelva. -</span></i><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";"> Marian aparece a su espalda. No puede ver a Laura, Marina
está interpuesta y se da la vuelta. <i style="mso-bidi-font-style: normal;"><o:p></o:p></i></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">– <i style="mso-bidi-font-style: normal;">¡A
mi despacho! - </i>Indica con autoridad.<i style="mso-bidi-font-style: normal;"> </i>Se
separa de ellas, Marian la mira extrañada, vuelve la vista hacia Laura y puede
darse cuenta en su expresión, que algo le ha sucedido. Aprecia los vestigios
del llanto anterior y se asusta. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">- <i style="mso-bidi-font-style: normal;">¿Qué
te ha pasado?-</i> Pregunta algo ofuscada. A Laura no le da tiempo a responder.
Marina las apremia y entran en su oficina, Marina bloquea la puerta. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><i style="mso-bidi-font-style: normal;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">– Sentaros. ¡A
ver! ¿Qué está pasando con vosotras?- </span></i><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">Interroga directamente mirando a los ojos
de las dos. No hay respuesta, ambas dudan, se miran entre sí. Marina es perro
viejo y los gestos de ambas le proporcionan la certeza de lo que le han
contado.<span style="mso-spacerun: yes;"> </span><o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">- <i style="mso-bidi-font-style: normal;">¡Venga
ya! Así que es cierto. ¿Estáis saliendo?</i> – Laura quiere esconderse, Marian
no sabe qué decir, en parte no se sorprende, pero está desconcertada con lo que
está pasando. Necesita una aclaración y pregunta que es lo que ocurre. En pocas
palabras Marina la pone al corriente, sin mencionar la artera maniobra de
Adela. No quiere añadir más conflicto en la empresa. Vuelca toda la
responsabilidad en el gerente, al que claramente todos desprecian por su
conducta déspota. <i style="mso-bidi-font-style: normal;">– Necesito conocer
vuestra versión, si queréis que os proteja. Temo que Fernando haga cualquier
barbaridad y cometa un atropello injustificado. Bien ¿Qué tenéis que contarme?
Os prometo que lo que aquí se hable no saldrá por esa puerta.- </i>Marina
espera paciente. Laura mira a Marian y con un gesto algo espantado le da pie
para que hable. La noticia ya es conocida y poco importa que la verbalicen. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">– <i style="mso-bidi-font-style: normal;">¡Es
cierto! Estamos saliendo desde hace unas semanas. Hemos tratado de tenerlo
oculto por nuestro interés personal. En el trabajo no hemos dado motivos para
que se sospeche, pero parece que ni escondidas podemos estar a salvo.- </i><span style="mso-spacerun: yes;"> </span>Marian narra de forma realista. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><i style="mso-bidi-font-style: normal;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">– Y tú ¿No
tienes nada que decir?- </span></i><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">Dirigiéndose
a Laura. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><i style="mso-bidi-font-style: normal;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">- ¡Estoy
asustada! Nadie debía saber nada de mi vida privada ni la de Marian. Ahora temo
que todo el mundo va a meter las narices en lo que hay entre nosotras. Y me da
pánico solo pensarlo, no estoy en condiciones de soportar...- </span></i><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">Marian interrumpe. <i style="mso-bidi-font-style: normal;"><span style="mso-spacerun: yes;"> </span>–
Laura es hipersensible en situaciones afectivas. Esta le puede hacer daño
emocional. Nunca la he visto como está ahora y me preocupa.- </i>Marian
extiende su mano hacia Laura que la aprieta con fuerza. Marina escucha con
atención y durante un segundo las observa con connivencia. <i style="mso-bidi-font-style: normal;"><span style="mso-spacerun: yes;"> </span><o:p></o:p></i></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><i style="mso-bidi-font-style: normal;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">– Conozco esa
mirada. Ya me lo había parecido, pero no estaba segura, me fijo poco. Esta vez
he acertado. Estáis enamoradas. ¡Os felicito!- </span></i><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">Marian y Laura se miran con desconcierto. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">-<i style="mso-bidi-font-style: normal;">¡Sí!
¡Os felicito! Cualquiera que no fuese un poco valiente lo hubiese negado.
Vosotras no. Demostráis valor y cariño. Veo que estáis muy unidas. ¡Qué
narices! ¡Me alegro! En mis tiempos era más difícil, a veces casi imposible.- </i>Vuelven
las miradas de desconcierto. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><i style="mso-bidi-font-style: normal;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">- ¿Tú también…?-
</span></i><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">Marian no
termina la pregunta pero Marina la entiende. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">- <i style="mso-bidi-font-style: normal;">¡No
y sí! De aquí no puede salir esto. Nadie en la oficina conoce mi vida y espero
que siga siendo así. Soy hetero.- </i>Afirma con rotundidad.-<i style="mso-bidi-font-style: normal;">Pero tengo un hermano gay, que es un cielo
de chico y eso me hace ser solidaria con la homosexualidad, sea la que sea.
Contáis con un aliado en este lugar. Seguir haciendo vuestra vida como hasta
ahora. Yo me ocupo de Fernando, soy la única a la que respeta.- </i>Marian y
Laura sonríen. <i style="mso-bidi-font-style: normal;">- ¡Laura! Trata de olvidar
el incidente y tú Marian no te lances al cuello del gerente, haz el favor de
contenerte, que te conozco. Ahora contarme. ¿Cómo surgió esto entre vosotras?- </i>Aunque
con dudas le comentan cuatro detalles sin mucha<span style="mso-spacerun: yes;">
</span>importancia<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>pero clarificadores.
Marina se dio por satisfecha y cerraron el incidente.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";"><o:p> </o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">Laura sigue algo compungida por el suceso
de la mañana. Al terminar la jornada ella y Marian salen juntas en su coche.
Laura aparca delante de la casa de Marian que se hace la reticente para
apearse, ni la ha besado en la mejilla, como de costumbre aunque, se vean poco
después.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><i style="mso-bidi-font-style: normal;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">– ¡Venga!
¡Bájate! - </span></i><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";"><span style="mso-spacerun: yes;"> </span>Le dice con autoridad. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">- <i style="mso-bidi-font-style: normal;">¡No
me apetece! Veo tu cara y me parece que no estás del todo bien. Necesito tener
la certeza que te has recuperado. - </i>Le dice con preocupación. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><i style="mso-bidi-font-style: normal;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">– ¡Estoy bien! -</span></i><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";"> Responde, el tono le parece a
Marian que no es del todo convincente. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><i style="mso-bidi-font-style: normal;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">– Es lo que
quería saber. Para el motor del coche.-</span></i><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";"> Le ordena. Ella la mira sin entender el
porqué, pero le hace caso y gira la llave. <i style="mso-bidi-font-style: normal;">–
Estás estresada, necesitas relajarte. Conduces a trompicones y estás
continuamente haciendo un gesto con la boca que solo dice una cosa. ¡Estás muy
nerviosa! -</i> Laura rompe a llorar con las manos cubriendo su cara. Marian la
abraza y reposa la cara sobre su hombro. A Marian se le saltan las lágrimas.
Acaba de comprobar que no puede verla sufrir. Esconde su cara en el pelo de su
novia. Comparte el sufrimiento y eso la llena de satisfacción. Una idea se va
formando en su cabeza, hay un cordón emocional que las une, solo ocurre cuando
sientes que has encontrado la persona a la que perteneces, al amor de tu vida.
Se emociona y sonríe. Permanecen así durante un instante. Se seca las mejillas
antes de recuperar la mirada de su amada. Con una sonrisa pone su rostro frente
al de ella, con un pañuelo le enjuga las lágrimas, tiene la cara empapada. Con
pausa le hace discurrir su mano por el rostro y finalmente le da un corto beso
en la punta de los labios. - <i style="mso-bidi-font-style: normal;">¿Estás
mejor? - </i><span style="mso-spacerun: yes;"> </span>Laura responde que sí con
un movimiento de su boca. Le asaltan unas ganas terribles de besar a Marian.
Tiene un momento de duda. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">-<i style="mso-bidi-font-style: normal;"> Me
siento muy rara. Todo lo que ha pasado hoy es como si un camión me hubiese
atropellado. No me repongo de esa emoción de vergüenza de ver que todo el mundo
conoce lo nuestro. ¿Por qué me siento así? Dime algo que no sepa, no sé cómo
enfrentarme a ello. - </i>Laura se siente algo perdida.<span style="mso-spacerun: yes;"> </span><o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><i style="mso-bidi-font-style: normal;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">- ¡No sé! Yo no
he vivido mi salida del armario de ésta forma. Lo mío fue un schok<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>familiar, muy traumatizante. Lo que pensaran
los demás me traía sin cuidado, me importaba lo que mis padres hicieron
conmigo. No tuve ni tiempo ni ocasión de sentirme como te sientes tú ahora.
Simplemente decidí llevar mi vida como a mí me apetecía y miré hacia adelante
sin hacer caso de lo que pudieran pensar los demás.- </span></i><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">Marian le explica con pausa y
mirando a sus ojos con sinceridad. <i style="mso-bidi-font-style: normal;"><span style="mso-spacerun: yes;"> </span><o:p></o:p></i></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><i style="mso-bidi-font-style: normal;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">- ¿Crees que
debo dejar de lado ese miedo? Y dime ¿Cómo lo hago?- </span></i><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">Interroga con severidad. <i style="mso-bidi-font-style: normal;"><span style="mso-spacerun: yes;"> </span><o:p></o:p></i></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><i style="mso-bidi-font-style: normal;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">– No sé cómo se
hace ¡Cariño! Yo solo miro hacia donde me interesa y obro en consecuencia. No
tengo una varita mágica. Sé que es difícil, lo he visto en otras personas.
Enfrentarse al mundo real donde posiblemente nos sintamos rechazadas es muy
fuerte, eso lo sé, pero cuando los temores son internos, solo quien los tiene
sabe la forma de vencerlos. - </span></i><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">Laura escucha con atención. En su interior masculla lo que
Marian acaba de decir y cierta sensación de orgullo emana en su ánimo. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">- <i style="mso-bidi-font-style: normal;">¡Escucha!
- </i>Le dice con firmeza a Marian. –<i style="mso-bidi-font-style: normal;"> Yo
no sé si esto es lo que la vida tiene escrito para mí, o es una broma del
destino. Hace días que pienso en ello y, de verdad, trato de excluirte de mi
pensamiento por si encuentro alguna referencia en otra dirección, pero no sales
de ninguna de las maneras. Tengo la sensación de que estoy destinada para ti,
que tú, eres mi destino, cuanto más dudo más me enganchas y veo que no hay nada
más en el mundo que me esté esperando. - </i>Marian sonríe con complacencia y
trata de decir algo, pero no le sale. De repente Laura la sorprende. <i style="mso-bidi-font-style: normal;"><span style="mso-spacerun: yes;"> </span></i>-
<i style="mso-bidi-font-style: normal;">¿Vamos a tu casa? - </i><span style="mso-spacerun: yes;"> </span>Marian sonríe con agradable extrañeza. <i style="mso-bidi-font-style: normal;"><o:p></o:p></i></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">- <i style="mso-bidi-font-style: normal;">¿Estás
segura? - </i>Pregunta con cierto<span style="mso-spacerun: yes;">
</span>asombro.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><i style="mso-bidi-font-style: normal;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">- No lo diría si
no fuese así. ¿No dices que hay que mirar hacia adelante? Ante todo, quiero
esconderme contigo, si tengo que hacerlo por un tiempo, quiero que nos
escondamos juntas. Aunque creo que después de lo sucedido hoy, esconderse no
sirve de nada. -</span></i><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";"><span style="mso-spacerun: yes;"> </span>Rápidamente salen del vehículo y se dirigen
al portal, entran en el ascensor. Antes de que éste pare, Laura ya ha cubierto
de besos a Marian. Se introducen en la vivienda en medio de un atracón de
besos, pasan al salón para caer en el amplio sofá frente a la balconada. Marian
besa alocadamente a Laura. Ella se deja hacer, recorre su cuello besando hasta
el lóbulo de la oreja. Entre besos pasa un rato sin que suceda nada más. Hasta
que Laura empieza a acariciar el pecho, el costado y con su mano recorre el
abdomen de Marian hasta llegar al rincón más sensible, Marian experimenta un
espasmo precipitado en ese instante.<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>Comienza
a besar el cuello de Laura, baja besando su fina piel hacia el pecho y le
desabrocha algo la camisa. Laura se deja llevar, siente que los labios de
Marian pasean por su abdomen hasta notar que la mano hábil de su amante se posa
en el lugar de máxima excitación. Laura se retuerce de placer. Coge la cara de
Marian entre sus manos y besa su boca al tiempo que la invade una convulsa
sensación provocando un intenso espasmo corporal. Continúan sus bocas
conectadas y jugando cada una en el interior de la otra. Laura comienza a
desabrochar la camisa de Marian, que hace lo propio con ella. Se pone de pie
para contemplarla en todo su esplendor. - <i style="mso-bidi-font-style: normal;">¡Ven!
- </i>La coge de una mano y la conduce hacia el dormitorio. Allí comienzan a
desnudarse mutuamente. Marian le retira la camisa, desabrocha el pantalón, que
cae al suelo, la ropa interior de ambas termina de igual forma. Se introducen
en la cama sin decir palabra alguna. Después de un largo beso Marian la
contempla con mirada embelesada. - <i style="mso-bidi-font-style: normal;">¡Te
quiero! - </i>Le dice. Rueda sobre ella apartándose el pelo de la cara, le
sonríe una vez está sobre su piel. Entrelazan sus cuerpos, se acoplan de forma
perfecta. Marian la besa de nuevo y comienza un suave bamboleo de sus caderas
que poco a poco va aumentando, sus bocas conectadas como sus almas, los ojos
cerrados, la respiración entrecortada y el rítmico baile dan paso a una
exhalación de aire al culminar en un espasmo corporal conjunto que las deja
exhaustas. Con los ojos cerrados permanecen abrazadas durante un buen rato.
Marian abre sus párpados, sonríe contemplando a su amor que muestra paz en su
semblante. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">- <i style="mso-bidi-font-style: normal;">¿Estás
dormida? - </i>Ella abre sus verdes ojos y sonríe. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">- <i style="mso-bidi-font-style: normal;">¡No!
No quiero dormir, y luego despertar pensando que ha sido un sueño. ¿Es esto el
sexo del amor? Porque me ha parecido algo maravilloso. Nunca me he encontrado
más feliz. ¡Te quiero! - </i>Un largo beso es la continuación de la palabra.
Abrazadas y apretadas la una contra la otra, yacen descansando en la cama. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">- <i style="mso-bidi-font-style: normal;">¿De
verdad nunca has hecho el amor con una mujer? -</i> Marian pregunta curiosa.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><i style="mso-bidi-font-style: normal;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">- Nunca he hecho
el amor con nadie, ¡Con nadie! - </span></i><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">Especifica.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">- <i style="mso-bidi-font-style: normal;">Debo
creerte. No tienes por qué esconderlo, pero es que me parece tan poco común. El
mundo de la Moda es muy… promiscuo y pensé que…- </i>No termina la frase. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">-<i style="mso-bidi-font-style: normal;">
Nunca me interesó. Pude haberlo hecho en cientos de ocasiones. Me lo proponían
a diario, pero yo no quería entrar en ese juego. Veía algunas de mis
compañeras, que si lo hicieron, y después las encontraba defraudadas y en
muchos casos tristes. Les prometían el oro y el moro, al final se encontraban
con la cruda realidad, ni lo uno ni lo otro. Aunque también las había que les
importaba poco, unas cabezas huecas. Yo no quería verme en esa situación. - </i>Se
explica con claridad. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">- <i style="mso-bidi-font-style: normal;">¿Y
no te atraían las otras modelos? Sé de buena tinta que también hay lesbianas en
ese mundillo. - </i>Pregunta intrigada Marian.<span style="mso-spacerun: yes;">
</span><o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">–<i style="mso-bidi-font-style: normal;"> Es
posible, pero no. La verdad, sí que me fijaba con bastante frecuencia en sus
cuerpos, pero nunca creí que fuera por una atracción sexual, solo curiosidad,
los comparaba con el mío. Ahora puede ser que tenga algo de sentido esa
curiosidad. Pero nunca he sabido lo que era el sexo hasta ahora. Y estoy
encantada de haberlo descubierto contigo, eres maravillosa, soy una mujer feliz
– </i>Laura racionaliza su vida actual.<i style="mso-bidi-font-style: normal;"><span style="mso-spacerun: yes;"> </span><span style="mso-spacerun: yes;"> </span><o:p></o:p></i></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">–<i style="mso-bidi-font-style: normal;"> Y
yo estoy encantada de que estés encantada</i>. - Hace una pausa<i style="mso-bidi-font-style: normal;">. - Ahora necesitaría una ducha. - </i>Comenta
Marian. - <i style="mso-bidi-font-style: normal;">¿Te apuntas? - </i>Pregunta.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><i style="mso-bidi-font-style: normal;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">- Lo que tú
quieras cariño. -</span></i><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";"><span style="mso-spacerun: yes;"> </span>Responde y se levantan. Laura se detiene un
segundo a contemplar la figura de Marian desnuda delante suya. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">- <i style="mso-bidi-font-style: normal;">¿Qué
ocurre? - </i>Le pregunta intrigada. Laura está admirada al contemplar en su
real dimensión el cuerpo armonioso de Marian, una figura menuda pero perfecta.
No recuerda haber visto un cuerpo tan agraciado a sus ojos.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">- <i style="mso-bidi-font-style: normal;">¡Eres
preciosa! -<span style="mso-spacerun: yes;"> </span></i>Se acerca a ella
insinuante. – <i style="mso-bidi-font-style: normal;">Cada día te quiero más. - </i>La
besa de nuevo románticamente. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">– <i style="mso-bidi-font-style: normal;">Soy
muy feliz por estar contigo. Dios mío, nunca he dicho eso a ninguna de mis
novias pasadas. - </i>Expresa Marian. – <i style="mso-bidi-font-style: normal;">La
verdad es que nunca me había enamorado así, esta sensación que tengo contigo a
mi lado es algo nuevo y al mismo tiempo maravilloso. ¡Te quiero amor mío! - </i>Un
beso de nuevo y se dirigen al baño. El agua caliente de la ducha es
reconfortante, solo el discurrir del agua por su piel es una sensación
agradable donde las haya para ellas en ese momento. Se aferran la una a la otra
en un baile sensual debajo de la corriente acuosa. Entrelazan sus extremidades
en ese baile erótico que acaba con una loca convulsión de sus cuerpos. Laura se
promete repetir esta experiencia nueva y agradable siempre que pueda. <i style="mso-bidi-font-style: normal;"><o:p></o:p></i></span></p>
<p class="MsoNormal"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">De
vuelta a la cama se arropan bajo el edredón y conversan un rato entre besos
cortos y más largos, se acarician con suavidad, despacio llevan a conectar sus
manos en la profundidad de su ser. Por más cursi que se lea, por más empalagoso
que suene, los besos, los abrazos y las caricias son la guía de una relación
sana, no se trata de estar con ellos todo el día, solo hay que recordar que el
contacto físico es sustancial, fortalece los lazos emocionales de cualquier pareja.<o:p></o:p></span></p><p class="MsoNormal" style="background: white; margin-bottom: 0cm; vertical-align: baseline;">
</p><p class="MsoNormal"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">Las
sensaciones que están experimentando y el deseo largamente ambicionado,
provocan que los actos de amor sean repetidos, intensos y cortos. Alcanzan el
culmen de forma rápida y viva. Parece
que no hay otra necesidad que la de satisfacerse mutuamente con el mayor ardor
posible. Aún no se han recuperado de un trance y ya están en ese baile rítmico
que las conduce al éxtasis de nuevo. Son felices y nada cuenta a su alrededor.
Repiten una y otra vez, entre frases de cariño, caricias y besos, los actos de
amor sin freno.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">Laura se sorprende a si misma al tomar la
iniciativa en alguno de los encuentros. Se desenvuelve como una experta, nunca
ha hecho el amor con una mujer, ni con un hombre. Simplemente se deja llevar
por el instinto y guiada por el sentimiento, pareciera que tuviese una práctica
solvente. Es la pasión la que guía sus manos y movimientos. Marian por su parte
cree encontrase en el cielo. Ella si tiene experiencia, pero jamás ha reiterado
tantas veces seguidas haciendo el amor con nadie. Le llama la atención el
comprobar que no le importa, más bien lo desea, insisten una y otra vez, se
siente inagotable y quiere disfrutar de tanta felicidad como sea posible. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">Todos se acaban en un momento, para
regresar a continuación a otro con el mismo ardor. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">Ya es de noche y Laura le plantea que debe
irse. Sus padres esperan que regrese, aunque sea tarde. Debe cumplir con su
familia, si bien no le piden explicaciones, pero no quiere preocuparlos, aunque
esté justificado por el estado de felicidad que vive en este momento. Marian
intenta retenerla, no quiere separarse de ella ahora que la tiene tan cerca, le
duele dejarla ir, pero debe ser así.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">Durante el retorno a su domicilio habitual
Laura va acompañada de una música celestial que mana de su cabeza. Nunca pensó
que hacer el amor fuera algo tan extraordinario. Se siente en el cielo de los
placeres y ama con profundo sentimiento a esa pelirroja encantadora con quien
ha compartido sus primeras y maravillosas relaciones no solo de sexo, de amor
transformado en entrega carnal. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">Una vez que se ha acomodado en su
dormitorio coge el teléfono, marca un número. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><i style="mso-bidi-font-style: normal;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">- ¿Me echas de
menos? - </span></i><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">Pregunta
con una sonrisa. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">– <i style="mso-bidi-font-style: normal;">Todavía
estoy asomada al balcón por si te arrepentías y dabas la vuelta. - </i>Le dice
Marian con una sonrisa de felicidad. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><i style="mso-bidi-font-style: normal;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">– Ha sido la
noche más feliz de mi vida. ¡No sabes lo que te quiero! Estoy encantada de
quererte. - <o:p></o:p></span></i></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><i style="mso-bidi-font-style: normal;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">- Yo aún sigo
alucinada, me haces muy, pero que muy feliz, y te digo lo mismo. ¡No sabes lo
que te quiero! - <o:p></o:p></span></i></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><i style="mso-bidi-font-style: normal;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">- ¡Buenas noches
amor! -<span style="mso-spacerun: yes;"> </span><o:p></o:p></span></i></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><i style="mso-bidi-font-style: normal;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">- ¡Buenas
noches, vida mía! -<o:p></o:p></span></i></p>
<p class="MsoNormal"><span lang="ES-TRAD"><o:p> </o:p></span></p>Francisco Freijaneshttp://www.blogger.com/profile/07136887969142331609noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-7189587968703271148.post-55894975032267364182021-04-08T20:38:00.001+02:002021-04-08T20:38:30.698+02:007. Un mundo diferente <p> </p><p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><b style="mso-bidi-font-weight: normal;"><span style="font-family: "Comic Sans MS"; font-size: 14.0pt; line-height: 115%; mso-ansi-language: ES;">Te quiero. Pero no a mi lado.<o:p></o:p></span></b></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><br /></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span style="font-family: "Comic Sans MS"; mso-ansi-language: ES;">Pasan unas dos semanas antes de que las recién casadas,
Carmen y Paloma, den señales de vida. Al regresar de su luna de miel se han
dedicado a poner las rutinas de su nueva vida matrimonial en orden. Al tiempo
van contactando con sus amistades, entre las que, obviamente está Marian.<span style="mso-spacerun: yes;"> </span><o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span style="font-family: "Comic Sans MS"; mso-ansi-language: ES;">Una tarde mientras se acicala esperando a Laura suena el
teléfono, descuelga al ver quien llama. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span style="font-family: "Comic Sans MS"; mso-ansi-language: ES;">-<i style="mso-bidi-font-style: normal;"> ¡Carmen! ¡Que
sorpresa! ¿Ya habéis vuelto?- </i>Responde con preguntas. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span style="font-family: "Comic Sans MS"; mso-ansi-language: ES;">-<i style="mso-bidi-font-style: normal;"> ¡Sí! Ya llevamos
aquí unos días. Teníamos muchas cosas pendientes y no hemos tenido tiempo de
hacer otra cosa que ordenar la casa, hacer papeles. Pero ya hemos acabado.- </i>Le
cuenta de una tacada. -<i style="mso-bidi-font-style: normal;"> ¿Tienes algo que
hacer esta tarde?- <o:p></o:p></i></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><i style="mso-bidi-font-style: normal;"><span style="font-family: "Comic Sans MS"; mso-ansi-language: ES;">- ¡Bueno
he quedado! ¿Por qué?- </span></i><span style="font-family: "Comic Sans MS"; mso-ansi-language: ES;">Pregunta intrigada. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><i style="mso-bidi-font-style: normal;"><span style="font-family: "Comic Sans MS"; mso-ansi-language: ES;">– Para
vernos. Tenemos mucho que contarte. ¿Te apetece?- </span></i><span style="font-family: "Comic Sans MS"; mso-ansi-language: ES;">El comentario
despierta curiosidad en Marian. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span style="font-family: "Comic Sans MS"; mso-ansi-language: ES;">– <i style="mso-bidi-font-style: normal;">¡Sí que me
apetece…! Te llamo en un rato.- </i>Cuelga y llama a Laura. No le responde. Le
extraña y vuelve a marcar, sigue sin responder. Decide esperar unos minutos
mientras termina de arreglarse.<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>Laura en
ese momento está aparcando cerca del domicilio de Marian. Sale del coche y
ahora es ella quien la llama. Marian descuelga. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span style="font-family: "Comic Sans MS"; mso-ansi-language: ES;">- <i style="mso-bidi-font-style: normal;">¿Dónde estás?</i>
– Pregunta con intranquilidad.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><i style="mso-bidi-font-style: normal;"><span style="font-family: "Comic Sans MS"; mso-ansi-language: ES;">-
Delante de tu casa, acabo de llegar.-</span></i><span style="font-family: "Comic Sans MS"; mso-ansi-language: ES;"> Responde extrañada Laura. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span style="font-family: "Comic Sans MS"; mso-ansi-language: ES;">–<i style="mso-bidi-font-style: normal;"> Bajo ahora mismo.
- </i>Marian cuelga, coge el bolso y sale a toda prisa. Se encuentra con Laura
en la puerta de la cafetería de Raúl. Se besan en la mejilla fraternalmente. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span style="font-family: "Comic Sans MS"; mso-ansi-language: ES;">- <i style="mso-bidi-font-style: normal;">¡Dime! ¿Qué
pasa?- </i>Pregunta intrigada. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span style="font-family: "Comic Sans MS"; mso-ansi-language: ES;">- <i style="mso-bidi-font-style: normal;">¡Vamos, tomemos
un café! - </i>Le dice algo inquieta. Entran en el local de Raúl y piden sendos
cafés con leche. Toman asiento en una mesa. Marian sacia la curiosidad de
Laura. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span style="font-family: "Comic Sans MS"; mso-ansi-language: ES;">– <i style="mso-bidi-font-style: normal;">¡Verás! Acabo de
hablar con mi amiga Carmen. Ella y Paloma han vuelto de su luna de miel. ¿Te
acuerdas la noche que nos encontramos y me asaltaste en aquel cuarto de baño?- </i>Laura
asiente. –<i style="mso-bidi-font-style: normal;"> Ese día se habían casado. Lo
estábamos celebrando. No las he vuelto a ver desde entonces. Carmen es una gran
amiga desde que éramos niñas. Por más que no me he acordado de ella desde que
estoy contigo. Necesito hablarte de ellas…-<o:p></o:p></i></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span style="font-family: "Comic Sans MS"; mso-ansi-language: ES;">Poco a poco Marian le va narrando la historia de su
infancia, el descubrimiento con Carmen y todos los sucesos acaecidos con los
padres de ambas. Cómo se volvieron a encontrar. La amistad que las une y lo
contenta que está porque ella ha encontrado el amor de su vida en Paloma, su
esposa.<i style="mso-bidi-font-style: normal;"><o:p></o:p></i></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span style="font-family: "Comic Sans MS"; mso-ansi-language: ES;">Le relata que al reencontrarse descubrió a una Carmen madura,
nada que recordara a aquella joven flaca casi sin pecho ni caderas.<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>Carmen había crecido lo suficiente para
presentar un físico hermoso y un rostro más bello de lo que ella recordaba. Le
explica que durante semanas no hicieron otra cosa que hablar del pasado, de
cómo les había ido en la Universidad y en el trabajo.<i style="mso-bidi-font-style: normal;"><o:p></o:p></i></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span style="font-family: "Comic Sans MS"; mso-ansi-language: ES;">– <i style="mso-bidi-font-style: normal;">Esta tarde me ha
llamado y quiere que nos veamos. Tiene mucho que contarme.- </i>Por fin
respira. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><i style="mso-bidi-font-style: normal;"><span style="font-family: "Comic Sans MS"; mso-ansi-language: ES;">- ¡Vaya!
Por fin sé algo más de ti. Eso que me has contado de tus padres es muy duro.
Deberíamos hablar de ello más despacio. Necesito saber de tu vida. ¡Bueno! ¿Y
qué vamos a hacer?- </span></i><span style="font-family: "Comic Sans MS"; mso-ansi-language: ES;">Pregunta curiosa. <i style="mso-bidi-font-style: normal;"><o:p></o:p></i></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><i style="mso-bidi-font-style: normal;"><span style="font-family: "Comic Sans MS"; mso-ansi-language: ES;">- Quiero
que vengas conmigo, me gustaría que las conocieras. Te aseguro que vas a estar
muy a gusto a su lado. - </span></i><span style="font-family: "Comic Sans MS"; mso-ansi-language: ES;">Marian mira con recelo a Laura que parece dudar en la
respuesta. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span style="font-family: "Comic Sans MS"; mso-ansi-language: ES;">- <i style="mso-bidi-font-style: normal;">¡Cariño…! No sé.
¿Quién sería yo, según tú? ¿Una amiga o tu novia?- <o:p></o:p></i></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span style="font-family: "Comic Sans MS"; mso-ansi-language: ES;">- <i style="mso-bidi-font-style: normal;">Lo que tú desees.
No voy forzar la situación. Ya lo sabes. Tú decides.- </i>Laura piensa por un
momento. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">No
existe un manual mágico para comenzar a salir del armario. Hay que ser
consciente de que es un proceso que se repetirá en infinidad de ocasiones.
Armarios hay muchos y motivos para no salir de ellos más; pero no se puede olvidar,
que al no hacerlo se aleja uno de los que te rodean y puede cambiar a una
persona alegre y abierta en alguien distante y aislada.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span style="font-family: "Comic Sans MS"; mso-ansi-language: ES;">- <i style="mso-bidi-font-style: normal;">¡Está bien! Tengo
claro que he vencer mis miedos. Voy a dar un paso, pero necesito tener la
certeza de que nadie más lo sabrá. Soy tu novia y habrá que empezar a decirlo
por algún sitio. Si tus amigas son de confianza. ¡Novia! -<span style="mso-spacerun: yes;"> </span></i>A Marian se le ilumina la cara. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span style="font-family: "Comic Sans MS"; mso-ansi-language: ES;">- <i style="mso-bidi-font-style: normal;">¿De verdad
cariño? ¿Estás decidida a dar este paso?- </i>Marian no acaba de creerlo.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span style="font-family: "Comic Sans MS"; mso-ansi-language: ES;">– <i style="mso-bidi-font-style: normal;">Eso he dicho.
Pienso mucho las cosas antes de dar un paso. Llevo días dándole vueltas a mi
cabeza de cómo enfrentarme a ello, ésta parece una buena oportunidad para dar
un primer paso. Cuando decido mirar hacia adelante lo hago sin dudas. Supongo
que contarlo en ambiente desconocido pero fiable, puede estar bien. - </i>Le
dice con solemnidad. Marian la abraza y besa su mejilla como si fuesen sus
labios. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">Salir
del armario, quizá sea una de las decisiones más complicadas y a la vez más
satisfactorias de la vida de todo homosexual. Vivir fingiendo ser otra persona
y sintiendo miedo a ser rechazado por ser una misma, en ocasiones, puede
convertirse en algo muy angustioso que puede generar un constante estado de
alerta. A la vez que de forma inconsciente se construye un muro para no ser
lastimada, muro que igual que nos protege de las flechas, también nos distancia
de los besos. Laura adolece de tener ya un muro, levantado hace tiempo, para
proteger su intimidad de agresiones externas, siempre se ha sentido protegida
tras esa coraza de aparente personalidad recia e inquebrantable. Ahora tiene ya
creada una nueva defensa donde proteger esa posibilidad de reconocerse
homosexual. Pero comienza a ver claro que debe reconocerse como tal y salir del
armario comienza a inquietarla. Acaba de encontrar un lugar seguro donde poder
hacerlo sin riesgos de que otros puedan inmiscuirse en su intimidad y espera
que la fortuna le acompañe. <o:p></o:p></span></p><p style="background: white; line-height: 115%; margin: 0cm;">
</p><p class="MsoNormal"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">– No
te arrepentirás, vida mía.- Marian le susurra al oído, coge el móvil y marca el
número de Carmen. Es Paloma quien contesta. Habla con ella un instante. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><i style="mso-bidi-font-style: normal;"><span style="font-family: "Comic Sans MS"; mso-ansi-language: ES;">-
Quedamos en su casa, Carmen está en la ducha. En lo que llegamos estarán
listas.-<o:p></o:p></span></i></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">Se meten en el coche y parten rumbo a la
Plaza del Comercio. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">Paloma y Carmen las esperan en la calle.
Laura aparca el vehículo. Marian presenta a Laura a sus amigas sin decir nada
de su relación. Han hablado que sea ella quien se reconozca como su novia. Las
recién casadas ya han decidido donde ir y se encaminan hacia el Pub cercano,
regentado por unos amigos de Paloma. Durante el paseo Carmen habla con Marian
de las cosas comunes, van haciendo risas. Paloma y Laura caminan una al lado de
la otra.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">– <i style="mso-bidi-font-style: normal;">Me
ha dicho Marian que estáis casadas.- </i>Comenta Laura a modo de interés. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><i style="mso-bidi-font-style: normal;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">– ¡Sí!- </span></i><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">Responde Paloma con cierta
seriedad. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">– <i style="mso-bidi-font-style: normal;">También
me ha dicho que Carmen es amiga de toda la vida.- <o:p></o:p></i></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><i style="mso-bidi-font-style: normal;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">- ¡Es cierto!
Han pasado mucho.- </span></i><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">Le
comenta a modo de aclaración. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><i style="mso-bidi-font-style: normal;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">- ¡Lo sé! Me lo
ha contado. Debe ser una gran persona. Marian parece que le tiene mucho
cariño.- </span></i><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">Expone
Laura sin intención.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";"><span style="mso-spacerun: yes;"> </span><i style="mso-bidi-font-style: normal;">– ¡Lo es! Me he casado con ella por eso. Y
tú ¿Qué relación tienes con Marian?- </i>Laura se siente atrapada por la
pregunta. Lo primero que piensa es decirle que es su novia, pero duda. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">– <i style="mso-bidi-font-style: normal;">Somos
compañeras de trabajo, y somos muy buenas amigas. - </i>Responde huyendo de la
verdad, un poco sonrojada y con una sonrisa forzada.<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>Paloma la mira y hace un gesto de
contrariedad, algo le dice que esa respuesta es obligada, no hace ningún
comentario, pero la mira con intriga. Caminan hasta el Pub de Guillermo y Pablo
que reciben al matrimonio con abrazos y felicitaciones. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">- <i style="mso-bidi-font-style: normal;">¿No
fue aquí donde nos besamos por segunda vez? </i>– Pregunta Laura en voz baja al
oído de Marian. Ella le sonríe con cara de felicidad. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">- <i style="mso-bidi-font-style: normal;">¡Sí!
En ese servicio. </i>– Le responde señalando con el dedo. Ambas se ríen con
regocijo. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">Durante un rato las recién casadas saludan
a conocidos y algunas amistades allí presentes. Casi parece un acto de
protocolo social. Paloma y Carmen saludan, hablan y reciben enhorabuenas
continuas. Por fin se sientan en compañía de Marian y Laura. Carmen está feliz,
se le ve en la expresión, Paloma parece algo más seria, pero no deja de
traslucir cierto contento de la mano de su esposa.<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>La conversación circula por las cosas que les
han sucedido en el viaje de luna de miel, lo narran con todo lujo de detalles.
Más tarde pasan a hablar del trabajo, la política, la ciudad, y temas de lo más
trivial, hasta que en un momento dado Carmen, algo intrigada, le pregunta a Marian
sobre ella y su acompañante. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">- <i style="mso-bidi-font-style: normal;">¿Así
que sois compañeras de trabajo?- </i>Pregunta con inocencia. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">- <i style="mso-bidi-font-style: normal;">¡Sí!
– </i>Responde Laura atropellada. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">- <i style="mso-bidi-font-style: normal;">¿Seguro
que nada más?- </i>Laura no sabe que decir. Regresa la duda. No sabe cómo
decirle a una desconocida que ama a Marian y que es su novia. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">- <i style="mso-bidi-font-style: normal;">¡Bueno!<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>¡No sé! Es difícil explicarlo…-<span style="mso-spacerun: yes;"> </span><o:p></o:p></i></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><i style="mso-bidi-font-style: normal;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">- ¡Que te gusta
Marian! Se nota a la legua.- </span></i><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">Paloma ejerce de adivina. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">-<i style="mso-bidi-font-style: normal;">
¿Queeé?- </i>Brama una sorprendida Laura. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><i style="mso-bidi-font-style: normal;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">– He visto como
la miras, son cosas que no sabemos esconder cuando estamos enamoradas. No debes
sorprenderte ella te mira igual.- </span></i><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">Laura no sale de su asombro. De repente
Paloma llama la atención de Marian.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">- <i style="mso-bidi-font-style: normal;">¡Marian!
Laura dice que sois compañeras de trabajo. ¿Es cierto?- </i>Marian se gira
hacia ella sorprendida de lo extraño de la pregunta. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">- <i style="mso-bidi-font-style: normal;">¡Sí!
Es cierto.-</i> Expresa dubitativa. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><i style="mso-bidi-font-style: normal;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">– Es raro porque
me ha parecido ver que os coméis con los ojos.- </span></i><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">Laura se queda petrificada, balbucea algo
incomprensible y mira hacia otro lado, como enfadada. Carmen mira con sorpresa
a Marian que a su vez ojea preocupada a su novia. Antes de decir nada se acerca
a ella para susurrarle al oído. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">–<i style="mso-bidi-font-style: normal;">
Tranquila cariño, a Paloma le gusta jugar. Siempre puedes tomártelo a broma.- </i>Acto
seguido mira a Paloma con severidad.<span style="mso-spacerun: yes;"> </span><o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">-<i style="mso-bidi-font-style: normal;">
¡Vale, vale! Lo pillo. Y lo siento, no quería molestar.- </i>Se disculpa
Paloma. Laura baja la cabeza y mira al suelo, respira y levanta la mirada. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">- <i style="mso-bidi-font-style: normal;">¡Está
bien! No tienes que disculparte. Soy yo quien tiene los problemas…- </i>Marian
la interrumpe, se acerca a su oído.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">– <i style="mso-bidi-font-style: normal;">No
tienes que decir nada. Otro día. - </i>Carmen muestra curiosidad. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">– ¿<i style="mso-bidi-font-style: normal;">Es
que hay algún problema?<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>¿Qué te ocurre?
¿Podemos ayudarte?- </i>Le dice a una Laura temblorosa.<i style="mso-bidi-font-style: normal;"> <o:p></o:p></i></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><i style="mso-bidi-font-style: normal;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">- ¡No! No es
necesario. - </span></i><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">Responde,
toma aire y habla. <i style="mso-bidi-font-style: normal;">– ¡Está bien! Es la
primera vez que lo voy a decir y estoy algo nerviosa... Marian y yo estamos…
enamoradas, solo es que me cuesta decirlo, admitirlo y adaptarme a estar en
compañía de una mujer. Me muero de vergüenza, no sé… ¡Me cuesta superarlo! Solo
es eso. - </i><span style="mso-spacerun: yes;"> </span>Laura respira hondo.
Marian la abraza. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">-<i style="mso-bidi-font-style: normal;">
¡Muy bien, amor mío! Te quiero.- </i>Le susurra al oído. A Laura se le escapa
una lágrima por la tensión, Marian le responde de forma positivista. Ha
superado ese primer paso, tenía pánico a realizar una confesión de algo tan
íntimo y comprometido. No es fácil salir del armario y tampoco hace que los
problemas se solucionen de forma instantánea. A la larga las cosas pueden ser
mejores y al hacerlo con personas que se espera comprendan la situación, la
tarea resulta algo más fácil de armar y de expresar. Para ella las amigas de
Marian aún son unas desconocidas, pero confía en su novia.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">- <i style="mso-bidi-font-style: normal;">¿Te
da vergüenza decir que eres gay? </i>– Pregunta Carmen con curiosidad. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><i style="mso-bidi-font-style: normal;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">- ¡Sí! Me da
mucha vergüenza. Tengo miedo a las críticas, al qué dirán, mi familia, el
trabajo… Esto nunca me había pasado. Es la primera vez que me enamoro de
verdad… y de una mujer.<span style="mso-spacerun: yes;"> </span></span></i><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">– En ese momento Carmen y
Paloma se miran con incertidumbre. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">- <i style="mso-bidi-font-style: normal;">¿Por
qué? Hoy en día no debe ser un problema, a menos que no lo aceptes.</i> – Le
responde Carmen con seguridad. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">– <i style="mso-bidi-font-style: normal;">Ese
es mi problema, no me considero homosexual, solo me he enamorado de Marian sin
percibirlo. Estoy en un mar de dudas y asustada con este sentimiento. Me
horrorizan las opiniones ajenas y todavía me avergüenza el que me vean con una
chica como pareja. Pero creedme, quiero a Marian con todo mi corazón.</i> –
Laura se explica con cierto nerviosismo. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">- <i style="mso-bidi-font-style: normal;">¡Te
creemos! Pero debes dejar de pensar de esa manera, no es saludable. Sabemos lo
difícil que es salir del armario. Enfrentarse a la selva que es la sociedad,
cuesta. Pero insisto debes alejar esos pensamientos de ti. </i>– Le dice Paloma
con cierto candor. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">– <i style="mso-bidi-font-style: normal;">Lo
que opinen los demás es solo eso, opiniones, opiniones diferentes a las tuyas.
Es el contraste, si todos opináramos lo mismo, esto sería un aburrimiento de
sociedad. Tómalo como lo que es, una opinión diferente a la tuya. </i>– Carmen
argumenta con sobriedad. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">– <i style="mso-bidi-font-style: normal;">Quien
te critique solo está diciendo que es alguien que no está preparado para asumir
tu personalidad.</i> – Marian ratifica con aplomo el argumento anterior. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">– <i style="mso-bidi-font-style: normal;">Tu
ama a Marian como lo estás haciendo, de esa manera tan bonita que has dicho. Si
alguien se molesta por ello, es porque ha decidido molestarse. En una palabra,
es su problema, no el tuyo.</i> – Paloma habla con sabiduría mirando fijamente
a los ojos de Laura que acepta el argumento como bueno. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">– <i style="mso-bidi-font-style: normal;">Nunca
me he cuestionado mi sexualidad, siempre he creído que era hetero, no necesité
hacerlo, no tenía dudas porque nunca se me presentaron como ahora. -<o:p></o:p></i></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">- <i style="mso-bidi-font-style: normal;">La
sexualidad forma parte de nuestra identidad como personas y es muy importante
definirla. Mientras no te la cuestionas, es difícil entender la importancia que
puede llegar a tener, y debes tener la certeza que forma parte importante de tu
propia realidad. – </i>Paloma ilustra el pensamiento de Laura que escucha con
atención sus palabras. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">- <i style="mso-bidi-font-style: normal;">Si de
verdad te enamoras, lo haces de una persona, de sus cualidades y sus
atractivos. Ella hace que te sientas bien a su lado. El que sea hombre o mujer,
llega a ser un aspecto secundario. Si ese amor hace que vivas en paz a su lado
y, que cuando te emociona, notas que es de felicidad. Entonces, estás en el
camino del amor verdadero. – </i>Laura se estremece inquieta ante la reflexión
de Paloma, que despliega toda su inteligencia hacia ella. – <i style="mso-bidi-font-style: normal;">La sexualidad es una parte de tu ser, no una
razón de existir. También nos define en cómo nos relacionamos con el resto de
la sociedad que nos rodea. Pero insisto, debes sentirte a gusto al lado de la
persona que amas, al lado de Marian. Es una mujer, ¡Sí!, pero es la persona de
la que te has enamorado y eso es lo bonito.-<o:p></o:p></i></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">En todo momento Marian no se separa de
Laura, cree que necesita sentir su apoyo y que esté a su lado en un momento tan
delicado. Sus manos entrelazadas, una suave caricia de sus dedos serenan el
ánimo de Laura. No necesita preguntarle, mira a sus ojos y a su sonrisa para
entender. Confesar públicamente su amor por Marian pensaba que le sería muy
costoso. Ahora Laura se siente algo más relajada, ni por un momento se sueltan
de la mano. La conversación ha tomado un sentido que a Laura le resulta
reconfortante al percibir cierto apoyo emocional.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">– <i style="mso-bidi-font-style: normal;">La
homosexualidad no es signo e infelicidad. Ser lesbiana no implica que una
persona sea alguien llena de conflictos internos o externos, que sufre y que
puede llevar a terminar su vida de forma dramática. Eso solo ocurre en las
películas y en las noticias. La normalidad es la que está oculta a ojos
públicos, la mayoría de las parejas homosexuales, y somos muchas más de las que
puedas imaginar, viven sus vidas cómodamente, sin las trabas que tanto se
publican por ahí. -<span style="mso-spacerun: yes;"> </span></i>Paloma remata su
discurso quitando dramatismo a los pensamientos de Laura, que de pronto se
siente acogida en forma agradable por las que ya considera sus amigas.<span style="mso-spacerun: yes;"> </span><o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">La tarde termina entre risitas y pasándolo
bien. Cuando las cuatro salen del Pub, Carmen las invita a la última copa en su
casa. Allí se dirigen las cuatro abrazadas por parejas formales. Entran en la
casa, Laura pide un refresco, dice que tiene que conducir y quiere dejar a
Marian en su domicilio, sana y salva, y ella también. Un rato de charla y en un
momento dado desaparecen Carmen al baño y Paloma a ponerse algo más cómodo. Al
verse a solas Laura se acerca a Marian y la besa con toda la dulzura que le es
posible. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">- <i style="mso-bidi-font-style: normal;">¡Gracias!
Ha estado perfecto, me siento bien. - <o:p></o:p></i></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><i style="mso-bidi-font-style: normal;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">- Has sido muy
valiente. ¿No ha sido tan difícil, verdad? Por eso te quiero.- </span></i><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">Repiten el beso esta vez con
intensidad. Ensimismadas besándose no se percatan de la presencia de Carmen que
regresa del baño. Se oculta detrás de la puerta y las observa con una sonrisa.
Por el pasillo aparece Paloma atándose el cordón del pantalón. Carmen le hace
señas para que no haga ruido y se acerque a observar. Ambas ríen en silencio,
se vuelven a esconder y Paloma finge que tose. La reacción inmediata de Laura
es separarse bruscamente y mirar para otro lado, Marian se queda con mirada de
espanto. El matrimonio entra en el salón medio sonriendo. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">– <i style="mso-bidi-font-style: normal;">Veo
que habéis aprovechado el rato.- </i>Dice Carmen riendo de buena gana. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">- <i style="mso-bidi-font-style: normal;">¿Por
qué lo dices? – </i>Pregunta Marian. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><i style="mso-bidi-font-style: normal;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">– No, por nada.
¿Os ha sentado bien el beso?- </span></i><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">Laura se pone roja de vergüenza y se tapa la boca, mira a
Marian que tiene repartido todo el carmín alrededor de los labios e
inmediatamente suelta una carcajada. Marian no entiende el motivo, Laura se
quita la mano del rostro y entonces entiende lo que pasa. Todas se ríen sin
tino.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";"><o:p> </o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">En su despacho el gerente está liquidando
unos papeles con Marina. Cuando terminan, la directora se va a sus ocupaciones.
Un poco a escondidas llama a la puerta Adela, la administrativa. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">- <i style="mso-bidi-font-style: normal;">¿Da
su permiso Don Fernando?- </i>Pregunta con voz aniñada, empequeñecida.
Mostrando el carácter retorcido del que es portadora. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><i style="mso-bidi-font-style: normal;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">– Pase, pase
Adela. ¿Qué la trae por aquí?- </span></i><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">Pregunta el gerente con ese tono de voz de la prepotencia
estúpida. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><i style="mso-bidi-font-style: normal;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">– El caso es que
quiero comentarle algo, que ya se sabe, pero…- </span></i><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">Es interrumpida con soez pronunciamiento de
su jefe. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><i style="mso-bidi-font-style: normal;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">- Si se sabe.
¿Qué coños quieres ahora?- </span></i><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">Le espeta casi escupiendo en su cara. Adela pone la mano
delante de su rostro a modo de escudo contra los perdigones que le salen de la
boca. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">– <i style="mso-bidi-font-style: normal;">Sabe
usted que las señoritas Marian y Laura tuvieron a bien hacer algo pecaminoso
después de la cena de la empresa.</i> – <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">- <i style="mso-bidi-font-style: normal;">¡Sí!
Y<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>¿Qué pasa?- </i>Pregunta casi
gritando.<span style="mso-spacerun: yes;"> </span><o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">– <i style="mso-bidi-font-style: normal;">Pues
que lo han vuelto a hacer. Y lo que más me indigna es que lo hicieron en mi
cara.- <o:p></o:p></i></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><i style="mso-bidi-font-style: normal;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">- ¿Aquí en la
oficina?- </span></i><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">Comienza
la ira<i style="mso-bidi-font-style: normal;">.<span style="mso-spacerun: yes;">
</span><o:p></o:p></i></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><i style="mso-bidi-font-style: normal;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">- ¡No, no señor!
En plena calle. Pasaba yo por allí y las vi en un rincón dándose un asqueroso
beso en la boca. Lo hacían como locas. Nuestro señor las enviará al infierno.
Son unas inmorales. Se frotaban el cuerpo con las manos de manera pecaminosa y
obscena. Un espectáculo repugnante don Fernando.-<span style="mso-spacerun: yes;"> </span></span></i><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">El gerente la escucha con la boca casi
abierta, el cigarrillo colgando de los labios se le cae sobre el pantalón
haciendo que dé un respingo hacia atrás que casi le hace caer de la silla.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">Recompuesto y sacudiéndose las cenizas de
la ropa le pregunta a Adela. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">- <i style="mso-bidi-font-style: normal;">¿Qué
quieres que haga yo ahora? No me encargo de la moral de mis empleados. Aunque
ganas me dan de echarlas a la calle por bolleras.- <o:p></o:p></i></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><i style="mso-bidi-font-style: normal;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">- Y ¿A qué
espera?- <o:p></o:p></span></i></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><i style="mso-bidi-font-style: normal;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">- ¿Cómo a que
espero? ¿No sabes que no se puede despedir a la gente por eso? Es
discriminación por condición sexual. ¡Estúpida!- <o:p></o:p></span></i></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><i style="mso-bidi-font-style: normal;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">- Usted manda.
Yo solo vengo a advertirle. Luego no me diga que no lo he hecho.- </span></i><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">Colocada la calumnia abandona
el despacho con un rictus de sonrisa estampado en su cara de harpía. Sin
comentar nada regresa a su mesa y continúa con su trabajo.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";"><o:p> </o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">Manolín, el conductor, ronda por las
cercanías de Laura, hace que busca algo y poco a poco se va acercando. Tiene
ganas de hacerse el gracioso y provocar a Laura para ver si consigue morder el
anzuelo. Como todos los graciosos, que no lo son porque difícilmente cuentan lo
que es oportuno en tiempo y circunstancia. Vuelve a la carga.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">–<i style="mso-bidi-font-style: normal;"> ¿Te
cuento un chiste muy gracioso? - </i>Laura lo mira severa. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><i style="mso-bidi-font-style: normal;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">- ¡No! No me
hacen gracia tus chistes- </span></i><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">Rechaza la propuesta. Pero como todos los inconscientes,
insiste. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><i style="mso-bidi-font-style: normal;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">– ¡Si es muy
gracioso! - <o:p></o:p></span></i></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><i style="mso-bidi-font-style: normal;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">- Tu no
entiendes el significado de la palabra, no ¿Verdad? - </span></i><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">Repite su negativa.<span style="mso-spacerun: yes;"> </span><o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">– <i style="mso-bidi-font-style: normal;">Pues
aunque no quieras te lo voy a contar de todas maneras. Soy Bisexual.- </i>Laura<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>levanta la mirada hacia él preguntándose qué
narices está diciendo. Manolín continúa. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">– <i style="mso-bidi-font-style: normal;">Me
gusta hacerlo con dos.- </i>Laura pone cara de no entender, aunque si descifra
a que se refiere. Pone gesto de desagrado, coge unos papeles y los mete en una carpeta
que pone “MARINA.”<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>Se levanta y sale de
su rincón detrás del mostrador, le da la vuelta y al pasar por delante del
conductor éste la coge por el brazo y se pone detrás apretándose contra ella.
Trata de decirle algo pero antes de que pronuncie palabra alguna, de forma
violenta Laura se da vuelta y le da una bofetada. Sorprendido por la reacción,
suelta el brazo para llevarse la mano a la cara. Laura continúa su camino hasta
la administración sin decir nada. Entrega la carpeta a Marina y regresa a su
mesa. Manolín ha desaparecido, supone que avergonzado. En ese momento le da un
estremecimiento que la bambolea, a duras penas consigue sentarse. Respira
profundamente y poco a poco se le va pasando. Marian se acerca a ella al verla
sentada con las manos tapándose la cara. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">- <i style="mso-bidi-font-style: normal;">¿Te
ocurre algo?- </i>Laura no responde, mantiene la misma posición. Oculta su cara
a Marian, no quiere despertar alarmas, pero no se encuentra bien. Marian
sospecha que algún problema le está sucediendo. Rodea la mesa y se agacha a
su<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>lado. Contempla la palidez de la cara
de Laura. - <i style="mso-bidi-font-style: normal;">¿Qué te ha pasado, cariño?- </i>Laura
sigue sin responder, se echa hacia atrás y en ese instante pierde el
conocimiento y cae al suelo deslizándose por la silla. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">- ¡<i style="mso-bidi-font-style: normal;">Laura,
Laura! ¡Socorro! Que alguien me ayude.- </i>Rápidamente acuden Marina y Esther,
las más cercanas en ese momento. Esther se pone a los pies de Laura y le levanta
las piernas por encima del cuerpo. - <i style="mso-bidi-font-style: normal;">¡Por
favor, cariño, despierta! ¿Qué te pasa? – </i>Marian expresa casi llorando. Al
segundo Laura recupera la consciencia. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">- <i style="mso-bidi-font-style: normal;">¿Laura?
¿Estás bien? ¿Qué te ha pasado?-<span style="mso-spacerun: yes;"> </span></i>Semiinconsciente
<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>parpadea con los ojos<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>como alucinada, intenta levantarse pero es
detenida por las demás. <i style="mso-bidi-font-style: normal;">- ¡Quieta ahí
hasta que tengas mejor cara!- </i>Le dice Marian. <i style="mso-bidi-font-style: normal;">- ¿Estás mejor?- </i>Laura afirma con la cabeza, siente la boca seca y
pide agua. Poco a poco Esther le va bajando las piernas al suelo. Al comprobar
que se ha recuperado la sientan en su silla. – <i style="mso-bidi-font-style: normal;">Ya me encuentro bien.- </i>Le dice a Marian. Esther regresa a su
oficina. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><i style="mso-bidi-font-style: normal;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">- ¿Qué ha
sucedido?- </span></i><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">Pregunta
Marian. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><i style="mso-bidi-font-style: normal;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">– ¡Nada! Me he
encontrado muy mareada. Algo ha debido sentarme mal.- </span></i><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">Oculta que se ha encontrado
mal después de la “broma” de Manolín. No quiere crear problemas innecesarios
por una chiquillada. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><i style="mso-bidi-font-style: normal;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">- En cuanto
estés mejor. Te llevo a casa.- </span></i><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">Propone con firmeza.<i style="mso-bidi-font-style: normal;"> <o:p></o:p></i></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><i style="mso-bidi-font-style: normal;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">- Tengo trabajo
Marian.- </span></i><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">No
quiere<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>darle mayor importancia.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><i style="mso-bidi-font-style: normal;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">- Puede esperar
a mañana. Ahora necesitas descanso. ¿Están tus padres en casa?- <o:p></o:p></span></i></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><i style="mso-bidi-font-style: normal;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">- No hace falta,
de verdad.- </span></i><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">Rechaza
la propuesta pero con poca convicción.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><i style="mso-bidi-font-style: normal;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">- ¡Sí! Puede
repetirse<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>otra vez. Así que a descansar
a casa.- </span></i><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">Marian
manda, Laura no tiene argumentos para rebatirla, así que cede a la pretensión
de su novia. La escena la contempla con humor Marina que apoya la imposición de
Marian. Recoge su bolso y cogidas del brazo llegan hasta el coche de Laura.
Marian la conduce hasta la puerta de su casa.<span style="mso-spacerun: yes;">
</span>Aparca delante y llama al timbre del exterior. Sale Don Luis y se acerca
a Marian que le explica lo sucedido en el trabajo, al tiempo que saca a Laura
del coche, aún algo pálida. La conducen dentro hasta el salón. Con la ayuda de
Lola, su madre, se tumba en el sofá. Marian mira con pavor la palidez que
presenta. Don Luis hace una llamada. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">–<i style="mso-bidi-font-style: normal;">
Dentro de unos minutos vendrá José Luis. Es un amigo mío que es el médico de la
familia.- </i>Le explica a Marian. No quiere marcharse sin comprobar que está
mejor. Se acerca a ella de nuevo. Laura está como desmadejada y apenas sin
voluntad para hacer nada, Marian la contempla con ojos de preocupación, no le
quita la vista de encima. El padre observa a las dos con expectación. Las
miradas y los gestos le parecen de cómplices más que de amigas. Cogidas de la
mano esperan la llegada del médico. Al poco rato llaman a la puerta y aparece
un hombre mayor con un maletín en la mano<i style="mso-bidi-font-style: normal;">.<o:p></o:p></i></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><i style="mso-bidi-font-style: normal;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">- ¡A ver! ¿Dónde
está mi chica preferida?- </span></i><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">Pregunta y entra en el salón. La mira con extrañeza. Explora
su cuello la garganta y la ausculta. Le toma el pulso y la tensión, le mira los
ojos, los oídos, le mueve el cuello y a cada maniobra que realiza Marian se
asusta más y más. Luego la interroga. Marian le explica lo que ha sucedido. Y
por fin da un dictamen. – <i style="mso-bidi-font-style: normal;">Ha sido una
lipotimia, un mareo, le ha bajado la tensión muy deprisa y ha perdido el
conocimiento. Le daré unas gotas para subirle la presión sanguínea y en cuanto
se encuentre mejor debe de tomar mucho líquido. Un susto nada más.- </i>Le dice
a Don Luis. Marian se acerca a ella. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">– <i style="mso-bidi-font-style: normal;">A
mi tendría que bajármela, me he puesto muy nerviosa. ¿Estás mejor?- </i>Le
pregunta a<i style="mso-bidi-font-style: normal;"> </i>Laura, ella afirma con la
cabeza. Le acerca la mano a la cara y ella la besa.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">- <i style="mso-bidi-font-style: normal;">¡Gracias
cariño!- </i>Le responde. Don Luis oye pero hace como que no ha escuchado nada.
Lola su madre ha ido a la cocina para preparar un zumo de naranja y el médico
no le da importancia a un comentario que está habituado a escuchar, ese
lenguaje es algo corriente entre las enfermeras, no le llama la atención. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">– <i style="mso-bidi-font-style: normal;">Me
voy. Me llevo tu coche, luego te lo devuelvo y así compruebo que estás mejor.- </i>Laura
consiente y Marian se despide con una sonrisa.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span style="font-family: "Comic Sans MS"; mso-ansi-language: ES;"><o:p> </o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span style="font-family: "Comic Sans MS"; mso-ansi-language: ES;"><o:p> </o:p></span></p>
<p class="MsoNormal"><span lang="ES-TRAD"><o:p> </o:p></span></p>Francisco Freijaneshttp://www.blogger.com/profile/07136887969142331609noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-7189587968703271148.post-4182019901780304242021-02-23T18:08:00.001+01:002021-02-23T18:08:42.052+01:006. Mucho que pensar<p><b><span style="font-family: "Comic Sans MS"; font-size: 14.0pt; line-height: 115%; mso-ansi-language: ES;">Te quiero. Pero no a mi lado.</span></b></p>
<p class="MsoNormal"><span style="font-family: "Comic Sans MS"; font-size: 14pt; line-height: 115%;">- <i>¡</i></span><i><span style="font-family: "Comic Sans MS"; mso-ansi-language: ES;">Si! Te
quiero. Pero no a mi lado.- </span></i><span style="font-family: "Comic Sans MS";">Con esta frase Laura manifiesta dos cosas distintas<i> </i>que Marian no alcanza a comprender; por
un lado afirma que si está enamorada y en la segunda le declara que no pueden
estar juntas. Tonta contradicción, piensa, es un sin sentido. Marian está
satisfecha de la primera respuesta. La segunda le resulta un enigma.</span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><i style="mso-bidi-font-style: normal;"><span style="font-family: "Comic Sans MS"; mso-ansi-language: ES;">- ¿Qué
quieres decir con, no a mi lado? - </span></i><span style="font-family: "Comic Sans MS"; mso-ansi-language: ES;"><span style="mso-spacerun: yes;"> </span>Pregunta intrigada.
Laura vuelve a tomar aire. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><i style="mso-bidi-font-style: normal;"><span style="font-family: "Comic Sans MS"; mso-ansi-language: ES;">– Me ha
salido espontáneo, no lo he pensado así. Te quiero, de verdad, estoy enamorada.
Mi hermano me lo hizo ver con claridad. Pero no sé a dónde voy, que es este
sentimiento, no sé si realmente es lo que me espera en la vida. Ya te lo he
dicho. Tengo un sin número de preguntas sin respuesta que necesito resolver. Mi
familia, mi trabajo. Yo misma me muero de vergüenza de que me vean con una
mujer como pareja. No puedo estar a tu lado… aún. Necesito tiempo, primero
necesito responder a todas esas incógnitas, necesito saber quién soy. Es lo que
trato de explicar. - </span></i><span style="font-family: "Comic Sans MS"; mso-ansi-language: ES;">Esta afirmación sorprende a Marian que reflexiona un
instante.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span style="font-family: "Comic Sans MS"; mso-ansi-language: ES;">- <i style="mso-bidi-font-style: normal;">Dijiste que habías
superado la negación, pero parece que no es así. Aún guardas cosas en tu
interior que me hacen pensar que sigues, al menos una parte de ti, en esa fase.
– </i>Toma aire antes de seguir. -<i style="mso-bidi-font-style: normal;"> Eres
Laura la recepcionista, relaciones públicas y otras muchísimas pequeñas cosas
que haces y que todos apreciamos en la empresa. Como persona eres tímida y
extraordinariamente tierna. Aprecias las buenas amistades, aunque creo que no
debes tener muchas, eres familiar, afable y tratas a todo el mundo con respeto.
Así podría seguir con muchas apreciaciones personales más. ¿Por qué te
subestimas? - </i>Esta bocanada de piropos deja callada a Laura. Sonríe con
complacencia, mira a Marian con ternura. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span style="font-family: "Comic Sans MS"; mso-ansi-language: ES;">– <i style="mso-bidi-font-style: normal;">Cualquiera diría
que también estás enamorada. - </i>Laura sorprende a<i style="mso-bidi-font-style: normal;"> </i>Marian que, apoyada en la fría piedra de la columna, responde sin
pensar, en voz baja y en un tono suave pero muy afectivo.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span style="font-family: "Comic Sans MS"; mso-ansi-language: ES;">– <i style="mso-bidi-font-style: normal;">¡Claro que estoy
enamorada! ¡Te quiero con todo mi corazón! Aquel beso abrió la caja de mis
sentimientos. Y tengo que decirte que jamás, ninguna de las mujeres con quien
he estado, me ha provocado un sentimiento tan fuerte como el que se ha
despertado por ti. Has ocupado mi cabeza y mi corazón completamente. - </i>Laura
se siente entusiasmada. -<i style="mso-bidi-font-style: normal;"> Quisiera
encontrar un rincón para besarte. Eres lo más bonito, interesante y enigmático
que me ha pasado en la vida.<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>Y lucharé
contigo lo que haga falta para que podamos estar juntas algún día. ¡Te quiero,
sí! Pero deseo que estés a mi lado. - </i>Marian vuelca su corazón sin
pretenderlo. <i style="mso-bidi-font-style: normal;">– ¡No va a ser fácil!
Defender nuestro amor no lo va a ser ¡Seguro! Solo sé que lo superaremos por la
fuerza del cariño y el deseo de estar juntas. Estoy en un momento en el que ya
no puedo soportar estar sin ti. Echo de menos tus caricias, los momentos de
ternura con que deleitarnos. Y esos besos robados o a escondidas en cualquier
rincón. Necesito estar cerca de ti. Necesito pasar tiempo contigo y que estemos
juntas todo lo posible. –</i> Laura abre los ojos como dos platos. Por un
momento siente la necesidad de decir algo hermoso también. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span style="font-family: "Comic Sans MS"; mso-ansi-language: ES;">- <i style="mso-bidi-font-style: normal;">¡No sé que vi en
ti! Desde el primer momento me encontré atrapada por la agradable sensación que
tuve cuando te conocí. Para mí son tiempos difíciles, es un cambio radical en
mi vida. Sin conocer la razón, percibí en tu persona el apoyo que solo dos
almas gemelas pueden darse. – </i>Durante unos instantes se miran a los ojos
con el embeleso fijado en la expresión de sus rostros. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span style="font-family: "Comic Sans MS"; mso-ansi-language: ES;">- <i style="mso-bidi-font-style: normal;">¿Sabes una
cosa?... </i>– Marian le dice con suave tono. – <i style="mso-bidi-font-style: normal;">A mí, también me sorprendió que me enamorara de ti. Fue un flechazo el
primer beso que me diste. Luego pensé que ya debía estar colada por ti sin
sentirlo como una realidad. - </i>Laura mira a sus ojos y le da un rápido y
dulce beso. No se fija si en el entorno alguien las observa. Es un momento de
éxtasis emocional y solo están ellas en el mundo. Se abrazan con fuerza y
después vuelven a reflejar sus miradas la una en la otra con una sonrisa
alegre.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><i style="mso-bidi-font-style: normal;"><span style="font-family: "Comic Sans MS"; mso-ansi-language: ES;"><o:p> </o:p></span></i></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span style="font-family: "Comic Sans MS"; mso-ansi-language: ES;">Ambas están encantadas de conocer los sentimientos
mutuos. Se cogen de la mano y reinician el camino. El resto del día lo
disfrutan paseando por la ciudad vieja. Visitando todos y cada uno de los
lugares interesantes de Compostela y los que a Marian le recuerdan su época de
estudiante, como la tasca de su amigo Felipe que la recibe con alborozo al
verla entrar en su local. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span style="font-family: "Comic Sans MS"; mso-ansi-language: ES;">No hace falta seguir hablando de lo evidente, las miradas
entre ellas son de lo más elocuentes. La sonrisa no se borra de sus rostros en
todo el día. Cuando regresan, ya anochecido, de vuelta a casa lo hacen llenas
de alegría y algunas compras compostelanas. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span style="font-family: "Comic Sans MS"; mso-ansi-language: ES;">En el portal de Marian deben despedirse, pero no quieren.
Le propone tomar un café arriba, en su casa, Laura declina la invitación. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span style="font-family: "Comic Sans MS"; mso-ansi-language: ES;">- <i style="mso-bidi-font-style: normal;">¿Por qué? No
pasará nada que no desees. No soy una loba. Solo tomar algo y besarnos, lo
necesito. - </i>Se lo pide como una niña pide un capricho.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><i style="mso-bidi-font-style: normal;"><span style="font-family: "Comic Sans MS"; mso-ansi-language: ES;">- Yo
también, pero no estoy segura. Te acompaño dentro del portal. - </span></i><span style="font-family: "Comic Sans MS"; mso-ansi-language: ES;">Laura no puede, es
superior a sus fuerzas, la tentación de quedarse a solas con Marian la
inquieta, mantiene ese miedo incontrolado, no se siente preparada para estar a
solas con ella en la intimidad, no entra en sus planes ir más allá de los besos
en las actuales circunstancias. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span style="font-family: "Comic Sans MS"; mso-ansi-language: ES;">Marian abre el portal y entran hasta la puerta del
ascensor, dejan las bolsas en el suelo. Marian comprueba que no hay nadie en la
escalera y se cuelga del cuello de Laura literalmente. La besa con pasión y es
correspondida con dulzura. Con sus bocas entrelazadas culminan un día que a las
dos les ha parecido grandioso.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span style="font-family: "Comic Sans MS"; mso-ansi-language: ES;">Llega el ascensor al bajo, allí permanece el tiempo que
ellas tardan en separarse, miran dentro de sus ojos la una a la otra
sonriendo.<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>- <i style="mso-bidi-font-style: normal;">¡Te quiero! - </i>Susurra Marian al oído de Laura. - <i style="mso-bidi-font-style: normal;">¡Yo También! - </i>Con un beso corto se
despiden. Marian entra de espaldas en el ascensor con las bolsas cogidas en una
mano y mirando a su nuevo amor salir hacia la calle. Mientras sube observa que
camina también marcha atrás hacia el portón. Laura sale al exterior buscando el
coche. Marian sale del ascensor con las bolsas. Entra en casa y las tira en la
entrada. Corre a la balconada, llega justo en el momento que ve arrancar a
Laura camino de su casa.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span style="font-family: "Comic Sans MS"; mso-ansi-language: ES;">Se sienta y se acuna en la mecedora. Con una sonrisa de
felicidad, gesticulando aspavientos y braceos sin control, baila liberando
alegría por toda la casa. Recoge las compras y las guarda. Se ha quitado los
zapatos y anda descalza. Cambia la ropa de calle por el pijama, se dirige a la
cocina para prepararse algo de comer. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span style="font-family: "Comic Sans MS"; mso-ansi-language: ES;">Mientras cena escucha música que procede del salón, el
nocturno para piano de Chopin le suena celestial. De pronto suena el
teléfono.<span style="mso-spacerun: yes;"> </span><o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span style="font-family: "Comic Sans MS"; mso-ansi-language: ES;">- <i style="mso-bidi-font-style: normal;">¡Diga! - </i>Dice
con intriga. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span style="font-family: "Comic Sans MS"; mso-ansi-language: ES;">-<i style="mso-bidi-font-style: normal;"> ¡Hola! - </i>Responde
Laura desde el otro lado, su voz le ilumina la cara. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span style="font-family: "Comic Sans MS"; mso-ansi-language: ES;">- <i style="mso-bidi-font-style: normal;">¡Holaa! - </i>Pronuncia
en una exhalación de felicidad. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span style="font-family: "Comic Sans MS"; mso-ansi-language: ES;">– <i style="mso-bidi-font-style: normal;">Ya te estoy
echando de menos. - </i>Le dice con voz dulce. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span style="font-family: "Comic Sans MS"; mso-ansi-language: ES;">– <i style="mso-bidi-font-style: normal;">Yo a ti también.
Es una pena que no te quedases, estaríamos cenando una rica tortilla francesa.
- <o:p></o:p></i></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><i style="mso-bidi-font-style: normal;"><span style="font-family: "Comic Sans MS"; mso-ansi-language: ES;">- No
puedo, de verdad. Es muy complicado. No quiero hacer algo de lo que pueda
arrepentirme. Necesito ir paso a paso, estar segura de lo que hago. - </span></i><span style="font-family: "Comic Sans MS"; mso-ansi-language: ES;">Le explica con
franqueza. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span style="font-family: "Comic Sans MS"; mso-ansi-language: ES;">– <i style="mso-bidi-font-style: normal;">No debes
preocuparte. Tú decides. - </i>Muestra su conformidad. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><i style="mso-bidi-font-style: normal;"><span style="font-family: "Comic Sans MS"; mso-ansi-language: ES;">– Algo
que se me ha olvidado. Mañana en la oficina. Me aterra que demos señales. ¿Me
explico? - </span></i><span style="font-family: "Comic Sans MS"; mso-ansi-language: ES;"><span style="mso-spacerun: yes;"> </span><o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span style="font-family: "Comic Sans MS"; mso-ansi-language: ES;">- <i style="mso-bidi-font-style: normal;">No te preocupes,
haremos como siempre hemos hecho, comportarnos con normalidad. Nadie se ha dado
cuenta que estábamos distantes, eso ha salido perfecto sin planearlo.
Tranquilízate todo va a salir como debe ser. Ahora estamos bien. - <o:p></o:p></i></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><i style="mso-bidi-font-style: normal;"><span style="font-family: "Comic Sans MS"; mso-ansi-language: ES;">- Lo sé.
Hemos pasado un día estupendo. ¿Verdad? -<span style="mso-spacerun: yes;">
</span><o:p></o:p></span></i></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><i style="mso-bidi-font-style: normal;"><span style="font-family: "Comic Sans MS"; mso-ansi-language: ES;">- Yo lo
he pasado fenomenal, he regresado a casa más enamorada. ¡Te quiero! -<o:p></o:p></span></i></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><i style="mso-bidi-font-style: normal;"><span style="font-family: "Comic Sans MS"; mso-ansi-language: ES;">- No
sospechaba que te habías enamorado también, solo que podía ser un… no sé.- <o:p></o:p></span></i></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><i style="mso-bidi-font-style: normal;"><span style="font-family: "Comic Sans MS"; mso-ansi-language: ES;">- Un
entretenimiento, dilo sin miedo, a mí se me pasó por la cabeza que podía ser un
capricho tuyo. ¡Por probar! Lo creía de veras. - <o:p></o:p></span></i></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><i style="mso-bidi-font-style: normal;"><span style="font-family: "Comic Sans MS"; mso-ansi-language: ES;">- Bueno
te he llamado para que sepas que he llegado a casa sin problemas. - <o:p></o:p></span></i></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><i style="mso-bidi-font-style: normal;"><span style="font-family: "Comic Sans MS"; mso-ansi-language: ES;">- Me
gusta. No había reparado en ello, pero gracias, ya sé que estás bien. Buenas
noches cariño. - <o:p></o:p></span></i></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><i style="mso-bidi-font-style: normal;"><span style="font-family: "Comic Sans MS"; mso-ansi-language: ES;">- Buenas
noches, amor. Soñaré contigo seguro. - <o:p></o:p></span></i></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><i style="mso-bidi-font-style: normal;"><span style="font-family: "Comic Sans MS"; mso-ansi-language: ES;">- ¡Y yo
contigo! Un beso- </span></i><span style="font-family: "Comic Sans MS"; mso-ansi-language: ES;">Cuelgan al unísono. Marian maniobra su teléfono para
añadir el número a la agenda del teléfono. –<i style="mso-bidi-font-style: normal;">
Tengo que poner una foto tuya en la pantalla. - </i>Besa el teléfono con
entusiasmo y lo deja en la mesilla.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span style="font-family: "Comic Sans MS"; mso-ansi-language: ES;"><o:p> </o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span style="font-family: "Comic Sans MS"; mso-ansi-language: ES;">El primer encuentro, a la mañana siguiente en la oficina,
resulta esclarecedor para los más cercanos. Quique se fija que la cara de
Marian tiene como un destello, un brillo especial que no mostraba últimamente. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span style="font-family: "Comic Sans MS"; mso-ansi-language: ES;">– <i style="mso-bidi-font-style: normal;">Parece que te lo
has pasado en grande en la boda. - </i>Le comenta de forma inocente. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span style="font-family: "Comic Sans MS"; mso-ansi-language: ES;">- <i style="mso-bidi-font-style: normal;">¿Boda? ¿Qué boda?
- </i>Recapacita un segundo. - <i style="mso-bidi-font-style: normal;">¡Ah!
Perdona. Tenía la cabeza en otro sitio. ¡Si! Carmen y Paloma. Muy Bien. Me lo
pasé en grande. Aunque mejor estuvo el Domingo. - </i>Remata el comentario
cuando aparece Laura en la puerta del despacho. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span style="font-family: "Comic Sans MS"; mso-ansi-language: ES;">- <i style="mso-bidi-font-style: normal;">¿Qué pasó el
Domingo? - </i>Pregunta Quique. Laura llega a su espalda con unas carpetas en
la mano, pone un gesto serio haciendo una mueca a Marian, que sonríe. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span style="font-family: "Comic Sans MS"; mso-ansi-language: ES;">– <i style="mso-bidi-font-style: normal;">Pues me fui de
excursión con una amiga y nos lo pasamos de rechupete. -</i> Expresa con una
pícara mirada hacia Laura que torna el gesto de su cara en grave.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><i style="mso-bidi-font-style: normal;"><span style="font-family: "Comic Sans MS"; mso-ansi-language: ES;">- Pues
me alegro. Ya va siendo hora de que pongas mejor cara, porque llevas unas
semanas calentita. - </span></i><span style="font-family: "Comic Sans MS"; mso-ansi-language: ES;">Le espeta sin mala intención. Viéndola relajada cree
oportuno hacer el apunte. <i style="mso-bidi-font-style: normal;"><span style="mso-spacerun: yes;"> </span></i><o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span style="font-family: "Comic Sans MS"; mso-ansi-language: ES;">- <i style="mso-bidi-font-style: normal;">¿Qué quieres
decir? - </i>Intrigada por el comentario. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span style="font-family: "Comic Sans MS"; mso-ansi-language: ES;">– <i style="mso-bidi-font-style: normal;">Pues eso, que
llevas unas semanas que no se te podía hablar. Siempre estabas como enfadada.
Aquí nadie se lo explica. Si ahora estás bien nos alegramos todos.- </i><span style="mso-spacerun: yes;"> </span>Se da la vuelta y se da de bruces con Laura. -
<i style="mso-bidi-font-style: normal;">¿Verdad Laura, que ha estado algo
insoportabilita? Contigo casi ni se hablaba. - </i><span style="mso-spacerun: yes;"> </span>Se sorprende como en un susto. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span style="font-family: "Comic Sans MS"; mso-ansi-language: ES;">- <i style="mso-bidi-font-style: normal;">¡Si, si! También
lo he visto…-<span style="mso-spacerun: yes;"> </span></i>Lo dice sin
convencimiento, suena falso.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><i style="mso-bidi-font-style: normal;"><span style="font-family: "Comic Sans MS"; mso-ansi-language: ES;">-
¿Veees?- </span></i><span style="font-family: "Comic Sans MS"; mso-ansi-language: ES;">Dice Quique sin percatarse de la situación de ambas mujeres, al dirigirse a
Marian que sonríe. -<i style="mso-bidi-font-style: normal;"> ¡Hasta luego! Te la
dejo para ti sola.- </i>Quique no se da cuenta de la mirada de sobresalto de la
recepcionista y abandona el despacho de Marian silbando. Laura y Marian se
miran con incertidumbre. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span style="font-family: "Comic Sans MS"; mso-ansi-language: ES;">– <i style="mso-bidi-font-style: normal;">¿Y tú decías que
no se te había notado? ¿A ver qué hacemos ahora? - </i>Comenta Laura con mucha
seriedad y en voz baja. Marian sonríe con complacencia. -<i style="mso-bidi-font-style: normal;"> Y ¿Por qué le has contado lo de ayer? - </i>Le dice con enfado. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span style="font-family: "Comic Sans MS"; mso-ansi-language: ES;">– <i style="mso-bidi-font-style: normal;">No le he dicho
nada, solo que me fui de excursión con una amiga. ¿Oíste que dijera algún nombre?
-<span style="mso-spacerun: yes;"> </span></i>A Laura le cuesta controlar las
situaciones incómodas. A veces parece no tener sentido del humor cuando está
molesta o se siente ridícula si percibe que le toman el pelo. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span style="font-family: "Comic Sans MS"; mso-ansi-language: ES;">- <i style="mso-bidi-font-style: normal;">¡Ya! Pero no me
ha hecho ninguna gracia. ¡Listilla! Toma tus papeles</i>. - Le entrega una
carpetilla repleta de documentos sobresaliendo por encima y que a buen seguro
supone que Marian estará muy ocupada el resto del día. – <i style="mso-bidi-font-style: normal;">Y haz el favor de no gastar bromas como esa. – </i>Se acerca a su oído
y en voz baja. - <i style="mso-bidi-font-style: normal;">¡Me muero por darte un
beso! - </i>Le dice. Marian se ríe de buena gana y Laura sale con un gesto
cuasi de enfado y mirada pícara. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span style="font-family: "Comic Sans MS"; mso-ansi-language: ES;"><o:p> </o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span style="font-family: "Comic Sans MS"; mso-ansi-language: ES;">Un día muy trabajado, los lunes son siempre así.
Normalmente todo sale sin dificultades mientras el gerente no mete las narices
en las tareas de cada cual. Más que un apoyo termina siendo un estorbo, por su
afán de querer controlarlo todo y por el poco respeto que guarda hacia los
empleados. Don Fernando es el típico jefe que no sabe organizarse, ni siquiera
con su apariencia es cuidadoso. Su despacho es un revoltijo de papeles y libros
amontonados encima de la mesa, tiene varios teléfonos e intercomunicadores con
lucecitas parpadeantes. A veces se queja de que no tiene buena comunicación con
sus empleados, algo que solo explica su ruda forma de tratar a los demás.
Aunque todos le respetan como gerente nadie le tiene por un líder en la
empresa. Esa particularidad se la reparten a medias entre la directora de
gestión, Marina, y Marian. Todo el personal acepta sus indicaciones sin
problemas, circunstancia que no consigue el gerente. Cualquier orden o
indicación suya es inmediatamente derivada hacia una de las dos mujeres antes
de acometerla. Esto da la medida de la falta de liderazgo de Don Fernando. De
su gestión hay pocas dudas, su competencia ha estado en entredicho en
cuantiosas ocasiones. Tanto papel encima de la mesa, hay quien apuesta que son
los mismos que fue colocando al inicio de su gestión y que ahí permanecen
inalterables, mientras él, sigue sin resolver ninguno de los problemas por
iniciativa propia, todos los han resuelto los demás y él va presumiendo y
apuntándose el tanto.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span style="font-family: "Comic Sans MS"; mso-ansi-language: ES;"><o:p> </o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span style="font-family: "Comic Sans MS"; mso-ansi-language: ES;">Don Luis, el padre de Laura está sentado en la terraza
leyendo una novela, que parece interminable por el grueso del libro. Levanta la
vista al oír el ruido del motor de un coche que se acerca a la entrada. La
puerta comienza a abrirse lenta hasta que permite el acceso del vehículo de
Laura que regresa del trabajo. Se acerca a la puerta del garaje y para antes de
entrar. Se apea, sube la escalera y se acerca a besar en la frente a su padre.
- <i style="mso-bidi-font-style: normal;">¡Hola Papá! - </i>Le dice con el rostro
muy alegre, casi cantando. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><i style="mso-bidi-font-style: normal;"><span style="font-family: "Comic Sans MS"; mso-ansi-language: ES;">- ¡Hola
hija! Muy contenta te veo. ¿Te ha tocado la lotería o algo así? - </span></i><span style="font-family: "Comic Sans MS"; mso-ansi-language: ES;">Pregunta con
curiosidad. Nota que en los últimos días Laura muestra un comportamiento
radicalmente opuesto a las pasadas semanas. La veía seria y taciturna
regresando del trabajo con un gesto algo triste, y en veinticuatro horas, su
semblante ha cambiado de la noche al día. En el presente se muestra alegre con
esa sonrisa que le llena la cara. Don Luis piensa que algo agradable le ha
sucedido, algún acontecimiento le ha dado la vuelta a su talante. - <i style="mso-bidi-font-style: normal;">¿Te pasa algo? - </i>Le dice.<span style="mso-spacerun: yes;"> </span><span style="mso-spacerun: yes;"> </span>Ella
responde que no. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><i style="mso-bidi-font-style: normal;"><span style="font-family: "Comic Sans MS"; mso-ansi-language: ES;">- Será
la primavera y no, no me ha tocado la lotería. Ahora tengo prisa, he quedado
con una amiga. - </span></i><span style="font-family: "Comic Sans MS"; mso-ansi-language: ES;">Le cuenta. Sin darle más explicaciones se introduce en la
casa. A voz en grito saluda a su madre que debe deambular por algún rincón.
Ella le contesta desde el fondo del cuarto donde está viendo la televisión.
Laura se da una ducha y se prepara para acudir a la cita que ha mencionado a su
padre. Ha quedado con Marian, y ya está nerviosa por salir. - <i style="mso-bidi-font-style: normal;">¡Hasta luego Papá! - </i>Le dice al regresar
al coche. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span style="font-family: "Comic Sans MS"; mso-ansi-language: ES;">- <i style="mso-bidi-font-style: normal;">¡Hasta luego
hija! ¡Que te diviertas! - </i>Don Luis la mira al rostro con preocupación
mientras ella le devuelve la mirada con una gran sonrisa. Semejante conducta le
resulta, cuando menos, sorprendente. Laura no es de tener cambios de humor tan
radicales, y menos de un día para otro. Nunca la ha visto tan expresiva como
estos dos últimos días. Piensa que algo bueno le debe estar ocurriendo, aunque
no sepa la causa. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span style="font-family: "Comic Sans MS"; mso-ansi-language: ES;">Pocas fechas después sondea a su hijo Paco por si sabe
algo de su hermana. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span style="font-family: "Comic Sans MS"; mso-ansi-language: ES;">-<i style="mso-bidi-font-style: normal;"> ¿Por qué lo
preguntas? -<span style="mso-spacerun: yes;"> </span></i>Le responde
preguntando.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span style="font-family: "Comic Sans MS"; mso-ansi-language: ES;">– <i style="mso-bidi-font-style: normal;">Lleva varios días
muy contenta. Todas las tardes se va con una amiga, dice, a pasear o a algún
espectáculo. El domingo pasado desapareció durante todo el día, solo vino a
dormir. No es habitual lo que está haciendo y estoy algo extrañado. ¿La has
visto últimamente? - </i>Le pregunta algo inquieto. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span style="font-family: "Comic Sans MS"; mso-ansi-language: ES;">– <i style="mso-bidi-font-style: normal;">Estuve tomando
una copa con ella hará unas semanas, más o menos…, no me acuerdo bien. - </i>Paco
no quiere contar nada de la conversación que tuvo con su hermana. Le parece un
asunto muy personal que solo ella debe desvelar. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span style="font-family: "Comic Sans MS"; mso-ansi-language: ES;">- <i style="mso-bidi-font-style: normal;">¿Y cómo estaba? -
</i>Pregunta Don Luis. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span style="font-family: "Comic Sans MS"; mso-ansi-language: ES;">-<i style="mso-bidi-font-style: normal;"> ¡Bien! No la noté
nada especial. Como siempre. - </i>Trata de eludir cualquier comentario. Aunque
conoce a su padre y no va a cejar hasta saber todo lo que suceda. Sabe que todo
alrededor de Laura le preocupa. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span style="font-family: "Comic Sans MS"; mso-ansi-language: ES;">-<i style="mso-bidi-font-style: normal;"> ¿Por qué me
mientes? Hace dos semanas estaba más triste que una viuda reciente. - <o:p></o:p></i></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><i style="mso-bidi-font-style: normal;"><span style="font-family: "Comic Sans MS"; mso-ansi-language: ES;">-
¡Bueno! Yo no la vi mal. Me contó varias cosas que la preocupaban sobre el
trabajo.- </span></i><span style="font-family: "Comic Sans MS"; mso-ansi-language: ES;">Paco sigue dando evasivas. Don Luis no ceja.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span style="font-family: "Comic Sans MS"; mso-ansi-language: ES;">- <i style="mso-bidi-font-style: normal;">¿Qué problemas
tan graves tenía que la afectaban tanto? - </i>Paco piensa unos segundos antes
de responder.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span style="font-family: "Comic Sans MS"; mso-ansi-language: ES;"><span style="mso-spacerun: yes;"> </span>- <i style="mso-bidi-font-style: normal;">¡Papá! No quiero mentirte, pero no puedo
responderte a esa pregunta. Creo que lo oportuno es que sea ella quien te diga
lo que realmente le preocupa. Si ahora está contenta, como dices, es que ya ha
solucionado sus preocupaciones. Pero no puedo decirte nada. Tendrás que hablar
con ella. -<o:p></o:p></i></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span style="font-family: "Comic Sans MS"; mso-ansi-language: ES;"><o:p> </o:p></span></p>
<p class="MsoNormal"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">Laura
recoge a Marian en la puerta de su casa y rápidamente se dirigen hacia la playa
de Orzán. Aparca en una de las calles cercanas y deciden dar un paseo por las
inmediaciones. Por la acera que bordea la playa caminan despacio charlando. No
buscan otra cosa que estar la una a lado de la otra, con algo más de intimidad
que la formal del trabajo, intercambiar temas de sus vidas y de sus
aspiraciones. De vez en cuando, cuándo ya ha oscurecido, se dan un beso en
algún rincón fuera de la vista de los escasos transeúntes que a esas horas
circulan por la calle. Durante días mantienen esta rutina al salir de sus
tareas laborales. En ocasiones ni pasan por sus domicilios. Acuden a algún
evento cultural o un espectáculo que una u otra, como mujeres algo
cosmopolitas, piensan que es interesante acudir a ver o escuchar, en caso de
algún concierto de música. Los fines de semana salen de excursión por las
poblaciones cercanas a disfrutar del paisaje y charlar de lo que les preocupa y
va sucediendo. Laura manifiesta sus temores constantemente. Marian trata de
disiparlos con razones y fundamentos de solidez. Las relaciones sanas no se encuentran
en el mercado, se aprenden a construir con herramientas que se van adquiriendo con
la experiencia, hasta que, en uno de esos intentos sin darse cuenta, ya nos encontramos
en medio de uno de esas relaciones bonitas que nos enseñan tanto y nos alimentan
las ganas de ser felices. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span style="font-family: "Comic Sans MS"; mso-ansi-language: ES;">Conforme pasa el tiempo la implicación mutua va creciendo
y también los contactos cariñosos entre ellas comienzan a ser más y más
frecuentes, delicados y tiernos. Sin embargo, el contacto íntimo todavía no
aparece, no hay sexo, nunca están a solas en lugares que potencialmente podrían
llevar a ello, Laura se encarga de evitarlo. Todavía mantiene un miedo atroz a
ese desconocido mundo del contacto carnal. Marian se preocupa, sobre todo
después de llenarla de besos, su alma pide más, pero ha de contenerse. Le ha
prometido que sería ella la que decidiera el momento adecuado de dar el paso.
Eso no evita que lo esté deseando. Laura pone objeciones de forma sistemática,
aunque va siendo algo más tolerante y va mostrando sutilezas afectivas muy
positivas. Todo esto lo hablan en largas conversaciones.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span style="font-family: "Comic Sans MS"; mso-ansi-language: ES;">– <i style="mso-bidi-font-style: normal;">Es irracional, lo
sé. No puedo evitarlo, me asusta, no soy capaz de decidir si deseo hacer el
amor contigo. Es algo que todavía está fuera de mi pensamiento. Sigo con miedos
irracionales. Pero ¡Por favor! Ten paciencia, te quiero, todo llegará. Necesito
encontrar ese momento, ese equilibrio personal que me de la seguridad que ahora
no tengo y poder enfrentarme a mí misma con honestidad. </i>-<i style="mso-bidi-font-style: normal;"> </i>Marian asiente sin remedio. Va cogida
del brazo de Laura mientras caminan. – <i style="mso-bidi-font-style: normal;">Pensar
en que me critiquen por estar con otra mujer me da pánico. Creo que eso hará
que algo no esté bien conmigo. Tengo la sensación de que necesito la aprobación
de los demás, en especial mi familia, para sentirme cómoda. No quiero sentirme
culpable por algo que les afecte y no quiero que me vean como alguien
despreciable. </i>– Las dudas de Laura se van concretando. Este último
pensamiento le recuerda a Marian la desagradable relación con su propia
familia. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span style="font-family: "Comic Sans MS"; mso-ansi-language: ES;">- <i style="mso-bidi-font-style: normal;">Son muchas cosas
a trabajar Laura. ¡Te comprendo! Es un camino difícil. - </i>El mundo de las
parejas del mismo sexo nunca ha sido fácil, mejor dicho, siempre ha sido muy
difícil.<i style="mso-bidi-font-style: normal;"> </i>La experiencia de Marian
marca cierto contraste con Laura. El aprendizaje adquirido con el paso del
tiempo le hace pensar con más pausa y sopesar las cosas con tranquilidad. Ella
misma, hubo un tiempo que se sentía inferior al resto de los mortales, hasta
que se dio cuenta que poseía otras cosas que nada tienen que ver con ser o no
ser lesbiana, rescató sus valores personales. Sus virtudes, por así decirlo,
fueron esas cualidades quienes le mostraron el camino y le hicieron recuperar
la autoestima. La sexualidad es una parte importante de la personalidad, pero
nunca es lo más relevante. Lo más importante es cómo se vea una de forma
introspectiva.<i style="mso-bidi-font-style: normal;"> </i><span style="mso-spacerun: yes;"> </span>Respira y recapacita mientras da un sorbo al
café con leche. Se encuentran solas, sentadas en una terraza, al abrigo del
aire contemplando como el mar se abate sobre la playa de Riazor. - <i style="mso-bidi-font-style: normal;">¡Escucha! Son las buenas cualidades que uno
posee y sobre todo el potencial como individuo, los que te hacen una persona
valiosa, no tu orientación sexual y afectiva.</i> – Termina exponiendo Marian a
una expectante Laura, que centra toda su atención en lo que Marian le está explicando.
<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span style="font-family: "Comic Sans MS"; mso-ansi-language: ES;">Se levantan para volver al paseo, mientras caminan, ella
mira hacia el suelo en un gesto reflexivo, guarda unos instantes de silencio.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span style="font-family: "Comic Sans MS"; mso-ansi-language: ES;">- <i style="mso-bidi-font-style: normal;">Me gustaría saber
cómo se hace eso. ¿Tienes alguna fórmula escrita? </i>– Pregunta con seriedad. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span style="font-family: "Comic Sans MS"; mso-ansi-language: ES;">– <i style="mso-bidi-font-style: normal;">No hay fórmula
secreta para la autoestima. Es algo que debes hacer en algún momento, necesitas
reconocer tus cualidades y virtudes, a partir de ahí debes trabajarlas para
darte cuenta lo buena que eres haciendo lo que haces. Ya te he expresado lo
valioso que es tu trabajo en la empresa. Eso debe de enorgullecerte y hacer que
tu autoestima sobresalga sobre otras cosas. Eso es lo que, a mi parecer, hace
que cualquier persona viva a gusto consigo misma. </i>– <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span style="font-family: "Comic Sans MS"; mso-ansi-language: ES;">- <i style="mso-bidi-font-style: normal;">Parece fácil
desde tu</i> <i style="mso-bidi-font-style: normal;">perspectiva</i>, <i style="mso-bidi-font-style: normal;">a mí me resulta muy complicado verlo así.
Toda esta revolución, porque es una revolución interior, me hace sentir como
algo deprimida. Me veo como encerrada en una habitación en la que solo hay una
puerta de salida pero que no quiero abrirla, me da mucho miedo, siquiera acercarme.
No sé cómo enfrentarme a ello.</i> – Laura se expresa con incertidumbre
manifiesta.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span style="font-family: "Comic Sans MS"; mso-ansi-language: ES;">- <i style="mso-bidi-font-style: normal;">No te des por
vencida de antemano, piensa en el valor de tu persona, en lo que haces, cual es
el resultado y lo que estás consiguiendo a nivel humano… Ya te lo dije en Compostela:
Eres una persona muy apreciada por todos los compañeros, porque siempre estás
haciendo cosas que nos son útiles a los demás, y siempre con alegría. Nadie en
su sano juicio dirá nada en contra de tus cualidades, todos las ensalzan a <o:p></o:p></i></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><i style="mso-bidi-font-style: normal;"><span style="font-family: "Comic Sans MS"; mso-ansi-language: ES;">diario,
otra cosa es que tu no lo percibas así, digamos que por modestia o cualquier
otra razón que ahora no se me ocurre. Pero no te quepa duda, eres muy valorada
por todos.</span></i><span style="font-family: "Comic Sans MS"; mso-ansi-language: ES;"> – <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span style="font-family: "Comic Sans MS"; mso-ansi-language: ES;">- <i style="mso-bidi-font-style: normal;">Me parece que te
has enamorado de otra persona. Yo no me veo así. Sí es cierto, cumplo con mi
trabajo, es lo que se me pide y por lo que me pagan, pero no lo veo como una
expresión de cualidades o virtudes, es mi obligación. No creo que sea especial
en eso.</i> – <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span style="font-family: "Comic Sans MS"; mso-ansi-language: ES;">- <i style="mso-bidi-font-style: normal;">Estás equivocada,
si eres especial, aunque ahora mi visión esté condicionada porque te quiero, te
he observado como persona durante dos años antes de enamorarme de ti, y
entiendo que mi opinión continúa siendo objetiva. Tienes un potencial que
desconoces y que en algún momento despertará, no lo dudes.</i> – <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span style="font-family: "Comic Sans MS"; mso-ansi-language: ES;">- <i style="mso-bidi-font-style: normal;">¿Tan segura estás
de mí? Eso es el amor que te confunde. </i>– Responde Laura satisfecha de tanto
halago. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span style="font-family: "Comic Sans MS"; mso-ansi-language: ES;">- <i style="mso-bidi-font-style: normal;">¡Lo estoy! Y el
amor no me confunde, me lo confirma. Ahora te conozco mejor y me siento segura
de tus cualidades como persona. </i>– Afirma Marian con seguridad que prosigue
con su parrafada. – <i style="mso-bidi-font-style: normal;">¿Sabes una cosa?
Antes que todo esto nos pasara, he estado pensando que a mí también me debió
suceder algo parecido. Siempre te miraba con simpatía, y a veces me alegraba de
tu presencia en la pecera. Nunca me paré a pensar en ti como una pareja
romántica. Estabas ahí y yo no me daba cuenta que esa conexión mutua, de la que
me hablaste, existía. He estado repasando nuestra relación antes del primer
beso y… ¿Sabes qué? Me sentía atraída por ti y no me daba cuenta. Me gustabas,
nuestro trato era magnífico, pero ni por un momento pensé que llegaría a
enamorarme de ti. Y que tú lo hicieses, me parecía imposible. – </i>Laura la
mira incrédula. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><i style="mso-bidi-font-style: normal;"><span style="font-family: "Comic Sans MS"; mso-ansi-language: ES;">- ¡Ya
ves cómo es la vida! Te sorprende a la vuelta de la esquina. Yo todavía estoy
atrapada en esa especie de perplejidad e incertidumbre. Solo sé que necesito de
ti, no de tus cosas o tu trabajo. Es a ti a quien quiero. Solo necesito
quitarme ese malestar de la duda y entonces creo que seré libre para entregarme
completamente. – <o:p></o:p></span></i></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><i style="mso-bidi-font-style: normal;"><span style="font-family: "Comic Sans MS"; mso-ansi-language: ES;">- Nos
hemos enamorado de verdad. Creo que nos vamos a entregar de corazón para
apoyarnos y estar juntas, porque nos hemos elegido como pareja. No lo haremos
complicado, no te voy a pedir que te etiquetes, ni voy a presionarte en ningún
sentido, ni siquiera para salir del armario, si no lo quieres hacer. Solo te
animo a que vivas con intensidad cada momento que estemos juntas y que
disfrutes de tus emociones. -<o:p></o:p></span></i></p>
<p class="MsoNormal"><span lang="ES-TRAD"><o:p> </o:p></span></p>Francisco Freijaneshttp://www.blogger.com/profile/07136887969142331609noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-7189587968703271148.post-32151095155773738072021-02-15T20:41:00.002+01:002021-02-15T20:41:38.218+01:00Te quiero. Pero no a mi lado.<p> <b><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS"; font-size: 14.0pt; line-height: 115%;">5.- </span></b><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS"; font-size: 14pt; line-height: 115%;">Tenemos que hablar</span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">Laura y Marian continúan besándose en aquel
callejón. La noche no es fría y es muy tarde. Apenas pasa gente por la calle.
Alguien se detiene y las observa unos segundos para después seguir su camino.
De pronto Laura recuerda que ha dejado a su hermano y amigos sin darles ninguna
explicación. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">– <i style="mso-bidi-font-style: normal;">Debo
volver, me he marchado sin decir nada y se estarán preguntando donde estoy. - </i>Marian
la detiene un momento. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">- <i style="mso-bidi-font-style: normal;">¡Espera!
¿Qué más da? Eres mayorcita para justificarte. -</i> <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><i style="mso-bidi-font-style: normal;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">- ¡No puedo! Mi
hermano se preocupa por mí, yo… tengo que regresar. - </span></i><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";"><span style="mso-spacerun: yes;"> </span>Insiste.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><i style="mso-bidi-font-style: normal;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">- ¿No hay nada
con lo que pueda retenerte? - </span></i><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";"><span style="mso-spacerun: yes;"> </span>Pregunta Marian un
tanto desesperada. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">- <i style="mso-bidi-font-style: normal;">¡No!
Quiero que me entiendas. Debo regresar. Mañana te veo. - </i>Le da un beso en
la mejilla y desaparece. Marian no entiende lo que ha pasado. Se pregunta a que
ha venido ese comportamiento infantil. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><i style="mso-bidi-font-style: normal;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">– Tengo la
impresión que ha salido huyendo como el primer día. - </span></i><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">Expresa en voz alta. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">Marian también regresa al Pub, Laura ha
desaparecido, se dirige a las recién casadas y se despide de sus amigas. En la
puerta toma un taxi y se dirige a su casa, para refugiarse en el calor de su
hogar. Ya en pijama y cubierta con una bata, se sienta sobre la mecedora dentro
de la balconada, contempla las luces del puerto y piensa en la escena del
callejón, aquellos besos. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">- <i style="mso-bidi-font-style: normal;">¡Que
bien besa! - </i>Sonríe complaciente y se deja llevar por la imaginación. <i style="mso-bidi-font-style: normal;">“¿Cómo será hacer el amor con ella?
Comparado con sus besos, puede ser algo fabuloso.”</i> <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">Poco a poco se va dejando llevar por esos
pensamientos y por el sueño que la abraza en un ratito.</span><span style="font-family: "Comic Sans MS";"> </span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">El domingo por la mañana la despierta el
constante repiqueteo del móvil. Durante la noche se trasladó de la mecedora al
dormitorio, completamente somnolienta y casi inconsciente. Allí ha dormido de
un tirón sin la molesta posición de la mecedora. Busca el teléfono entre la
ropa allí tirada. Lo encuentra y mira la pantalla, es un número desconocido. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">– <i style="mso-bidi-font-style: normal;">¡Son
las ocho! Es Domingo ¿Quién será? - </i>Descuelga - <i style="mso-bidi-font-style: normal;">¡Diga! - </i>Dice con voz sin aclarar. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><i style="mso-bidi-font-style: normal;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">- ¿Marian? - </span></i><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">Pregunta la voz al otro lado. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><i style="mso-bidi-font-style: normal;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">- ¡Si! Soy yo
¿Quién es? - </span></i><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";"><span style="mso-spacerun: yes;"> </span>Inquieta responde. No reconoce la voz en el
teléfono, le suena familiar. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><i style="mso-bidi-font-style: normal;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">- ¡Laura! - </span></i><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">Marian hace la estatua de
rodillas sobre la cama, abre los ojos incrédula mirando al infinito. Durante un
segundo guarda silencio, gira su cabeza y mira hacia la ventana para descubrir
que es realidad lo que está viviendo y no es un sueño. La luz del día, entra
por las rendijas de las contras. Aunque la luminaria no es intensa, le anuncia
que ha amanecido y que está despierta. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">- <i style="mso-bidi-font-style: normal;">¡Pero!
¿Cómo…? ¿Por qué…? -</i> No sabe que decir la ha cogido por sorpresa y aún no
puede reaccionar. Es un auténtico mar de dudas. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><i style="mso-bidi-font-style: normal;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">- ¡Te noto algo
confusa! Anoche te dije hasta mañana. -</span></i><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";"><span style="mso-spacerun: yes;"> </span>Le
dice mientras sonríe. Marian no ha encajado todavía la situación. Con algo de
nerviosismo le contesta tartamudeando. No se cree que esté hablando con ella. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">- <i style="mso-bidi-font-style: normal;">¡Sí!
Si… Pero pensé que te habías equivocado, en realidad creí que te referías al
lunes. ¡Pero bueno! ¿Por qué me has llamado? -</i> Está intrigada. No sabe que
pretende Laura. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">– <i style="mso-bidi-font-style: normal;">Invitarte
a desayunar. ¿Te parece que compartamos un café y unos bollos en la cafetería
de tu amigo Raúl? - </i><span style="mso-spacerun: yes;"> </span>Marian va de
sorpresa en sorpresa. La cafetería de Raúl está enfrente de su balconada. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><i style="mso-bidi-font-style: normal;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">- ¿Cóoomo? ¿Qué
estás delante de mi casa</span></i><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">?
- Corre a través del salón y mira desde detrás de los cristales hacia la acera
de enfrente. Detrás de la cristalera del bar puede ver la figura de Laura con
el teléfono en el oído y sonriendo. – <i style="mso-bidi-font-style: normal;">Pero
¿Cómo sabías…? ¡Espera! Bajo ahora mismo. - </i>Corta la llamada, mira al techo
resoplando, sin saber que pensar. Rápidamente se moja la cara y se repeina
discretamente recoge el pelo en una coleta. Unos pantalones vaqueros una blusa
y un jersey encima, toma el bolso del recibidor, las llaves y sale escaleras
abajo. Traspasa el portal y corre atravesando la calle. De repente se detiene y
afloja el paso, por un momento piensa que debe aparentar tranquilidad. Con ese
aire entra en la cafetería. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">- <i style="mso-bidi-font-style: normal;">¡Buenos
días Marian! -</i> Raúl le saluda con cordialidad. Raúl es un hombre grandote
de unos cincuenta años y el dueño del establecimiento, además de buen amigo.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">– <i style="mso-bidi-font-style: normal;">¡Buenos
días Raúl!... </i>Ella se gira hacia su izquierda para contemplar la figura de
Laura sentada frente a ella y con una sonrisa en los labios.<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>- <i style="mso-bidi-font-style: normal;">¡Hola!
- </i><span style="mso-spacerun: yes;"> </span>Dirige ahora el saludo hacia ella
en un tono suave, con voz aterciopelada y completamente sobrecogida por el
encuentro, que nada tiene de casual.<span style="mso-spacerun: yes;"> </span><o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">- <i style="mso-bidi-font-style: normal;">¡Hola!
¿Te he sorprendido? -</i> Le dice en tono de broma y sonriendo ampliamente.
Marian tarda en reaccionar unos segundos. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><i style="mso-bidi-font-style: normal;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">- ¡Pues, sí! -</span></i><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";"> Le confirma mientras se va
sentando en la silla frente a ella. Raúl las observa desde la barra mientras
pone un cruasán en un plato y un café con leche en vaso, como le gusta a su
vecina. Marian está admirada con la expresión fija en el rostro de Laura, gesto
que no pasa desapercibido para el barman, hace una mueca de media sonrisa y se
dirige a la mesa con el café y el bollo. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">- <i style="mso-bidi-font-style: normal;">¿Quieres
alguna otra cosa Marian? -</i> Le pregunta antes de retirarse. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">- <i style="mso-bidi-font-style: normal;">¡Sí!
¿Te importa hacerme un zumo de naranja antes de esto? – </i>Le pide casi sin
apartar la vista de Laura. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">- <i style="mso-bidi-font-style: normal;">¡Ahora
mismo te lo traigo! - </i>Se acerca a la barra y saca unas naranjas del
frigorífico, las exprime y a continuación lleva el vaso de zumo a la mesa. En
todo este rato ambas mujeres no dejan de mirarse la una a la otra sin
pronunciar palabra. Laura sonríe, Marian atisba esa sonrisa, pero mantiene el
gesto de intriga que no es capaz de desprender de su cara. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">- <i style="mso-bidi-font-style: normal;">¡Bien!
¿Qué te trae por aquí? -</i> Pregunta Marian un tanto severa de tono. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><i style="mso-bidi-font-style: normal;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">– Anoche dijiste
que teníamos que hablar. Ya ves que no se me ha olvidado. -</span></i><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";"><span style="mso-spacerun: yes;"> </span>Expresa con seriedad. Marian duda, aunque el
gesto le parece convincente. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><i style="mso-bidi-font-style: normal;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">– Estoy de
acuerdo. ¿Qué propones? Y ¿Cómo sabes dónde vivo? -</span></i><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";"><span style="mso-spacerun: yes;"> </span>Marian va directa y sin miramientos. - <i style="mso-bidi-font-style: normal;">¿Y por qué conoces a Raúl? -<o:p></o:p></i></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">- <i style="mso-bidi-font-style: normal;">Está
en tu ficha, tengo una lista de los empleados en mi agenda de trabajo, no he
tenido más que copiarla y ya ves… De Raúl has hablado de sobra en el trabajo.
¡Bueno! ¿Pasamos el día juntas? No tenía ningún plan para hoy y que mejor que
pasarlo contigo después de lo de anoche. ¿Te apetece? Tendremos tiempo para
hablar de todo lo que se nos antoje... La verdad es que estoy hecha un lío y
necesito aclararme. - </i>Le propone. La necesidad de acercarse a ella está en
su mente desde hace tiempo, pero no era capaz de tomar la iniciativa. Alguna
tarde había aparcado delante de la casa de Marian a la espera que apareciese y
poder hablar con ella y esclarecer la situación, pero se echaba atrás nada más
verla asomar por el portal, se escondía en su propio vehículo presa de un
pánico irracional. En este momento tiene esa misma sensación, pero se ha
prometido resolver esta incertidumbre. Y de paso, cumplir con la palabra dada,
aunque tuvo un momento de duda antes de marcar el número de teléfono de
Marian.<span style="mso-spacerun: yes;"> </span><o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">Cuando la abandonó en aquel callejón la
noche anterior, ya había decidido que era la hora de dar un paso adelante, ese
segundo beso la ha lanzado al encuentro de Marian con decisión. Casi no ha
dormido, dándole vueltas a la pequeña charla que sostuvieron, y, a los besos
que se dieron en aquel oculto rincón. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">La idea de pasar el día juntas es atrayente
para Marian. Muchas horas para intentar aclarar la situación, conocerse mejor y
acercar sus vidas en la medida de lo posible. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">–<i style="mso-bidi-font-style: normal;"> Me
parece una idea estupenda. - </i>Marian ya ha pasado de la ansiedad a cierta
entereza que le da la compañía de la mujer más hermosa que haya conocido nunca.
Y de la que se ha enamorado a partir de un beso. “<i style="mso-bidi-font-style: normal;">Y qué beso”.</i> La cautivó al instante, después todo han sido dudas,
inquietud y emociones sin salida. Acaban el desayuno y salen del local. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">Marian necesita volver a su casa para
adecentarse algo, ha salido de estampida y le hace falta cambiar de vestimenta.
<i style="mso-bidi-font-style: normal;"><o:p></o:p></i></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">– <i style="mso-bidi-font-style: normal;">He
de volver a mi casa. Estoy un poco sudada. ¿Me acompañas? - </i>Laura duda,
tiene aprensión a quedarse a solas con ella y tarda en darle una respuesta.
Marian se da cuenta de que algo pasa. - <i style="mso-bidi-font-style: normal;">¿Hay
algún problema? -</i> Pregunta con dudas. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><i style="mso-bidi-font-style: normal;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">- ¿Te importa
que espere aquí? No estoy segura de querer subir. - </span></i><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">Le dice con cierta timidez. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">– <i style="mso-bidi-font-style: normal;">¿Por
qué? No lo entiendo. - </i>Duda antes de seguir. - <i style="mso-bidi-font-style: normal;">¿Hay algo más que no me has dicho? - </i>Esta vez la pregunta va con
intención. Laura mira al suelo y contesta algo avergonzada. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><i style="mso-bidi-font-style: normal;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">- ¡Sí! De eso
también debemos hablar. - </span></i><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">Responde insegura. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">- <i style="mso-bidi-font-style: normal;">¡Está
bien! Vuelvo en un ratito. ¿Seguro que estarás aquí? ¿No vas a salir huyendo? -
</i>Marian ya pregunta con incertidumbre. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><i style="mso-bidi-font-style: normal;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">– Estaré aquí.
No te preocupes. Te he propuesto pasar el día juntas. ¿Lo recuerdas? Te espero
en el coche. - </span></i><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">Marian
la mira con extrañeza. Da su conformidad y regresa a su domicilio para aparecer
de nuevo quince minutos más tarde, ya preparada para la inesperada aventura de
este día, que no es precisamente bueno en cuanto al clima. Laura propone salir
de excursión, no se siente cómoda en su ciudad, aunque no tiene una idea
concreta de dónde ir. Marian le plantea viajar hasta Santiago de Compostela,
pasear por el casco viejo, visitar la catedral y comer en alguna de las tascas
que ella frecuentaba de estudiante. Lejos del lugar que habitan, la Coruña,
donde, en cualquier rincón te puedes encontrar con amigos, familiares y otras
gentes conocidas. Que no harían otra cosa que distorsionar el diálogo entre las
dos.<span style="mso-spacerun: yes;"> </span><o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">Marian comienza a sospechar que Laura tiene
un problema de aceptación interna que debe resolver. En un lugar alejado donde
se puede ocultar de su entorno habitual, podrá mostrarse más relajada y
mantener un diálogo más fluido sin interrupciones inoportunas.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";"><o:p> </o:p></span><span style="font-family: "Comic Sans MS";">El viaje por la autopista es cómodo, apenas
hay tráfico, es domingo y muy temprano, en cuarenta y cinco minutos se
presentan en la ciudad del Apóstol. En ese tiempo charlan de trivialidades.
Laura es la que conduce.</span><span style="font-family: "Comic Sans MS";"> </span><span style="font-family: "Comic Sans MS";">A veces reposa
su mano sobre el cambio. Marian está tentada de acariciarla en varias
ocasiones. Esa tentación, tantas veces repetida, de acercar la mano al mismo
lugar termina por atraerla. Por fin se decide y en la siguiente ocasión
acaricia el dorso de la mano de Laura con la punta de los dedos, produciendo un
ligero cosquilleo sobre su piel. Ella con un movimiento rápido retira la mano
con brusquedad. </span><i style="font-family: "Comic Sans MS";">“Error” </i><span style="font-family: "Comic Sans MS";">Piensa
Marian, se lo recrimina a sí misma con frustrada actitud.</span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">De pronto Laura le extiende su mano para
que la acerque, es ella ahora quién la acaricia con suave tacto. Marian la
observa con una sonrisa, empieza a sentirse optimista. Laura sonríe y también
de vez en cuando mira hacia ella con gesto pícaro.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span style="font-family: "Comic Sans MS";">Pasean por la Rúa del Vilar la una al lado
de la otra sin contacto y calladas. Marian piensa que debe provocar la
conversación por difícil que le pueda resultar a Laura. Necesita aclarar un
montón de cosas y el silencio no conduce a ninguna parte.</span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">- <i style="mso-bidi-font-style: normal;">¿Por
dónde empezamos, Laura? -</i> Rompe el silencio entre las dos. Laura duda un
momento, quiere hablar, pero algo la atenaza. Por fin rompe el mutismo en el
que estaba refugiada y descarga su ansiedad de forma atropellada. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">- <i style="mso-bidi-font-style: normal;">¡Todavía
estoy algo asustada!... Me siento incómoda conmigo misma. Lo que siento me
resulta muy agradable, pero todo esto es nuevo para mí, desconcertante y no sé
qué hacer. Me preguntabas en la puerta de tu casa, si iba a salir huyendo. Esa
sensación me asalta cada vez que estamos cerca. No sé lo que me ocurre, me
siento inquieta y muy nerviosa. Tenerte al lado me produce sensaciones muy
inquietantes…- </i>Marian la interrumpe. </span><span style="font-family: "Comic Sans MS";"><i>- ¿Como
la de besarme de improviso? -</i> </span><span style="font-family: "Comic Sans MS";">Le comenta
con una sonrisa. En realidad, trata de que se relaje. Percibe que Laura se
expresa con tensión y quiere que se encuentre cómoda, que se pronuncie con
naturalidad. No se lo hará complicado, no le pedirá que se etiquete, ni la va a
presionar para salir de un armario que ni conocía. La anima a vivir al máximo el
momento y disfrutar de sus emociones. </span><i><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">-
¡Ya! Lo siento si te hice sentir mal, no era mi intención. Fue un impulso, ya
lo sabes. Ese impulso es lo que no acabo de comprender. ¿Por qué me atraes de
esa manera? Siempre me he tenido por ser una persona normal, una mujer a quien
le tienen que gustar los chicos. - </span></i></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><i style="mso-bidi-font-style: normal;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">- Heterosexual.
- </span></i><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">Matiza
Marian.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">- <i style="mso-bidi-font-style: normal;">¡Sí!
Eso… Desde que te conozco… El día que nos presentaron, no sé si te acuerdas,
nos dimos un abrazo superficial, así… como informal. ¡Sentí un calor interior
al tocarte! Una sensación que nunca he tenido. - </i>Lo dice con afecto. –<i style="mso-bidi-font-style: normal;"> Fue agradable. No sabía quién eras, ni
siquiera que eras gay. Solo percibí un estremecimiento que me impresionó. Nadie,
repito, nadie me ha producido esa emoción en un primer encuentro. Algo de
curiosidad se despertó en mi con aquella especie de sacudida al abrazarnos.
Desde ese día, comencé a darme cuenta que mi interés por ti aumentaba, una
sensación que no he sentido jamás con nadie. Cuando estás cerca es como si
nadie más estuviera, mi cabeza no deja de dar vueltas a tu alrededor, me atraes
y necesitaba, de alguna manera, acercarme. No sabía cómo hacerlo, hasta ese día
que no pude evitar besarte. Primero con la conversación, fui algo torpe, lo
reconozco y después en medio del baile, estábamos medio abrazadas y volví a
percibir aquel calor que surgía de dentro. Esa vez era intenso, estar abrazadas
en un baile me impresionó mucho más que otras veces, sí, esa sensación la tuve
en otras ocasiones. Por un impulso, es que me atraía con mucha fuerza, como un
imán, llevé mi boca hacia la tuya y te besé. Al separarnos, me maldije y salí corriendo,
no porque no me gustase aquel beso. Todo lo contrario, me gustó… me encantó,
fue algo maravilloso y eso fue lo que puso en mi alma el miedo. Me asusté
porque me sentí fascinada. - </i>Laura se detiene en medio de la Rúa y mira
severamente a Marian. <i style="mso-bidi-font-style: normal;">- ¿Me has echado un
embrujo o algo así? -</i> Marian se ríe con ganas ante la pregunta tan
extravagante de Laura. <i style="mso-bidi-font-style: normal;"><o:p></o:p></i></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><i style="mso-bidi-font-style: normal;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">– Ya me
gustaría. ¡Pero no! No tengo esa capacidad. Mis sensaciones contigo siempre han
sido agradables, pero no al punto que tú relatas. Nunca soñé con que te
acercases a mí de esta manera. Siempre presumiendo de ligona, que si los chicos
aquí, que si los chicos allá. Ni en mis mejores sueños pensé en lo que está
sucediendo ahora. Le has dado la vuelta a mis emociones para contigo… Fijarse
en ti es sencillo acaparas el escenario donde estés. Acercarse, sin embargo, es
difícil no dejas que nadie entre en tu cabeza, si tú no quieres…- </span></i><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">Laura se sorprende por el
comentario. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><i style="mso-bidi-font-style: normal;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">- ¿Cómo sabes
eso? ¿Me has psicoanalizado, o algo así? - </span></i><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">Marian le responde con placidez. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><i style="mso-bidi-font-style: normal;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">– Sé muchas
cosas de ti. Lo dices todo con tu comportamiento. - <o:p></o:p></span></i></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><i style="mso-bidi-font-style: normal;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">- También puedo
estar mintiendo, no todo lo que digo puede ser verdad. - <o:p></o:p></span></i></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><i style="mso-bidi-font-style: normal;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">- ¡Es cierto!
Mientes mucho, bueno en las cosas superficiales o en trivialidades. De eso me
di cuenta muy pronto. Por ejemplo, presumes de ligona. ¿Por qué no liga en el
trabajo? Me preguntaba. Hay chicos de nuestra edad que estarían encantados de
estar contigo. - </span></i><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">Laura
la mira como con espanto. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><i style="mso-bidi-font-style: normal;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">– ¿Estás segura
de lo que dices? - </span></i><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">Marian
asiente, Laura no puede creer lo que le está diciendo. En su mente resuena la
gran mentira que le acaban de descubrir.<span style="mso-spacerun: yes;">
</span>- <i style="mso-bidi-font-style: normal;">¡Es una Táctica! Una táctica que
es efectiva, así los contengo. Nada asusta más a un hombre que el temor de que
una mujer pueda ir a por él. De esta manera los mantengo alejados. - </i>Le
explica a Marian entre risas. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">– <i style="mso-bidi-font-style: normal;">Inteligente.
A mí no me hace falta usar tácticas ni engaños, soy directa, esté donde esté,
siempre soy honesta con mi sexualidad, no lo voy pregonando, solo mantengo mi
posición. Si hay alguien a quien le gusta o no, es algo que no me importa. Es
una forma de saber el lugar que ocupamos cada uno. Tú tienes que recurrir a
subterfugios porque lo has elegido así. ¿Qué necesidad tenías de hacerlo? ¿Eres
homosexual y necesitas esconderte? - </i>Esta pregunta pone en un compromiso a
Laura que no sabe que responder. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal"><i><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">-
¡No lo sé! No me lo he planteado, no he sentido atracción ni por hombres ni por
mujeres. Esta situación es estresante para mí. ¿Por qué crees que me siento tan
mal? No sé qué me pasa, bueno sí, tengo una atracción contigo que no puedo
explicar. Nunca he tenido esta sensación, y menos con una mujer, estoy
confundida y con mi cabeza muy revuelta. Ser homosexual es algo que nunca ha
pasado por mi cabeza. Y tampoco siento que lo sea.</span></i><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";"> - Lo explica lo mejor que
puede. Sentir atracción por otra mujer, creyéndose heterosexual, es un lio.
Ahora está aquí enfrentándose al hecho de ser homosexual, lo que conlleva el
olvidar todo lo que, desde niña, le han enseñado y, por tanto, plantear su vida
con una perspectiva completamente distinta a lo que ha sido su realidad hasta
el presente. Ve a Marian, a esa mujer en concreto, y encuentra en ella todo aquello
que esperaba de alguien desde hace mucho tiempo. Para Laura es como la panacea
del universo, se ha enamorado porque a su lado ha encontrado esa sensación
tanto tiempo deseaba. No condiciona el amor en el género para ponerse una
etiqueta, simplemente eso no le importa, le gusta ella, a su modo está
embelesada por ese amor que la ilusiona, pero ve que la sociedad, los
prejuicios y otros factores lo hacen muy complicado. A su modo también ella
misma no deja de ponerse barreras justificándolas según las circunstancias. En
estos dos meses desde el primer beso no ha hecho otra cosa que sentir pánico.
Atenazada, no era capaz de dar un paso en un sentido u otro, simplemente se
sentía como si sus pies estuviesen metidos en un bloque de cemento, impidiendo
cualquier movimiento.</span><span style="font-family: "Comic Sans MS";"> </span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">Hallarse en un lugar donde se siente libre
para expresarse resulta algo más cómodo para Laura. Necesitaba esa sensación
interna de poder hablar con libertad. Conversar con Marian empieza a percibir
que le es más agradable de lo que había pensado. La barrera mental que ella
misma se había generado ha desaparecido como niebla llevada por el viento.
Tiene la sensación de que puede dialogar con ella libremente diga lo que diga,
observa que la escucha con atención todo lo que dice y acaba de darse cuenta
que la conoce mejor de lo que pensaba. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">– <i style="mso-bidi-font-style: normal;">No
es fácil reconocer que se es homosexual. Tengo amigas que han pasado por el
mismo problema. Cuando te das cuenta que eres distinta a como has creído
siempre, surge un conflicto y la negación es uno de los primeros enemigos que
aparecen en ese campo de batalla. Se niega todo y el rechazo a una misma suele
ser lo más frecuente. Digamos que no quieres ser lo que ya has reconocido que
eres y entras en un conflicto, que no deja de ser otra cosa que un laberinto en
el que parece que no hay salida. -<span style="mso-spacerun: yes;"> </span></i>Laura
escucha atenta las explicaciones de Marian. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">– <i style="mso-bidi-font-style: normal;">Sí,
pero no me importaría reconocer que lo pueda ser, por esta sensación que tengo
en tu compañía tan agradable, estar contigo me gusta. A tu lado tengo la sensación
de que todo encaja de forma perfecta en mi vida. Me siento muy afortunada de
conocerte.<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>Lo que no sé hacer es hallar
la forma de encontrarme a gusto conmigo misma, no quiero vivir con el malestar
de no saber quién soy. -<span style="mso-spacerun: yes;"> </span><o:p></o:p></i></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><i style="mso-bidi-font-style: normal;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">- Deberás
aceptarlo. El primer paso es hacerte visible a ti misma. Hasta entonces no
encontrarás el equilibrio que necesitas. -<span style="mso-spacerun: yes;">
</span><o:p></o:p></span></i></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><i style="mso-bidi-font-style: normal;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">- ¡Está
bien!<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>Y ¿Cómo se hace eso? -<span style="mso-spacerun: yes;"> </span><o:p></o:p></span></i></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><i style="mso-bidi-font-style: normal;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">- No lo sé. Cada
persona es un mundo, es un camino que debes recorrer sola en tu interior. Los
demás solo podemos apoyarte con nuestra experiencia y cariño. Pero el rumbo
debes elegirlo tú. - <o:p></o:p></span></i></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><i style="mso-bidi-font-style: normal;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">- Creo que la
negación para mí ya ha pasado. Al menos eso pienso, pero todavía me quedan
muchas dudas. Necesito ir despacio y tener la seguridad de que esto es lo que
la vida me tiene preparado, que no es un juego ni una broma del destino. –<o:p></o:p></span></i></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><i style="mso-bidi-font-style: normal;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">- ¡Bueno! Todos
tenemos dudas con nuestra vida, el futuro, los sentimientos y todo aquello que
nos genera inquietud. Todo eso propicia una ansiedad que nos lleva a dudar de
lo que nos está sucediendo. Si insistimos en buscar una explicación o una
solución, más tarde o más temprano la encontraremos. Es cuestión de paciencia y
constancia.<span style="mso-spacerun: yes;"> </span><o:p></o:p></span></i></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">Laura está pensativa, mira con inquietud a
su alrededor, como buscando una respuesta a todas sus preguntas. En ese
silencio momentáneo se aproxima al costado de Marian y coge su mano con
suavidad. Ella la mira con el rabillo del ojo y con discreción la lleva debajo
de uno de los arcos de la calle. Apoya su espalda en la columna y mira con
firmeza a los ojos de Laura.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">- <i style="mso-bidi-font-style: normal;">Laura
tengo una pregunta que me interesa hacerte y te pido sinceridad en la
respuesta. Con un sí o un no, será suficiente. ¿Estamos de acuerdo? - </i>Laura
asiente con la cabeza. El misterio se apodera de ella y de lo que quiere saber.
Marian se detiene prolongando el enigma y mira fijamente a los ojos de Laura que
la contempla expectante. –<i style="mso-bidi-font-style: normal;"> Laura ¿Estás
enamorada? –</i> La pregunta es directa y va franca al corazón. Marian sabe lo
que pregunta, las sensaciones que está percibiendo afirman que ha conquistado
su corazón, pero necesita que se lo verbalice. A Laura se le acelera el pulso
solo pensar que debe responder a una pregunta que no esperaba escuchar. Durante
un instante duda como dar la respuesta. Toma aire mira a su alrededor esperando
que nadie la escuche y vuelve la mirada hacia los ojos de Marian que espera una
respuesta clara.<span style="mso-spacerun: yes;"> </span><o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">- <i style="mso-bidi-font-style: normal;">¡Si!
Te quiero. Pero no a mi lado. – <o:p></o:p></i></span></p>
<p class="MsoNormal"><span lang="ES-TRAD"><o:p> </o:p></span></p>Francisco Freijaneshttp://www.blogger.com/profile/07136887969142331609noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-7189587968703271148.post-67989447719809799802021-02-08T19:16:00.000+01:002021-02-08T19:16:25.795+01:00 Te quiero. Pero no a mi lado.<p> <b><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS"; font-size: 14.0pt; line-height: 115%;">4. </span></b><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS"; font-size: 14pt; line-height: 115%;">Insospechada
aparición.</span><span style="font-family: "Comic Sans MS";"> </span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">Han pasado más de dos meses desde el suceso
en la discoteca con aquel beso en medio de la pista de baile. Poco han cambiado
las cosas entre Marian y Laura, su relación es correcta y sobre todo muy
profesional. No hay un acercamiento manifiesto, pero tampoco hay una sensación
de separación notoria. Marian hace su vida sin exponerse emocionalmente. Aunque
la distancia en el tiempo ha aumentado, el peso de lo sucedido con Laura no
desaparece. Está convencida que hasta que no puedan comunicarse con
naturalidad, nada hará que la situación mejore o cambie. Poco a poco ha crecido
en su interior un sentimiento algo más que afectuoso hacia la recepcionista,
sufre al no poder dar salida a esa sensación. La firme presencia de la imagen
de Laura en su mente se ha convertido en una constante y no abandona sus
pensamientos.</span><span style="font-family: "Comic Sans MS";"> </span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">Pasaron las Navidades y cada una en su
ambiente, Laura con toda su familia y Marian con su circulo de amistades mas
cercano. Nada ha entorpecido el pensamiento de ambas, cada una recapacitando
sobre la otra como si de una conexión cósmica se tratara.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">Ya está cerca la primavera y los
preparativos de boda de Carmen y Paloma se van acelerando. Marian las contempla
con sana envidia al verlas tan enamoradas y felices por el próximo enlace de
sus vidas. Como era de prever nadie de la familia de Carmen la acompaña en el
día más importante para ella. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">De alguna manera ante tanta dicha, Marian
se siente algo desventurada. No parece estar interesada en buscar, encontrarse
con alguien que pueda hacerla feliz. Esa necesidad básica de afecto la cubre
con sus amigas. El sexo que con carácter ocasional a veces se presentaba
oportuno ya no le interesa, se siente desganada. Porque no hay continuidad y
tampoco encontraría satisfacción en ello en las circunstancias actuales. Esas
aventuras han desaparecido de su lado. Está sola con sus pensamientos, que
inopinadamente están constantes en la figura de Laura. Sueña con ella despierta
o dormida, se ha acomodado en su pensamiento y también en su alma. El sabor que
le dejó aquel beso en su espíritu, es como haber labrado su nombre en el
corazón. A veces piensa que es una pesada broma del destino lo sucedido con
aquel beso. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">Que a partir de esa fecha Laura levantase
un muro en su trato personal le parece inconcebible. <i style="mso-bidi-font-style: normal;">“¿Por qué lo hizo? No ha hecho más que complicarme la existencia” </i>Piensa
a veces. El hecho es que ella debería desatascar la situación en algún momento.
“<i style="mso-bidi-font-style: normal;">Pero… ¿Cómo hacerlo si ella no recuerda
o no quiere recordar nada de aquella noche? Se escuda en que estaba muy
borracha, la amnesia es su coartada. Pero su actitud la delata, que diera ese
cambio radical a sus relaciones conmigo, es que debe recordarlo, pero no quiere
admitirlo. Si realmente no se acordase de nada, no habría motivo para ese
cambio tan drástico en su conducta, la relación no habría cambiado. Debo
intentarlo en cuanto pueda. Esto no puede seguir así. ¿Es que tiene algún
prejuicio con ello? ¿Por qué si no? No hay otra explicación, rechaza tener una
relación homosexual.”</i></span><i><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";"><o:p> </o:p></span></i></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">Y llega el día de la boda. Carmen y Paloma
lucen espléndidas y felices. Se celebra en el juzgado en presencia de una tropa
de amigos. Un hermano de Paloma ejerce de padrino para ella y a Marian le toca
ser la Madrina de Carmen. Se lo pidió después de una desagradable visita a sus
padres. Salió llorando de su casa con el alma encogida. Afuera la esperaba
Paloma que la acogió entre sus brazos con todo el amor que le fue posible. La
intolerancia y falta de comprensión fueron la conducta dominante en unos padres
que no soportan que su hija sea homosexual y que quisiera casarse con otra
mujer, era una ofensa inaceptable. Con gritos y muy malos modos la echaron de
su casa por segunda y última vez. Carmen se prometió que nunca volvería a pisar
ese sitio. Todo lo contrario que Paloma, por su parte cuenta con el aprecio de
sus hermanos, sus padres fallecieron hace tiempo. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">Marian sigue en su monótono pensamiento, es
incapaz de quitarse de la cabeza a Laura. Algo que empieza a parecer un tormento
o una paranoia. Esa dosis diaria de tener que verla a través de la cristalera
actúa como lenta intoxicación para sus sentimientos. No sabe cómo actuar. </span><span style="font-family: "Comic Sans MS";">Durante la ceremonia está absorta, su mente
se separa de la realidad y contemplando a sus amigas se ve en ellas con Laura
cogida de la mano y diciendo un sí quiero dentro de una nebulosa. </span><span style="font-family: "Comic Sans MS";">Despierta al escuchar el pueden besarse,
que cierra la ceremonia.</span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">Pero los pensamientos sobre Laura siguen azotando su mente de forma machacona. Es un comportamiento obsesivo, se dice a sí
misma, Marian no deja de pensar en su compañera de trabajo. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">Durante el banquete se encuentra como
aislada, permanece callada casi todo el tiempo, aunque una de sus amigas más
cercanas, Rocío, trata de levantarle el ánimo. </span><span style="font-family: "Comic Sans MS";">- </span><i style="font-family: "Comic Sans MS";">Estás
ausente Marian. ¿Qué te pasa? - </i><span style="font-family: "Comic Sans MS";">Le pregunta en un momento que le pilla con
la guardia baja. </span><i><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">- No lo sé. Es
que esto de la boda y que últimamente no duermo bien, estoy muy cansada. - </span></i><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">Se exprime el cerebro para encontrar una
justificación. Rocío, que la conoce bien, no se lo cree. </span><span style="font-family: "Comic Sans MS";">- </span><i style="font-family: "Comic Sans MS";">¿Estás
segura? ¿No estarás enferma? - </i><span style="font-family: "Comic Sans MS";">Le pregunta, ella responde que no, pero su
amiga es insistente. – </span><i style="font-family: "Comic Sans MS";">Entonces creo que
tienes algún problema sin resolver. Dime cariño ¿Qué es lo que te agobia?
Puedes confiar en mí, no se lo voy a decir a nadie.- </i><span style="font-family: "Comic Sans MS";">Marian vuelve la vista
hacia ninguna parte como queriendo no hacer caso. Hace una inspiración profunda
y expulsa el aire con violencia. </span><span style="font-family: "Comic Sans MS";">– </span><i style="font-family: "Comic Sans MS";">¡Creo
que estoy enamorada de alguien! - </i><span style="font-family: "Comic Sans MS";">Expresa en voz baja. </span><span style="font-family: "Comic Sans MS";">- </span><i style="font-family: "Comic Sans MS";">Me
lo imaginaba. ¿Pero? Hay algo más. ¿Verdad? - </i><span style="font-family: "Comic Sans MS";">Rocío hurga en la llaga sin
querer. </span><span style="font-family: "Comic Sans MS";">– </span><i style="font-family: "Comic Sans MS";">No
me siento correspondida y eso me está doliendo mucho. Nunca imaginé que me
ocurriría algo así, está siendo muy duro. - </i><span style="font-family: "Comic Sans MS";">En pocas frases resume su
situación. </span><span style="font-family: "Comic Sans MS";">– </span><i style="font-family: "Comic Sans MS";">Bueno
pues eso lo explica todo. Ahora ven a mi lado, necesitas algo de consuelo. Aquí
tienes una amiga para lo que haga falta. - </i><span style="font-family: "Comic Sans MS";">Rocío se muestra como bálsamo
para Marian y la abraza con afecto. Ella esconde su cara en el hombro de Rocío
para sollozar, no quiere arruinar la fiesta de sus amigas. Carmen y Paloma se
acercan a ellas entre risas y gestos de cariño. Al verlas abrazadas se paran y
Carmen pregunta que es lo que pasa. Rocío hace un ademán para que se alejen
gesticulando, que después hablará con ellas. Carmen se preocupa, pero Rocío
insiste con gestos, ellas se alejan llenas de dudas.</span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">– <i style="mso-bidi-font-style: normal;">¿Estás
mejor? Ya te has desahogado. ¡Toma! - </i>Le ofrece un pañuelo con el que se
seca el rostro, tiene los ojos irritados por el llanto. Nunca le había pasado
algo semejante. Plañir de esa manera no es su estilo, raramente lo hace, pero
esta vez su emoción la desborda, una sensación imposible de controlar. </span><span style="font-family: "Comic Sans MS";">- </span><i style="font-family: "Comic Sans MS";">¡Gracias
Rocío! Eres una buena amiga. - </i><span style="font-family: "Comic Sans MS";">Mira su cara que le está diciendo que quiere
saber más. – </span><i style="font-family: "Comic Sans MS";">Es una compañera del
trabajo, preciosa y encantadora. Un día me dio un beso, fue una sorpresa
enorme. Un beso lleno de pasión y eso lo desencadenó todo. Desde entonces se
muestra distante, huye de mí, aunque a veces tengo la sensación de que me
vigila. Y me he enamorado de ella como una idiota sin obtener nada a cambio… Me
enamoré de quien no imaginé y de quién no esperaba. Me he dado cuenta que el
amor no se elige. Es él quien te elige a ti. - </i><span style="font-family: "Comic Sans MS";"> </span><span style="font-family: "Comic Sans MS";">Rocío escucha con cariño a Marian. Reflexiona
durante unos instantes. </span><span style="font-family: "Comic Sans MS";">–</span><i style="font-family: "Comic Sans MS";">Voy
a decirte algo. Puedo equivocarme, pero no puedo dejar el darte mi opinión.
Creo que a ella le sucede lo mismo que me pasó a mí… Esa conducta de rechazo es
solo miedo. Hace lo contrario de lo que realmente desea porque en el fondo está
asustada de sus sentimientos. Te preguntarás porque lo digo. Yo viví esa
situación la primera vez que me enamoré de una mujer. Lo rechacé durante
tiempo, no era consciente de quien era en realidad y mi respuesta fue parecida
a la que me has contado. Me escondí de mi misma. Debes ser paciente, si es como
te digo un día vendrá a ti sin cargas, pero debes esperarlo con tranquilidad.
Ella necesita reconocer esos sentimientos como algo positivo, y no es fácil
precisamente, exige mucha madurez y reflexión, pero al final todo estará bien.
- </i><span style="font-family: "Comic Sans MS";">Marian la mira sorprendida y agradecida. </span><span style="font-family: "Comic Sans MS";">– </span><i style="font-family: "Comic Sans MS";">Espero
que tengas razón. - </i><span style="font-family: "Comic Sans MS";">Marian responde sin convencimiento, pero se anima algo.
El vaciar su ansiedad con alguien en quien confía le hace sentirse mejor y
renueva su espíritu para afrontar el resto de la fiesta. </span><span style="font-family: "Comic Sans MS";">Después del banquete se citan en el pub cerca
del domicilio de las recién casadas, para acabar la fiesta tomando unas copas. </span><span style="font-family: "Comic Sans MS";">Las novias se retiran a su casa para
cambiar el atuendo y refrescarse algo. De paso celebran a su manera en la
intimidad otra ceremonia más íntima y afectiva que la social. </span><span style="font-family: "Comic Sans MS";">- </span><i style="font-family: "Comic Sans MS";">¡Te
quiero con toda el alma, Paloma! -</i><span style="font-family: "Comic Sans MS";"> Le dice mirando tiernamente a sus ojos. </span><i><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">- ¡Lo sé! Eres
lo mejor de mi vida y yo también te amo con todo mi corazón. -</span></i><i><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";"><o:p> </o:p></span></i></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">Entrada la noche la mayoría de los
participantes en la boda están sentados tomando una copa o bailando en el
centro del local. Marian, Rocío y las recién casadas comparten una mesa
bebiendo y haciendo risas en un ambiente relajado, aunque un poco ruidoso.
Paloma saca a bailar a Carmen cuando suena una canción romántica que invita al
arrumaco entre amantes. Rocío le insinúa a Marian para salir a la pista, ella
rechaza la invitación, no se encuentra con ganas. </span><span style="font-family: "Comic Sans MS";">- </span><i style="font-family: "Comic Sans MS";">Prefiero
seguir charlando. Siempre me ha gustado mucho hablar contigo, eres muy buena
conversadora.</i><span style="font-family: "Comic Sans MS";"> – Rocío se siente halagada por el cumplido de su amiga. En
animada cháchara siguen ambas sentadas en una mesa alejadas de la bulliciosa
pista de baile.</span><span style="font-family: "Comic Sans MS";"> </span><span style="font-family: "Comic Sans MS";">Pasado un rato, por la entrada del local,
Laura aparece acompañada por otras personas entre las que está su hermano Paco.
Marian no se percata de su presencia, pero ella si la reconoce nada más cruzar
la puerta, allí sentada al lado de una mujer muy guapa con la que conversa
afable y sonriente. Se acerca a la barra escondida entre sus amistades, pide y
le sirven una copa. Mientras, observa con el rabillo del ojo como Marian abraza
afectuosa a su acompañante. A Laura se le encienden las alarmas, de repente se
pone muy nerviosa, y sabe por qué, le entran unos celos terribles, a pesar de
reconocerlo le cuesta pensarlo. </span><i style="font-family: "Comic Sans MS";">“¿Será
que tiene novia, y no me he enterado?” </i><span style="font-family: "Comic Sans MS";">Piensa por un momento. Durante un
rato mantiene una actitud expectante, camuflada entre sus amigos, y muy
alterada por lo que está viendo, siente unas dudas terribles, es incapaz de
controlarse. En un momento dado, Marian y Rocío se levantan, Marian se dirige al baño y
su acompañante a la pista, mezclándose con la gente que está bailando en ese
momento. Sin decir palabra a sus acompañantes, Laura sigue los pasos de Marian
hasta el servicio. Se para en la puerta y espera.</span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">Marian termina de lavarse las manos, se las
seca y abre la puerta. Su expresión es un poema al ver a Laura allí apostada
esperando. Con voz entrecortada la saluda, nerviosa. </span><span style="font-family: "Comic Sans MS";">- </span><i style="font-family: "Comic Sans MS";">¡Hola!
- </i><span style="font-family: "Comic Sans MS";">No alcanza a decir nada más. Laura la empuja de nuevo adentro, cierra la
puerta, la abraza con fuerza, fija la mirada en sus ojos con intensidad y
vuelve a besarla, esta vez con ímpetu. Inmovilizada su cara, Marian no quiere
responder, pero después de unos segundos se deja llevar. Mezclan sus lenguas
entre gemidos. Cuando Laura se separa es Marian quien no quiere hacerlo y
continúan besándose unos instantes más. Se miran con ansiedad y con misterio.
Marian no sale de su asombro, Laura, al contrario, muestra una sonrisa leve, se
siente relajada. </span><span style="font-family: "Comic Sans MS";">- </span><i style="font-family: "Comic Sans MS";">¿Es
esa tu novia? Con la que estabas abrazada. - </i><span style="font-family: "Comic Sans MS";">Le increpa beligerante. </span><span style="font-family: "Comic Sans MS";">- </span><i style="font-family: "Comic Sans MS";">¡No!
Es solo una amiga. – </i><span style="font-family: "Comic Sans MS";">Toma aire</span><i style="font-family: "Comic Sans MS";"> </i><span style="font-family: "Comic Sans MS";"> con fuerza. -</span><i style="font-family: "Comic Sans MS";"> Tenemos que hablar. - </i><span style="font-family: "Comic Sans MS";">Expone Marian serena. </span><span style="font-family: "Comic Sans MS";">- </span><i style="font-family: "Comic Sans MS";">¡Lo
sé! - </i><span style="font-family: "Comic Sans MS";">Responde en un tono suave y expresión algo vergonzosa. </span><i><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">- Pero no aquí.
Vamos a un sitio más tranquilo. -</span></i><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";"> Le propone con alegría contenida. </span><span style="font-family: "Comic Sans MS";">- </span><i style="font-family: "Comic Sans MS";">Vale.
¿Salimos? -</i><span style="font-family: "Comic Sans MS";"> Laura contesta con una sonrisa. La besa de nuevo, un beso corto
muy intenso antes de abandonar el servicio. De vuelta al recinto se dirigen
hacia la puerta de la calle, se cruzan con Carmen que también acude al
servicio. </span><span style="font-family: "Comic Sans MS";">- </span><i style="font-family: "Comic Sans MS";">¿Estás
mejor? – </i><span style="font-family: "Comic Sans MS";">Le pregunta. </span><span style="font-family: "Comic Sans MS";">-</span><i style="font-family: "Comic Sans MS";">
¡Sí! En realidad, no me pasaba nada. – </i><span style="font-family: "Comic Sans MS";">Le contesta con soltura y sin dejar
de sonreír mientras camina. Se siente como liberada, este nuevo encuentro ha
cerrado una crisis que ya se volvía insoportable. Con presteza salen del pub y
comienzan a deambular por la calle despacio. </span><span style="font-family: "Comic Sans MS";">- </span><i style="font-family: "Comic Sans MS";">¿Dónde
vamos? - </i><span style="font-family: "Comic Sans MS";">Pregunta Laura en voz baja. </span><span style="font-family: "Comic Sans MS";">– </span><i style="font-family: "Comic Sans MS";">Hace
buena noche. ¿Te parece que paseemos? - </i><span style="font-family: "Comic Sans MS";">Propone
Marian. </span><span style="font-family: "Comic Sans MS";">– </span><i style="font-family: "Comic Sans MS";">¡Lo
siento! He sido una impetuosa. – </i><span style="font-family: "Comic Sans MS";">Laura rompe su silencio después de unos
minutos de mutismo.</span><span style="font-family: "Comic Sans MS";"> </span><i><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">- No quiero tus disculpas, quiero que me digas lo que está pasando. Necesito una explicación. - </span></i><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">Marian expone con seriedad. </span><i><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">- No sé por
dónde empezar. </span></i><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">-
Dice Laura mientras caminan. </span><span style="font-family: "Comic Sans MS";">- </span><i style="font-family: "Comic Sans MS";">¿Qué
te parece si me dices lo del beso de hace unas semanas? - </i><span style="font-family: "Comic Sans MS";">Marian está aparentemente serena y centrada, pero por dentro es un flan está impaciente por conocer lo que Laura pueda decirle. </span><i><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">- ¡Quiero disculparme!
Fue un impulso repentino, lo hice sin pensar. De pronto sentí la necesidad de
besarte y me dejé llevar. Supongo que le habrás dado mil vueltas. Pero eso es
lo que pasó. - </span></i><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">Laura
no sabe seguir, siente su lengua atenazada y la boca seca. Teme, que si cuenta
sus sentimientos puede provocar una situación incómoda. </span><span style="font-family: "Comic Sans MS";">– ¿</span><i style="font-family: "Comic Sans MS";">Eso
es lo que pasó?</i><span style="font-family: "Comic Sans MS";"> ¿</span><i style="font-family: "Comic Sans MS";">Eso es lo que pasó?
Lo dices como si hubiese ocurrido algo sin importancia. Nadie da un beso así
sin darle la más mínima importancia. Me das un beso por sorpresa, huyes y
después vas y dejas de hablar conmigo, escapas cada vez que estoy delante. ¿Por
qué me dijiste que no te acordabas? ¿Por qué me mentiste? – </i><span style="font-family: "Comic Sans MS";">Marian aparenta
estar hecha una furia, deja que la ansiedad acumulada salga hacia la persona
causante de la misma. </span><span style="font-family: "Comic Sans MS";">- </span><i style="font-family: "Comic Sans MS";">¡No
es tan fácil! ¡Entiéndeme! Ahora tampoco lo está siendo. Esta es una situación
nueva para mí, aparte de inexplicable. Me acobardé. No sabía qué hacer.<b> </b>Y decidí de forma inconsciente
esconderme. ¡Perdóname! Quiero pedirte disculpas. No sé cómo lo estás viviendo
tú, pero a mí, me está costando un mundo. - </i><span style="font-family: "Comic Sans MS";">Laura trata de justificarse lo
mejor que puede. En su interior guarda muchas dudas aún y no se siente segura
con lo que le está pasando. </span><i><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">- ¿Por qué me
has besado esta noche? - </span></i><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">Marian
pregunta con intención. Después de unos segundos de dudas Laura responde con
algo de temor. </span><span style="font-family: "Comic Sans MS";">– </span><i style="font-family: "Comic Sans MS";">Porque
lo necesitaba desde que te di el primer beso. Me entraron unos celos terribles
al verte abrazada a otra persona, ¿Celos?... ¡Por dios! ¿Qué me pasa?... Y ahora mismo estoy deseando besarte otra
vez. ¡Oh dios mío! ¿Cómo se me ocurre?- </i><span style="font-family: "Comic Sans MS";">Marian mira sus ojos verdes con
emoción. Ella también está deseosa de besarla de nuevo. – </span><i style="font-family: "Comic Sans MS";">Ni se te ocurra hacerlo aquí en la calle, me muero de vergüenza. - </i><span style="font-family: "Comic Sans MS";">Laura
detiene a Marian en sus intenciones. Con seriedad da un paso atrás. Marian se
hace más reflexiva. </span><span style="font-family: "Comic Sans MS";">– </span><i style="font-family: "Comic Sans MS";">No
quisiera descubrir que esto es un juego para ti. O que pretendes acostarte
conmigo para divertirte. - </i><span style="font-family: "Comic Sans MS";">Se muestra fría y distante. Laura acusa el
golpe, desea decirle que en realidad está enamorada, que la quiere, pero el
temor aún está presente, no se atreve. Ese camino oscuro presenta aún muchas
incógnitas. </span><span style="font-family: "Comic Sans MS";">– </span><i style="font-family: "Comic Sans MS";">Nada
de eso ha pasado por mi cabeza. Escucha Marian, me caes bien, más que bien.
Desde hace tiempo eres alguien especial para mí. Me gusta tenerte cerca, siento
que hay algo entre nosotras, como si nos conociéramos de siempre o de otra
vida. No sé qué quieres decir con eso de un juego. Te lo digo totalmente en
serio me gustaría acabar con mi farsa y que podamos hablar como lo hemos hecho
siempre. - </i><span style="font-family: "Comic Sans MS";">Se va encontrando algo mas suelta y confiada, el estar hablando con Marian de nuevo lo vive como una liberación. </span><i><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">- Yo también te
echaba de menos. Me has hecho sufrir. Desearía decirte algo más, pero creo que
es precipitado en este momento. Ahora deberíamos reposar nuestros pensamientos.
¿Seguimos mañana? Creo que el encuentro de hoy ha sido magnífico. El beso, el
paseo, la compañía y lo que es más importante, que volvamos a hablarnos con
sinceridad. Echaba de menos tus sonrisas en la pecera - </span></i><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">Laura la mira con una sonrisa,
le brillan los ojos de la emoción y unas ganas terribles de volver a besarla. </span><i><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">– ¡Ven! </span></i><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">- Coge a Marian de la mano y
se meten en un callejón casi a oscuras. Laura contempla el cabello de Marian y
lo acaricia, su mejilla y acerca sus labios y, con dulzura, la besa
plácidamente. </span><span style="font-family: "Comic Sans MS";">– </span><i style="font-family: "Comic Sans MS";">¡Eres
un amor!</i><span style="font-family: "Comic Sans MS";"> – Le dice al concluir ese gesto de cariño.</span><span style="font-family: "Comic Sans MS";"> </span></p>
<p class="MsoNormal"><span lang="ES-TRAD"><o:p> </o:p></span></p>Francisco Freijaneshttp://www.blogger.com/profile/07136887969142331609noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-7189587968703271148.post-43567841398566189852021-02-01T12:17:00.000+01:002021-02-01T12:17:09.348+01:003.- Esperanza truncada<p> </p><p class="MsoNormal"><br /></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">Durante todo el fin de semana Marian no ha
podido quitarse de la cabeza el beso de Laura del viernes en la discoteca. Esta
noche casi no ha dormido dándole vueltas a aquel inesperado contacto, imprevisto
y sorprendente. Nunca un beso romántico le produjo unas sensaciones tan
valiosas, nuevas y distintas, agradables y que surgieron del interior de su
alma al contactar con los labios de Laura. “<i style="mso-bidi-font-style: normal;">¿Qué
es lo que ha pasado?” </i>Se pregunta una y otra vez. Recuerda haberse besado
con otras chicas en distintos momentos de su vida, ninguna le ha producido una
sensación parecida, tan gratificante, encantadora y al mismo tiempo emotiva y
llena de zozobra.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">Por su parte Laura tampoco ha dejado de
darle vueltas. Recuerda el desconcierto y la zozobra percibida el día que le
presentaron a Marian, sintió una sacudida inquieta y misteriosa en su interior,
fue una sensación entre el agrado y alboroto llamó poderosa su atención. A
partir de ese instante la curiosidad y atracción secreta por ella fue progresando
en su mente de una forma casi permanente. Aunque todas esas sensaciones las
percibe como algo agradable, el misterio se ha instalado en su pensamiento, más
después de besarla en la fiesta, no acaba de entender su comportamiento y qué
le ha movido a realizar ese acto casi anti natural. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">Un aura especial envuelve a Marian que
excita su mente cuando se encuentra en su cercanía. Desde el primer momento intentaba
encontrar la causa que explicase esa atracción tan grande por ella, pero ahora…
La incógnita de esa agitación que nota al tenerla cerca o al contacto visual ha
tomado forma de algo incomprensible con ese beso romántico. Siempre que se
miraban de forma casual, en la oficina o en cualquier lugar, una sonrisa
espontánea aparecía en la expresión de ambas. La relación mutua es muy
agradable, a su lado se encuentra a gusto. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">Reflexiona sobre la atracción que siente
hacia esa pelirroja menuda y de sonrisa generosa, que la contagia y que a veces
no puede retirar la mirada posada en ella. En ocasiones se descubre que, al
contemplarla, no sólo la mira, se da cuenta que lo hace embobada.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">El beso en medio de la pista de baile ha
desatado una incertidumbre formidable en su imaginación y con una intensidad
mayor de la que podía percibir con anterioridad. No entiende porque la ha
besado, es consciente de la atracción que Marian le provoca, sin embargo, no
encuentra explicación que le justifique su atrevido comportamiento. Desde esa
noche no duerme a gusto, la emoción percibida en el contacto de sus labios la
perturba de manera desmedida. Que ese estremecimiento fuese tan encantador le
resulta misterioso. “<i style="mso-bidi-font-style: normal;">¿Cómo se puede
percibir algo tan entrañable al besar a otra mujer?” <span style="mso-spacerun: yes;"> </span></i>Se pregunta racionalmente.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";"><o:p> </o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">De madrugada, Marian se levanta y después
de ir al baño, se pasa el resto de la noche deambulando por el pasillo de casa
o sentada en la mecedora de la balconada con una bebida caliente en la mano,
una manta cubriéndole parte del cuerpo y la excitación por montera. El misterio,
la pesadumbre y la angustia, la mantienen en alerta durante ésta pluviosa
noche.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">A la hora de cada mañana se mete en la
ducha. Más tarde desayuna un café con leche sin azúcar y después de vestirse se
dirige al trabajo con el gesto algo contrariado. Ha mejorado de su resfriado,
solo le queda una ligera afonía como producto residual. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">Al entrar en la oficina no puede evitar el
dirigir la mirada a través de la cristalera hacia Laura que parece no atender a
otra cosa que no sea el teléfono y el ordenador. Como cada mañana pasa por la
recepción para recoger el correo y los iniciales encargos del día, que se han
acumulado durante la noche en el fax y han de ser despachados a primera hora. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">- <i style="mso-bidi-font-style: normal;">¡Buenos
días! - </i>Saluda con cordialidad a la recepcionista. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">- <i style="mso-bidi-font-style: normal;">¡Buenos
días! - </i>Le responde sin mirar hacia ella y en un tono severo. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">- <i style="mso-bidi-font-style: normal;">¿No
hay correo? - </i>Pregunta con curiosidad esperando algo más explícito. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">- <i style="mso-bidi-font-style: normal;">¡Todavía
no! -</i> Laura le espeta sin cortesías y sin levantar la mirada. Es todo lo
que obtiene como respuesta. Coloca una carpetilla llena de papeles sobre el
mostrador. Marian la recoge con la mirada turbada.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">– <i style="mso-bidi-font-style: normal;">Es…to,
¿Hay algo que te moleste? Te noto rara. - </i>Le pregunta aprovechando que
están solas en la recepción. - <i style="mso-bidi-font-style: normal;">¿Si estás
molesta por lo de la otra noche, yo…? - </i>Laura interviene con sequedad. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><i style="mso-bidi-font-style: normal;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">- ¿Lo de la otra
noche? ¿Qué pasó la otra noche? –</span></i><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";"> Responde con cierto tono de rechazo, sin
mover la vista del ordenador o los papeles de la mesa, pasa fugaz por el rostro
de Marian, va con ese gesto de lo uno a lo otro. La pregunta sorprende a
Marian. Se cuestiona si tan borracha estaba para no acordarse. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">- <i style="mso-bidi-font-style: normal;">¿No
te acuerdas de…? – </i>Reflexiona un segundo antes de continuar. <i style="mso-bidi-font-style: normal;">– Creo que bebiste demasiado y te fuiste sin
dar ninguna explicación. -</i> Le dice antes de volver a preguntar. - <i style="mso-bidi-font-style: normal;">¿Estás ya bien o todavía tienes resaca de lo
ocurrido? -<o:p></o:p></i></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><i style="mso-bidi-font-style: normal;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">- ¡Sí! Será eso,
tuve una resaca terrible y aún no me encuentro bien. -</span></i><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";"> Explica sin convencimiento y
en un tono distante. La disculpa, a Marian, le suena como ensayada. Tiene la
sensación que; o no quiere, o no se acuerda. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">Hablar del beso que le dio en medio de la
pista de baile debe resultarle violento. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">– <i style="mso-bidi-font-style: normal;">Pues.
¡Cuídate! - </i>Le dice en cierto tono de ofensa y abandona la recepción algo
airada. Laura la sigue con la mirada hasta que la pierde de vista. Suspira con
profundidad y apoya su frente en las manos queriendo ocultar la mirada. Se
siente débil, frustrada y avergonzada por el trato que acaba de dispensar a
Marian. Es lo opuesto a sus deseos, percibe cierta sensación de culpabilidad
por ese feo comportamiento. No sabe qué le pasa con Marian. Le gusta estar a su
lado y al mismo tiempo siente una sensación de rechazo, como de aversión por sí
misma. Sus pensamientos hace tiempo que ruedan en muchos momentos alrededor de
ella, pero continua sin entender esas sensaciones. Nunca nadie se ha acomodado
en su mente de esa forma, parece haber tomado plaza en su cabeza y no la
abandona. Un extraño influjo sobre su alma la tiene cautivada, pero le ha
mentido intencionadamente. Se acuerda con claridad meridiana de lo ocurrido y
de las sensaciones percibidas con aquel beso, a pesar de lo bebida que estaba.
No se arrepiente, pero no deja de pensar en sí misma y qué es lo que ocurre en
su interior. - <i style="mso-bidi-font-style: normal;">¿Qué es lo que me pasa? ¿Por
qué me siento tan rara? </i>– Piensa para sí.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";"><o:p> </o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">Pasan los días y la relación no varía desde
lo ocurrido en ese primer encuentro después del beso, como si algo grave
ocurriera entre ellas, su trato comienza a ser distante y a veces frío. Marian
decide hacer su vida intentando olvidar a Laura, algo difícil pues todas las
mañanas forzosamente ha de trabajar cerca y el contacto personal es inevitable
por las obligaciones en la oficina. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">En la empresa es tema de comidilla en petit
comité entre los empleados, Manolín, que es el bocazas, se ha encargado de
cotillear lo ocurrido entre ellas, aquel viernes por la noche,
ampliamente.<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>En los despachos de gestión
Marina, la directora, pregunta a Esther y Adela sobre el particular. Esther que
es un modelo de prudencia no lo desmiente, pero lo justifica por el hecho de
haber bebido demasiado y el tono festivo de aquella noche en especial. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><i style="mso-bidi-font-style: normal;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">- ¿Cómo puedes
decir eso? Es pecado, y no se puede permitir. - </span></i><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">Responde la mojigata de Adela de forma
airada. - <i style="mso-bidi-font-style: normal;">¡Dios las castigará en el
infierno por pecadoras! - </i>Marina y Esther sonríen mal. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><i style="mso-bidi-font-style: normal;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">– ¿No te parece
que eso debería quedar entre ellas y el creador? - </span></i><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">Marina no puede evitar darle a
Adela con sus propias armas y donde más le duele porque sabe que no tiene
respuesta. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">- <i style="mso-bidi-font-style: normal;">¡Ah!
Bueno. ¡Sí! Pero no te quepa duda que las castigará. - </i>Con esta frase hace
mutis camino del servicio. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><i style="mso-bidi-font-style: normal;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">– Me exaspera
cuando saca la religión a pasear para justificar lo que no sabe o no entiende
por sí misma. - </span></i><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";"><span style="mso-spacerun: yes;"> </span>Esther es joven y sus ideas son muy actuales,
no le gustan nada las personas que usan el dogma para argumentarlo todo. Marina
trata de suavizar la situación. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">- <i style="mso-bidi-font-style: normal;">Es
bueno tener cerca gente que es lo opuesto a nosotros para tomar situación de
donde estamos. A mí tampoco me gusta su forma de comportarse, pero debemos ser
tolerantes, al fin y al cabo, la equivocación es patrimonio universal. - </i>La
joven toma nota de la sabiduría de su jefa y esboza una leve sonrisa. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">Marina es la directora de gestión de la
empresa, cincuenta años y un carácter sereno y juicioso, ejerce una autoridad
formal sobre el grupo de trabajo a la par que ejecutiva. Respetada por todos
por sus formas de buen hacer. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">Cierto día al salir del trabajo Marian y
Laura coinciden en el aparcamiento. Marian saluda con un hola fresco y afable.
Laura la mira con frialdad y responde por compromiso.<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>Entran en sus respectivos vehículos y antes
de partir Marian abre la ventana derecha del automóvil y hace señas a Laura
para que ella abra su ventana.<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>– <i style="mso-bidi-font-style: normal;"><span style="mso-spacerun: yes;"> </span>Parece que la resaca no se te haya pasado.
Deberías tomar algo.- </i>Sin esperar respuesta arranca en dirección a su
domicilio. Laura se queda vacilante y petrificada. No esperaba semejante
comentario de su jefa. Se da cuenta que tiene razón, en realidad, es ella la
que está llevando mal todo el asunto y debiera ponerle solución. El problema es
que no sabe resolverlo sin sentirse incómoda. De alguna forma le faltan argumentos
para saber que es lo que le ocurre y por tanto no sabe que dirección tomar.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";"><o:p> </o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">El cotilleo poco a poco va creciendo hasta
que por fin llega a oídos del gerente Don Fernando. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">- <i style="mso-bidi-font-style: normal;">¿Queeeé?
¿Qué tengo dos bolleras en la empresa en lugar de una y se entienden entre
ellas? No lo pienso permitir. ¿Qué quieren? Ser la ruina del negocio. ¡Que
inmoralidad! ¡Ni hablar! Las pongo de patitas en la calle en cuanto pueda. </i>–<i style="mso-bidi-font-style: normal;"> <o:p></o:p></i></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">Ésta fue la respuesta del impresentable del
gerente, Don Fernando Maqueda, individuo poco recomendable. Es un personaje de
unos cincuenta y tantos años incapaz de convivir consigo mismo en lo personal. Da
la impresión de estar irritado de forma permanente. Su comportamiento como
responsable máximo de la empresa siempre fue, y es, muy déspota. Parte del
personal le tiene miedo por su forma grosera, agresiva y casi siempre maleducada,
de tratar a todo el mundo.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">En realidad, es perro ladrador, hace mucho
ruido solamente, pero hay quien se lo cree, aunque también es capaz de lanzar
una tarascada en situaciones de crispación. Marian, Quique, Laura y Marina,
entre otros, pasan olímpicamente de él, no se asustan con sus gritos y sus
desplantes, le conocen bien. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">En una ocasión le tiró los tejos a Laura,
pero ella no le hizo caso. Después de la primera vino una segunda, hubo una
tercera y más que le siguieron hasta que un día le prometió un goloso regalo y
ella ni corta ni perezosa le contestó que si lo que quería era meterse en la
cama con ella lo tenía imposible. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">- <i style="mso-bidi-font-style: normal;">Vuelve
otra vez con eso y te llevo al juzgado por acoso. - </i>Le respondió sin
miramientos. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">– <i style="mso-bidi-font-style: normal;">Eso
tendrías que demostrarlo. - </i>Contestó el jefe con engreimiento. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">- <i style="mso-bidi-font-style: normal;">¿Tu
qué crees? - </i>Le dijo mirando con dureza a sus ojos. Por un momento duda
antes de seguir hablando. Toma aire y con pasmosa tranquilidad le espeta. – <i style="mso-bidi-font-style: normal;">Aquí no vuelvas si no es con trabajo.
Deberías saber que hay una cámara de seguridad vigilando y el ordenador está
grabando la conversación. – </i>A partir de esa fecha el gerente recogió velas
y se minoraron las propuestas indecentes. Desde ese día Laura no es
precisamente su mejor amiga. Él está vigilante, le hace la vida imposible en
cuanto puede, busca la manera de pillarla en alguna falta que justifique con
que despedirla. Laura es competente y responsable en su trabajo y en ese camino
es difícil que pueda conseguir nada. También, poco tiempo después que comenzara
a trabajar en la empresa, le hizo una proposición indecente a Marian, pero ella
no precisó de ninguna argucia, simplemente le dijo que era lesbiana y que los
hombres le daban asco, especialmente él. Con esta respuesta también se ganó la
“amistad” del gerente. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";"><o:p> </o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">La distancia entre Laura y Marian, a veces
exagerada, es<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>evidente, incluso para los
demás que, sin embargo, no le dan mayor importancia. Marian se muestra más seria
de lo habitual y su natural simpatía parece que la dosifica según la situación
y las personas con las que trata. Quique se preocupa por Marian la nota algo
triste y a veces enfadada, como si estuviera molesta con todos, no quiere
molestarla con preguntas, pero observa desde la distancia a su amiga. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">Esta forma de alejamiento entre las dos
mujeres parece que aumenta con el paso de las semanas, con frecuencia se huyen.
Laura es la que más escapa, cuando la tiene cerca se siente intimidada,
nerviosa en su presencia, su sola aparición sin que insinúe con dirigirle la
palabra, provoca que se cohíba de hacer cualquier comentario.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">A veces, Marian tiene la impresión que le
genera rechazo. Esto le incomoda de forma considerable, no acaba de
comprenderlo y no sabe cómo contrarrestarlo. Laura no le ha dado ninguna
explicación y por la actitud que mantiene parece no estar dispuesta a dársela.
Se contraría cada vez que sucede una escena de esas en la que Laura aparta la
vista de ella, o simplemente se calla en su presencia. Por otra parte, la
recepcionista no puede dejar sentirse perturbada cada vez que Marian aparece en
escena. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">Realmente lo que siente Laura es impotencia
al mirarla, siempre surge en su mente el beso. Profesa una admiración y
atracción hacia ella que la inquieta que la pone tensa cada vez que aparece en
su entorno. Siempre está pensando que es producto de esa aversión que siente
hacia sí misma. La tensión que siente es tal, que un día colocó un calendario
sobre el cristal para impedir que las miradas pudieran cruzarse, lo que no
evita que, a hurtadillas, durante la jornada laboral, ella la observe a
escondidas por una rendija, oculta tras esa pantalla, lo que no impide que en alguna ocasión sus miradas se llegan a cruzar despertando, a escondidas, una ligera sonrisa en el rostro de ambas. Laura sigue con la mirada
cada vez que Marian sale de la pecera al pasillo, en ocasiones está tentada de
acercarse para oler su perfume, pero siempre se reprime.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">Su naturaleza tímida y una experiencia poco
grata le hacen ser desconfiada al extremo y ahí radica la dificultad de Laura para
generar amistad. La historia proviene desde cuando debutó como modelo de moda
con cierto éxito. Su figura es espectacular. Alta, delgada, pelo castaño liso y
largo muy bien cuidado. Sus ojos verdes proyectan una mirada severa, a veces
recia y en ocasiones muy dura cuando algo no le gusta. Durante el tiempo que
trabajó como modelo profesional sufrió, no pocas precisamente, proposiciones de
las llamadas deshonestas. Ofrecimientos que la molestaban mucho. Su carácter
retraído en temas de relaciones personales más allá de la amistad siempre la ha
inquietado. Nunca tuvo interés ni curiosidad en tener relaciones románticas, y
mucho menos sexuales, con nadie. Vivía para su trabajo, lo demás no le
interesaba. A su alrededor giraba mucha trivialidad y superficialidad<i style="mso-bidi-font-style: normal;">. “Ese mundillo del envase.”</i> Decía.
Nunca encontró a nadie que se interesara por ella como persona. En su entorno
rondaban individuos que solo pretendían llevarla a la cama, circunstancia que ella
percibía horrorizada. Es de esas personas que piensan que solamente se
entregará a quien ame, para Laura el sexo no es una trivialidad con la que
jugar.<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>Realmente bella en todo su
conjunto la adulación por su figura, su cara o sus ojos, hacía que veneraran su
cuerpo de forma indolente esperando conseguirlo. Pero ella siempre se mantuvo
firme en sus convicciones hasta el punto de generarse fama de estrecha en el
entorno de la moda. Cansada de tanta tontería y harta de la superficialidad del
medio, se planteó encontrar una salida. Éste empleo en la distribuidora de
medicamentos regional como recepcionista, la satisfizo lo suficiente y es la
ocupación en la que trabaja actualmente. Por su formación y educación, es
persona seria y con criterio, aprovecha de forma notable su adiestramiento en relaciones
públicas. Le pareció maravilloso el empleo, no ganaría tanto dinero como de
modelo, pero estaría cómoda y con tiempo libre para dedicárselo a sí misma, y a
su familia, algo de lo que no disponía en su anterior etapa. No tendría que
exhibir su cuerpo a gentes que no la importaban. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">A las pocas semanas ya se había hecho con
la dinámica de la empresa y comenzó a gestionar su trabajo con eficiencia. Con
lo que no contaba era que el acoso laboral existe en todas partes, para su
desgracia y de otras mujeres. </span></p><p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS"; line-height: 115%;">Algunas mujeres creyéndose heterosexuales viven
con ideales muy altos, alguien con quien compartir las fiestas familiares; una
vida profesional equilibrada, con un matrimonio y dos bellos hijos, o
simplemente salir de juerga para vivir su vida. Eso pensaba, pero ahora, Laura
se da cuenta que le gusta una chica, le han roto el modelo de existencia que
tenía en su cabeza. Ese cambio, al que coloquialmente se le llama ponerlo todo
patas arriba, está relacionado con la aparición de un sentimiento romántico por
Marian, que le plantea dar la vuelta a su mentalidad en la forma de afrontar la
vida y cómo será ésta a partir de este momento. El escenario de su realidad se
ha transformado de forma tan radical que no encuentra referencias en las que
fijar sus emociones y sus pensamientos</span></p><p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span style="font-family: "Comic Sans MS";">Después de besar a Marian en la fiesta de
la empresa, advierte que el rumbo de lo que le está pasando en lo personal, es
algo muy inquietante y desazonador. Le fastidia responderle de esa forma tan
agresiva, cuando en realidad lo que desea es, estar cerca de ella, no
espantarla, tener la posibilidad de besar de nuevo esos labios tan atrayentes.
El miedo atenaza cualquier iniciativa y provoca que viva, de forma constante, a
la defensiva.</span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">Necesita descargar su ansiedad, pero no
tiene con quien compartir este tipo de intimidades, Laura tiene gran dificultad
para generar amistad. No tiene amigas, ni amigos, solo la familia. En realidad,
su mejor amigo es su hermano Paco, él siempre ha sido proclive a ejercer de
confesor, la escucha siempre complacido, quiere a su hermana con locura, le
parece la mejor hermana del mundo, es la única, y hay mucha correlación entre
ambos, sus personalidades son muy similares. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">El tema es complicado. Laura no sabe cómo
plantearlo, espera que la inspiración la ayude en el momento oportuno. El miedo
a un rechazo de su hermano no deja de estar presente en su pensamiento. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">Él tiene cuatro años más que Laura, es un
individuo dinámico y con un cierto aire bohemio en su semblante. Muy
positivista y con una fe inquebrantable en el ser humano. Siempre apuesta por
una actitud creativa en las relaciones personales. Su forma de ver la vida le
hace ser muy respetado por su entorno.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">Un domingo tomando unas copas en un Pub se
quedaron solos apurando las bebidas después que sus amigos se despidieran. Con
un nerviosismo palpable mira con fijeza a su hermano.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">– <i style="mso-bidi-font-style: normal;">¡Paco!
¿Podemos hablar? Necesito consultar una cosa contigo. - <o:p></o:p></i></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><i style="mso-bidi-font-style: normal;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">- ¿Qué ocurre
hermanita? - </span></i><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">Pregunta
un tanto intrigado.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">- <i style="mso-bidi-font-style: normal;">Tengo
un problema… ¿Nos vamos de aquí? - </i>Abren la puerta del local y salen. Laura
se detiene al borde de la acera y toma aire. -<i style="mso-bidi-font-style: normal;"> No quiero que me juzgues. Solo escucha, al final me dices lo que
piensas ¿Vale? - </i>Le expresa con serenidad, aunque por dentro está como un
flan. Cruzan la calle en dirección al aparcamiento en busca del coche.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">- <i style="mso-bidi-font-style: normal;">Te
escucho, soy todo oídos. - </i>Paco muestra actitud receptiva, intrigado por el
misterioso proceder de su hermana. Caminan por la acera rodeados de gente.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">– <i style="mso-bidi-font-style: normal;">¡Bien!
El asunto es el siguiente: Desde que entré a trabajar en esta empresa he
conocido a varias personas realmente majas, honestas y buena gente en general.
Pero desde el principio, una en especial me llamó la atención ya el primer día
y hoy me sigue importando mucho. Encuentro en ella… como alguien inquietante,
no puedo quitarle el ojo de encima. A veces la sigo por las dependencias sin
que se dé cuenta. La veo constantemente a través de la cristalera de su
oficina. Cuando la tengo delante me siento rara, nerviosa, como si me<span style="color: red;"> </span>tocase algo muy adentro. Me mira y la miro y no sé
qué me pasa… es que me encuentro diferente. En fin, que a su lado estoy
encantada…a veces me entusiasma tenerla cerca…- </i>Paco la interrumpe. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">- <i style="mso-bidi-font-style: normal;">¡Estás
enamorada! - </i>Laura se queda sin palabra. Rápidamente reacciona como si nada
hubiese escuchado. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">- <i style="mso-bidi-font-style: normal;">¡Espera!
No he acabado. - </i>Toma aire de nuevo con tranquilidad y retoma el relato. Se
detienen en un paso de peatones, Laura se gira hacia su hermano y le mira de
frente. <i style="mso-bidi-font-style: normal;">- ¡Verás! La noche de la cena de
la empresa nos fuimos a tomar una copa, yo estaba bebida, muy bebida, pero
sabía lo que hacía. Salimos a bailar y entre los vapores del alcohol y la
música romántica nos besamos en medio de la pista. </i>- Mira hacia el cielo
como en súplica.<i style="mso-bidi-font-style: normal;"> - ¡Oh dios! ¡Qué beso!
Nunca sentí nada igual… Desde entonces no duermo pensando en ese dichoso beso.
Total, que no sé qué hacer, estoy hecha un lío. - </i>Paco escucha confiado.
Una sonrisa agradable aparece en su rostro. Siempre deseó que su hermana
encontrara a alguien que le hiciera sentirse así, enamorada. Pasaba el tiempo y
empezaba a perder la esperanza. Caminan al otro lado de la calle.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">– <i style="mso-bidi-font-style: normal;">Hermanita
estás enamorada, y muy enamorada. - </i>Le dice convencido. Laura llena el
pecho de aire en una profunda inspiración y despacito le dice…<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">- <i style="mso-bidi-font-style: normal;">El
problema es que…- </i>Su hermano la interrumpe.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">- <i style="mso-bidi-font-style: normal;">¿Está
casado? – </i>Le espeta<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><i style="mso-bidi-font-style: normal;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">- Esa persona
es… una mujer. - </span></i><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">A
Paco le cambia el gesto. Se le borra la sonrisa, pero no va al desagrado. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">– <i style="mso-bidi-font-style: normal;">Eso
sí, que no me lo esperaba. ¿Es una mujer? ¿En serio? - </i>Le dice un poco
asombrado. Su tono no es agresivo. Laura va confirmando con el gesto de su cara
parada delante del coche y mirando fijamente a Paco.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">- <i style="mso-bidi-font-style: normal;">¡Totalmente!
Entenderás ahora que no sé qué hacer. Llevo semanas dándole vueltas y no lo
entiendo. Nunca me he fijado en las mujeres, bueno en los hombres tampoco
mucho. En fin, estoy hecha un lío que no me deja dormir por las noches. Es como
si ese beso me hubiera despertado un sentimiento que no acabo de entender, y
que me cuesta aceptar. - </i>Hace su exposición y respira. Mira a su hermano
que aún está digiriendo la noticia. Él tiene que direccionar sus pensamientos a
un enfoque diferente. Sobre todo, quiere apoyar a Laura y evitarle cualquier
daño emocional. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">- <i style="mso-bidi-font-style: normal;">Solo
fijándome en tu mirada mientras hablabas, me he percatado y puedo asegurar que
estás muy enamorada de esa persona. No sé cómo es, pero seguro que es alguien
grande, si ha sido capaz de enamorarte. ¿Sabe ella algo de esto? - </i>Pregunta
curioso. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">- <i style="mso-bidi-font-style: normal;">¡No!
No tiene ni idea. Además, desde el día del beso me da mucho corte hablar con
ella. Escapo cuando está presente, no puedo mirarla a los ojos, me da mucha
vergüenza que me mire, pero la sigo con la vista y la observo sin que se dé
cuenta. No puedo soportar más esta situación. No sé cómo salir y me siento
extraña conmigo misma, incómoda en mi propia piel. Nunca he experimentado una
sensación como la que siento por ella. Y es una mujer. ¿Cómo puedo asumir eso?
¿Te das cuenta del conflicto que tengo?- </i>Lleva las circunstancias a la
situación actual. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">- <i style="mso-bidi-font-style: normal;">¡Vamos
a ver Laura! Tú ya has tenido otras relaciones. ¿Por qué piensas que es
diferente? - </i>Laura baja la vista con vergüenza. Después la levanta con
lentitud y mordiéndose el labio inferior para sujetar el nerviosismo. Su mirada
lo dice todo. Paco la mira, inquisitorio, se fija que hay algo que quiere, pero
no lo sabe decir. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">- <i style="mso-bidi-font-style: normal;">¡Ohh!
¡No! ¿Nunca has estado con un tío? – </i>Laura afirma tímidamente con el rostro
sin dejar de morderse el labio. En ese momento quiere que la tierra se la
trague. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">- <i style="mso-bidi-font-style: normal;">¿Y
con una tía? Perdona la pregunta. - </i>Lo dice a modo de disculpa. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><i style="mso-bidi-font-style: normal;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">– ¡Tampoco! No
sé lo que es el sexo. Supongo que te extrañará, pero nunca he sentido esa
necesidad. Pienso que tener relaciones sexuales a la ligera no es sano. - </span></i><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">Ella da sus explicaciones. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">- <i style="mso-bidi-font-style: normal;">¿Así
que eres virgen del todo? ¿Te das cuenta que tienes treinta años? Hoy en día no
es una situación corriente. Y no eres una puritana. - </i>Laura no sabe qué
decir. - <i style="mso-bidi-font-style: normal;">¡Bueno! Eso es un tema
secundario. Lo importante es lo que te preocupa ahora. - </i>Él hace una pausa
para recapacitar. -<i style="mso-bidi-font-style: normal;"> En esto no hay
reglas. El amor es como es, nos embarga sin explicación y lo malo es que no
podemos luchar contra esa fuerza. Creo que debes acercarte de nuevo a esa
persona y esperar el momento de expresar tus sentimientos. Si ella está por
sentir algo por ti, mejor todavía. -<span style="mso-spacerun: yes;"> </span></i>Laura
piensa por un momento. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><i style="mso-bidi-font-style: normal;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">– Lo ves muy
fácil, no estás en mi piel y tampoco estoy segura de que sea eso lo que quiero.
¿Y si ella no quiere nada conmigo? O si me acepta. ¿Cómo me enfrento al miedo
que siento por tener a una mujer como pareja? El sexo en estos momentos me da
pánico, por no decir que luego me etiqueten de bollera. No quiero tener una
doble vida, quiero ser yo misma, como hasta ahora. Todo esto está rompiendo con
mis emociones. Tengo la sensación de haber perdido el rumbo de mi vida. - </span></i><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">Expone sinceramente. En
realidad, Laura no está convencida de que eso sea amor. Por la razón que sea
cree que no es lo natural. Siempre pensó que era heterosexual, es más, ni se
llegó a plantear ninguna otra posibilidad. <i style="mso-bidi-font-style: normal;">-
Es difícil encajar que esté enamorada de una mujer, aunque sea un encanto como
Marian. - </i><o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="background: white; margin-bottom: 0cm;"><span lang="ES-TRAD" style="color: black; font-family: "Comic Sans MS"; mso-color-alt: windowtext;">–
<i style="mso-bidi-font-style: normal;">Escucha Laura. No se trata de saber lo
que quieres hacer con tu vida o con tu trabajo. Esto es diferente, estás enamorada
de una persona que te ha hecho ese tilín del que hemos hablado algunas veces.
Ha llegado hasta ti sin necesidad de empujar, y eso es lo bonito del amor. Que
una persona entre en tu corazón sin romper la puerta, es lo más grande. Tú
misma lo expresas, solo con su mirada te sientes diferente.</i></span><span lang="ES-TRAD" style="color: black; font-family: "Comic Sans MS"; mso-bidi-font-family: Helvetica; mso-color-alt: windowtext; mso-fareast-font-family: "Times New Roman"; mso-fareast-language: ES-TRAD;"> <i style="mso-bidi-font-style: normal;">Reconoce y acepta tus
sentimientos es todo lo que importa ahora. Si sientes atracción hacia esa mujer
es que eres así. No es necesario que juzgues esa atracción de ninguna forma.
Simplemente acéptala. </i></span><i><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">No te
eches atrás por un tonto prejuicio. Igual en el futuro te arrepientes de haber
perdido la oportunidad de encontrar el amor de tu vida. </span></i><i><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">¿No esperabas por
la relación más bella del mundo? ¿Y si es ella la indicada? </span></i><i><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">- </span></i><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">Una
frase lapidaria que cierra la conversación. La respuesta le da un empujoncito
en la dirección de sus sentimientos, a la vez que arroja luz sobre el amor y
trata de que aleje esos miedos. Intenta convencerla de que no es importante que
sea hombre o mujer, es una persona que la ha encandilado y que casi tiene más
fuerza que su propia voluntad.</span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">Laura, sin embargo, mantiene sus dudas,
muchas, muchas dudas. De alguna forma la conversación le ha iluminado parte del
camino, pero el resto aún permanece oscuro y le da vértigo el no saber que hay
más adelante. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><i style="mso-bidi-font-style: normal;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">- Enamorada de
una mujer, ni en un millón de años lo hubiese pensado. ¿Qué hacer ahora? Necesito
encontrar esa repuesta que aclare mis ideas y pueda justificar estos
sentimientos. – </span></i><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS";">Con
esta idea, fruto de la charla con su hermano, Laura regresa a casa de sus
padres. Una vez se ha acostado, deja la luz encendida y se pone a leer. A los
cinco minutos el libro está sobre sus rodillas y su mirada en el techo. Su
cabeza no para de dar vueltas, el rostro de Marian aparece en su pensamiento y
no desaparece por mucho que intente olvidarla. Se arropa y apaga la luz,
intenta dormirse, pero imposible. Comienza a dar vueltas en la cama como una
posesa, se levanta, se sienta, trata de leer, no se concentra. Finalmente, el
cansancio termina por hacer su trabajo y se duerme. Por la mañana al
despertarse le suena que algo ha soñado, no recuerda el qué, pero si, que
Marian ha estado ahí.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span style="font-family: "Comic Sans MS"; mso-ansi-language: ES;"><o:p> </o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span style="font-family: "Comic Sans MS"; mso-ansi-language: ES;"><o:p> </o:p></span></p>
<p class="MsoNormal"><span lang="ES-TRAD"><o:p> </o:p></span></p>Francisco Freijaneshttp://www.blogger.com/profile/07136887969142331609noreply@blogger.com1tag:blogger.com,1999:blog-7189587968703271148.post-60658594729861369862021-01-26T13:49:00.000+01:002021-01-26T13:49:53.900+01:002. – Un reencuentro feliz. <p><br /></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span style="font-family: "Comic Sans MS"; mso-ansi-language: ES;">Sentada en el salón de su casa con un tazón de leche
caliente, a la que le ha añadido miel y una copa de ron, está pasando la tarde
del domingo. El vapor caliente que desprende penetra por su graciosilla nariz,
cada vez que se acerca la taza para darle un sorbo. Percibe la sensación de que
se le despeja al paso del vaho humeante. Cuando llegó a casa la noche del
viernes, después de aquel beso maravilloso de Laura, ya estaba congestionada, está
pasando el fin de semana metida en la cama en casa. Recoge el libro que está
leyendo de encima de la mesita y continúa la lectura hasta el siguiente sorbo.
Así va pasando la tarde hasta que suena el timbre de la puerta y se ve obligada
a levantarse para acudir a la llamada desde la escalera. Abre y allí están sus
amigas Carmen y Paloma. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span style="font-family: "Comic Sans MS"; mso-ansi-language: ES;">- <i style="mso-bidi-font-style: normal;">¡Hola! Venimos a
animarte. - </i>Le dicen en plan festivo entrando con una botella de vino y
algo de comida en una bolsa. - <i style="mso-bidi-font-style: normal;">¿Cómo
estás de mal? - </i>Pregunta Paloma mirando la nariz congestionada y los ojos
un poco enrojecidos. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><i style="mso-bidi-font-style: normal;"><span style="font-family: "Comic Sans MS"; mso-ansi-language: ES;">– No
estoy mal, al menos no tengo fiebre que es lo que realmente me tumba. Unos
pocos de mocos nada más.- </span></i><span style="font-family: "Comic Sans MS"; mso-ansi-language: ES;">Habla con la voz tomada y respirando por la boca. –<i style="mso-bidi-font-style: normal;">¡Y vosotras! ¿Cómo sabéis que estoy enferma?
- </i>Pregunta intrigada. <i style="mso-bidi-font-style: normal;"><o:p></o:p></i></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span style="font-family: "Comic Sans MS"; mso-ansi-language: ES;">– <i style="mso-bidi-font-style: normal;">Nos lo ha dicho
un pajarito.- </i>Carmen contesta en tono de guasa mientras abre el paquete de
la comida y lo va disponiendo en una bandeja. – <i style="mso-bidi-font-style: normal;">Así que nos hemos dicho, que había que venir a animarte y traer la
poción mágica para que te repongas. – </i><span style="mso-bidi-font-style: italic;">Le dice mientras le muestra una botella de champan que mete en el
congelador.<o:p></o:p></span></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span style="font-family: "Comic Sans MS"; mso-ansi-language: ES;">Carmen es todo alegría, a Marian le parece que algo más
se trae entre manos. No es muy frecuente verla con la moral tan animada y menos
en un día como éste, no para de llover, afortunadamente el viento ha cesado
pero el cielo está plomizo como cualquier tarde de invierno.<span style="mso-spacerun: yes;"> </span><o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span style="font-family: "Comic Sans MS"; mso-ansi-language: ES;">- <i style="mso-bidi-font-style: normal;">¡A ver! ¿Qué
pasa? Aquí hay algo que no me encaja.- </i>Marian habla con cierto mosqueo,
percibe que el ambiente está alterado pero es incapaz de poder discernir lo que
esté sucediendo. Carmen la mira con los ojos brillando como perlas, Paloma
sonríe y Marian las mira con dudas. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span style="font-family: "Comic Sans MS"; mso-ansi-language: ES;">– <i style="mso-bidi-font-style: normal;">Tenemos que decirte
que te hemos mentido, no hemos venido por tu resfriado. Ni sabíamos que estabas
enferma. Queremos darte una noticia que espero que te alegre.- </i>Dice<i style="mso-bidi-font-style: normal;"> </i>Paloma expresándose con un manojo de
nervios. Carmen toma la palabra de nuevo.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span style="font-family: "Comic Sans MS"; mso-ansi-language: ES;">- <i style="mso-bidi-font-style: normal;">Queremos que seas
la primera en saberlo, eres mi mejor amiga de siempre. Como sabes Paloma es mi
amor y mi compañera. Esta tarde le he propuesto que se case conmigo y ella ha
aceptado. ¡Vamos a casarnos!- </i>Espeta en un gritito de júbilo. Vierte esa
alegría mirando a su amiga de forma interrogante. Marian se queda parada y
sorprendida. Es una noticia inesperada pero feliz. Abraza a Carmen y después
hace lo mismo con Paloma y luego las tres en un solo estrujón. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span style="font-family: "Comic Sans MS"; mso-ansi-language: ES;"><o:p> </o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span style="font-family: "Comic Sans MS"; mso-ansi-language: ES;">-<i style="mso-bidi-font-style: normal;">¡Os felicito! De
veras. Es una gran noticia. Estoy feliz por vosotras, os lo merecéis. Y os voy
a pegar el resfriado.-</i> Les dice entre risas y estornudos.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span style="font-family: "Comic Sans MS"; mso-ansi-language: ES;">Marian comienza a recordar los tiempos en que ella y
Carmen se escondían de las miradas curiosas de las gentes del pueblo. Se
descubrieron en la adolescencia la una a la otra en un espontáneo beso de
amantes, jugando a descubrir cómo eran esos besos. Al cerrar los ojos querían
soñar que les besaba un príncipe azul, de esos de las novelas.<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>Pero el beso les gustó de una manera
inesperada. Sin pretenderlo se habían dado un beso lésbico. No soñaban con esa
figura regia, se vieron la una a la otra, fue un impacto. Ambas se miraron como
si se hubieran visto un mundo nuevo.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span style="font-family: "Comic Sans MS"; mso-ansi-language: ES;">Durante la cena Carmen y Paloma le van contando sus
proyectos para el enlace.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span style="font-family: "Comic Sans MS"; mso-ansi-language: ES;">- <i style="mso-bidi-font-style: normal;">¡Bueno! Pero
¿Habéis puesto fecha a la boda? - </i>Pregunta Marian algo confusa. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span style="font-family: "Comic Sans MS"; mso-ansi-language: ES;">– <i style="mso-bidi-font-style: normal;">No una fecha
concreta. Queremos hacerlo en la primavera. Solo que…- <o:p></o:p></i></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span style="font-family: "Comic Sans MS"; mso-ansi-language: ES;">Paloma se detiene y mira con interrogación a Carmen.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span style="font-family: "Comic Sans MS"; mso-ansi-language: ES;">– <i style="mso-bidi-font-style: normal;">Verás, es que
quisiera hacerlo saber... Debería hablar con mi familia. No sé lo que
responderán y eso nos tiene algo preocupadas. Ya sabes cómo son nuestros
padres. No les va mucho este rollo de la homosexualidad y preveo que la
respuesta puede no ser muy agradable.- </i>Carmen expone sus dudas y Marian la
escucha con actitud serena. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span style="font-family: "Comic Sans MS"; mso-ansi-language: ES;">- <i style="mso-bidi-font-style: normal;">¡No te preocupes!
Sea como sea lo vas hacer bien. No tengas miedo, ya nos hicieron bastante daño
hace diez años. No creo que ahora puedan hacernos más. Estamos fuera, tenemos
nuestras vidas y no dependemos de ellos. Podemos caminar con la cabeza alta.- </i>Le
narra Marian tratando de tranquilizar su ánimo. –<i style="mso-bidi-font-style: normal;">Va a ser una boda muy bonita. - </i>Poco después Paloma se va al baño, momento
que Marian aprovecha para aclarar sus dudas, salen a la galería para ver
llover. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span style="font-family: "Comic Sans MS"; mso-ansi-language: ES;">- <i style="mso-bidi-font-style: normal;">¿Estás segura? – </i>Marian
pregunta con intención. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span style="font-family: "Comic Sans MS"; mso-ansi-language: ES;">-<i style="mso-bidi-font-style: normal;"> ¿De querer
casarme? ¡Sí! ¿Porqué lo preguntas?- </i>Carmen está intrigada. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span style="font-family: "Comic Sans MS"; mso-ansi-language: ES;">– <i style="mso-bidi-font-style: normal;">Somos amigas
desde niñas y fuimos novias una vez, si aquello fue un noviazgo. Me preocupo
por ti y no quiero verte sufrir. No conozco bien a Paloma y entiende que tenga
dudas. Me dolería mucho que te hiciesen daño.- </i>Marian es sincera y clara.
Aprovecha este instante a solas para poner las cartas boca arriba. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span style="font-family: "Comic Sans MS"; mso-ansi-language: ES;">- <i style="mso-bidi-font-style: normal;">¡Verás! Adoro a
mi novia, no sabes lo que la quiero, es mi relación perfecta. Hay entre las dos
una conexión que no se puede romper.- </i>A Carmen le brillan los ojos hablando
de su novia. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span style="font-family: "Comic Sans MS"; mso-ansi-language: ES;">– <i style="mso-bidi-font-style: normal;">Se que no te
equivocarás, si se lo has pedido es porque estás convencida de que es lo
mejor.-</i> Marian le dice con todo el cariño. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><i style="mso-bidi-font-style: normal;"><span style="font-family: "Comic Sans MS"; mso-ansi-language: ES;">– ¡No
sabes cómo me quiere! Me llena de cariño cada instante del día. Me despierta
con un “buenos días amor mío” y me besa. Si estoy triste o preocupada siempre
encuentra la forma de levantarme. Es detallista en cualquier situación, está
atenta a lo que pueda necesitar sin que yo le pida nada. Es romántica, cariñosa
y muy alegre. Y cuando me mira tierna me derrito en sus brazos. Comprenderás
que sienta una pasión grande por ella. Es el amor de mi vida.- </span></i><span style="font-family: "Comic Sans MS"; mso-ansi-language: ES;">Le brillan los ojos
casi hasta el lagrimeo. Marian le seca una lágrima que corre por su mejilla. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><i style="mso-bidi-font-style: normal;"><span style="font-family: "Comic Sans MS"; mso-ansi-language: ES;">– No me digas
nada más. Tu amor es grande. Me haces muy feliz. Ahora solo puedo pensar en ti
como mi mejor amiga, no mi ex.-</span></i><span style="font-family: "Comic Sans MS"; mso-ansi-language: ES;"> Se ríen. Marian está algo decepcionada. En algún rincón
de su conciencia pensaba que volver a reunirse de nuevo con Carmen sería posible
en un futuro, ahora lo ve quimérico. Los recuerdos de su adolescencia
ocultándose juntas en cualquier escondrijo para besarse, le daban esa
esperanza. Hoy está convencida de que en realidad solo fue eso, ese primer amor
con el que descubrió quien era y cual sería parte de su camino en la vida.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span style="font-family: "Comic Sans MS"; mso-ansi-language: ES;">Paloma es aún una desconocida para Marian. Se la presentó
Carmen aquel día que se encontraron en los Cuatro Caminos por casualidad.
Habían pasado diez años en los que habían perdido todo contacto después de los
sucesos que precipitaron su separación.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span style="font-family: "Comic Sans MS"; mso-ansi-language: ES;">Recuerda cuando a su padre alguien, con propósito
malintencionado, le contaron aquella incipiente relación lésbica de las dos
adolescentes. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span style="font-family: "Comic Sans MS"; mso-ansi-language: ES;">Un padre opresor y violento que, desde ese momento la
obligó a trabajar en el comercio propiedad de la familia, la explotaba y la
hacía la vida imposible. Nunca pudo salir fuera del círculo que él le marcó,
colegio, casa y comercio. Pese a las dificultades, ella terminaría sus estudios.
El día que recibió la comunicaron que estaba admitida en la Universidad, fue
para ella una inmensa liberación. Esperaba ese momento con ansiedad, porque,
harta de tanta pelea y disgusto, había decidido abandonar el pueblo y alejarse
donde encontrar algo más de paz y tranquilidad, donde pasar desapercibida y poder
buscarse un futuro mejor.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span style="font-family: "Comic Sans MS"; mso-ansi-language: ES;">Así llegó a Santiago con dieciocho años recién cumplidos.
Una beca y la subvención de su padre para alojamiento, ropa y comida. Después
de todo no se portó mal, Marian siempre ha estado convencida que fue una treta
paterna para mantenerla alejada del pueblo. La Universidad fue el
descubrimiento de la libertad, libertad que nunca había disfrutado en su lugar
de origen ni en ningún lugar que conociese.<span style="mso-spacerun: yes;">
</span><o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span style="font-family: "Comic Sans MS"; mso-ansi-language: ES;">El destino de Carmen fue muy distinto. Encerrada en un
internado también se centró en el estudio y en la esperanza de salir perdonada
y quizás comprendida por sus padres. Eso nunca sucedió, de la misma forma que
regresó al pueblo su padre le entregó todo lo necesario para ir a la
universidad en Salamanca. Allí vivió en una residencia para señoritas durante
los años que estudió medicina. Paloma es una historia mas reciente, ambas son
médicos de familia, aunque trabajan en lugares distintos. Se conocieron en un
simposio sobre enfermedades reumáticas un año y medio atrás, y se enamoraron
casi al instante. Desde hace seis meses viven juntas en un pisito en la Plaza
del Comercio. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span style="font-family: "Comic Sans MS"; mso-ansi-language: ES;"><o:p> </o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span style="font-family: "Comic Sans MS"; mso-ansi-language: ES;">Marian tomaba un refresco después del trabajo con Quique
y Susana, sentados en una terraza. Carmen y Paloma entraron colocándose a
espaldas de Marian que escuchaba atenta la plática de Quique, sin percatarse de
su presencia. De pronto corta la palabra a su amigo elevando discretamente la
voz rebatiendo algo que él había dicho. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><i style="mso-bidi-font-style: normal;"><span style="font-family: "Comic Sans MS"; mso-ansi-language: ES;">– No
estoy de acuerdo, creo que no es así. -</span></i><span style="font-family: "Comic Sans MS"; mso-ansi-language: ES;"> Dijo enfática de repente escucha que alguien
dice su nombre. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="line-height: normal; margin-bottom: 0cm;"><span style="font-family: "Comic Sans MS"; mso-ansi-language: ES;">-<i style="mso-bidi-font-style: normal;">¿Maria Angeles? ¿Eres tú?- </i>Sonó una voz a sus espaldas, una voz
conocida, muy familiar. Se dio la vuelta para ver a su primer amor, el rostro
de Carmen que sonreía con complacencia. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span style="font-family: "Comic Sans MS"; mso-ansi-language: ES;">-<i style="mso-bidi-font-style: normal;">¡Carmen, Carmen
Delgado!- </i>No salía de su asombro. Se abrazaron con efusividad y poderosa
emoción. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span style="font-family: "Comic Sans MS"; mso-ansi-language: ES;">Recuerda que en ese encuentro vio a una Carmen madura, el
cuerpo desarrollado, de joven era muy delgada y casi no tenía pecho ni caderas.
Pero esta Carmen del reencuentro, había crecido lo suficiente para presentar un
físico hermoso y un rostro más bello de lo que ella recordaba. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span style="font-family: "Comic Sans MS"; mso-ansi-language: ES;">Durante semanas no hicieron otra cosa que hablar del
pasado, de cómo les había ido en la Universidad y en el trabajo. Carmen y Paloma
como Médicos de familia, aunque no trabajan en el mismo centro, comparten muchas
experiencias profesionales. Marian les narraba sus estudios de empresariales y
les hizo una descripción de lo que hace en la actualidad. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span style="font-family: "Comic Sans MS"; mso-ansi-language: ES;">Este reencuentro, dio paso a recuperar una relación de
amistad muy entrañable. Paloma, sin embargo ha mantenido un poco de recelo con
la actitud de Carmen con Marian. En algún momento, los celos asomaron a su
mente, se sentía desplazada por ambas cuando hablaban de sus vidas actuales y
pasadas, pero hoy es una mujer feliz por poder casarse con la mujer que ama.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span style="font-family: "Comic Sans MS"; mso-ansi-language: ES;"><o:p> </o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span style="font-family: "Comic Sans MS"; mso-ansi-language: ES;">Desde el interior del salón de la casa de Marian, Paloma
oye la plática de Carmen haciendo una descripción de su amor por ella, guarda
silencio sin hacer ningún ruido. Lo que está escuchando le llena de felicidad,
está por saltar de alegría sobre su novia, pero decide esperar para cuando
estén a solas en su propia casa y llenarla de amor.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span style="font-family: "Comic Sans MS"; mso-ansi-language: ES;">- <i style="mso-bidi-font-style: normal;">¿Y tú qué? Sigues
sin compañía aquí sola. No es bueno que estés así. Deberías buscarte…- </i>Marian
corta en seco la frase. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span style="font-family: "Comic Sans MS"; mso-ansi-language: ES;">- <i style="mso-bidi-font-style: normal;">Cuando encuentre
a alguien que me haga sentir como tú y Paloma lo hacéis. No es fácil hallar una
persona en esas condiciones. Vosotras habéis tenido suerte.-</i> Responde
categórica. Justo en ese momento aparece Paloma en la balconada. Una vez que ha
comprobado que la conversación ha cambiado. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><i style="mso-bidi-font-style: normal;"><span style="font-family: "Comic Sans MS"; mso-ansi-language: ES;">-
Paloma, ¿Tú qué crees? - </span></i><span style="font-family: "Comic Sans MS"; mso-ansi-language: ES;">Se hace la despistada para no dar pistas que ha estado
escuchando toda la conversación. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span style="font-family: "Comic Sans MS"; mso-ansi-language: ES;">- <i style="mso-bidi-font-style: normal;">No sé de que
estáis hablando. - </i>Expresa como disculpa. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><i style="mso-bidi-font-style: normal;"><span style="font-family: "Comic Sans MS"; mso-ansi-language: ES;">- Que no
es bueno vivir solas. - </span></i><span style="font-family: "Comic Sans MS"; mso-ansi-language: ES;">Dice Carmen con énfasis. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span style="font-family: "Comic Sans MS"; mso-ansi-language: ES;">- <i style="mso-bidi-font-style: normal;">Bueno. Eso
depende de la persona y lo que haya elegido. - </i>Expone con honestidad.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span style="font-family: "Comic Sans MS"; mso-ansi-language: ES;">- <i style="mso-bidi-font-style: normal;">Me refiero a que
se vive mejor acompañada</i>. - Le dice su novia<i style="mso-bidi-font-style: normal;">.<span style="mso-spacerun: yes;"> </span></i><o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><i style="mso-bidi-font-style: normal;"><span style="font-family: "Comic Sans MS"; mso-ansi-language: ES;">- Puede
que ella haya elegido vivir así. - </span></i><span style="font-family: "Comic Sans MS"; mso-ansi-language: ES;">Responde Paloma. Marian asiente. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span style="font-family: "Comic Sans MS"; mso-ansi-language: ES;">- <i style="mso-bidi-font-style: normal;">Vivir en soledad
no es tan malo. Yo estoy sola porque quiero y lo deseo. He tenido experiencias
de convivencia, con novias y con inquilinos. Todas fueron un fracaso. Reconozco
que tengo mi carácter y mis rarezas, pero es difícil compaginarse con otras personas
que son distintas a ti, más que distintas, distantes de ti en lo personal,
ideológico, costumbres y manías, por decir algo. Desde que estoy sola tengo paz
y sosiego en mi vida diaria. Por ahora no pido más… ¡Sí! Encontrar una amor
como el vuestro.- </i>Marian respira y se suena la nariz, Carmen y Paloma la
observan con tranquilidad. Su planteamiento les parece coherente y lleno de
razones.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span style="font-family: "Comic Sans MS"; mso-ansi-language: ES;">Después de tomar una copa de champán sentadas en el salón
ambas se marchan, dejando a Marian con sus pensamientos. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span style="font-family: "Comic Sans MS"; mso-ansi-language: ES;">Al entrar por la puerta de su casa, Paloma toma a Carmen
por la cintura y la besa con dulzura y lleva a cabo su meditado plan de hacer
el amor con ella todo lo que a Carmen se le antoje.<i style="mso-bidi-font-style: normal;"> <o:p></o:p></i></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><i style="mso-bidi-font-style: normal;"><span style="font-family: "Comic Sans MS"; mso-ansi-language: ES;"><o:p> </o:p></span></i></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span style="font-family: "Comic Sans MS"; mso-ansi-language: ES;">Por su parte Marian en casa sola reflexiona sobre el
suceso del viernes por la noche, el beso de Laura regresó a su pensamiento
revolviendo todo su ser. Ni el catarro ni la visita le ha hecho olvidar ese
beso apasionado. Marian piensa que esa imponente mujer algo debe ocultar. No
encuentra razonable esa actitud de presumidita, es un contraste muy fuerte que
aquella noche le diese un beso tan entrañable y dulce que la ha dejado
cautivada. Debe haber una explicación para ello y una explicación razonable a la
espantada. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span style="font-family: "Comic Sans MS"; mso-ansi-language: ES;">Con estos pensamientos se va a la cama y duerme con
ellos.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal"><span style="mso-ansi-language: ES;"><o:p> </o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span style="font-family: "Comic Sans MS"; mso-ansi-language: ES;"><o:p> </o:p></span></p>Francisco Freijaneshttp://www.blogger.com/profile/07136887969142331609noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-7189587968703271148.post-8513376506145592132021-01-17T20:27:00.001+01:002021-01-17T20:28:25.152+01:00Te quiero. Pero no a mi lado.<p></p><p class="MsoNormal"><b style="mso-bidi-font-weight: normal;"><span style="font-family: "Comic Sans MS"; font-size: 14pt; line-height: 115%; mso-ansi-language: ES;">1. Un encuentro inesperado<o:p></o:p></span></b></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span style="font-family: "Comic Sans MS"; mso-ansi-language: ES;">Marian toma asiento en su mesa de trabajo. Son las siete
de la mañana, ha llegado a su trabajo una hora antes de la obligada. Lleva en
la mano una taza de café que se ha preparado en la sala del desayuno de la empresa.
Aturdida por la falta de sueño, el temporal que ha sacudido la ciudad durante
la noche no la ha permitido dormir, su aspecto es somnoliento y se frota la
cara con viveza para espabilarse. El jaleo nocturno impidió que hiciera un
descanso reparador. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span style="font-family: "Comic Sans MS"; mso-ansi-language: ES;">A sorbos va apurando la ardiente bebida esperando entrar
en calor y que alguien más, también afectado por la tormenta, asome por la
puerta, para alejarse de esta soledad que estima, entre mesas y papeles, con
cierta aprensión.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span style="font-family: "Comic Sans MS"; mso-ansi-language: ES;">La recepcionista aparece escasos minutos después, llega
con cara de pocos amigos. En el rostro luce las secuelas de una mala noche. No
haber dormido de forma satisfactoria le deja ha dejado en estado letárgico y camina
un tanto dubitativa. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span style="font-family: "Comic Sans MS"; mso-ansi-language: ES;">- <i style="mso-bidi-font-style: normal;">¡Buenos días!- </i>Saluda
Marian con cierta sorna. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span style="font-family: "Comic Sans MS"; mso-ansi-language: ES;">- <i style="mso-bidi-font-style: normal;">¿Seguro? ¿Tú
crees que estos son buenos días?- </i>Le responde<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>en tono de enfado manifiesto. A la legua se
ve que la falta de sueño le sienta mal. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><i style="mso-bidi-font-style: normal;"><span style="font-family: "Comic Sans MS"; mso-ansi-language: ES;">-
¡Venga! No te enfades, todos estamos igual. Yo tampoco he dormido. De madrugada
se abrió el ventanal de la balconada de mi casa y me puse como una sopa al
cerrarla.- </span></i><span style="font-family: "Comic Sans MS"; mso-ansi-language: ES;">Noche desagradable la vivida en La Coruña, viento, lluvia y mucho ruido.
Las ramas de los árboles golpeándose entre sí, los cubos de la basura viajando
por las calles empujados por el viento tropezaban con estruendo contra coches y
fachadas, el zumbido del aire y sobre todo el aguacero crearon un ambiente de
lo más molesto a toda la vecindad. El ventanal de la balconada en la casa donde
vive Marian, debió cerrarlo de forma defectuosa y se abrió de forma brusca
empujado por el viento. Se levantó rápida al oír el golpe de las contras. Al
entrar en la galería intenta, con no poca dificultad, cerrarlo. La lluvia la empapaba
de arriba abajo mientras no conseguía bloquear el ventanal. Después de la
maniobra debió cambiarse toda la ropa, el pijama completamente mojado, el agua
la había calado hasta la ropa interior. Mientras se secaba con la toalla de la
ducha, en el espejo contempla como se aparecían unas incipientes ojeras, que
aún están presentes en su rostro. No ha dormido casi nada. Y todavía tenía
ganas de hacer bromas. <i style="mso-bidi-font-style: normal;">- “¡Que buena que
estoy!”-</i> Expresó jocosa al contemplarse desnuda delante del espejo. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span style="font-family: "Comic Sans MS"; mso-ansi-language: ES;">Al hacer ese comentario mostrando una mueca de payasa,
Laura se ríe con ganas, el tono desenfadado de Marian hace que se relaje. Ella
le cuenta que los bomberos estuvieron delante de la ventana de su dormitorio
cortando las ramas de un árbol, que se había caído sobre la calle a media
noche. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><i style="mso-bidi-font-style: normal;"><span style="font-family: "Comic Sans MS"; mso-ansi-language: ES;">- La
sierra mecánica esa, hacía un ruido espantoso</span></i><span style="font-family: "Comic Sans MS"; mso-ansi-language: ES;">. <i style="mso-bidi-font-style: normal;">Menos
mal que no cayó en el jardín de casa. Así que estoy hecha polvo. Habrá que irse
pronto esta tarde a dormir una siesta, si queremos recuperar sueño, quiero estar
espabilada para la cena de mañana. - </i>Le cuenta a Marian. La conversación
relaja a Laura, el tono de enojo inicial casi se ha esfumado.<i style="mso-bidi-font-style: normal;"> – Me preparo un café y vuelvo a mi sitio. -
</i>Le dice dándose la vuelta y entra en la sala del desayuno. Al poco rato
aparece de nuevo con una taza humeante en la mano y se dirige al mostrador en
el que tiene su puesto en la entrada. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><i style="mso-bidi-font-style: normal;"><span style="font-family: "Comic Sans MS"; mso-ansi-language: ES;"><o:p> </o:p></span></i></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span style="font-family: "Comic Sans MS"; mso-ansi-language: ES;">Marian observa cómo la recepcionista se encamina a su
mesa, que casi es un mostrador, en la entrada principal. A través de la
cristalera puede verla a diario desde su asiento. De la misma forma contempla,
a través de la cristalera, como avanza su figura mientras camina por el pasillo
que rodea el despacho, la pecera la llama ella. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span style="font-family: "Comic Sans MS"; mso-ansi-language: ES;">Con frecuencia expresan una media sonrisa cuando cruzan
las miradas de forma casual. Marian observa reposadamente el paso de esa estampa
de alta costura de Laura. Semblante que no ha perdido de sus años de modelo
profesional. Por un momento piensa que si estuviera a su alcance no la dejaría
escapar, que sería fácil enamorarse de ella. Le cae bien, su trato personal en
el trabajo es agradable. Sin embargo, no la acaba de ver en una relación con
otra mujer, hay demasiada feminidad en ese cuerpo.<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>Lo que realmente le molesta, es que no hace
otra cosa más que alardear de lo ligona que es, que trae a los chicos de
cabeza. Esa forma de presumir pone los nervios de Marian en tensión, cuando
está con esa actitud, piensa de ella, que es una fanfarrona estirada.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span style="font-family: "Comic Sans MS"; mso-ansi-language: ES;">Marian nunca ha ocultado su sexualidad en los entornos
que se ha manejado, tanto laboral como personal. Para ella es un principio
básico, no tiene que disimular ante nadie, ni esconderse en si misma por algo
que a ella le parece del todo natural. Es como es, porque ha nacido así y no
puede cambiar. Siente atracción por las mujeres, los hombres existen para ella
solo en el campo laboral y de la amistad, no están en su ámbito de relación
sentimental. Hace tiempo que decidió que aparentar lo que no se es, es fingir
una falsa personalidad. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span style="font-family: "Comic Sans MS"; mso-ansi-language: ES;">El trabajo como coordinadora en una empresa de
distribución farmacéutica le permite ganarse la vida. Considera que es
importante tener un trabajo solvente para tener independencia económica. Pero
la ocupación laboral no ocupa un lugar primordial en su vida, solo es importante.
Ella es concienzuda, constante, muy inteligente y dedicada a su función al cien
por cien. Cuando termina la jornada olvida todo lo relacionado con los pedidos,
el almacén y la coordinación para dedicarse a algo más primordial, su vida como
persona, evita que las responsabilidades profesionales incidan en su intimidad.
Licenciada en empresariales con mención especial en la Universidad de
Compostela. Cuatro años atrás, recaló en A Coruña recién titulada y dispuesta a
enfrentarse al mundo con sus cualidades, habilidades y todas sus armas
personales.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span style="font-family: "Comic Sans MS"; mso-ansi-language: ES;">Es una solitaria pertinaz, lo que no excluye que se
relacione satisfactoriamente en sus círculos de trabajo y amistades, eso sí,
muy pocas y que ella percibe sólidas. A veces ha compartido vivienda con
resultados poco amables. Prefiere la soledad, su soledad. Entiende que quien
deba acompañarla en la vida ha de ser alguien que merezca la pena. A los
veintiocho años ya se ha vuelto muy selectiva y exigente con el tipo de
personas con quien relacionarse.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span style="font-family: "Comic Sans MS"; mso-ansi-language: ES;">No oculta su condición sexual, aunque en su porte y
apariencia nadie sospecharía su homosexualidad, ella viste, peina y maquilla
como cualquier mujer, le gusta estar guapa, que lo es sin artificios. El
maquillaje, discreto, realza sus ojos negros y grandes por encima de su pequeña
nariz.<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>Su boca chica explota cuando
sonríe y sobre todo destaca su pelo rojizo natural en una melena larga y poblada.
Al mirarla cualquiera se queda prendado de la sensación de inocencia que
transmite.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span style="font-family: "Comic Sans MS"; mso-ansi-language: ES;"><o:p> </o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span style="font-family: "Comic Sans MS"; mso-ansi-language: ES;">La jornada de trabajo se desarrolla con bastante
normalidad. Laura atendiendo el teléfono, el fax y correos electrónicos en la
recepción con su natural simpatía, de vez en cuando entra en la pecera con una
sonrisa para entregar a Marian papeles que ella va despachando. Quique, el
encargado del almacén y por lo tanto responsable de ejecutar todas las tareas
que ella programa, es quien más frecuenta la pecera, es además un buen amigo.
Entre ellos hay una buena relación, eso hace que el trabajo funcione como un
reloj. Se acerca a ella con unos papeles arrugados en la mano y se los entrega.
Amigos personales al margen de la empresa no permiten que su amistad sea un
obstáculo o una ventaja en el trabajo. Marian le muestra con la mano otros
papeles similares, pero impolutos, que los que tiene sobre la mesa.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span style="font-family: "Comic Sans MS"; mso-ansi-language: ES;">- <i style="mso-bidi-font-style: normal;">Ya los puedes
enviar, Manolín está tomando café ahora, si te das prisa lo pillas en la sala
del desayuno. -</i> Le comenta con evidentes signos de cansancio. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span style="font-family: "Comic Sans MS"; mso-ansi-language: ES;">Han llegado las cuatro de la tarde y los efectos de la
noche anterior comienzan a ser manifiestos en casi todos. La hora de la siesta,
sin siesta, se hace eterna. Los bostezos son frecuentes y por el efecto
contagio, se multiplican. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span style="font-family: "Comic Sans MS"; mso-ansi-language: ES;">- <i style="mso-bidi-font-style: normal;">¿Vaaaaleee?-<span style="mso-spacerun: yes;"> </span></i>Marian responde con una apertura de boca,
llegando casi al espiro. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span style="font-family: "Comic Sans MS"; mso-ansi-language: ES;">- <i style="mso-bidi-font-style: normal;">¡Tampoco has
dormido! Por lo que veo.- </i>Le dice Quique antes de salir.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span style="font-family: "Comic Sans MS"; mso-ansi-language: ES;">- <i style="mso-bidi-font-style: normal;">Y además creo que
me estoy constipando. Anoche me caló la lluvia y me debo haber enfriado algo.- </i>Responde
Marian que saca un pañuelo de papel de un paquetito que tiene encima de la mesa
y se suena la nariz,<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>la maniobra hace
que se le enrojezca<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>discretamente. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span style="font-family: "Comic Sans MS"; mso-ansi-language: ES;">– <i style="mso-bidi-font-style: normal;">Pues cuídate, ya
sabes, leche calentita con miel y a la cama.-</i><span style="mso-spacerun: yes;"> </span>Le responde su amigo con un consejo de salud
y se va. Detrás del encargado aparece Laura en la puerta en ese instante, que
pone cara de susto al oír el comentario de Quique.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span style="font-family: "Comic Sans MS"; mso-ansi-language: ES;">- <i style="mso-bidi-font-style: normal;">¿Qué te pasa? He
oído a Quique decir que te cuides. ¿No irás a ponerte enferma ahora? Que aquí,
si no estás, esto es un caos.- </i>Pregunta interesada y le entrega una carpeta
llena de papeles.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span style="font-family: "Comic Sans MS"; mso-ansi-language: ES;">– <i style="mso-bidi-font-style: normal;">Tranquila que si
hay algo solo será un pequeño resfriado y nada más, gracias por tu interés.- </i>Le
contesta con honestidad, aliviando su preocupación. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span style="font-family: "Comic Sans MS"; mso-ansi-language: ES;">- <i style="mso-bidi-font-style: normal;">Te recuerdo que
mañana tenemos cena de empresa y no puedes faltar.- </i>Le apunta Laura
queriendo ser positiva. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span style="font-family: "Comic Sans MS"; mso-ansi-language: ES;">– <i style="mso-bidi-font-style: normal;">No me olvido, ya
sabes que a las juergas voy aunque sea arrastrando.- </i>Baja el tono de voz.-<i style="mso-bidi-font-style: normal;"> ¡Por cierto! Ahora que se ha ido.<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>¿Ya tienes lo del regalo preparado?- </i>Quique
ha cumplido treinta y ocho años hace unos días. Han hecho una colecta entre los
compañeros para hacerle un presente durante la cena de la empresa. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span style="font-family: "Comic Sans MS"; mso-ansi-language: ES;">– <i style="mso-bidi-font-style: normal;">Preparado y
empaquetado, con su lacito y todo. La tarjeta firmada por todos la he metido
dentro del paquete. ¡Menuda sorpresa se va a llevar! – </i>Informa en un tono
algo empalagoso. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span style="font-family: "Comic Sans MS"; mso-ansi-language: ES;">- <i style="mso-bidi-font-style: normal;">¡Bien! Lo has
hecho muy bien. Le va a gustar seguro.- </i>Responde Marian con una sonrisa,
Laura se la devuelve y se despide. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span style="font-family: "Comic Sans MS"; mso-ansi-language: ES;">- <i style="mso-bidi-font-style: normal;">¡Hasta mañana
pues! No faltes.-</i> Le dice con inusitado interés. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span style="font-family: "Comic Sans MS"; mso-ansi-language: ES;">– <i style="mso-bidi-font-style: normal;">No te preocupes,
no lo haré.-</i> A Marian le llama la atención el entusiasmo de Laura, no se
explica la razón por la que, cuando está cerca, percibe un aura de cierto
agrado en su expresión. “<i style="mso-bidi-font-style: normal;">Serán
apreciaciones mías, o que me gusta y lo veo así”</i> Piensa por un momento. De
inmediato rechaza todo pensamiento por improbable o que en ese momento está
alucinando.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span style="font-family: "Comic Sans MS"; mso-ansi-language: ES;"><o:p> </o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span style="font-family: "Comic Sans MS"; mso-ansi-language: ES;">La cena del viernes por la noche resulta como se
esperaba, alegre y divertida. A los postres Laura, con su peculiar gracejo y
simpatía, le entrega a Quique un paquete envuelto con un lazo y una etiqueta en
la que se puede leer “Felicidades”.<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>Abre
el regalo y muestra una sonrisa infantil al ver la colección completa de la
discografía de ABBA, el grupo sueco de los años ochenta. Una pasión de chaval
que Quique nunca ha ocultado.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span style="font-family: "Comic Sans MS"; mso-ansi-language: ES;">Después de la cena comienza la diáspora, los más jóvenes,
es decir, casi todos, Todos los demás se dirigen a un bar de copas de un
familiar de Susana, esposa de Quique. Dónde había reservado un espacio libre
para ellos. La plantilla casi al completo invade el lugar entre risas y bromas.
Después de la primera copa Adela, la señorita bien y muy provinciana, se
ausenta aludiendo que su marido está solo y ella se encuentra muy cansada. A
nadie le extraña que lo haga, la administrativa es conocida como la estrecha de
la empresa y parece no encontrarse a gusto en estos ambientes. Casi todos
piensan que no sabe divertirse. Entre los compañeros masculinos se opina que
debe estar estreñida de forma permanente o que su marido no sabe satisfacerla
con éxito. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span style="font-family: "Comic Sans MS"; mso-ansi-language: ES;">Marian sigue con ese picorcillo en la nariz que la hace
estornudar de vez en cuando, Laura ha bebido algo más de la cuenta y se
encuentra en un estado de euforia mantenida y más extrovertida de lo habitual.
La juerga continúa entre risas y chanzas. De vez en cuando Quique y Manolín
sacan a bailar a las chicas a relevos.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span style="font-family: "Comic Sans MS"; mso-ansi-language: ES;">El ambiente se va caldeando conforme avanza la noche, aún
no es muy tarde y algunos compañeros también se van marchando después de la
primera copa, los que se quedan intentan divertirse todo lo que pueden. Laura
saluda a unos amigos que acaban de entrar en el bar. Marian mira con
displicencia como despliega toda su simpatía. </span><span style="font-family: "Comic Sans MS";">Se abraza con uno de ellos para despedirse y regresa al
grupo de la empresa.</span></p><p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span style="font-family: "Comic Sans MS";">- </span><i style="font-family: "Comic Sans MS";">¿Alguno de tus
ligues?- </i><span style="font-family: "Comic Sans MS";">Pregunta Marian con ironía.</span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span style="font-family: "Comic Sans MS"; mso-ansi-language: ES;">– ¿<i style="mso-bidi-font-style: normal;">Lo dices por el
que he abrazado?- </i>Inquisitoria. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span style="font-family: "Comic Sans MS"; mso-ansi-language: ES;">– <i style="mso-bidi-font-style: normal;">Te he visto
hacerlo con euforia y he pensado…-</i> Laura le corta.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span style="font-family: "Comic Sans MS"; mso-ansi-language: ES;">-<i style="mso-bidi-font-style: normal;"> Es mi hermano
Paco con sus amigos.- </i>Marian se pone roja de vergüenza, sonrojo que no se
aprecia por el efecto de las pocas luces del local. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span style="font-family: "Comic Sans MS"; mso-ansi-language: ES;">-<i style="mso-bidi-font-style: normal;">¡Uff! Perdona, no
sabía…- </i>Laura mira su expresión de culpabilidad. Marian no sabe donde
esconderse. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span style="font-family: "Comic Sans MS"; mso-ansi-language: ES;">– <i style="mso-bidi-font-style: normal;">No te preocupes,
cualquiera se puede confundir, ya sabes lo ligona que soy.- </i>Algo le dice a
Marian que esta afirmación de Laura suena poco sincera, no sabe por qué, pero
le da la impresión de ser una cortina de humo. Laura se pide otra copa y se la
traga literalmente. Quique sale a bailar con Susana y Manolín coge a Esther, la
otra administrativa, de la mano para hacer lo propio. Se quedan ellas dos solas
sentadas en la rinconera. Marian contempla a los que están bailando sin decir
ni una palabra. Laura vuelve la vista hacia su compañera y aprovecha para
preguntar algo que desde que la conoce ha llamado su atención. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span style="font-family: "Comic Sans MS"; mso-ansi-language: ES;">- <i style="mso-bidi-font-style: normal;">¡Marian! ¿Te
puedo preguntar algo personal?-</i> Marian la mira algo intrigada. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span style="font-family: "Comic Sans MS"; mso-ansi-language: ES;">- <i style="mso-bidi-font-style: normal;">¡Sí! Por
supuesto. ¡Qué quieres saber!- </i>Laura se muerde el labio inferior dudando. -
<i style="mso-bidi-font-style: normal;">¿Desde…? ¿Cuándo… supiste que eras…
les…?- </i>No es capaz de acabar la pregunta, se muere de vergüenza. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span style="font-family: "Comic Sans MS"; mso-ansi-language: ES;">- <i style="mso-bidi-font-style: normal;">¿Homosexual?- </i>Le
corta Marian.<i style="mso-bidi-font-style: normal;"> </i><span style="mso-spacerun: yes;"> </span>Laura toma aire antes de responder. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><i style="mso-bidi-font-style: normal;"><span style="font-family: "Comic Sans MS"; mso-ansi-language: ES;">- ¡Sí!
Quiero decir…<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>¿Cómo sabes que te gustan
las mujeres?- </span></i><span style="font-family: "Comic Sans MS"; mso-ansi-language: ES;">Ya se atreve con algo más. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span style="font-family: "Comic Sans MS"; mso-ansi-language: ES;">- <i style="mso-bidi-font-style: normal;">¡Verás! Es fácil
de explicar. Siempre me siento mejor en compañía de una mujer. Los hombres no
me atraen. A ti por ejemplo te atraen los hombres como a mí las mujeres.- </i>Responde
con convencimiento. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><i style="mso-bidi-font-style: normal;"><span style="font-family: "Comic Sans MS"; mso-ansi-language: ES;">-¡Ya! Y…
¿Te acuestas con mujeres? - </span></i><span style="font-family: "Comic Sans MS"; mso-ansi-language: ES;">Se lanza sin pensar.- <i style="mso-bidi-font-style: normal;"><span style="mso-spacerun: yes;"> </span>Perdona la pregunta, si estoy siendo
indiscreta no tienes que responderme, no es curiosidad morbosa. Es que no sé
nada de eso.- <o:p></o:p></i></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><i style="mso-bidi-font-style: normal;"><span style="font-family: "Comic Sans MS"; mso-ansi-language: ES;">- Y
sientes curiosidad. Si no es morbosa ¿Qué tipo de curiosidad es la que tienes? </span></i><span style="font-family: "Comic Sans MS"; mso-ansi-language: ES;">Marian profundiza para
conocer mejor el interés de Laura. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><i style="mso-bidi-font-style: normal;"><span style="font-family: "Comic Sans MS"; mso-ansi-language: ES;">– La
verdad es que no sabría explicarlo, solo curiosidad. ¿Por qué? <o:p></o:p></span></i></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><i style="mso-bidi-font-style: normal;"><span style="font-family: "Comic Sans MS"; mso-ansi-language: ES;">– Nada
especial. Solo que estoy habituada y harta de que la gente pregunte cosas
impertinentes a veces insultantes y en ocasiones muy, muy desagradables. Si tu
intención va por esos derroteros no pienso darte ninguna explicación. ¿Me
comprendes? -<o:p></o:p></span></i></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span style="font-family: "Comic Sans MS"; mso-ansi-language: ES;">Laura se siente avergonzada. Se le enrojecen algo las
mejillas, no esperaba una respuesta tan contundente. Vuelve a por otra copa que
bebe de un golpe en la misma barra. En los temas sensibles como la
heterosexualidad u homosexualidad muestra un cierto puritanismo y timidez
palpables, es algo que siempre le ha creado innegable inquietud y aprensión sin
saber la causa. Tiene una cierta sensación de culpabilidad y vergüenza
mezcladas, pero eso no la desanima, el tono que la bebida proporciona, genera
en su mente cierta valentía, serena nunca sería tan osada y regresa al lugar
donde permanece sentada Marian con la mirada impasible y se coloca a su lado<i style="mso-bidi-font-style: normal;">. <span style="mso-spacerun: yes;"> </span><o:p></o:p></i></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><i style="mso-bidi-font-style: normal;"><span style="font-family: "Comic Sans MS"; mso-ansi-language: ES;">– ¿Ya
has ocultado tu vergüenza debajo de la bebida?-</span></i><span style="font-family: "Comic Sans MS"; mso-ansi-language: ES;"> Marian siente cierto
resquemor hacia ella, tiene la sensación de que algo oculta y está a la
defensiva. Laura mira con extrañeza a Marian, que está contemplando a los que
están bailando. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span style="font-family: "Comic Sans MS"; mso-ansi-language: ES;">- <i style="mso-bidi-font-style: normal;">¡Si! ¡No!
Perdona, no quería molestarte ni ofenderte. Siento curiosidad, me caes bien y
pensé que sería una forma de acercarme a ti. Hace tiempo que pienso que
podíamos ser buenas amigas.- </i>Marian la mira con cierto pasmo dibujado en su
rostro. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span style="font-family: "Comic Sans MS"; mso-ansi-language: ES;">- <i style="mso-bidi-font-style: normal;">¿Por qué crees
que seriamos buenas amigas? ¿Te atraigo de alguna manera o estás tan borracha
que no sabes que decir?- </i>Marian muestra su lado más duro. En las
situaciones que alguien se interesó de forma morbosa por su sexualidad, ha
terminado por construir un muro defensivo, y en éstas conversaciones muestra
una actitud agresiva defensiva y levantando todas las protecciones para resguardar
su intimidad. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span style="font-family: "Comic Sans MS"; mso-ansi-language: ES;">- <i style="mso-bidi-font-style: normal;">¡Me lo merezco!
He sido poco prudente. ¡Discúlpame! No pretendía herir tu sensibilidad. Solo
era curiosidad sin malicia. ¡Lo siento! –</i> Aspira aire con profundidad
mirando hacia otro lado. -<i style="mso-bidi-font-style: normal;"> Para
compensarte ¿Te puedo pedir una cosa? - </i>Marian la mira con desconfianza. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span style="font-family: "Comic Sans MS"; mso-ansi-language: ES;">- <i style="mso-bidi-font-style: normal;">¡Tú dirás!-<o:p></o:p></i></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span style="font-family: "Comic Sans MS"; mso-ansi-language: ES;">- <i style="mso-bidi-font-style: normal;">¿Bailas conmigo?-</i>
Le propone, sorprendiendo a Marian que abre los ojos como platos al tiempo que
va girando la mirada hacia ella. No sabe que responder, la petición la ha
dejado parada. <i style="mso-bidi-font-style: normal;"><span style="mso-spacerun: yes;"> </span>- ¿No quieres? - </i>Laura espera con la calma
que le proporciona el alcohol que ya ha consumido, cree que bailar con ella
disipará las dudas de Marian sobre sus intenciones. Su forma de hablar es
ligeramente balbuceante y Marian aún no es capaz de discernir si es ella o los
efluvios de la bebida. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><i style="mso-bidi-font-style: normal;"><span style="font-family: "Comic Sans MS"; mso-ansi-language: ES;">- ¡Está
bien! Vamos a bailar. -</span></i><span style="font-family: "Comic Sans MS"; mso-ansi-language: ES;"> Le dice en tono asertivo, nada afable pero tampoco de
rechazo. Se dirigen a la pista, la música es lenta y atrayente, se abrazan.
Espontáneamente se acoplan de forma natural. Laura, algo más alta, apoya sus
manos y brazos sobre los hombros de Marian que, a su vez, coge a Laura por la
cintura. El ritmo de la música es pausado, lento, a veces casi parado, la
melodía es envolvente, ambas están muy cerca, corre el aire entre ellas, no hay
otro contacto que el de sus manos, pero poco a poco Marian percibe que se van
arrimando con delicadeza. Siente el calor del cuerpo de Laura cerca de su pecho
y luego su aliento cerca del oído despertando en ella una reacción ardiente.
Cierra los ojos, aunque no quiere soñar. A cada momento Laura está más y más
próxima hasta llegar al contacto físico de sus cuerpos frente a frente. El
ardor sube en intensidad hasta que siente que Laura le pasa un brazo por detrás
del hombro hacia su espalda. Con la otra mano toma la de ella de su cintura y
las sube ambas engarzadas la altura del pecho. Marian mira con desconcierto la
maniobra de Laura y levanta la vista hacia ella, aprecia una sonrisa en su
expresión y comienza a sentirse confundida. De pronto nota que su mano está
siendo acariciada con suavidad por los dedos de Laura, ella los devuelve, mientras
le envía una mirada agradable. Los dedos se aprietan entre si y el ritmo lento
hace que el acaloramiento crezca. Marian cierra los ojos de nuevo y apoya su
rostro sobre las manos enlazadas. Laura también siente un calor en su interior
y, sin mediar palabra, acerca su rostro al de Marian y sorpresivamente la besa
en los labios. Primero con suavidad para después hurgar con delicadeza en la
boca de Marian. Ella la recibe permitiendo que penetre provocando un apasionado
beso que se prolonga durante un par de minutos, ambas paradas en el centro de
la pista, son foco de atención. A Marian le parece eterno y encantador el
momento. Compañeros y amigos observan estupefactos la escena.</span></p><p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span style="font-family: "Comic Sans MS"; mso-ansi-language: ES;">Laura separa sus labios de los de Marian con brusquedad, la mira con violencia, se aparta, da media vuelta y se aleja. Recoge sus cosas y sale del local rápidamente. Corre por la calle con gesto dolorido. Alguna lágrima salta de sus ojos confundiéndose con la lluvia que cae, fina pero insistente. Bajo una marquesina se detiene, necesita abrigarse y recapacitar. Comienza a llorar como una niña a la que le han robado la mejor de sus muñecas. Durante un rato permanece en aquel lugar con el llanto por compañía. Su mente es un revoltijo, acaba de hacer algo impulsivo, algo que le pedía su alma y que le gustado de sobremanera, sin embargo no entiende porque lo ha hecho. <i>"Esto no es natural"</i> Se dice en un pensamiento de rechazo a si misma. <i>" Siempre creyendo que era una chica normal y ahora esto. Ella me gusta y me atrae, no sé por qué. En medio de la fiesta y medio bebida, va y sucede, la besé con pasión y además me he dado cuenta que hay algo más aquí dentro"</i> Señala su pecho con la mano derecha apuntando al corazón. Un beso romántico que resultó un tanto precipitado, pero hecho con plenitud, ha resultado ser el despertador de algo que siempre he soñado que sucediera, la aparición de un sentimiento de pasión por alguien que encandilara mi alma. <i>"Y resulta que es una mujer" </i>Se dice sollozando con lamento. Rememora su imagen en su cabeza, ese cabello rojizo, sus labios rosas... de repente nota que su corazón late a mil por hora, se la agita la respiración, le sudan las manos y no sabe qué hacer. Parece un contrasentido, pero está encantada. <i>"¿Que hago ahora? ¿Me acobardo y salgo huyendo? </i>El miedo y la incertidumbre se instalan en su alma y la conducen a la duda, al cuestionamiento de su propia identidad y comienza a aterrarse por lo sucedido y lo que está sintiendo.</span></p><p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span style="font-family: "Comic Sans MS"; mso-ansi-language: ES;"> D</span><span style="font-family: "Comic Sans MS";">espués de un rato de reflexión, llanto y tratar de serenarse,
para un taxi que la conduce al refugio de su casa y una vez allí se esconde
entre las sábanas de su cama sollozando angustiada.</span></p><p></p><p>
</p><p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span style="font-family: "Comic Sans MS";">Marian se queda en la pista parada y sin saber que ha
ocurrido, cree que ha tenido una alucinación, producto del alcohol, aunque ella
no bebe en demasía, le molestan las resacas y, está segura, que esa noche ha
bebido de forma moderada.</span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span style="font-family: "Comic Sans MS"; mso-ansi-language: ES;">Con paso lento va regresando a casa, la persistente
lluvia no le molesta, le fastidia el no saber qué ha pasado. Ese beso, ese beso
tiene la impresión de estar envenenado, la ha cautivado. Nunca nadie la besó de
esa manera, no por el beso en sí, son las sensaciones que ha percibido, ha sido
algo completamente distinto a toda su experiencia. <i style="mso-bidi-font-style: normal;">“Algo mágico.”</i> No puede quitárselo de la cabeza mientras camina.
Luego, ya en el salón de su casa, o en la cocina preparando una bebida caliente
y más tarde acostada en la cama, el beso no desaparece de su pensamiento. Su
cara es la expresión de quien se siente feliz. Comienza a pensar que es el más
hermoso beso que le han dado nunca, no quiere dormirse y terminar de soñar
despierta con algo tan gratificante. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span style="font-family: "Comic Sans MS"; mso-ansi-language: ES;">Las caricias de su mano resultaron ser el anticipo,
fueron como una muestra de cariño y afecto que desconocía tuviese Laura por
ella, nunca había dado señales de ese aprecio hasta el instante en que la besó.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span style="font-family: "Comic Sans MS"; mso-ansi-language: ES;">Un beso es la palabra de un sentimiento y después de
recibir el de Laura piensa que ella ya ha dicho todo. Una atracción manifiesta
la ha impulsado y ella lo ha recibido entre el embeleso y el enigma. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span style="font-family: "Comic Sans MS"; mso-ansi-language: ES;"><o:p> </o:p></span></p>
<p class="MsoNormal"><span lang="ES-TRAD"><o:p> </o:p></span></p>
<p class="MsoNormal"><span lang="ES-TRAD"><o:p> </o:p></span></p><br /><p></p>Francisco Freijaneshttp://www.blogger.com/profile/07136887969142331609noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-7189587968703271148.post-15409349258282232232021-01-17T19:36:00.005+01:002021-01-17T19:36:45.617+01:00He vuelto<p><span style="font-size: medium;"> Hola a tod@s:</span></p><p><span style="font-size: medium;">He vuelto y con ganas renovadas para contaros alguna nueva historia. </span></p><p><span style="font-size: medium;">Pero no serán esta vez Marlene y Rebecca. Es un relato basado en una idea que leí, en no me acuerdo donde, pero que me inspiró este cuento que he desarrollado en veinte capítulos, algo similar en extensión a la última historia de M&R.</span></p><p><span style="font-size: medium;">Nada tiene que ver con estos personajes tan queridos que han hecho las delicias de quien las ha escrito y por supuesto de quienes las habéis leído. </span></p><p><span style="font-size: medium;">En ciernes estoy trabajando sobre otra historia nueva, pero eso queda para más adelante.</span></p><p><span style="font-size: medium;">Espero que la lectura de esta nueva novela os resulte agradable y espero vuestros comentarios.</span></p><p><span style="font-size: medium;">Un saludo</span></p><p><br /></p>Francisco Freijaneshttp://www.blogger.com/profile/07136887969142331609noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-7189587968703271148.post-35966096436456637892019-02-09T10:27:00.000+01:002019-02-09T10:27:18.639+01:00Mis seguidores.¡Hola a Tod@s!:<br />
<br />
<i><span style="font-family: "Trebuchet MS", sans-serif;">Es para mí una alegría poder comunicaros que mis relatos han llegado a las cien mil lecturas. Desde que empecé con estos cuentos de Rebecca y Marlene no pensé que fuese tanto el éxito de las distintas narraciones que he publicado. Os agradezco a tod@s el apoyo que le habéis dado con vuestras visitas al blog. </span></i><br />
<i><span style="font-family: "Trebuchet MS", sans-serif;"><br /></span></i>
<i><span style="font-family: "Trebuchet MS", sans-serif;">Supongo que la gran mayoría lo ha vivido con interés y cierto misterio según se iba desarrollando cada una de las historias. Pero el feeback que el autor esperaba no ha sido muy prolífico, apenas cincuenta comentarios durante estos tres últimos años, lo cual es un bagaje francamente bajo. </span></i><br />
<i><span style="font-family: "Trebuchet MS", sans-serif;"><br /></span></i>
<i><span style="font-family: "Trebuchet MS", sans-serif;">También los espacios publicitarios se han visitado poco, no es una queja, pues no es el objetivo de este blog ganar dinero, pero si es bueno recaudar para el mantenimiento de la página y al mismo tiempo satisfacer al lector. Quien disfrute de la lectura de estos relatos no tiene que rascarse el bolsillo, es completamente gratuito, es la publicidad quien aporta los recursos, siempre que se pulse en las distintas carátulas para consultar lo que allí se anuncia.</span></i><br />
<i><span style="font-family: "Trebuchet MS", sans-serif;"><br /></span></i>
<i><span style="font-family: "Trebuchet MS", sans-serif;">El éxito de las historias se debe a todos los lectores que, desde distintos ámbitos y lugares, se entretienen leyendo las aventuras de estos dos personajes tan entrañables. Son además cincuenta países en los que se ha leído alguna vez. Por supuesto todos los de habla hispana sin faltar ninguno, casi todos los Europeos a pesar de las diferencias idiomáticas, también en Asia, países como India, Filipinas o China y Uzbequistán. En fin es agradable ver que las historias de amor son universales y pueden agradar a mucha gente.</span></i><br />
<i><span style="font-family: "Trebuchet MS", sans-serif;"><br /></span></i>
<i><span style="font-family: "Trebuchet MS", sans-serif;">Quiero enviar un especial y cariñoso mensaje a todo el elenco homosexual, especialmente al femenino. Creo que las mujeres, todas en general, saben expresar como nadie lo que es el amor y la dedicación a la persona a quien se ama. Ese tipo de entrega no lo hace casi ningún hombre, solo vosotras sois poseedoras de la ternura y delicadeza que llena una relación y hace que perdure. Así he tratado de reflejarlo en mis narraciones, con los consiguientes roces y problemas que toda pareja debe de tener a lo largo de la vida, pero dejando ver el caldo de cultivo que es ese loco sentimiento que nos hace ser distintos cuando tenemos cerca a la persona amada, mas positivos, mas buenos y más alegres porque ella es quien nos infunde esa energía para sentirnos como personas importantes para nosotras mismas. </span></i><br />
<span style="font-family: "Trebuchet MS", sans-serif;"><i></i><br /></span>
<span style="font-family: "Trebuchet MS", sans-serif;"><i>Hoy cumplo sesenta y ocho años y lo estoy celebrando con vosotr@s porque estoy contento, alegre y me parece que es bonito participar de esa alegría. </i></span><br />
<br />
<i><span style="font-family: "Trebuchet MS", sans-serif;">Un abrazo a tod@s.</span></i>Francisco Freijaneshttp://www.blogger.com/profile/07136887969142331609noreply@blogger.com7tag:blogger.com,1999:blog-7189587968703271148.post-89636666286805980542018-11-30T08:11:00.003+01:002018-11-30T08:11:31.314+01:0020ª Entrega
<br />
<div style="margin: 0px;">
<b style="mso-bidi-font-weight: normal;"><i style="mso-bidi-font-style: normal;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS"; margin: 0px;"><span style="font-size: large;">Es solo un trámite.</span></span></i></b><b style="mso-bidi-font-weight: normal;"><i style="mso-bidi-font-style: normal;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS"; margin: 0px;"><span style="font-size: large;"> </span></span></i></b></div>
<br />
<div style="margin: 0px;">
<span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS"; margin: 0px;"><span style="font-size: large;">La temporada de revista de
Brodway poco a poco se va transformando en un éxito casi inesperado. El público
acude de forma creciente a la revista en la que Marlene luce sus mejores dotes
de actriz. Por su parte Rebecca está exultante con su tienda de la calle
Stanton. El fluir de clientes es constante y las ventas de sus modelos aumentan
de forma constante, se ha vuelto muy popular entre la alta sociedad
neoyorquina. Las ganas de Rebecca por crear nuevos diseños son estimuladas con
tanto laurel. Antes de la primavera ya se está planteando realizar su propio
desfile de moda, como cualquier modista de alta costura. Marlene la anima en
esa idea y como buena organizadora le prepara un estudio previo para llevarlo a
una realidad.</span></span></div>
<div style="margin: 0px;">
<span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS"; margin: 0px;"><span style="font-size: large;">Todo parece maravilloso de
cara al futuro, pero deben de cumplir con lo prometido entre ellas, enlazar sus
vidas como lo están sus almas. Tanto trabajo casi les hace perder el rumbo y
olvidar que tienen pendiente una ceremonia de boda que debió aplazarse por un
desgraciado accidente.</span></span></div>
<div style="margin: 0px;">
<span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS"; margin: 0px;"><span style="font-size: large;">Rebecca propone que, ya
concluido el otoño y casi el invierno, opina que con la primavera avanzada y la
floración explotando el mes de Mayo sería una buena época para realizar la
ceremonia. Marlene se muestra conforme, hasta le parece una preciosidad que se
casen rodeadas de flores en plena efervescencia. <span style="margin: 0px;"> </span>Consigue en el teatro licencia para una semana,
actuará una de las suplentes en su lugar y Rebecca no necesita cerrar la
tienda. A primeros de mes viajan a Düsseldorf, no sin antes planificar con toda
la familia los detalles de la boda, cuando ellas lleguen estaran ultimados los
encargos y casi todo lo concerniente a la ceremonia.</span></span></div>
<div style="margin: 0px;">
<span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS"; margin: 0px;"><span style="font-size: large;">Justus despliega todo su
ingenio para que ese día todo sea perfecto para las condesitas, como ella las
llama, organiza a la servidumbre, los adornos florales, el templete de la
ceremonia, y todos aquellos elementos necesarios para que todo esté perfecto.</span></span></div>
<br />
<div style="margin: 0px;">
<br /></div>
<br />
<div style="margin: 0px;">
<span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS"; margin: 0px;"><span style="font-size: large;">El día anterior a la boda se
realiza en el castillo una cena familiar en la que solo están presentes los
Lanhstein y los Wolf. Es una idea de Tristán que está resuelto a compensar todo
lo que de inoportuno ha forjado. La cena se desarrolla con toda cordialidad,
llena de sonrisas y buenos deseos entre todos. Con parsimonia actitud al llegar
a los postres Tristán se levanta y hace sonar su copa golpeándola con un
tenedor. Con la atención sorprendida de todos comienza a hablar. <i style="mso-bidi-font-style: normal;">– Deseo hacer un brindis por lo que va a
suceder mañana. Queridas Marlene y Rebecca, sé que en el pasado todo fue
tormentoso entre nosotros. Nada deseo más que olvidarlo y que vosotras lo
olvidéis también. Mi apuesta para el futuro es un deseo de que seáis felices
sin interferencias que os perturben. He entendido que vuestro amor es el más
sólido que he visto nunca. Marlene, sé que cuidarás de Rebecca como solo tú
eres capaz, no se necesitan más pruebas de tu amor por ella después de lo
vivido. Rebecca, tienes a tu lado lo más preciado que una persona pueda desear,
un amor incondicional fuerte y solidario, cuídala, es una joya, lo sé muy bien.
Solo contemplar como os miráis cualquiera puede apreciar esa conexión de
vuestras almas. Espero que seáis felices el resto de vuestra vida. ¡Por el amor
y por vosotras! – </i>Levanta su copa y le acompañan todos los comensales
poniéndose en pie. <i style="mso-bidi-font-style: normal;">-¡Por el amor! – </i>Dicen
todos al unísono.</span><b style="mso-bidi-font-weight: normal;"><i style="mso-bidi-font-style: normal;"></i></b></span></div>
<br />
<div style="margin: 0px;">
<br /></div>
<br />
<div style="margin: 0px;">
<span style="font-family: "Comic Sans MS";"><span style="font-size: large;">Y llega por fin el ansiado día,<span lang="ES-TRAD" style="margin: 0px;"> un
bullicio tremendo recorre el castillo. Han preparado la carpa en el centro del gran
patio. La ceremonia será al aire libre. </span></span></span></div>
<div style="margin: 0px;">
<span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS"; margin: 0px;"><span style="font-size: large;">Las novias han pasado la noche
en el invernadero mirándose fijamente a los ojos. - <i style="mso-bidi-font-style: normal;">Mañana sellamos nuestras vidas, Marlene.- </i>Ella la mira complacida y
le responde con dulzura. <i style="mso-bidi-font-style: normal;">– La sellamos
hace mucho Rebecca, mañana prometemos no volver a separarnos nunca.-</i> Coge
aire despacio y vuelve a mirar a esos ojos marrones que la absorben.<span style="margin: 0px;"> </span><i style="mso-bidi-font-style: normal;">– Hay algo que quiero decirte. Ya sabes lo que me gusta leer libros de los clásicos, de la historia y de las
religiones como la judía o la cristiana. A veces encuentras cosas muy
interesantes y muy bonitas. Esta que te voy a relatar me hizo acordarme de ti
cuando estaba en Los Angeles. Describe con toda claridad lo que es el amor
entre dos personas y no puede describir con más exactitud lo que siento. Es del libro de Ruth en la tradición judaica, dice así: No
me pidas que te deje o que me aparte de ti. Donde quiera que tú vayas, iré yo.
Donde quiera que tú mores, moraré yo y donde tu murieras, moriré yo y allí seré
enterrada. Es el pensamiento más bello que conozco sobre el amor y así pienso,
donde tú estés allí me <span style="margin: 0px;"> </span>encontrarás.- </i>Rebecca
no sabe qué decir, solo contempla maravillada la belleza que Marlene atesora en
su interior y en su cuerpo. La besa con toda dulzura y se abrazan con fuerza.</span></span></div>
<div style="margin: 0px;">
<span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS"; margin: 0px;"><span style="font-size: large;"><br /></span></span></div>
<div style="margin: 0px;">
<span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS"; margin: 0px;"><span style="font-size: large;">Hileras de sillas blancas están
ocupadas por amigos y familiares con los que Marlene y Rebecca querían compartir
su enlace y al fondo hay un arco de flores silvestres cuidadosamente diseñado
que marca el lugar donde ellas se comprometerán para siempre. La espera para el
comienzo de la ceremonia acaba <span style="margin: 0px;"> </span>al sonar,
del cuarteto de violinistas que comienzan a interpretar, el Canon de Pachelbel.
Tristán y Tomás situados en sus respectivos lugares, al principio del pasillo, están
listos para escoltar a las novias. Marlene a la derecha y Rebecca a la
izquierda aparecen por detrás de las barreras florales que habían mantenido a las
dos escondidas simbólicamente la una de la otra. Ambas mujeres irradian alegría
en el momento en que sus ojos se fijan entre sí, una sonrisa permanente aparece
en cada una de sus caras encantadoras. Casi en estado hipnótico comienzan a
caminar una hacia la otra, frente a frente, sólo para ser interceptados por
Thomas y Tristán. La separación será breve, apenas el paseo por el pasaje entre
las sillas hasta el arco floral. Marlene se coge del brazo de su padre y Rebeca
de su hermano, cada uno conduce con orgullo a las novias por el pasillo hacia la
oficiante. Thomas y Tristán toman las manos de ambas damas para unir a las
novias. Thomas besa en la mejilla a Marlene y Tristán en los dos hombros de
Rebecca desvaneciéndose hacia el fondo. Kim y Dana son las damas de Marlene.
Hagen y Sebastian testigos a la izquierda de Rebecca. Marlene percibe temblando
la mano de Rebecca en la suya. De pie delante de la audiencia no es fácil para
Rebecca. En un esfuerzo por tranquilizarla Marlene acaricia suavemente sus dedos,
susurrando en el oído en voz baja <i style="mso-bidi-font-style: normal;">- ¡Cálmate!</i>
- Rebecca consigue sentirse serena ante la sensación del tacto de Marlene y el
sonido de su voz, con un ligero asentimiento de sí, las dos dan un último paso
más hacia la oficiante de la boda. Ella comienza la ceremonia con una breve
alocución. <span style="margin: 0px;"> </span>- <i style="mso-bidi-font-style: normal;">Nos hemos reunido aquí con la finalidad de unir en matrimonio a Rebeca
von Lahnstein y Marlene Wolf. Esta unión es el fruto de un sentimiento de amor
fuerte y sólido entre ambas contrayentes. Han decidido unir sus almas para
afrontar el futuro con la esperanza de una vida en armonía y con el objetivo de
ser felices hasta el final de sus días. –</i> Hace una pequeña pausa y abre una
carpeta para comenzar a leer. <i style="mso-bidi-font-style: normal;">- ¿Rebecca
von Lahnstein y Marlene Wolf acudís a esta ceremonia voluntariamente con los
corazones dispuestos a recibiros la una a la otra en matrimonio?- </i>Se miran
fijamente a los ojos <i style="mso-bidi-font-style: normal;">- ¡Sí! -</i> Contestan
ambas mujeres. </span></span></div>
<div style="margin: 0px;">
<span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS"; margin: 0px;"><span style="font-size: large;">– <i style="mso-bidi-font-style: normal;">¿Prometéis amaros, respetaros con absoluta lealtad, compartir la
alegría y apoyaros en las dificultades? –</i> Vuelven a mirarse frente a
frente. - <i style="mso-bidi-font-style: normal;">¡Si! Es lo que haremos toda nuestra
vida. –</i> Responden al unísono.</span></span></div>
<div style="margin: 0px;">
<span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS"; margin: 0px;"><span style="font-size: large;">Marlene se esfuerza todo lo
posible por prestar atención a las palabras pronunciadas por la oficiante, pero
su atención no puede desviarse de los cautivadores ojos marrones de Rebecca que
están encerrados en los suyos. Las palabras aleatorias del discurso del
oficiante, como el respeto y la lealtad, distraerían a Rebecca y Marlene de la
mirada de cada una. Llega el momento de que Rebecca y Marlene intercambiaran
los anillos y los votos. Con el permiso de la oficiante Marlene comienza a
hablar. - <i style="mso-bidi-font-style: normal;">Me resultó difícil escribir lo
que siento necesario para decirte en estos momentos. No pude encontrar todas
las palabras que podrían describir ... cuán increíblemente enamorada estoy de
ti. <span style="margin: 0px;"> </span>Recuerdo una época en la que tuve
miedo de decir en voz alta que te quería y ahora ... No quiero nada más que
todo el mundo lo sepa, que sin ninguna duda, tú, Rebeca von Lahnstein tienes
todo mi corazón. Nunca supe lo poderoso que era el amor hasta que descubrí la
vida contigo. Todo mi mundo quedó hecho un revoltijo. Aquello que pudiera pensar
acerca de amar a otra persona cambió radicalmente… para mejor. Cuando entraste
en mi corazón ya no pude imaginar mi vida sin ti.</i> <i style="mso-bidi-font-style: normal;">Tu amor me ha hecho más fuerte y sólo espero que mi amor pueda hacer lo
mismo por ti, espero con ansias conocer lo que nuestro futuro juntas tiene
reservado y juro estar a tu lado siempre, para lo bueno y para lo malo.-</i></span></span></div>
<div style="margin: 0px;">
<span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS"; margin: 0px;"><span style="font-size: large;">Biggi ayuda a Tommy a
acercarse a Marlene, y en su pequeña mano sostiene la almohadilla con la banda
de raso para Rebecca. Marlene toma la banda y enlaza la mano de Rebecca en la
suya cuidadosamente, toma el anillo de desposorio, lo pone en el dedo de
Rebecca. <i style="mso-bidi-font-style: normal;">- Este anillo representa mi
promesa de que seré la morada del amor y la devoción que tengo y siempre tendré
por ti.</i> - La alegría de Rebecca se desborda mientras mira el símbolo de oro
que ahora adorna su mano. Su atención a Marlene es interrumpida por la petición
de la oficiante, ahora es su turno. Antes de que pudiera hablar, siente un
suave tirón de su vestido. Rebecca baja la mirada hacia el dulce rostro de
Emma, que está de pie a su lado con el brazo extendido, sostiene la banda de raso
en oro que debe enlazar la mano de Marlene. Rebecca toma el anillo del querubín
con la mano, agradece el gesto a la niña con una sonrisa, y se dispone a
completar los votos. Rebecca comienza a hablar, sus abrumadoras emociones hacen
que su voz quiebre. Una vez más Marlene no puede resistir el encanto subconsciente
de Rebecca. Marlene es ahora la que empieza a estar emotiva. Rebecca se aclara
la garganta y comienza de nuevo<i style="mso-bidi-font-style: normal;">. <span style="margin: 0px;"> </span>– Marlene, tú has sido mi inspiración y mi
apoyo a través de los momentos más difíciles de mi vida, te sacrificaste por mí
porque me amabas incondicionalmente e incluso siempre viste en mi lo mejor de
mi persona.<span style="margin: 0px;"> </span>Que esta unión sea el
comienzo de una vida larga y feliz llena de hogar, familia e hijos. Que nunca más
nos perdamos en el camino. Y lo más importante, dejar que el amor que
compartimos sea un recordatorio constante de lo que hemos construido. Que él
sea ese faro de luz que alumbre el sendero en nuestro caminar en tiempos de
incertidumbre. Marlene te doy mi amor eterno ante nuestra familia y amigos. Este
anillo te entrego como un símbolo de mi amor por ti, junto con el tuyo será el
lazo que una nuestras vidas juntas para la eternidad. -</i> Antes de que el
oficiante pudiera reanudar, añadió Rebeca. <i style="mso-bidi-font-style: normal;">-
Eternidad, ese es el tiempo que te amaré.</i> - Marlene no creía que su corazón
pudiera llenarse más de amor por ella, estaba delante suya besándose con la
mirada. Dándoles su momento el oficiante continuó. <i style="mso-bidi-font-style: normal;">- Es un honor y un privilegio para mí deciros, Rebecca von Lahnstein y <span style="margin: 0px;"> </span>Marlene Wolf, que desde ahora estáis unidas en
uno, en el amor y el matrimonio. Pueden certificar el enlace con el beso
ceremonial. - </i>A pesar de que sus labios se habían reunido muchas veces antes
nunca habían tenido un beso tan dulce para ambas mujeres. Fue el único beso que
selló su destino, las dos en uno solo. Un beso que podrían haber dejado ir por
mucho más si no hubiera sido por el anuncio de la oficiante<i style="mso-bidi-font-style: normal;">. - Señoras y caballeros, les presento al matrimonio Rebecca y Marlene
von Lahnstein Wolf.</i> - Ambas se dan la vuelta para presentarse ante su
familia y amigos. Incapaces de contener tanta felicidad se toman de la mano y
dan sus primeros pasos hacia un futuro juntas para siempre.</span></span></div>
<div style="margin: 0px;">
<span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS"; margin: 0px;"><span style="font-size: large;"><br /></span></span></div>
<div style="margin: 0px;">
<span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS"; margin: 0px;"><span style="font-size: large;"><br /></span></span></div>
<div style="margin: 0px;">
<span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Comic Sans MS"; margin: 0px;"><span style="font-size: x-large;"><b><i> Se acabó.</i></b></span></span></div>
<span style="font-size: x-large;"></span><b></b><i></i><br />
<div style="margin: 0px;">
<br /></div>
<b></b><i></i><u></u><sub></sub><sup></sup><strike></strike><span style="font-size: large;"></span>Francisco Freijaneshttp://www.blogger.com/profile/07136887969142331609noreply@blogger.com5tag:blogger.com,1999:blog-7189587968703271148.post-58648496722060513782018-11-27T08:55:00.001+01:002018-11-27T08:55:57.702+01:0019ª Entrega<br />
<div style="margin: 0px 0px 10.66px;">
<span style="font-family: "comic sans ms"; margin: 0px;"><span style="font-size: large;"><span style="margin: 0px;"> </span><b style="mso-bidi-font-weight: normal;"><i style="mso-bidi-font-style: normal;">Reencuentro</i></b>.</span></span></div>
<br />
<div style="margin: 0px;">
<span style="font-size: large;"><span style="font-family: "comic sans ms"; margin: 0px;">El encuentro entre Rebecca y Tristán en los jardines de Koninsgbrunm
es inesperado, pero a la vez resulta tranquilizador para él. Aunque las
noticias que le han llegado, sobre el estado de salud de su hermana, son muy
positivas, verla de nuevo ejerce de bálsamo en la preocupación de Tristán. </span><span style="font-family: "comic sans ms"; margin: 0px;">Ella le mira seria, no se han visto desde
el día del accidente y el gesto es tenso entre los dos. Elisabeth capta la
zozobra de Rebecca. <i style="mso-bidi-font-style: normal;"><span style="margin: 0px;"> </span>- ¿Estás bien? – </i>Rebecca asiente con la
cabeza y mira desafiante a Tristán. Él también se siente inquieto, hace semanas
que quiere hablar con ella, pero no se ha sentido lo suficientemente fuerte
para hacerlo. <i style="mso-bidi-font-style: normal;">- ¿Cómo estás, hermanita? –
</i>Pregunta con timidez y algo nervioso, empleando un tono conciliador. <i style="mso-bidi-font-style: normal;">- ¡Recuperada! – </i>Ella le contesta en un
tono algo lejano. <i style="mso-bidi-font-style: normal;">– ¿Podemos hablar? – </i>Continúa
su nerviosismo. <i style="mso-bidi-font-style: normal;"><span style="margin: 0px;"> </span>- ¡Por supuesto! - </i>Ella no le cierra la
puerta. Necesita conocer cómo será su relación de ahora en adelante y eso solo
lo sabrá entendiéndose con él. Es mucho lo que Tristán ha hecho de mal y el
cariño fraternal que existía entre ellos dos se ha ido degradando hasta que el
día del accidente todo pareció romperse. Elisabeth mira expectante a Rebecca,
ella le asiente con un gesto de su mirada. –<i style="mso-bidi-font-style: normal;">
Estaré en el estudio, si me necesitas. – </i>Abandona con dudas la compañía de
los dos hermanos, confía en que ambos hablen con sensatez. Tristán es un
misterio pues nunca da signos de su comportamiento inmediato y casi siempre
rompe cualquier pronóstico. Rebecca está tranquila porque ha visto y captado
sensación culpable en sus ojos y espera que tenga un gesto de desagravio con
ella. Recuerda la conversación con Marlene y lo que expresó mientras estaba
inconsciente.</span></span></div>
<div style="margin: 0px;">
<span style="font-family: "comic sans ms"; margin: 0px;"><span style="font-size: large;">Ambos caminan despacio, el uno al lado del
otro en silencio. Rebecca espera que Tristán rompa el mutismo en el que está
encerrado, al fin y al cabo, él es quien ha propuesto hablar. Ella no se
descompone ni apura el momento. <i style="mso-bidi-font-style: normal;"><span style="margin: 0px;"> </span>- ¡Lo siento! Lo siento mucho, no me lo
perdonaré en la vida. Si hubieses muerto, yo me moriría detrás de ti. Nunca
quise hacerte daño, pero en aquel momento no pensaba, era mi lado oscuro quién
me gobernaba. – </i>Rebecca está a punto de lágrima, pero se recompone. <i style="mso-bidi-font-style: normal;"><span style="margin: 0px;"> </span>– Fue
un accidente, no tenías intención de hacerme daño, me caí al apartarme, tu estabas
enfurecido con Marlene y actuabas cegado. – </i>Tristán mira a su hermana algo
sorprendido. Pensaba que ella le echaría la culpa de todo lo sucedido y eso le
preocupaba. Oyendo la respuesta que le ha dado, se da cuenta de lo superficial
que era su pensamiento. <i style="mso-bidi-font-style: normal;"><span style="margin: 0px;"> </span>- ¡Lo siento! Lo siento de nuevo por el
infierno que os he hecho pasar. Me he dado cuenta, muy tarde para mi
conciencia, de que el amor entre vosotras dos es algo que impresiona. Marlene
me lo describió con palabras que yo nunca sería capaz de expresar. Hagen me
hizo ver lo importantes que sois la una para la otra y me arrepiento de estar
tan ciego. Me ofuscó mucho veros de nuevo, ya había olvidado mis rencores.
Estabais fuera de mi vista y muy lejos. Cuando Marlene mostró a su hijo, algo
se revolvió dentro de mí y por un momento pensé que era mío. A partir de ahí no
quise escuchar a nadie y actué cegado por mi locura. – </i>Rebecca se siente
ahora reconfortada por las palabras de Tristán. Sin embargo, todavía tiene sus
dudas. En el pasado también prometió no intervenir entre ellas y no cumplió su
palabra, una vez casi las mata en la cuadra con un incendio.<i style="mso-bidi-font-style: normal;"> – Comprenderás que debo ser cauta con lo
que me estás diciendo. Tu pasado habla por ti. – </i>Le expone en un tono menos
tenso. Ella entiende el gesto de sinceridad de su hermano, pero duda de que sea
capaz de mantener su promesa, sobre todo en momentos tensos o cuando el nivel
de alcohol le haga estar fuera de la realidad. - <i style="mso-bidi-font-style: normal;"><span style="margin: 0px;"> </span>Tristán, la semana que viene
regreso a Nueva York, Marlene ya está allí. Como ya sabes nos casaremos muy
pronto. No volveremos a cruzar nuestros caminos, salvo que sea necesario. Busca
tu felicidad, olvídate de nosotras, ya somos felices juntas y tu no eres parte
de esa felicidad. Solo lo serás el día que olvides a Marlene y lo que te hizo.
Debes emprender una nueva vida al lado de otra persona o vivas solo porque así
lo has decidido. Déjanos vivir la nuestra en paz, ya tenemos un proyecto de
futuro organizado. Si quieres formar parte de ello, reconduce la tuya y todos
ganaremos. Le dijiste a Marlene que una vez te dije que eras mi héroe. Vuelve a
serlo, solo debes recuperar tu propia vida <span style="margin: 0px;"> </span>y vívela feliz, entonces volverás a ser mi
héroe. Hasta ese momento solo serás mi hermano… un hermano lejano. – </i>Duras
palabras de Rebeca que hacen mella en el alma de Tristán. Él recapacita durante
un rato, mientras caminan, le va dando patadas a algunas piedrecitas de la
senda, con eso descarga su ansiedad. Rebecca lo observa con el rabillo del ojo.
-<i style="mso-bidi-font-style: normal;"> ¡Sabes! En parte estoy haciendo lo que
me dices. Hace meses que estoy saliendo con alguien que me gusta y que tiene una
personalidad magnética.<span style="margin: 0px;"> </span>Ella no sabía
nada de lo de Marlene hasta que no tuve más remedio que contárselo, me veía muy
triste por tu salud, y le terminé confesando que me consideraba culpable de lo
sucedido. Le conté todo y lo que más me sorprendió es que comprendió mi
zozobra. Ese día fuimos al Hospital, fue cuando te visité, estabas
inconsciente, Marlene estuvo muy tolerante, pero salí de allí completamente
entristecido después de ver el estado en el que te había dejado. – </i>Rebecca
se detiene en su caminar, se gira hacia él y le mira. – <i style="mso-bidi-font-style: normal;">Tú no hiciste nada, yo me caí sola porque tropecé, no te culpes por
ello. Es ya agua pasada y no debes atormentarte. Es cierto que si no te
hubieses presentado de esa manera nada hubiese sucedido, pero ya está, estoy
curada, viva y deseando ver a Marlene con toda el alma. Olvida todo y empieza
de nuevo. </i>-<span style="margin: 0px;"> </span>Toma aire después del
discurso y en un tono más suave comienza a hablar de nuevo. - <i style="mso-bidi-font-style: normal;">Me alegra lo que me has dicho y veo que has
encontrado a alguien que puede hacerte feliz. La comprensión del otro es la
base fundamental de una relación, ojalá tengas suerte Tristán, estaré muy feliz
si consigues estabilizar tu vida.- </i>Tristán sonríe ligeramente y mira al
suelo con algo de pudor. <i style="mso-bidi-font-style: normal;"><span style="margin: 0px;"> </span>– Marisa es un encanto, desde que la conozco
vivo muy a gusto. – </i>Rebecca vuelve a mirar a su hermano con misterio. <i style="mso-bidi-font-style: normal;"><span style="margin: 0px;"> </span>-
¿Has dicho Marisa? ¿No será la as…?- </i>Tristán corta la frase asintiendo con
una sonrisa. <i style="mso-bidi-font-style: normal;"><span style="margin: 0px;"> </span>- ¡Ahhh! Bonita chica, muy agradable. Ha
estado como asistente conmigo. -<span style="margin: 0px;"> </span></i>Tristán
sigue sonriendo, - <i style="mso-bidi-font-style: normal;">¡Lo sé! Me ha contado
que no has perdido tu creatividad. Y no solo es asistente, será una diseñadora
de categoría, he visto sus bocetos y son espléndidos. – </i>La conversación
deriva hacia el tema de Marisa. Durante rato hablan de ella, LCL y el banco. Él
la informa puntualmente de todo lo relacionado con las empresas de la familia.</span></span></div>
<div style="margin: 0px;">
<span style="font-family: "comic sans ms"; margin: 0px;"><span style="font-size: large;"><br /></span></span></div>
<div style="margin: 0px;">
<span style="font-family: "comic sans ms"; margin: 0px;"><span style="font-size: large;">Rebecca espera con el equipaje en la
terminal del aeropuerto de Colonia la llegada de Thomas con el pequeño Tomy, al
que no ha dejado de ver un solo día. Se lo lleva a Nueva York. También ha
llamado a Roselyn para que regrese a la ciudad de los rascacielos. Como de
costumbre el niño se abalanza sobre ella. Thomas está algo triste por la partida
del niño, todas estas semanas en casa han sido una alegría para él y Biggy, y
por supuesto para su tío, el otro Thomy. Rebecca toma el vuelo de media tarde,
cuando llegue a su destino Marlene estará en pleno ensayo, la esperará en el
apartamento. Aunque le ha anticipado que ya puede viajar, mantiene el misterio
de la hora de llegada. Calcula que estará en el apartamento sobre las ocho de
la tarde de N.York, tiempo suficiente para dejar a Tomy en su cama, estará
completamente dormido, facilitando así los planes de Rebecca para dar la
sorpresa a Marlene. </span></span></div>
<div style="margin: 0px;">
<span style="font-family: "comic sans ms"; margin: 0px;"><span style="font-size: large;">La pesada carga de Tomy y la maleta no
amilanan las ganas de Rebecca, está ansiosa por ver de nuevo a Marlene. Llega
al apartamento y acuesta al niño en su cama, comprueba que está todo correcto y
se dedica a preparar la bienvenida a su amada.</span></span></div>
<div style="margin: 0px;">
<span style="font-family: "comic sans ms"; margin: 0px;"><span style="font-size: large;">Marlene abre la puerta, el cerrojo muestra
signos de no estar pasado, recuerda que todos los días al salir si lo cierra.
Piensa que quizás no lo ha hecho. Al abrir percibe un aroma familiar y que algo
hay en el dormitorio, una tenue luz asoma por una rendija de la puerta de
acceso a la habitación, se acerca misteriosa y la empuja suavemente. Una hilera
de velas encendidas ilumina el rostro de Rebecca allí de pie delante suya. La
encuentra bellísima y de un salto se acerca, la abraza besando sus labios con
verdadera pasión. Se le saltan las lágrimas de felicidad -<i style="mso-bidi-font-style: normal;"> ¡Oh! ¡Dios mío! ¡Cuánto he soñado con verte! – </i>Marlene no cabe en
si de gozo al tener a Rebecca en sus brazos. -<i style="mso-bidi-font-style: normal;"> ¡Te quiero, te quiero, te quiero! Eres lo mejor de mi vida. – </i>Le
dice nerviosa y aún temblorosa. Deseaba tanto volverla a encontrar que no cabe
en si de gozo. Con insinuante actitud Rebecca comienza a desabrochar la camisa
de Marlene. Al principio se deja llevar, pero de pronto se le despiertan las
alarmas.<span style="margin: 0px;"> </span>-<i style="mso-bidi-font-style: normal;"> ¿Estás segura? ¿Podemos hacerlo? – </i>Pregunta algo insegura. <i style="mso-bidi-font-style: normal;"><span style="margin: 0px;"> </span>-
¡Estoy segura! Y nada me apetece más que hacer el amor de nuevo contigo, lo deseo mas que nada en el mundo.- </i>Rebecca disipa
todas las dudas de Marlene con un profundo beso. Ella misma se desprende del
camisón que lleva puesto, descubriendo su desnudez ante su amada, que
rápidamente la sigue y se introducen en la cama llenas de pasión. Es Rebecca
quien toma el mando de las operaciones. Se coloca sobre Marlene y encajan sus
cuerpos de forma perfecta. para seguir con ese baile erótico que las conduce
finalmente al éxtasis mutuo.<i style="mso-bidi-font-style: normal;"> </i></span></span></div>
<div style="margin: 0px;">
<span style="font-family: "comic sans ms"; margin: 0px;"><span style="font-size: large;"><br /></span></span></div>
<div style="margin: 0px;">
<span style="font-family: "comic sans ms"; margin: 0px;"><span style="font-size: large;">La tienda de la calle Stanton es un
hervidero de gente esa mañana, Rebecca no se lo cree, casi no puede conducirse
entre la gente hasta detrás del mostrador, donde sus empleadas la reciben de
forma entusiasta. Con la cara llena de espanto se introduce en su despacho y
algo especial está en el ambiente que la intriga. Se sienta en la silla de la
mesa para comprobar que está modificada. <i style="mso-bidi-font-style: normal;">–
Aquí se ha sentado otra persona. -</i> <span style="margin: 0px;"> </span>Expresa
un pensamiento en voz alta. El orden de la mesa también está alterado, no es su
orden. De pronto le entra una sensación de que alguien ha invadido su espacio
vital en aquel lugar. Revisa la documentación, los cajones, los expedientes
comerciales y todo está en orden, todo está al día, como si ella hubiese estado
trabajando cada jornada de ausencia. - <i style="mso-bidi-font-style: normal;"><span style="margin: 0px;"> </span>Solo puede ser una persona. Marlene. – </i>Reflexiona
un instante y a continuación comienza a reordenar el despacho a su manera,
ajusta la silla a su medida y coloca las cosas como a ella le gustan. Del bolso
extrae una fotografía enmarcada de Marlene y ella abrazadas y mirándose a los
ojos. La coloca sobre la mesa a su izquierda, entre la puerta y su mirada. Poco
rato después aparece Isabel, la encargada, es una mujer alta, latina y atractiva,
cuerpo de modelo y una mirada inteligente. Ella le cuenta que los últimos días
Marlene ha estado gestionando todo lo que había pendiente. Rebecca le contesta
que ya lo sabía. Se disculpa con ella por no haberla avisado.<i style="mso-bidi-font-style: normal;"> – No hacía falta, tu hermano Sebastián nos
avisó. De hecho un día pasó por aquí con su mujer, Tanja, de camino a San
Francisco, hicieron una visita a la tienda. – </i>Rebecca se enciende, nada
tenía que hacer aquí Tanja. Esta tienda no pertenece a LCL. Siempre tiene que
entrometerse. <span style="margin: 0px;"> </span></span></span></div>
<br />
<div style="margin: 0px;">
<span style="font-family: "comic sans ms"; margin: 0px;"><span style="font-size: large;">Marlene aparece antes de la hora del
almuerzo, sonriente entra en la tienda y pregunta por Rebecca. Isabel señala el
almacén. Abre la puerta y la ve de espaldas buscando algo en un estante.
Sigilosa se acerca a ella y la abraza por la cintura. Rebecca da un respingo
asustada, se le ilumina la mirada al ver a su amada sujetándola por la cintura
y queriendo darle un beso de bienvenida. Ella la rodea con su brazo derecho y
se desprende de la caja que lleva en la mano izquierda para abrazarla
mientras recibe el cariñoso beso de Marlene. <i style="mso-bidi-font-style: normal;"><span style="margin: 0px;"> </span>- ¿Dónde estabas? Te perdí al
salir de casa. - </i><span style="margin: 0px;"> </span>Le dice tierna. <i style="mso-bidi-font-style: normal;"><span style="margin: 0px;"> </span>– Fui
a buscar a Roselyn al aeropuerto. Me llamó para decir que ya estaba en La
Guardia. Ahora está con Tomy en casa. ¿Almorzamos? – </i>Rebecca pone una
sonrisa con los ojos iluminados. –<i style="mso-bidi-font-style: normal;"> Marlene,
¿Has hecho tú todo lo que me he encontrado en la tienda?- </i>Marlene la mira
extrañada. <i style="mso-bidi-font-style: normal;">- ¡Sí! ¿No te gusta? - </i><span style="margin: 0px;"> </span>Rebecca la mira con pasión, no puede verla de
otra forma. - <i style="mso-bidi-font-style: normal;">¡Me encanta! Has hecho un
trabajo magnífico.- </i>Salen del almacén y se dirigen al despacho, Rebecca
recoge el bolso y salen hacia la calle. En el restaurante Balvanera deciden
hacer el almuerzo, como hacía Rebecca con frecuencia. <i style="mso-bidi-font-style: normal;">- ¿De verdad te ha gustado? No estaba segura si querías algo así. Puse
mi cabeza a trabajar por que no podía estar casi medio día sin hacer nada. Los
ensayos comienzan a las cuatro de la tarde, estamos unas cinco horas en el
escenario ensayando, pero las mañanas eran interminables sin ti a mi lado y ya
ves. - </i><span style="margin: 0px;"> </span>Rebecca escucha con atención.
<i style="mso-bidi-font-style: normal;">– Pero ¿Cómo has conseguido llenar la
tienda de gente? Esta mañana no se cabía, Isabel está encantada. – </i>Marlene
le va explicando paso por paso todos los detalles de la campaña publicitaria y
las gestiones que ha realizado con casas comerciales y centros de ocio, teatros
y salas de muestras textiles. <i style="mso-bidi-font-style: normal;">- Isabel ha
sido de gran ayuda para conocer algunas cosas de esta ciudad que me han sido
muy útiles. – </i>Así fue desgranando uno a uno todos los detalles. Acabada la
comida, Rebecca regresa a la tienda y Marlene se encamina al teatro de la
Avenida Brodway.</span></span></div>
<div style="margin: 0px;">
<span style="font-family: "comic sans ms"; margin: 0px;"><span style="font-size: large;"><br /></span></span></div>
<div style="margin: 0px;">
<span style="font-family: "comic sans ms"; margin: 0px;"><span style="font-size: large;">El estreno de Marlene en la escena resulta
muy satisfactorio, no ha sido un gran éxito pero al menos ella se siente
triunfadora por el trabajo realizado en escena.<span style="margin: 0px;">
</span>Rebecca la ha acompañado en esta noche tan especial y al acabar la
representación se dirige a su encuentro en el camerino. Entra mientras ella se
está cambiando detrás de un biombo. Se acerca al espejo para domarse el pelo,
se lo han peinado muy voluptuoso y a ella no parece gustarle. Rebecca la
detiene. – <i style="mso-bidi-font-style: normal;">Déjalo así, estas preciosa. Me
encanta lo bonita que me pareces con ese peinado. – </i>Ella la mira con una
sonrisa. <i style="mso-bidi-font-style: normal;">– Pues si a ti te gusta, a mi
también. – </i></span></span></div>
<div style="margin: 0px;">
<span style="font-family: "comic sans ms"; margin: 0px;"><span style="font-size: large;">Durante semanas el ritmo de vida está en
una rutina alrededor de la Tienda con Rebecca y del teatro para Marlene. Los
domingos son para disfrutar en Central Park jugando con el niño y Roselyn que
se ha quedado definitivamente con ellas. La boda quedó pendiente a causa de las
lesiones de Rebecca. Un día regresaran a Düsseldorf solo con esa única
intención. </span></span></div>
<br />
<div style="margin: 0px;">
<br /></div>
<br />
<div style="margin: 0px 0px 10.66px;">
<br /></div>
<b></b><i></i><u></u><sub></sub><sup></sup><strike></strike><span style="font-size: large;"></span>Francisco Freijaneshttp://www.blogger.com/profile/07136887969142331609noreply@blogger.com7tag:blogger.com,1999:blog-7189587968703271148.post-82127923979856820882018-11-23T07:53:00.000+01:002018-11-23T07:53:04.552+01:0018ª Entrega.<br />
<div style="margin: 0px 0px 10.66px;">
<b style="mso-bidi-font-weight: normal;"><i style="mso-bidi-font-style: normal;"><span style="font-family: "comic sans ms"; margin: 0px;"><span style="font-size: large;">Hay que continuar.</span></span></i></b></div>
<br />
<div style="margin: 0px 0px 10.66px;">
<span style="font-family: "comic sans ms"; margin: 0px;"><span style="font-size: large;">Rebecca ha vuelto
a respirar. Antes de que saliera de la UVI, Ricardo le hizo pasar por algunas
pruebas para comprobar que su estado era óptimo, previo al traslado a una
habitación convencional de la clínica en la que está convaleciente. Pruebas de
Rx y de laboratorio. Con su abdomen se entretuvo un buen rato explorando por
delante, por detrás, arriba y abajo. Lo que le preocupaba eran sus análisis
clínicos. Seguía manteniendo ese rostro céreo, incluso a veces, estando sentada
notaba cierto mareo, que poco a poco va desapareciendo. Desde el sillón en el
que se acomoda, puede contemplar el exterior con cierta confortabilidad por la
ventana. Marlene sigue a su lado sin separarse ni un momento. Ahora trabaja
activa para que Rebecca se sienta cómoda, es la perfecta asistente para su
recuperación. Sus hermanas en cooperación con Elena y Justus son la logística
de apoyo para que todo ruede perfectamente. Cuando llegó a la habitación desde
la UVI se encontró con casi toda la familia Lahnsteinn y Wolf. Se alegró
especialmente a ver a Thomas, el padre de Marlene. Al día siguiente apareció
con los dos niños, Tomy se abrazó a ella y no quería despegarse en ningún
momento, Marlene contempla la escena feliz, nunca había pensado que su hijo
pudiera tener tanto cariño a Rebecca, la satisface enormemente y sonríe
contenta con la escena. Thomy el hermano de Marlene mira a su hermana con ojos
de misterio, ella le explica en un lenguaje comprensible para un niño de cinco
años lo sucedido con Rebecca obviando las causas. Justus aparece todos los días
para traer el menú elegido por ella misma. <span style="margin: 0px;"> </span><i style="mso-bidi-font-style: normal;">– La
comida de los hospitales es horrenda.-</i> Decía él mismo cada vez que Rebecca
se deleitaba con las excelencias culinarias de la señora Lenz.</span></span></div>
<br />
<div style="margin: 0px;">
<span style="font-family: "comic sans ms"; margin: 0px;"><span style="font-size: large;">Tras una semana de vivir bajo la tutela de
Ricardo y sus enfermeras, por fin él le dice que puede irse a casa, no
obstante, estará bajo la estrecha vigilancia de la enfermera de visita a
domicilio, que la verá a diario en su hogar. Para este acontecimiento Justus le
ordena al chófer que use el Rolls, Sebastián le recrimina semejante
ostentosidad para ir a un hospital a lo que él responde que: <i style="mso-bidi-font-style: normal;">– No es ostentosa mi pretensión, es de
espacio. El Rolls tiene el doble de capacidad que cualquiera de los que tenemos
en el garaje y es el adecuado para trasladar a la condesa Rebecca en su estado
actual con toda comodidad. –</i> Ante el razonamiento tan contundente Sebastián
reconoce sus saberes y le felicita por la elección. Dicho esto, se acomoda en
el asiento delantero de copiloto y ordena inicie el camino a la clínica para
traer de vuelta a casa a la condesita, como él la llamaba cuando era pequeña.</span></span></div>
<br />
<div style="margin: 0px;">
<span style="font-family: "comic sans ms"; margin: 0px;"><span style="font-size: large;">Al salir por la puerta del hospital Marlene
y Rebecca, sentada en una silla de ruedas, miran con ojos de sorpresa a Justus
que está de pié al lado de la puerta de atrás del Rolls con una sonrisa poco
habitual en él. <i style="mso-bidi-font-style: normal;">- ¡Justus! ¿Cómo se te ha
ocurrido traer el Rolls?-</i> Pregunta Rebecca sonriendo alegre por salir de
nuevo al mundo real. - <i style="mso-bidi-font-style: normal;">¡Cuestión de
espacio condesas!</i>– Contesta acomodando a ambas en el interior. Sin decir
nada más cierra la puerta y se coloca otra vez al lado del conductor. – <i style="mso-bidi-font-style: normal;">A Konnigsbrunm. – </i>Ordena con altivez.</span></span></div>
<div style="margin: 0px;">
<span style="font-family: "comic sans ms"; margin: 0px;"><span style="font-size: large;">Llegan a la orangerie, Rebecca se apropia del
sofá, Marlene coloca una bolsa de viaje que trae de vuelta, Justus se acerca a
la puerta y les dice que si le necesitan no duden en llamar. Ellas le dan las
gracias y esperan a que desaparezca. Rebecca esperaba quedarse a solas con
Marlene que le está preparando una taza de chocolate caliente. Se acerca con la
taza en la mano y la ofrece a su novia con una mirada cariñosa. La contempla sonriente
y le dice que se siente a su lado. - <i style="mso-bidi-font-style: normal;">¡Al
fin en casa! – </i>Dice Marlene. <i style="mso-bidi-font-style: normal;"><span style="margin: 0px;"> </span>- ¡Sí! Al fin en casa las dos. -<span style="margin: 0px;"> </span></i>Rebecca mira a los ojos de Marlene con
una sonrisa leve, se acerca a ella y la besa con suavidad. <i style="mso-bidi-font-style: normal;"><span style="margin: 0px;"> </span>– Te quiero Marlene, te amo más
de lo que yo misma he imaginado. Mi vida no es nada sin ti.- </i>Se gira hacia
la mesita y deja la taza sobre ella. Mirando hacia sus ojos, que brillan como
dos perlas azules.<i style="mso-bidi-font-style: normal;"> - ¡Sabes! Recuerdo que
en los días que estaba dormida debí soñar mucho, o no… no sé, es una sensación
extraña porque sentía que estabas a mi lado, si te alejabas me veía caer a un
pozo. Era muy extraño. Solo cuando estabas cerca notaba la frescura del aliento
de tus palabras empujándome a salir de allí. Supongo que debía ser el deseo de
mi alma de permanecer a tu lado lo que me mantenía a flote hasta que me he
recuperado. No podía abandonarte, irme yo sola y dejarte aquí sufriendo mi
ausencia para siempre. ¿Comprendes como te quiero? No soy nada sin ti amor mío.
– </i>Marlene está a punto de romper a llorar, su corazón acaba de comprender
que el permanecer a su lado fue lo mejor que pudo decidir para las dos. Su
corazón late rápido y con fuerza, el nerviosismo se apodera de ella en un
momento. Rebecca la observa con embeleso, ella baja la mirada a las manos que
están enlazadas. –<i style="mso-bidi-font-style: normal;"> ¡Rebecca! Nada me va a
separar de ti en esta vida. El que nuestras manos permanezcan enlazadas siempre
que estamos juntas no es casualidad, es una necesidad que tenemos de
percibirnos y de entregarnos. Yo me he entregado a ti todos estos días, en
especial desde el momento que saliste del quirófano. Desde ese momento nuestras
manos estuvieron enlazadas todo el tiempo y no solo nuestras manos. Yo te
hablaba, te decía que tenías que ser fuerte, que tenías que salir de donde
estabas, que yo moriría detrás de ti si te ibas al más allá. No era un sueño lo
que escuchabas, era a mí, porque estando en el más extremo de los cansancios soñaba
que estaba a tu lado y sabía que me escuchabas. – </i>A Rebecca se le saltan
las lágrimas de los ojos en un torrente incontrolable. Marlene le sigue en el
llanto, pero no es de sufrimiento es de emoción al comprobar que su conexión,
tantas veces manifestada de palabra, es una realidad, sus almas de alguna
manera están conectadas. <i style="mso-bidi-font-style: normal;"><span style="margin: 0px;"> </span>– Creo que después de esto casarnos es un
trámite burocrático, realmente pienso que este amor es para toda la vida, y que,
aunque viviésemos lejos la una de la otra nunca se apagará. – </i>Rebecca mira
a los ojos de Marlene y lentamente acercan sus labios para unirlos igual que
sus almas.</span></span><span style="font-family: "comic sans ms"; margin: 0px;"><span style="font-size: large;"> </span></span></div>
<br />
<div style="margin: 0px;">
<span style="font-family: "comic sans ms"; margin: 0px;"><span style="font-size: large;">La recuperación de Rebecca es notoria al
cabo de diez días. Camina por los jardines del castillo todas las mañanas y
todas las tardes, no importa la climatología, la temperatura o la calidad del
aire, ella y Marlene salen a disfrutar del aire libre. Todos los días Thomas
trae a Tomy para que pase tiempo con sus madres lo que insufla mucha alegría a
ambas, Marlene juega con él en el suelo, algo aún vetado a Rebecca, pero ella
sabe sacarle partido cuando se le sube encima y la abraza con fuerza. Los
planes de boda se han post puesto hasta que Rebecca esté completamente
recuperada. Y además está cerca la fecha en la que debieran regresar a Nueva
York. Rebecca sabe que Marlene no puede faltar a la cita en Brodway, decide
pues animarla para que viaje sin ella. Llegado el momento que Ricardo le de
permiso, no perderá un minuto en hacerlo. Durante días porfía con ella no
logrando convencerla. Marlene es muy testaruda, si decide que algo es como ella
dispone, no ceja en su empeño. Está convencida que Rebecca es lo más importante
y no piensa alejarse por muy importante que sea su vida profesional, su
prioridad es ella y nada más que ella. Rebecca llama a Yakov a espaldas de
Marlene para que él intente convencerla por si tiene argumentos más
convincentes. Dos días después él le dice que no encuentra la manera de
convencerla. </span></span></div>
<br />
<div style="margin: 0px;">
<span style="font-family: "comic sans ms"; margin: 0px;"><span style="font-size: large;">El té es la bebida más frecuentada por las
dos mujeres, y así después del paseo vespertino Marlene prepara sendas tazas y
las dispone en la mesita del salón de la orangerie.<span style="margin: 0px;"> </span>–<i style="mso-bidi-font-style: normal;"> Marlene,
tenemos que hablar. – </i>Le dice con actitud seria. - <i style="mso-bidi-font-style: normal;"><span style="margin: 0px;"> </span>¿Otra vez lo de Brodway? Ya te
he dicho que no y no pienso cambiar de idea.- </i>Le contesta con cierto enojo.
–<i style="mso-bidi-font-style: normal;"> Perderás la oportunidad de tu vida. Yo
ya estoy bien, y es cuestión de pocas semanas que pueda viajar.- </i>Le razona
con tranquilidad, cree Rebecca que Marlene está muy obstinada en mantenerse a
su lado de forma permanente y eso la halaga, pero no encuentra razonable esa
actitud de arriesgarse a perder semejante oportunidad, lo encuentra
irresponsable. Suenan unos golpes en la puerta de alguien que llama. Marlene se
levanta y se dirige para abrirla. Ricardo aparece en el pasillo con una
sonrisa, Marlene le abraza, Rebecca se incorpora para hacer lo mismo. Después
del buen trabajo de Ricardo con Rebecca, los saludos protocolarios de simples
amigos han pasado a algo más cercano entre personas que viven la mistad casi
como si fueran hermanos. -<i style="mso-bidi-font-style: normal;"> ¿Qué te trae
por aquí? – </i>Pregunta Rebecca como en broma. Él responde que ha perdido un
cliente y busca recuperarlo. – <i style="mso-bidi-font-style: normal;">Pues aquí
la tienes al completo. – </i>Entre risas y bromas le invitan a una copa de vino
que acepta encantado. En el transcurso de la conversación Rebecca se interesa
en saber cuando podrá viajar a América, se justifica por el negocio de la calle
Stanton. Ricardo contesta que es pronto para ello, podría viajar, pero
asumiendo algún riesgo. Marlene mira con ojos de espanto lo que cree que está
pensando Rebecca. - <i style="mso-bidi-font-style: normal;">¡Ni se te ocurra! No
vas a viajar conmigo. – </i>Ricardo pone cara de póker y pregunta que es lo que
sucede. -<i style="mso-bidi-font-style: normal;"> Marlene debe estar en Nueva
York la próxima semana y no quiere dejarme sola. No encuentro argumentos para
evitar que pierda la oportunidad de su vida en el teatro en Brodway, porque yo
no pueda viajar.– </i>Ricardo entiende el planteamiento de Rebecca y apoya la
postura. <i style="mso-bidi-font-style: normal;"><span style="margin: 0px;"> </span>– Realmente es razonable lo que dice Rebecca.
Vete a Nueva York, a Rebecca le falta poco e irá detrás. No veo el problema.- </i>Son
los mismos argumentos, Marlene mira con rabia a Ricardo, esperaba que
promocionara los cuidados de Rebecca y así ella se encontraría fuerte. - <i style="mso-bidi-font-style: normal;"><span style="margin: 0px;"> </span>No
quiero dejar sola a Rebecca, tengo miedo que le pase algo y no esté nadie aquí
para ayudarla. ¡No! No pienso dejarte sola ¿Entiendes? – </i>Le dice alzando la
voz, no le deja otra alternativa, Rebecca debe decidir sobre el futuro de
Marlene, dejarla o acompañarla. Finalmente decide que la acompañará. <i style="mso-bidi-font-style: normal;"><span style="margin: 0px;"> </span><span style="margin: 0px;"> </span>– Pues entonces creo que tendremos que
preparar la maleta. Pediré los billetes del vuelo para dentro de cuatro días. Volveremos
al apartamento de la calle 78. ¿Crees que estaré en condiciones para entonces,
Ricardo? – </i>Sin mirar a Marlene permanece pendiente del médico. - <i style="mso-bidi-font-style: normal;">¡No es conveniente! Y ante la duda, yo no
recomiendo que lo hagas.-</i> Le aconseja. -<i style="mso-bidi-font-style: normal;">
¡Pues eso es lo que haremos! – </i>Marlene se enciende y responde que no lo
piensa tolerar. -<i style="mso-bidi-font-style: normal;"> ¿Es que quieres jugarte
la vida o la salud?- </i>Rebecca la mira estoicamente. -<i style="mso-bidi-font-style: normal;"> ¡Pues elige! O te vas por delante o me voy contigo a costa de lo que pueda
suceder. – </i>Marlene no sale de su asombro por la dureza de Rebecca. A
escondidas Ricardo sonríe, acaba de adivinar cual es la pretensión de Rebecca.
Cuando le llamó para que acudiera a visitarla le expuso que tenía que convencer
a Marlene de algo importante. Ahora está viendo la estrategia. Marlene pasea de
un lado a otro de la habitación. Rebecca la observa estoica siguiéndola con la
vista como si fuera un partido de tenis. Completamente irritada contesta casi a
gritos.<span style="margin: 0px;"> </span>-<i style="mso-bidi-font-style: normal;"> ¡Está bien! Tú ganas. Me iré, pero quiero que alguien se quede aquí
contigo de forma permanente. Y tú le das permiso solo si está en verdaderas
condiciones.- </i>Ambos sonríen con satisfacción. Marlene se siente incómoda
por el chantaje de Rebecca y muestra un serio semblante de enfado manifiesto. <i style="mso-bidi-font-style: normal;"><span style="margin: 0px;"> </span>-
¡Bien! Pues que sea así. – </i>Sentencia Rebecca.<i style="mso-bidi-font-style: normal;"> </i></span></span><i style="mso-bidi-font-style: normal;"><span style="font-family: "comic sans ms"; margin: 0px;"><span style="font-size: large;"> </span></span></i></div>
<br />
<div style="margin: 0px;">
<span style="font-family: "comic sans ms"; margin: 0px;"><span style="font-size: large;">Dos días antes de que Marlene tenga que
comenzar los ensayos vuela a Nueva York, disconforme con la decisión de
Rebecca. Ella la tranquiliza cada vez que muestra ese nerviosismo por dejarla
sola. Su hermana Elena se traslada a vivir con Rebecca durante su ausencia.
Marlene es muy insistente también y durante horas aleccionaba e instruía a su
cuñada sobre las tareas y los cuidados que debía realizar a Rebecca, hasta que
estaba segura de que había entendido todo el proceso. Elena cuenta con el apoyo
y la ayuda de Justus y todo el servicio de Konignsbrunm para lo que se necesite
y también actúa como tranquilizadora de Marlene. </span></span></div>
<div style="margin: 0px;">
<span style="font-family: "comic sans ms"; margin: 0px;"><span style="font-size: large;">Aunque el vuelo se desarrolla por la noche,
la histeria de Marlene por Rebecca no le permite conciliar el sueño. El viaje
se le vuelve eterno, ni la lectura ni las películas consiguen distraerla.
Cuando llega a la terminal del J. Fitgeral Kennedy sale casi con desesperación
maldiciendo el haber aceptado realizar el viaje. Son las dos de la mañana
cuando llega al apartamento de la calle 78. Entra y deposita las maletas sobre
la mesa del salón. Toma el teléfono para llamar, pero se da cuenta que en
Düsseldorf son las 8 de la mañana y Rebecca aún debe estar dormida. Piensa que
el descanso es más importante para ella que recibir una llamada, que bien puede
demorarse unos pocos minutos más. Decide pues hacer dos cosas: deshacer las
maletas y luego darse una ducha. Una vez fresca se pone el albornoz, se prepara
un chocolate caliente y se pone el pijama. Ya sentada en la cama recoge de
nuevo el teléfono y esta vez sí, marca el número de Rebecca. -<i style="mso-bidi-font-style: normal;"> ¡Buenos días! – </i>Se oye la dulce voz de
Rebecca que saluda en un tono de voz alegre. Lleva despierta dos horas
esperando esa llamada. <i style="mso-bidi-font-style: normal;"><span style="margin: 0px;"> </span>- ¡Buenos días, amor mío! ¿Te he despertado?- </i>Le
pregunta inquieta. Ella le responde que no, ella y Elena están desayunando
antes de vestirse para salir a dar el paseo matutino. <i style="mso-bidi-font-style: normal;"><span style="margin: 0px;"> </span>– Ha sido desesperante, el vuelo
se me ha hecho eterno, no hacía más que pensar en ti, que te he abandonado y
eso no lo puedo soportar.- </i>Rebecca esboza una sonrisa. –<i style="mso-bidi-font-style: normal;"> No debes preocuparte, mi hermana se ha
pegado a mí como una lapa y estaré segura todo el tiempo.<span style="margin: 0px;"> </span>Ya nos hemos organizado y todo estará bien.- </i>Continúan
hablando hasta que a Marlene le aparecen los primeros síntomas de sueño, pierde
claridad al conversar, Rebecca se da cuenta y le aconseja que descanse. Marlene
se mete en la cama con una sonrisa feliz después de hablar con su amada.</span></span><span style="font-family: "comic sans ms"; margin: 0px;"><span style="font-size: large;"> </span></span></div>
<br />
<div style="margin: 0px;">
<span style="font-family: "comic sans ms"; margin: 0px;"><span style="font-size: large;">Rebecca pasa la mayor parte de las mañanas
paseando, leyendo o dibujando dentro del castillo, mientras Elena está en la
Universidad. A veces charla de cocina con la señora Lenz. Con Elisabeth de
negocios e incluso con Thomas, al que visita en el taller del castillo. Sin
proponérselo ha construido una rutina que casi le ocupa todo el día. Cada dos
días aparece Ricardo de visita entre profesional y de amigo. Comprueba la
evolución favorable de Rebecca en la salud y en lo anímico. Ella le manifiesta
que solo le falta algo en su vida, Marlene, su presencia es estimulante y
tremendamente enternecedora. <i style="mso-bidi-font-style: normal;">- ¿Sabes que
ella no se separó de ti ni un instante?- </i>Le manifiesta Ricardo en forma de
pregunta. <i style="mso-bidi-font-style: normal;">- ¡Si! La sentía muy cerca. Fue
mi salvación. – </i>Responde mirando al cielo en un tono muy sensiblero. <i style="mso-bidi-font-style: normal;"><span style="margin: 0px;"> </span>– Doy
fe de ello. Cuando se alejaba de ti, tu pulso bajaba de forma alarmante, se
acercaba y te recuperabas. Hice la prueba varias veces, me sentí asombrado, no
lo entendía. Cedí a su pretensión de quedarse a tu lado porque veía que si se
marchaba tu corrías un gran riesgo. – </i>Rebecca extiende sus labios en una
sonrisa gratificadora. </span></span><span style="font-family: "comic sans ms"; margin: 0px;"><span style="font-size: large;">-<i style="mso-bidi-font-style: normal;">
Había oído hablar de ese fenómeno. Lo que nunca pensé es que me pudiera ocurrir
a mí y con dos de mis mejores amistades. Vuestro amor es indestructible Rebecca
y no sabes lo feliz que me siento por ello. Sois dos personas maravillosas y os
lo merecéis. – </i>A Rebecca se le salta una lágrima al oír a su amigo. <i style="mso-bidi-font-style: normal;"><span style="margin: 0px;"> </span>– Ha
pasado una semana y estoy ansiosa por encontrarme de nuevo con ella, es
necesidad coger su mano, abrazarla y besarla. Alimenta mi alma solo con
mirarme. -<span style="margin: 0px;"> </span></i>Le dice embelesada en
sus propias palabras. Ricardo no sabe que decir, él no tiene esa poesía en su
vida, pero está encantado de vivirla de cerca. <i style="mso-bidi-font-style: normal;"><span style="margin: 0px;"> </span>- ¡Bueno! Pues creo que eso lo
harás pronto. Pasado mañana hacemos una última revisión en la clínica y si todo
está como debe ser, podrás viajar a su encuentro. – </i>Rebecca salta de
alegría sobre Ricardo abrazándole y llenando su cara de besos fraternales. <i style="mso-bidi-font-style: normal;"><span style="margin: 0px;"> </span>- ¿De
verdad?- </i>Él responde que si, que ha evolucionado muy bien y que está en
unas condiciones físicas envidiables. – <i style="mso-bidi-font-style: normal;">Pues
tienes que venir conmigo, te lo mereces como premio. Te enseñaremos la ciudad más
cosmopolita del mundo. Tenemos que organizarlo y no acepto un no por respuesta.
– </i>Ricardo rechaza la oferta en un principio por razones evidentes de
trabajo, pero promete visitarlas más adelante. Rebecca piensa en Marlene y lo
feliz que se sentirá en el momento que estén de nuevo la una al lado de la otra
y comienza a planear como será el encuentro. </span></span></div>
<br />
<div style="margin: 0px;">
<span style="font-family: "comic sans ms"; margin: 0px;"><span style="font-size: large;">A la mañana siguiente mientras pasea en
compañía de Elisabeth por los jardines se topa de frente con su hermano
Tristán. </span><i style="mso-bidi-font-style: normal;"></i></span></div>
<b></b><i></i><u></u><sub></sub><sup></sup><strike></strike><span style="font-size: large;"></span>Francisco Freijaneshttp://www.blogger.com/profile/07136887969142331609noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-7189587968703271148.post-78000346366541616912018-11-20T08:23:00.000+01:002018-11-20T08:23:25.117+01:0017ª Entrega
<br />
<div style="margin: 0px 0px 10.66px;">
<span style="font-family: "Comic Sans MS"; margin: 0px;"><span style="font-size: large;"><span style="margin: 0px;"> </span><b style="mso-bidi-font-weight: normal;"><i style="mso-bidi-font-style: normal;">Volver a la vida.</i></b></span></span><span style="font-family: "Comic Sans MS"; margin: 0px;"><span style="font-size: large;"> </span></span></div>
<br />
<div style="margin: 0px 0px 10.66px;">
<span style="font-family: "Comic Sans MS"; margin: 0px;"><span style="font-size: large;">Marlene duerme apoyada
su cabeza sobre el costado de Rebecca que tarda en recuperarse. Abre lentamente
los ojos, pero le cuesta mantenerlos abiertos. Incluso la tenue luz resulta
dolorosa. Finalmente puede concentrar la vista en el jarrón de flores al otro
lado de la habitación. Continua parpadeando tratando de saber dónde se
encuentra. Las blancas paredes no dan indicios y ese terrible sonido del monitor la incomoda. Aprieta los párpados y abre los ojos completamente, respira profunda y mientras el aire llena sus
pulmones, aparecen sus últimos recuerdos llenando su conciencia. Su memoria repite
toda la confrontación con Tristán, el dolor agudo al caer, y luego una última escena
final, Marlene, que se cierne sobre su llanto. Rebecca abre de nuevo sus
pesados ojos tratando desesperadamente de reconocer el entorno. A pesar del desconcierto
de dónde se halla y sus alrededores. No hay confusión en cuanto a quién busca. <i style="mso-bidi-font-style: normal;">- ¿Marlene? –</i> Trata de que su voz se esfuerce
por ir más allá de un susurro. <i style="mso-bidi-font-style: normal;">-
¿Marlene? -</i> Es entonces cuando se da cuenta. Marlene está maravillosamente dormida
a su lado. Coloca la mano encima de su pelo y lo acaricia, luego le toma de la
mano y la envuelve con la suya. Escanea el resto de la habitación percibiendo
finalmente cual es el entorno dónde se encuentra. Se concentra en el amor que
duerme a su lado. Una vez más, y esta vez con un suave apretón de la mano de
Marlene, Rebecca susurra. <i style="mso-bidi-font-style: normal;">- ¡Marlene! -</i><span style="margin: 0px;"> </span>Ella siente los párpados como pesados, muy pesados.
El agotamiento todavía mantiene capturada a Marlene, pero el sonido de su
nombre la hace luchar contra su necesidad de dormir. Oye el susurro de su
nombre. <i>- ¡Marlene! -</i> E</span></span><span style="font-family: "Comic Sans MS";"><span style="font-size: large;"><span style="margin: 0px;">sta vez lo escucha acompañada por una suave caricia
en su mejilla. Lucha contra la necesidad de dormir y se obliga a abrir los ojos.
La aguarda una oleada en su cuerpo que será como las primeras mariposas de amor
mezcladas con el temor y de que todo fuera un sueño. Mira fijamente a la causa
por lo que había estado orando durante los últimos días. Puede sentir que sus
propios ojos comienzan a llenarse de lágrimas al contemplar de nuevo los
hermosos ojos marrones de Rebecca. Tiene miedo de parpadear, está asustada de
que en realidad no sea más que un sueño. <i style="mso-bidi-font-style: normal;">-
¿Rebecca?</i>- <span style="margin: 0px;"> </span>Rebecca confirma el hecho
de que Marlene no sueña, sonríe al oír la voz de Marlene. El alivio y la
excitación en Marlene borran de su rostro cualquier signo de agotamiento que
pudiera haber tenido. Sabiendo que Rebecca continua en estado frágil, con su
temblorosa mano acaricia cuidadosa el rostro de Rebecca. No hacen falta más pruebas
para demostrar que no está soñando. Con el pulgar limpia suavemente la lágrima
que escapa por el exterior del ojo de Rebecca. <i style="mso-bidi-font-style: normal;">- ¡Oye! -</i> Rebecca le susurra. <i style="mso-bidi-font-style: normal;">-
¡Oye, tú! - </i>La sonrisa de Marlene provoca una lágrima y en una vertiginosa risa
la acompaña. Con la mayor ternura besa los labios de Rebecca. Nunca lo había puesto
tan dulce. Nunca un beso significó más para ella. A pesar de que todavía estaba
en una nube drogadicta por los medicamentos, Rebecca también percibe que el
beso de Marlene es la mejor sensación de siempre, quería más, pero al acercar
más a Marlene se da cuenta de la gravedad de su situación. El dolor atraviesa
su cuerpo, es incapacitante y hace que Marlene se separe. Ella responde de
inmediato fijando su atención en los gestos el dolor de Rebecca, y se despierta
en su conciencia la necesidad de hacer que se lo calmen. Inmediatamente alcanza el botón
de llamada con la esperanza de que Ricardo, la enfermera o cualquier persona
llegue rápidamente para aliviar el malestar que la está incordiando. En este
punto, los pies de Marlene están listos para arrastrar a una enfermera allí, si
tenía que hacerlo, pero afortunadamente Ricardo se abre paso a través de la
puerta. <i style="mso-bidi-font-style: normal;">- ¡Ricardo, está sufriendo,
tienes que hacer algo para el dolor! -</i> Marlene está ansiosa y su carácter
protector se ha activado con fuerza. No queriendo inquietar a Marlene, Rebecca
hace todo lo posible por no mostrar cuánto dolor está soportando. Ricardo llega
a su lado. <i style="mso-bidi-font-style: normal;">– Estoy encantado de ver que
ya estás alerta.-</i> Responde. <i style="mso-bidi-font-style: normal;">- ¡Hola
mi amigo! -</i> Rebecca sonríe forzando el gesto. <i style="mso-bidi-font-style: normal;">- ¡Hola.-</i>
Le responde y se dirige de inmediato a la enfermera que lo había seguido, dando
orden que preparare los medicamentos para el dolor que necesita. Marlene ronda
mientras Ricardo examina a Rebecca. <i style="mso-bidi-font-style: normal;">- Respira
profundo. -</i> Le ordena Ricardo mientras escucha atentamente el corazón y los
pulmones de Rebecca, satisfecho, su sonrisa le brinda alivio a Marlene. <i style="mso-bidi-font-style: normal;">- Todo está sonando muy bien, los signos
vitales de Rebecca están donde deben estar. -</i> En ese momento la enfermera inyecta
en el suero el medicamento para el dolor prescrito. <i style="mso-bidi-font-style: normal;">- Y esto pronto hará efecto, mitigará la mayor parte de tu malestar. - </i>Expresa
Ricardo mientras la enfermera hace su trabajo buscando el alivio de la paciente.
<i style="mso-bidi-font-style: normal;">- Nos habéis dado un susto de muerte,
pero ahora que estáis despiertas tengo plena fe de que os recuperaréis
completamente. -</i> Marlene se aparta con Ricardo mientras la enfermera
mantiene su atención en Rebecca. <i style="mso-bidi-font-style: normal;">- Gracias
Ricardo por todo lo que has hecho, sé que Rebecca nunca habría sobrevivido sin
tu gran cuidado. - </i>Exclama Marlene con aire de aprecio<i style="mso-bidi-font-style: normal;">. - Rebecca es una de mis amigas más queridas, siempre he mantenido un
interés cercano sobre ella. El hecho de que ahora esté despierta y alerta es un
paso en la dirección adecuada. Sin embargo, ella todavía está sanando y es
importante que no sufra ningún estrés. Me gustaría mantenerla todavía durante
un día más en la UVI para controlar cualquier signo extraño que aparezca de la hemorragia
interna sufrida. Después de examinarla no veo ninguna razón por la qué Rebecca
no puede tener una recuperación completa. -</i> Marlene no puede contener su
felicidad, coge a Ricardo por sorpresa al abrazarle alrededor de su cuello.
<i style="mso-bidi-font-style: normal;">- Ricardo es la mejor noticia que he escuchado,
no se cómo puedo agradecértelo. </i>- <span style="margin: 0px;"> </span>La
felicidad de Marlene contagia a Ricardo y él sonríe, pero no pierde el sentido
de la realidad<i style="mso-bidi-font-style: normal;">. - ¡Bueno! No quiero
atribuirme todo el éxito, tú has sido una parte muy importante en que regrese
entre nosotros, tu amor la ha salvado. Ahora necesito atender a otros pacientes
en este momento. Estoy feliz por vosotras Marlene. Sé que esto no ha sido fácil
para ninguna de las dos ..</i>.- Le embarga la emoción<i style="mso-bidi-font-style: normal;">. - De verdad que me voy a ir. Estoy seguro de que Rebecca estará bien
cuidada contigo a su lado.-</i> Ella le mira contenta. <i style="mso-bidi-font-style: normal;">- Naturalmente.-</i> La sonrisa de Marlene crece al ver a Rebecca ya
relajada, una vez que la enfermera termina sus deberes. Rápidamente recupera el
puesto a su lado. Toma la mano de Rebecca entre las suyas. <i style="mso-bidi-font-style: normal;">- ¡Marlene! –</i> La llama con una sonrisa y una voz aún débil pero
hermosa. Le dice que está empezando a sentir los efectos de alivio de los
medicamentos y el dolor se está marchando. Ya casi aliviada, se concentra en Marlene en lugar
de su incomodidad. <span style="margin: 0px;"> </span><i style="mso-bidi-font-style: normal;">- ¡Dios! Nunca he estado tan feliz de oírte decir mi nombre.-</i>
Marlene besa ansiosamente la mano de Rebecca y luego la sostiene pegada a su
mejilla. No puede evitar una vez más las lágrimas por la alegría de que Rebecca
la mirara. No dejan de mirarse a los ojos con pasión encendida. <i style="mso-bidi-font-style: normal;">- ¡Lo
siento mucho!</i> – Marlene pide perdón a Rebecca<i style="mso-bidi-font-style: normal;">. <span style="margin: 0px;"> </span>- ¿Perdón por qué? - </i><span style="margin: 0px;"> </span>Pregunta a Marlene.<span style="margin: 0px;"> </span><i style="mso-bidi-font-style: normal;">- Nunca
debería haberte puesto en peligro, nunca debería haber permitido que Tristán se
acercara, tu has pagado las consecuencias de la virulencia de tu hermano para
conmigo.-</i><span style="margin: 0px;"> </span>Rebecca levanta la mano y pone un dedo en su boca. <i>-Shhhh, para, para
ahora, no tienes la culpa, no hay necesidad de discutir esto más, se acabó,
todo ha terminado. Nos casaremos y nos iremos de aquí, como teníamos planeado.
Eso es todo lo que quiero. - </i>Marlene
se tranquiliza.<span style="margin: 0px;"> </span><i style="mso-bidi-font-style: normal;">- ¿Cómo que terminó? ¿Qué quieres decir? -</i> Marlene no está segura
de que Rebecca ese encuentre en situación para decidir alguna cosa en estos momentos. <i style="mso-bidi-font-style: normal;">– Mi hermano no nos volverá a molestar, no
volveremos a verle nunca más, para mí está desaparecido. -</i>Marlene respira
con profundidad<i style="mso-bidi-font-style: normal;">. -¡Lo siento Rebecca! Pero
Tristán no ...-</i> Rebecca detiene a Marlene en medio de la frase. – <i style="mso-bidi-font-style: normal;">Espera. Se que esto ha sido un desgraciado
accidente, el no lo hizo de forma intencionada, pero sus acciones,
intencionadas o no, siempre acaban mal, lo más seguro es mantenerle alejado,
porque a su lado no sabes lo que puede suceder. -</i><span style="margin: 0px;"> </span>Se entristece algo por el comentario de
Rebecca, Marlene quiere ser sincera con ella, debe narrarle la visita que le
hizo hace dos días.<span style="margin: 0px;"> </span><i style="mso-bidi-font-style: normal;">- Tristán está muy afectado…-</i> <span style="margin: 0px;"> </span>En pocos minutos le cuenta como se desarrolló
la conversación y lo confuso que estaba. <i style="mso-bidi-font-style: normal;">–
Le dolía en el alma verte ahí sin conocimiento y al borde del abismo. Reconocí
el arrepentimiento en su mirada y me dijo también que lo sentía, que todo lo
que había hecho por hacernos daño que había sido un error. ¡Ah! También me dijo
que había sido tu héroe.-</i> Rebecca aspira aire con lentitud<i style="mso-bidi-font-style: normal;">. – Aún así creo que alejarnos no es una
broma. El es gafe cuando se trata de nosotras. Creo que he podido morir y te
hubiese dejado sola.-</i><span style="margin: 0px;"> </span>Busca a
Marlene para acercarla más a ella. <i style="mso-bidi-font-style: normal;">- Y yo
nunca habría sobrevivido si eso hubiera ocurrido. Te amo. - </i>Es todo lo que
Marlene podía pensar en decir para devolver el afecto de Rebecca. <i style="mso-bidi-font-style: normal;">– Y yo también te amo.-</i> Rebecca está
empezando a sentir los efectos de somnolencia del medicamento para el dolor. <i style="mso-bidi-font-style: normal;">- ¿Crees que podrías hacer algo por mí?- </i>Pregunta
con misterio. <i style="mso-bidi-font-style: normal;">- Haré todo lo que
necesites. -</i> Responde Marlene. <i style="mso-bidi-font-style: normal;">- ¡Abrazarme
de nuevo! -</i> Marlene no puede evitar cumplir el pedido de Rebecca. De hecho,
es lo único que ella quería hacer. Por no hablar de mirar esa cara preciosa y
esos ojos marrones que la iluminan. Marlene nuevamente se coloca con cuidado
junto a Rebecca y las dos cogidas de la mano. Marlene rompe el breve silencio y
se posa sobre su codo para mirar a Rebecca a los ojos. - <i style="mso-bidi-font-style: normal;">Estos últimos días pasé miedo de perderte para siempre. Fue un
sufrimiento horrible</i>. – Le cuenta con algo de sentimiento, necesita liberar
su angustia. <i style="mso-bidi-font-style: normal;">- Lo siento Marlene.-</i> <span style="margin: 0px;"> </span>Rebecca se siente ligeramente culpable por haber
preocupado a Marlene. Ella responde. <i style="mso-bidi-font-style: normal;">– No
quiero estar sin ti. ¿Entiendes?-</i> <span style="margin: 0px;"> </span>Libera
su ansiedad acumulada. Los ojos azules de Marlene sólo<span style="margin: 0px;"> </span>refuerzan su declaración. Rebecca asiente con
la cabeza. Comprende la sinceridad de Marlene y le responde. <i style="mso-bidi-font-style: normal;">- Entonces contigo, para siempre, es donde
me quedaré, donde quiero quedarme. Es donde quiero vivir, donde tu estés,
viviré yo.-</i> Marlene sella el trato con un beso que está lleno de amor.</span></span></span></div>
<span style="font-family: "Comic Sans MS";"></span><span style="font-size: large;"></span><br />
<div style="margin: 0px 0px 10.66px;">
<br /></div>
<b></b><i></i><u></u><sub></sub><sup></sup><strike></strike><span style="font-size: large;"></span>Francisco Freijaneshttp://www.blogger.com/profile/07136887969142331609noreply@blogger.com1tag:blogger.com,1999:blog-7189587968703271148.post-45817643299441629482018-11-16T08:05:00.000+01:002018-11-16T08:05:28.603+01:0016ª Entrega
<br />
<div style="margin: 0px 0px 10.66px;">
<b style="mso-bidi-font-weight: normal;"><i style="mso-bidi-font-style: normal;"><span style="font-family: "Comic Sans MS"; margin: 0px;"><span style="font-size: large;">Tiempo de esperanza</span></span></i></b></div>
<br />
<div style="margin: 0px;">
<span style="font-family: "Comic Sans MS"; margin: 0px;"><span style="font-size: large;">Marlene abre los ojos cansinamente. El
agotamiento está empezando a cobrar su precio, pero ella permanece fiel al lado
de Rebecca. Han transcurrido dos días y medio, ella permanece inconsciente, ya
no precisa respiración asistida, ayer se la retiró Ricardo después de comprobar
que podía hacerlo de forma espontánea, pero Marlene continua esperando
pacientemente el momento en que pudiera volver a mirar sus bellos ojos
marrones, espera sufrida que Rebecca la llame una vez más, para borrar el
doloroso sonido de la última vez que dijo su nombre antes de que las sombras la
cubrieran. Marlene sacude la cabeza para alejar la repetición de aquel momento
de su memoria. Afortunadamente para ella un golpe en la puerta la distrae de
esos pensamientos. Marlene se cohíbe y se tensa un poco cuando ve quien está
delante de ella. <i style="mso-bidi-font-style: normal;">- ¿Tristán? –</i>
Exclama con cautela y se incorpora en actitud defensiva. De pronto percibe que
la ansiedad la invade pensando en lo que puede venir a continuación, no está en
condiciones de discutir con él de nuevo, pero está preparada para mantenerse
firme. Exhala un suspiro de alivio cuando él le entrega una taza de café. <i style="mso-bidi-font-style: normal;">- ¡Gracias! -</i> En realidad se siente
agradecida por el caliente líquido. Necesita algo de calor y energía. Tristán
asiente y dirige su atención a Rebecca. Camina hacia el lado opuesto de la
cama, él acaricia nervioso la mano de Rebecca. <i style="mso-bidi-font-style: normal;">- ¿Alguna vez te contó que la perdimos? -</i> Marlene abre los ojos. <span style="margin: 0px;"> </span><i style="mso-bidi-font-style: normal;">- ¿Cómo
que la perdisteis? -</i> Marlene se da cuenta que Tristán está afectado por el
estado de su hermana. Él sonríe entre dientes al recordar aquel suceso. <i style="mso-bidi-font-style: normal;">- ¡Sí! Bueno, no sólo fui yo, todos nosotros
habíamos salido al bosque un día, Rebecca tenía unos cinco años y, por
supuesto, tenía dificultades para mantenerse cerca. Lo siguiente que todos
recordamos es que no estaba alrededor nuestra. La buscamos durante horas, no
sólo temíamos lo que pudiera haberle sucedido, también lo que nos pasaría a
nosotros una vez que nuestra madre se enterara de que la habíamos perdido. – </i>Explica
Tristán con cierta gracia. <i style="mso-bidi-font-style: normal;">- ¿Cómo la
encontraste? - </i>Pregunta Marlene con gran interés. De nuevo Tristán sonríe.
A pesar de todo lo que Rebecca y Marlene han pasado con Tristán, Marlene puede
ver el amor evidente que tiene por ella. <i style="mso-bidi-font-style: normal;">-
¡Bueno! Resulta que realmente no estaba tan perdida como pensábamos. Como estoy
seguro de que eres consciente de que mi hermana tiene un lado terco y obstinado.
Ella simplemente se subió a un árbol y se encaramó muy por encima de nosotros.
Contemplaba divertida como la buscamos frenéticamente por todas partes. Finalmente
comenzó a sentirse mal porque estábamos muy preocupados y trató de bajar, pero
descubrió que no era tan fácil. Primero la oímos llorar, no pidió ayuda,
levanté la vista y pude comprobar lo asustada que estaba, subí hasta ella lo
más rápido que mis manos me permitieron, nunca olvidaré cómo se aferró a mí.
Hagen, era ya muy grande y acudió a nuestro rescate. Esta vez yo fui el héroe. Yo
era el héroe de Rebecca. Sé que era así, porque eso es lo que me llamó. Su
héroe. - </i>Tristán comienza a ahogarse en sus propias palabras mientras trata
de contener su emoción. <i style="mso-bidi-font-style: normal;">- Nunca había
sido un héroe para nadie. Le prometí que siempre sería su héroe. -</i> Tristán
deja de hablar mientras mira con ternura a su hermana pequeña, a la que obviamente
ama grandemente. Marlene no está segura de qué hacer o decir. <i style="mso-bidi-font-style: normal;">- No he sido un buen héroe. ¿Verdad? -</i> <span style="margin: 0px;"> </span>Nuevamente Marlene no está segura de cómo
responder, sobre todo porque ella tiene cierta sensación de culpabilidad,
recordando cómo lo utilizó de forma inconsciente para conseguir a Rebecca<i style="mso-bidi-font-style: normal;">. - Ser héroe de alguien a veces puede ser
una cosa difícil de vivir hasta, afortunadamente ... para nosotros dos ...
Rebecca tiene… es capaz de perdonar. -</i> Marlene trata de explicarse entre
dudas. <i style="mso-bidi-font-style: normal;">- La amas como lo dices
continuamente, realmente no es una pose ni un capricho. ¿verdad? -</i>Tristán
sigue enfocándose en Rebecca mientras hace la pregunta<i style="mso-bidi-font-style: normal;">. - Sí, más que nunca. Mi vida carece de sentido si ella no está. - </i>Marlene
responde con una cuidadosa consideración. Tristán afirma con la cabeza. <i style="mso-bidi-font-style: normal;">- ¡Yo también! -</i> Marlene recibe con
sorpresa la siguiente declaración de Tristán, se vuelve hacia ella para mirarla<i style="mso-bidi-font-style: normal;">. - ¡Lo siento! Lo siento por todo lo que he
hecho, a las dos.-</i> Marlene se queda sin habla, no encuentra palabras y sólo
es capaz de asentir con la cabeza<span style="margin: 0px;">
</span>aceptando su disculpa. Tristán pasa junto a Marlene, pero antes de salir
por la puerta se vuelve. <i style="mso-bidi-font-style: normal;">- Ahora eres mi
héroe. –</i> Le dice Marlene con paz en la mirada. <span style="margin: 0px;"> </span>Con ese comentario final en su oído se marcha.
</span></span></div>
<br />
<div style="margin: 0px;">
<span style="font-family: "Comic Sans MS"; margin: 0px;"><span style="font-size: large;">Marlene percibe firmemente que la paz está
sellada con Tristán. Se dirige de nuevo al lado de Rebecca, donde ha
permanecido durante estos días. Una vez más, sigue con la mirada todos los
tubos a los que está unida. Envidia del hecho de que estén más cerca de Rebecca
que ella. ¡Cómo le duele tener a Rebecca en esta situación! Marlene ya no puede
resistir la necesidad de tener a Rebecca cerca de ella. Cuidadosamente se acerca
a la cama y se coloca a su lado, mueve su cuerpo para ajustarse lo mejor que puede
a su costado. Con suavidad, apoya la cabeza en el pecho de Rebecca, donde una
vez más la tranquiliza el sonido del corazón. <i style="mso-bidi-font-style: normal;">- No necesito ser tu héroe, simplemente quiero ser tuya para siempre. -</i>
Le susurra suavemente cerca del oído. <span style="margin: 0px;"> </span><i style="mso-bidi-font-style: normal;">- Te quiero Rebecca, por favor, vuelve a mí.
-</i> No hay respuesta a la petición de Marlene. Con un suspiro y su corazón
pesaroso, coloca la cabeza en el pecho de Rebecca y los dedos enlazados con los
de ella. Marlene ya no puede luchar contra el agotamiento que consume su
cuerpo. Lentamente sus ojos se cierran, el rostro pacífico de Rebecca es la
visión que aparece en sus sueños.</span></span><span style="font-family: "Comic Sans MS"; margin: 0px;"><span style="font-size: large;"> </span></span></div>
<br />
<div style="margin: 0px;">
<span style="font-family: "Comic Sans MS"; margin: 0px;"><span style="font-size: large;">Ricardo entra en la sala en compañía de la
enfermera, Marlene duerme reposada su cabeza sobre el costado de Rebecca. Él la
mira con candidez, se acerca con lentitud y le toca con su mano en el hombro.
Ella está dormida en profundidad y no responde a un primer estimulo. A Ricardo
le cuesta despertarla pues el cansancio es tan grande que duerme sin conexión
con la realidad. Por fin se sacude ligeramente y levanta la mirada buscando
ubicarse. Da un respingo al ver a su lado a la enfermera y a Ricardo que sonríe
ante el susto de Marlene. - <i style="mso-bidi-font-style: normal;">¿Qué pasa?
¿Ha sucedido algo? Ricardo ¿Por qué estás aquí? – </i>Ella habla sobresaltada,
él la tranquiliza. – <i style="mso-bidi-font-style: normal;">No te preocupes, no
pasa nada. Estabas dormida y te he asustado sin querer. - </i>Le dice con una
sonrisa y acaricia su cara con complacencia. <i style="mso-bidi-font-style: normal;">– Queremos hacerle una prueba a Rebecca, si la supera la dejaremos sin
el tubo de respirar. Será una buena noticia si responde de forma positiva. – </i>Marlene
se espabila y abre los ojos buscando tener mayor claridad en su cabeza. Entran
dos médicos llevando un carrito con instrumentos y monitores que ella no
entiende. Ricardo ordena que procedan, ellos obedecen y enseguida descubren
algunos de los tubos que penetran en el cuerpo de Rebecca. Uno de los médicos
enseña un bote al final de un tubo, Ricardo asiente y él procede a retirar
dicho tubo del cuerpo de Rebecca. Por la parte superior el otro facultativo
desconecta el tubo por el que respira y Ricardo acerca el estetoscopio a un
costado y escucha, luego al otro haciendo la misma maniobra. Con un gesto de
aprobación el tubo de su boca es extraído mientras él mantiene la escucha a
través de la piel de Rebecca. Repite la maniobra varias veces por todo el pecho
de la inconsciente Rebecca hasta que levanta la vista y mira el monitor
cardiaco. Marlene asiste a toda esta tarea con gesto compungido ante la
incertidumbre de lo que pueda pasar. Ricardo se vuelve hacia ella con ese gesto
serio que le caracteriza, a ella le entra una angustia atroz. - <i style="mso-bidi-font-style: normal;">¡Prueba superada! Rebecca es realmente
fuerte, está respirando por si misma sin ayuda y sin apoyo. Ahora solo cabe
esperar. Todos los parámetros están correctos, le falta recuperar algo de
sangre, pero está en índices aceptables. Todo depende ahora de ella misma. Si
es lo que pienso no tardará en recuperar el conocimiento. Está fuera de
peligro. - </i>Marlene abraza a Ricardo con fuerza, es la primera buena noticia
desde el accidente y siente que el cansancio ha desaparecido. Una vez retirados
los tubos que tanto aterraban a Marlene y que los médicos abandonen la sala,
entran las enfermeras y auxiliares para asear a Rebecca y adecentar la ropa de
la cama cambiándola por otra limpia. </span></span></div>
<br />
<div style="margin: 0px;">
<span style="font-family: "Comic Sans MS"; margin: 0px;"><span style="font-size: large;">Poco después aparecen Elisabeth y Elena con
un ramo de flores en la mano. Elisabeth reconoce la palidez de Rebecca y
pregunta si está bien, Marlene le responde que está mejorando y que, aunque aún
permanece dormida sabe que despertará en cualquier momento, que espera ese
instante con impaciencia, pero con la serenidad que le ha transmitido Ricardo.
Ellas están impresionadas por la entereza de Marlene, que no la haya abandonado
durante estos tres días ni un solo instante, les dice lo mucho que ama a
Rebecca le dice a su hermana y a Elisabeth que no puede contener la emoción. – <i style="mso-bidi-font-style: normal;">Rebecca es lo más importante de mi vida
ahora, no puedo vivir si ella no está, es mi ancla de existencia, mi alma
gemela y el ser humano más grande que conozco. – </i>Les dice a las dos mujeres
que más tarde abandonan la estancia profundamente impresionadas por lo que han
visto y oído, Elena se echa a llorar al encontrarse con Hagen y Dana en la sala
de espera. Hagen se asusta, pronto se da cuenta de que no sucede nada trágico,
Elena se ha desbordado emocionalmente.</span></span></div>
<br />
<div style="margin: 0px;">
<span style="font-family: "Comic Sans MS"; margin: 0px;"><span style="font-size: large;">Thomas y Biggy se presentan en la sala de
espera con los dos pequeños. Alguien avisa a Marlene de su presencia y desea
salir, pero le resulta complicado abandonar, aunque sea unos instantes, a
Rebecca para abrazar a su hijo. Sin decir nada a nadie Dana coge al pequeño
Tomy en brazos y entra en la sala, con celeridad se presenta en la puerta de la
habitación de Rebecca y abre ligeramente la puerta para llamar a Marlene, sale
y el pequeño se abalanza sobre ella que lo abraza con fuerza y lágrimas en los
ojos. No le resulta fácil volver a soltarlo, antes de despedirse, Dana y ella
se abrazan también deseando lo mejor. Marlene regresa al lado de Rebecca para
seguir esa inacabable espera. </span></span></div>
<br />
<div style="margin: 0px 0px 10.66px;">
<br /></div>
<b></b><i></i><u></u><sub></sub><sup></sup><strike></strike><span style="font-size: large;"></span>Francisco Freijaneshttp://www.blogger.com/profile/07136887969142331609noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-7189587968703271148.post-91009239091258677562018-11-13T08:47:00.000+01:002018-11-13T17:20:00.116+01:0015ª Entrega<br />
<div style="margin: 0px 0px 10.66px;">
<span style="font-family: "comic sans ms"; margin: 0px;"><span style="font-size: large;"><span style="margin: 0px;"> </span><i><b>A vida o muerte</b></i></span></span></div>
<br />
<div style="margin: 0px;">
<span style="font-family: "comic sans ms"; margin: 0px;"><span style="font-size: large;">Completamente entumecida sentada en el suelo de la sala
de espera del hospital no puede controlar el flujo de lágrimas que discurren
por sus mejillas.<span style="margin: 0px;"> </span>Su cuerpo se sacude
por un escalofrío como si fuera una puñalada helada. Entumecimiento, eso es
todo lo que puede permitirse sentir mientras mira hacia adelante sin ver nada
de lo que por allí sucede. Todavía está desencajada por la visión y la
sensación del cuerpo abatido de Rebecca en sus brazos y el oír su nombre en las últimas palabras <span lang="ES" style="font-family: "Comic Sans MS"; line-height: 107%; margin: 0px;">que
pronunció antes de perder el conocimiento</span>. La escena se repite entera en su mente una y otra vez,
prolongando que las lágrimas aumenten su intensidad. <i style="mso-bidi-font-style: normal;">- ¿Marlene? </i>– Suena una voz familiar, Thomas explora desde la
puerta buscando a su hija. Él no está preparado para ver a su primogénita en
sufrimiento, perdida la mirada, con la ropa manchada de sangre y sentaba en el
suelo completamente desvalida. Ama a sus hijas incondicionalmente, pero siempre
hay algo especial en Marlene. No fue la muerte de su madre lo que la separó de
los demás. Ella era la hija predilecta. Dana y Kim heredaron de su madre los
ojos oscuros y cabello, pero Marlene tiene los ojos azules y cabellos rubios, se
parece a él, pero con la personalidad de Vicki. Marlene se había convertido en
la fuerza, la lógica, la sabiduría y la belleza que había atesorado su madre. En
este momento, todo lo que Thomas puede ver ante si es a su niña presa por el
dolor. Se arrodilla a la altura de los ojos de Marlene<i style="mso-bidi-font-style: normal;">. - ¿Marlene? -</i> Ella continua mirando fija hacia delante, la luz de
sus ojos no brilla, está apagada, ha perdido la irradiación que de vida que proyecta
de forma permanente. Con pausa gira la cabeza para encontrar la mirada de su
padre. Una vez que hace contacto visual con el hombre, con su protector,
Marlene se deja inundar por el dolor que consume cada centímetro de su cuerpo y
alma. <i style="mso-bidi-font-style: normal;">- ¡Papá! –</i> Es todo lo que puede
expresar con la tristeza plasmada en el rostro, antes de que la fuerza de su
dolor se derrame en sollozos incontrolables. Se aferra a su padre como lo hacía
de niña cuando él la consolaba, después de sus peleas con las pesadillas. Como
había hecho tantas veces cuando era pequeña, la recoge en sus brazos y la abraza
con fuerza. Trata de darle la misma comodidad y tranquilidad que había hecho siempre
que lo necesitó. Le duele mucho verla herida. De todos sus hijos Marlene ha
sido la que ha experimentado los mayores obstáculos en la vida. El asunto de
Dana y Hagen. Alexander que la violó y hubo de abortar. La pérdida de su voz y
de su carrera a manos de Tristán, y la separación de Rebecca, pero de todos
esos acontecimientos nunca la había visto tan rota. Nunca se había derrumbado
por el puro dolor de la situación. Thomás empatiza con su dolor. Son los mismos
sentimientos que lo consumieron después de la muerte de Vicki. Él había
cuestionado la elección de Marlene cuando le dijo todo lo concerniente a su amor
por Rebecca. Tuvo que admitir lo que sucedía, muchas veces pensó que aquello
sería una fase de la vida, pero ahora, viendo lo que le afectó todo el tiempo
que estuvo separada de Rebecca y su aspecto dolorido después de los sucesos de
la mañana, ya no piensa que fuera una fase de la vida, sino la de un amor
verdadero. La atrae más fuerte y le besa la parte superior de la frente
mientras la percibe cada vez más débil y desesperada. </span></span></div>
<span style="font-size: large;"></span><br />
<div style="margin: 0px;">
<span style="font-family: "comic sans ms"; margin: 0px;"><span style="font-size: large;">Ha transcurrido
más de una hora, ambos siguen sentados en silencio. Todavía la mantiene abrazada,
consigue que se siente en la butaca mientras trata de que recobre la
compostura. El silencio es interrumpido por Dana y Kim que entran muy ofuscadas
en la estancia. <i style="mso-bidi-font-style: normal;">- Hola, papá.-</i><span style="margin: 0px;"> </span>Kim saluda primero a su padre y se arrodilla
al lado de su hermana, Dana toma a Marlene de la mano y, al hacerlo, siente la
cadena del collar de Rebeca que ella aprieta con fuerza. <i style="mso-bidi-font-style: normal;">- ¿Marlene? -</i> Pregunta Dana con preocupación. Ella mira la pieza
simbólica de joyería en su mano. <i style="mso-bidi-font-style: normal;">- La enfermera
me lo trajo poco después de que se llevaran a Rebecca. -</i> Marlene acaricia
suavemente los dedos sobre oscura piedra y no puede evitar la lágrima que se le
escapa de su ojo.<span style="margin: 0px;"> </span>Kim alcanza y recoge el
collar de sus manos y lo engarza amorosamente alrededor del cuello de Marlene
dejándolo junto al de color fósforo sobre su pecho. <i style="mso-bidi-font-style: normal;">- Ahora estará a salvo hasta que pueda
volver a usarlo. –</i> Le dice Kim mientras limpia suavemente las lágrimas de Marlene. Ella mira alrededor el amor que la rodea y agradece a su padre y hermanas
que la cuiden y la amen tanto como ella. <i style="mso-bidi-font-style: normal;">-
¡Vamos! Vamos a limpiarte, te traje ropa para cambiarte, y una vez que estés
lista podremos volver al vestíbulo para ver si hay alguna novedad más sobre la
situación de Rebecca. -</i> Ofrece su
mano para ayudarla a levantarse. <i style="mso-bidi-font-style: normal;">- Tengo
miedo Dana, ¿Y si no sale? Cuando llegamos, Ricardo no estaba seguro de que pudiera
sobrevivir ... Sangre ... Dana ... Perdió mucha sangre.-</i> Marlene lucha por
mantenerse bajo control. Con la ayuda de su hermana, se levanta y se dirige al cuarto
de baño, delante del espejo, puede ver la evidencia de la vida de Rebecca
empapada en los hilos de su camisa, huellas de rojo aún manchan sus ropas. La
visión de las manos de Marlene tratando de contener la pérdida de sangre de
Rebecca hasta el momento en que los paramédicos llegaron reaparece en su mente.
<i style="mso-bidi-font-style: normal;">- Lo he intentado Dana, he intentado
salvarla. -</i> Dana ve claramente que Marlene está todavía en estado de shock<i style="mso-bidi-font-style: normal;">. <span style="margin: 0px;"> </span>- Marlene
Todavía hay esperanza, Ricardo y su equipo están en el quirófano ahora haciendo
todo lo que pueden, llegó al hospital viva por ti. –</i> Le dice dulce pero
firme a su hermana. <span style="margin: 0px;"> </span><i style="mso-bidi-font-style: normal;">- Dana tiene razón Marlene, todavía hay esperanza, Rebecca es una
luchadora, y sabe que estás aquí esperando por ella. -</i> Kim la tranquiliza. Salen
del cuarto de baño, una vez Marlene ha cambiado su ropa por una limpia y se ha
lavado cara y manos de la sangre de Rebecca. Thomas hace por verse frente a
frente con Marlene. <i style="mso-bidi-font-style: normal;">- ¡Sabes! Un padre
nunca cree que alguien amará a su hija tanto como él la ama, y yo sabía que
ningún hombre podría hacerlo, yo tenía razón, pero esa mujer, es Rebecca von
Lahnstein la que te ama con toda el alma. He tenido mis momentos con la familia
Lahnstein, pero hay una cosa que tengo que admitir como Wolf, son fuertes y son
luchadores. Pelean duro por lo que aman y quieren. Rebecca es fuerte y no tengo
ninguna duda de que ella quiere volver a ti,</i> <i style="mso-bidi-font-style: normal;">y eso es porque te ama.-</i> Por primera vez desde que llegó al
hospital Marlene siente una chispa de<span style="margin: 0px;">
</span>esperanza oyendo hablar a su familia. Como una niña obediente está
conforme con las palabras de su padre<i style="mso-bidi-font-style: normal;">. -
Ahora voy a salir por un momento y dejaré que tus hermanas terminen de
adecentarte.</i> - Thomas se vuelve para irse, pero es detenido por el abrazo
de Marlene alrededor de su cuello. <i style="mso-bidi-font-style: normal;">- Tal
vez mi amor por una mujer fue porque sabía que nunca podría amar a otro hombre
más que a ti.</i> – Marlene le susurra con mimo. Thomas sonríe y abraza a su
hija con fuerza, con un beso en la mejilla la deja en las cuidadosas manos de
sus hermanas. Finalmente, limpia y con ropa fresca, Marlene comienza a sentirse
un poco aliviada. No tener el sangriento recordatorio de la desgracia de
Rebecca salpicada por su cuerpo la ayuda a recuperar parte de su fe. <i style="mso-bidi-font-style: normal;">- ¡Ahí! -</i> Dana endereza el cuello de la
blusa de Marlene. Feliz de que esta vez pueda estar allí para Marlene como
había sido tantas veces al revés. Dana también comprende lo que siente Marlene,
recordando su propio dolor cuando se creyó que Hagen estaba muerto. Ver la pena
que ahora aflige a su hermana mayor hace que se sienta agradecida, ella reza
por el mismo feliz resultado para Marlene y Rebecca, como cuando regresó Hagen.
<i style="mso-bidi-font-style: normal;">- ¡Gracias! Gracias a las dos. -</i> Marlene
expresa con voz ronca mientras busca un último y consolador abrazo de grupo de
sus hermanas. Más evidencia de su cercanía<i style="mso-bidi-font-style: normal;">.
<span style="margin: 0px;"> </span>- Rebecca ha estado en el quirófano ya un
par de horas, estoy seguro de que Ricardo o una de las enfermeras saldrá pronto
para darnos buenas noticias. - </i>Kim quiere ser portadora de buenas noticias.
Marlene respira hondo y se muestra conforme con el planteamiento de su hermana.
Con renovada fuerza y fe de su familia, está lista para esperar las noticias sobre
el estado de Rebecca. </span></span></div>
<div style="margin: 0px;">
<span style="font-family: "comic sans ms"; margin: 0px;"><span style="font-size: large;">Pero lo que Marlene no había previsto era la oleada
Lahnstein. Entran en tromba mientras se acomodaba en la sala de espera. Todos
estan allí. Elizabeth, Elena, Sebastian, Hagen, Tanja y Ansgar, y luego Tristán. La
atención de Marlene se fijó en él principalmente en parte debido a la maniobra
que lanzó a Rebecca al suelo y fue causa del accidente. Inmediatamente se
acercó ella. <i style="mso-bidi-font-style: normal;">- ¿Cómo te atreves a venir
aquí? –</i> Marlene ladra en lugar de hablar. <i style="mso-bidi-font-style: normal;">- Es por tu imprudencia que tu hermana está al borde de la muerte.-</i>
<span style="margin: 0px;"> </span>El trata de defenderse. <i style="mso-bidi-font-style: normal;">- No tienes derecho a… -</i> <span style="margin: 0px;"> </span>Las palabras de Tristán acuchillan a Marlene
como una serpiente venenosa.<span style="margin: 0px;"> </span>En
cualquier otro momento ella sería rápida en defenderse, pero su alma está
demasiado dolida y no se encuentra capaz. <i style="mso-bidi-font-style: normal;">-
¡Detente Tristan! -</i> Elizabeth rápidamente salta para terminar la
confrontación<i style="mso-bidi-font-style: normal;">. - Ahora no es el momento
para esto. -</i> Antes de que pudiera continuar sus palabras, la atención es
desviada hacia la llegada de Ricardo con noticias. El rostro de Ricardo no
ofrece indicios de lo que está a punto de informarles. <i style="mso-bidi-font-style: normal;">- Bueno, me alegro de que todos lo oigan. –</i> Se conforta Ricardo<i style="mso-bidi-font-style: normal;">. - ¿Y Rebecca? ¿Qué está pasando con
Rebecca? -</i> Sebastián pregunta con fuerza. <i style="mso-bidi-font-style: normal;">- Rebecca está fuera de la cirugía, sin embargo, su condición es
todavía muy grave y muy delicada. El hierro penetró en una pequeña porción de
su hígado. Por suerte no lo suficiente para generar un desorden serio, pero antes
había atravesado la arteria renal que se ha reconstruido, no es un órgano vital
y no preocupa, lo que si preocupa es que Rebecca ha sufrido una pérdida de
sangre extrema, ha superado la cirugía afortunadamente, las próximas 48 horas
son muy críticas en este momento, la hemorragia está bajo control, pero
necesitamos un suministro adicional de sangre.-</i> <span style="margin: 0px;"> </span>Hagen rápidamente se adelanta. <i style="mso-bidi-font-style: normal;">- Eso no es un problema, estoy seguro de que
uno de nosotros, si no todos nosotros somos del grupo que ella necesita.
Podemos donar todo lo que se precise. - </i>Ricardo asiente y sonríe. <i style="mso-bidi-font-style: normal;">- Eso es lo que yo esperaba, una enfermera
os llevará al laboratorio.</i> – Hagen Sebastien y Elena hacen ademán de salir
para ser conducidos por una enfermera. <i style="mso-bidi-font-style: normal;">- ¿Cuándo
puedo verla? -</i> La voz de Marlene es ligera, por encima de un susurro, pero
suficiente para que la atención de todos se vuelva hacia ella. <span style="margin: 0px;"> </span>Tristán retorna a dar a conocer su opinión. <i style="mso-bidi-font-style: normal;">- ¿Cuándo puedes verla? No se te permite
acercarte a Rebecca, como te decía antes, es por ti que nuestra hermana está en
el hospital. ¿Y tienes el valor de preguntar cuando puedes verla? Ahora Rebecca
solo necesita a su familia y usted no es su familia. La dejaste. ¿Lo recuerdas?
y francamente, nunca deberías haber regresado. -</i> A pesar del estado
sensible, Marlene siente que la ira hacia Tristán irrumpe dentro de ella y
explota por cada uno de sus poros. Lo empuja con violencia contra la pared gritando.
<i style="mso-bidi-font-style: normal;">- ¿Cómo te atreves a juzgarme después de
todo el infierno que nos hiciste pasar a mí y a Rebecca? ... Tú mismo, con tus
propias manos, casi me matas a mí ya tu hermana, has olvidado ese poco de
información. Veo que todavía me odias en secreto ¿no? Odias el hecho de que
nunca te amé de la manera que amo a tu hermana, ¡Sí! La amo a ella con cada onza de
mi ser. Y ¿Quien eres tú para decir que no somos de la familia? Cada pedacito de
Rebecca es mi familia. Ella es mi socio, mi alma gemela y nada que de lo que usted
diga cambiará eso. -</i> Marlene abandona a Tristán y le pregunta de nuevo a
Ricardo<i style="mso-bidi-font-style: normal;">. - ¿Cuándo puedo verla, Ricardo?
¿Puedo verla ahora?</i> - Ricardo mira a Marlene con ojos apologéticos. <span style="margin: 0px;"> </span><i style="mso-bidi-font-style: normal;">- Lo
siento Marlene, entiendo lo que sientes por Rebecca, pero la verdad del asunto
es que el permiso de la familia de Rebecca lo permita.</i> - Marlene siente que
le han dado un puñetazo en el estómago. <span style="margin: 0px;"> </span><i style="mso-bidi-font-style: normal;">- Ricardo no seas ridículo, sabes muy bien
que Rebeca me necesita.- <span style="margin: 0px;"> </span></i>Los ojos de
Marlene empezan a llenarse de lágrimas. <i style="mso-bidi-font-style: normal;">-
Sabes que la necesito, nosotros, nosotros, Rebecca y yo, somos familia, ella es
mi compañera.-</i> Le suplica con el rostro empapado de lágrimas. <i style="mso-bidi-font-style: normal;">- Sé que es así como lo ves, pero Marlene,
legalmente no lo eres. - </i>Ricardo odia como el infierno cuando la ley
interfiere con lo que es mejor para sus pacientes. <i style="mso-bidi-font-style: normal;">– Sin el permiso de su familia, no puedo dejar que la veas. -</i> <span style="margin: 0px;"> </span>Una voz sale desde atrás. <i style="mso-bidi-font-style: normal;">- Ella no tiene permiso de la familia.-</i> Interrumpe Tristán, pero Elizabeth
rápidamente expresa su propia opinión. - <i style="mso-bidi-font-style: normal;">Tristán,
párate, no eres el único miembro de la familia aquí para determinar cuál es el
mejor curso de acción para Rebecca</i>.- <span style="margin: 0px;"> </span>Hagen, que escuchaba desde la puerta, los
gritos de Marlene despertaron en él la alarma, se volvió hacia Marlene. <i style="mso-bidi-font-style: normal;">- No todos de la familia Lahnstein están de
acuerdo con Tristán, legalmente o no, no es un error que seas familia.-</i> <span style="margin: 0px;"> </span>Hagen no puede evitar darle una <span style="margin: 0px;"> </span>sonrisa y entre dientes mientras toma a
Marlene por los hombros. <i style="mso-bidi-font-style: normal;">- Ha sido un
viaje interesante en la familia Lahnstein, ¿Verdad? -</i> Marlene asiente con la
cabeza. <i style="mso-bidi-font-style: normal;">- ¡Sabes! Cuando te conocí, sabía
que eras una mujer especial, siempre he pensado que las mujeres inteligentes y
fuertes tendrían que ser parte de la dinastía de Lahnstein, ahí está Elisabeth,
y tú… tuve muchas veces esa sensación, sabía que debías ser un Lahnstein cuando
nos conocimos ... Quizás por eso sentí la necesidad de casarme contigo, a pesar
de la falta de amor verdadero entre nosotros. -</i> Marlene sonríe y asiente de
nuevo con la cabeza.<span style="margin: 0px;"> </span><i style="mso-bidi-font-style: normal;">- Necesitabas más que el poder y el nombre
de Lahnstein, igual que mi hermana necesitabas el AMOR mas que el poder y
encontraste el amor en Rebeca ella encontró ese amor en ti. A pesar de lo que
la ley o Tristán tengan que decir, Marlene, eres una Lahnstein, eres de la
familia. -</i> Él mira a Sebastian y a Elizabeth, quienes dan su aprobación a
las sabias palabras de Hagen.<span style="margin: 0px;"> </span>Tristán se
ha ido alejando al otro lado de la habitación con actitud desaprobadora. <i style="mso-bidi-font-style: normal;">- ¿Qué hay de Tristán? - </i>Pregunta
Marlene. <i style="mso-bidi-font-style: normal;">– Deja de preocuparme por
Tristan, ahora mismo tiene que donar sangre.-</i> Hagen se retorna hacia
Ricardo. <i style="mso-bidi-font-style: normal;">- Que Marlene vea a Rebecca todo
lo que se necesite.- </i>Le expresa con contundencia.<i style="mso-bidi-font-style: normal;"> - ¡Gracias, Hagen! -</i> Marlene abraza con fuerza a su cuñado. <span lang="ES" style="font-family: "Comic Sans MS"; line-height: 107%; margin: 0px;">Después
él coge a su hermano del brazo y lo arrastra por el pasillo en búsqueda de la
sala de donación. </span><i>- Ven, te llevaré con ella. -</i> <span style="margin: 0px;"> </span>Ricardo hace un gesto para que Marlene lo siga. </span></span></div>
<div style="margin: 0px;">
<span style="font-family: "comic sans ms"; margin: 0px;"><span style="font-size: large;">Mientras caminan por el pasillo hasta la habitación de Rebecca, Ricardo prepara
a Marlene. - <i style="mso-bidi-font-style: normal;">Quiero que estés preparada
para lo que vas a ver Marlene, como ya he mencionado está fuera de peligro, por
así decirlo. A partir de ahora, no hemos conseguido ninguna respuesta física todavía
de Rebecca, aún no hay estímulo, sin embargo, todos sus signos vitales están dentro
de lo esperado, son buenos signos, pero todavía está en una etapa en la que
todo podría cambiar rápidamente. Te parecerá pálida, es debido a toda la
pérdida de sangre y tiene muchos tubos conectados.</i> - Finalmente llegan a la
puerta que conduce al cuarto de Rebecca. <i style="mso-bidi-font-style: normal;">-
¿Estás lista? -</i> Marlene da su conformidad con un gesto de la cabeza. Cuando
la puerta se abre Marlene recibe el primer golpe al escuchar el sonido de las
máquinas y el pitido repetitivo del monitor cardíaco. Entonces, y a pesar de
las advertencias de Ricardo, Marlene se debilita al ver a su amada en esa
oscura habitación fría, los tubos que Ricardo le advirtió, en todas direcciones
hacia su cuerpo. Marlene recibe vestimenta aséptica y acepta las instrucciones
de seguridad para acercarse a Rebecca. <i style="mso-bidi-font-style: normal;">-
¡Está bien! Puedes ir con ella.-</i> Ricardo la tranquiliza y la acompaña. Mientras
se dirige a la cama de Rebecca, Ricardo cierra la puerta en silencio. Al principio,
todo lo que Marlene puede hacer es estar junto a la cama de Rebecca. Con los
ojos, sigue todos los tubos para ver exactamente dónde están colocados, a qué
máquina pertenecen. Quiere desesperadamente tocar a Rebecca, pero está
aterrorizada. Asustada de que su tacto hiciera que algo saliera mal. Marlene tira
de un taburete, lo pone cerca de la cama y se sienta. Lentamente, busca la
mano de Rebecca. Calor. En el momento en que Marlene percibe la pequeña
cantidad de calor de la mano de Rebecca. Marlene entonces aprieta la frágil
mano de Rebecca con la suya, la lleva con suavidad a los labios y le coloca un
beso en la palma de la mano. <i style="mso-bidi-font-style: normal;">- ¡Rebecca! -</i>
Susurra Marlene<i style="mso-bidi-font-style: normal;">. - Cariño, soy yo, lo
siento tanto, lo siento, lo siento, me gustaría que fuese yo quien estuviera
acostada aquí y no tú.-</i>. Marlene no puede detener las lágrimas. <i style="mso-bidi-font-style: normal;">- Por favor, tienes que ser fuerte, por
favor, sal de aquí pronto.-</i> El pitido continuo del monitor cardíaco es
tranquilizador, sí, pero al mismo tiempo el tono agudo y áspero es más de lo
que Marlene puede manejar. Alarga la mano para silenciar la máquina. Después de
un momento, sin embargo, el silencio es aún peor. <i style="mso-bidi-font-style: normal;">- ¿Cómo sabría si el corazón de Rebecca se detiene? - </i>Ajustando los
tubos Marlene se inclina sobre el cuerpo dormido y coloca cuidadosamente su
oído en el pecho de Rebecca. Puede oírlo. Tendría que ser el sonido más
glorioso que haya escuchado. El latido lento del corazón de Rebeca. No quiere
moverse de ese lugar. Oír el suave sonido rítmico de los latidos de Rebeca es
lo único que trae a Marlene algún tipo de consuelo. Su momento con Rebecca es
interrumpido por Ricardo y la llegada de su enfermera. <i style="mso-bidi-font-style: normal;">- Lo siento Marlene, pero tenemos que mantener las visitas al mínimo,
la enfermera y yo revisaremos los signos vitales y debemos examinar a Rebecca
para asegurarnos de que todo está en orden.-</i><span style="margin: 0px;"> </span>Marlene odia la idea de dejar a Rebecca, pero
no desea impedir el trabajo de Ricardo. No desea nada más que el mejor cuidado para
ella. Con un último beso en su frente y un susurro de “te amo”. Marlene
retrocede y se da la vuelta para alejarse. Cuando ya está cerca de la puerta, oye
el pitido del monitor cardiaco, la enfermera volvió a encender el volumen, pero
esta vez suena diferente y de repente una alarma se apaga y Marlene observa una
mirada de inquietud entre Ricardo y la enfermera. <i style="mso-bidi-font-style: normal;">- ¿Ricardo? -</i> Pregunta Marlene. <i style="mso-bidi-font-style: normal;">-
Marlene tienes que irte.-</i> El tono urgente de Ricardo le dice inmediatamente
que algo anda mal. <i style="mso-bidi-font-style: normal;">- Ricardo, ¿Qué pasa?
¿Qué está pasando? –</i> Vuelve a pregunta mientras trata de regresar al lado
de Rebecca. La enfermera trata de sacarla de allí. <i style="mso-bidi-font-style: normal;">- ¡Ahora! -</i>Ordena Ricardo mientras presiona el botón para recibir
ayuda adicional. Pero la enfermera no llega a Marlene antes de que pudiera
volver al lado de Rebecca.<span style="margin: 0px;"> </span><i style="mso-bidi-font-style: normal;">- Rebecca, Rebecca, por favor ... ¡por
favor, no me dejes! ¡POR FAVOR! -</i><span style="margin: 0px;"> La enfermera la toma por un brazo. </span><i style="mso-bidi-font-style: normal;">- Marlene, tienes que ...-</i> Las palabras de Ricardo caen al darse
cuenta de que el ritmo cardíaco de Rebecca está recuperando un ritmo más
aceptable. <i style="mso-bidi-font-style: normal;">- Ricardo, ¿Qué ocurre? Dime
algo. –</i> Balbucea Marlene presa del pánico. <i style="mso-bidi-font-style: normal;">- Está bien Marlene, creo que está bien. - </i>Ricardo escucha el
corazón de Rebeca y comprueba los signos vitales adicionales. Sinceramente, no
sé lo que acaba de suceder, el monitor indicó que Rebecca estaba en un paro
cardiaco, nunca lo había visto parar así. Lo siento, Marlene, pero realmente creo
que deberías irte. Vigilaré de cerca a Rebecca. Es la orden y lo único que
Marlene puede hacer, liberar de nuevo la mano de Rebecca. Le entra el miedo
alejarse de ella, sigue muy confusa y asustada por el hecho de que Rebecca está
aún en peligro. Un beso a su amada y comienza a alejarse, cuando llega a la salida. <i style="mso-bidi-font-style: normal;">- Marlene, ¡vuelve! -</i> Ricardo continúa observando el monitor
cardíaco<i>. – Ricardo. ¿Qué pasa? - </i>Ella toma
la mano de Rebecca de nuevo. - <i style="mso-bidi-font-style: normal;">¡No lo sé!
Por favor ve hacia la puerta de nuevo. - </i>Marlene duda. –<i style="mso-bidi-font-style: normal;"> Haz lo que te digo, confía en mí. – </i>Ella<i style="mso-bidi-font-style: normal;"> </i>obedece y lentamente se aleja de la cama. Cinco pasos después Ricardo le ordena que regrese. Repite tres veces más, va y vuelve, lo que su amigo le va ordenando<i style="mso-bidi-font-style: normal;">. – ¡Está bien! –</i> Vocifera él exhalando
aire un tanto confuso. Marlene podía oír el cambio del sonido del monitor
cardíaco, pero no entiende por qué de esas variaciones. <i style="mso-bidi-font-style: normal;">- Es algo que ya he escuchado sobre algunos pacientes. –</i> Comenta
sin especificar. <i style="mso-bidi-font-style: normal;">- ¿Has oído qué? ¿Qué
pasa? -</i> Marlene se preocupa.<span style="margin: 0px;"> </span><i style="mso-bidi-font-style: normal;">- Nada está mal, al contrario, creo que todo
está bien, muy bien al menos mientras estés con ella. Cada vez que te alejas su
ritmo cardíaco cae a un nivel peligroso, pero cuando estás con ella vuelve a una
cadencia normal. Es como si ella se diera cuenta de que estás aquí. –</i> Expresa sin
mucho convencimiento que su cercanía está siendo
percibida por Rebecca y no quiere que se aparte. La sonrisa de Marlene, dentro
del dolor, no puede ser más amplia, se dirige hacia ella y coge su mano.<span style="margin: 0px;"> </span><i style="mso-bidi-font-style: normal;">- Estoy
aquí mi amor, estoy aquí y no me iré, nunca me iré, solo tienes que regresar,
por favor vuelve a mí. -</i> Le dice susurrando al oído. Marlene mira a Ricardo. <span style="margin: 0px;"> </span><i style="mso-bidi-font-style: normal;">- No me
voy de aquí Ricardo, no me voy de su lado, no hasta que vuelva en sí.- </i>Ricardo
mueve la cabeza con incredulidad. Conoce la política del hospital, pero también
sabe que debe hacer lo que es lo mejor para su paciente y ahora, lo mejor es
tener a Marlene al lado de su novia. <i style="mso-bidi-font-style: normal;">- Marlene va
en contra de la política del hospital, tenemos normas estrictas para la visitas
en Cuidados Intensivos.-</i> Le informa que lo que plantea presenta
dificultades. <i style="mso-bidi-font-style: normal;">– No la voy a dejar
Ricardo, te juro que voy a pelear, Rebecca me necesita y no la abandonaré.-</i>
Marlene es inflexible. Ricardo no tiene dudas sobre la declaración de Marlene.
Al cabo de unos segundos da su brazo a torcer. <i style="mso-bidi-font-style: normal;">- ¡Bien! Puedes quedarte a su lado, pero cuando yo o la enfermera entremos
debes ponerte a un lado para permitirnos hacer nuestro trabajo y es imperativo
que ella permanezca tranquila. Como dije antes, ella todavía está en una fase
crítica, pero tengo que reconocer que puedes ser la mejor terapia para ella
ahora mismo. -<span style="margin: 0px;"> </span></i>Ricardo impone sus
normas al ceder a las pretensiones de Marlene. <span style="margin: 0px;"> </span><i style="mso-bidi-font-style: normal;">- Te
prometo que no interferiré en ningún momento cuando estéis aquí, quedándome a su
lado será la mejor medicina para las dos. Gracias Ricardo. - </i>Marlene sostiene
la mano más apretada.<span style="margin: 0px;"> </span><i style="mso-bidi-font-style: normal;">- No estoy seguro de cómo puedo hacer que tu
estancia sea más cómoda, pero veré lo que puedo hacer. ¿De acuerdo?-</i>
Marlene le mira con simpatía. <i style="mso-bidi-font-style: normal;">- Estaré bien,
siempre y cuando pueda quedarme al lado de Rebeca, estaré bien.-</i> Ricardo
asiente en conformidad<i style="mso-bidi-font-style: normal;">. – Bueno... entonces.-</i>
<span style="margin: 0px;"> </span>Él sonríe. En colaboración con la
enfermera terminan de revisar los signos vitales de Rebecca. <i style="mso-bidi-font-style: normal;">- Te dejaremos sola por ahora, pero
volveremos a vernos a menudo.-</i> Marlene acepta las instrucciones de Ricardo
y recupera su puesto al lado de Rebecca en el taburete. Marlene contempla amorosamente
a Rebecca. Se explaya pensando en ello. <i style="mso-bidi-font-style: normal;">-
Rebecca von Lahnstein Nunca creí que alguien pudiera cambiar mi vida de la
manera que tu la has cambiado</i>.- Le dice soltando una leve risita. <i style="mso-bidi-font-style: normal;">- Te di mucha guerra, ¿Verdad? Al principio,
tratando de negar lo fuertemente que me enamoré de ti y ahora me miras, ahora
ni siquiera puedo imaginar ... -</i> Marlene hace una pausa y luego susurra con
culpa. <span style="margin: 0px;"> </span><i style="mso-bidi-font-style: normal;">- Nunca debí haberme dado por vencida.-</i> Marlene trata de ahogar el
dolor. <i style="mso-bidi-font-style: normal;">- Lo siento mucho por darme por
vencida y alejarme, por favor, por favor, Rebecca, no te rindas, hazlo por
nosotras ahora, por favor, te amo. Necesito de ti, yo no me sentiría completa
sin ti. -</i> La única respuesta que recibe Marlene es el pitido inquietante
del monitor cardíaco de Rebecca.</span></span></div>
<br />
<div style="margin: 0px 0px 10.66px;">
<br /></div>
<b></b><i></i><u></u><sub></sub><sup></sup><strike></strike><span style="font-size: large;"></span>Francisco Freijaneshttp://www.blogger.com/profile/07136887969142331609noreply@blogger.com1tag:blogger.com,1999:blog-7189587968703271148.post-35763422446659958472018-11-09T10:09:00.002+01:002018-11-09T10:09:52.771+01:0014ª Entrega<br />
<div style="margin: 0px 0px 10.66px;">
<b style="mso-bidi-font-weight: normal;"><i style="mso-bidi-font-style: normal;"><span style="font-family: "comic sans ms"; margin: 0px;"><span style="font-size: large;">Algo real.</span></span></i></b></div>
<br />
<div style="margin: 0px;">
<span style="font-family: "comic sans ms"; margin: 0px;"><span style="font-size: large;">Un individuo paranoico como Tristán, que
mantiene cierta animosidad hacia la persona que le hirió de forma importante en
el pasado, suele buscar formas de hacer daño por que mantiene abierta esa
herida. Su actitud es estar siempre a la expectativa de cualquier motivo que
justifique el devolver el golpe. Si bien la ausencia prolongada de Marlene en
Los Angeles casi le hizo olvidar aquel suceso, su reaparición en compañía de
Rebecca ha despertado todos los fantasmas del pasado. En su mente comienza de
nuevo la búsqueda de nuevas formas de escarmiento sobre ella. El castigo se
convierte en una obsesión constante. Nunca piensa que el daño que provoca es
suficiente, necesita más, busca cómo lesionar emocionalmente al objeto de su
venganza. Que Marlene haya rehecho su vida al lado de su hermana lo siente como
una afrenta y, aun cuando Rebecca no es su objetivo, sabe que también puede
dañarla en manera formidable, eso tampoco le importa, ya lo hizo en otra época
y ella se ha recuperado y piensa que lo podrá hacer de nuevo.</span></span></div>
<div style="margin: 0px;">
<span style="font-family: "comic sans ms"; margin: 0px;"><span style="font-size: large;">Con curiosidad ladina pregunta en el
entorno familiar, pero no encuentra nada que le pueda ser útil a sus objetivos.
Pasan los días hasta que en una conversación informal, toma conocimiento de la
edad del pequeño Tomy. </span></span></div>
<div style="margin: 0px;">
<span style="font-family: "comic sans ms"; margin: 0px;"><span style="font-size: large;">Tristán suele ahogar sus frustraciones en
estado ebrio. De esta manera recupera los hechos del pasado que más daño le
hicieron. En esta situación recuerda el aborto de Marlene después de la
violación y sin saber el porqué, recuerda la última noche que pasó con ella en
el almacén de “No Limits” después que hubiese roto con Rebecca por sus engaños.
A la mañana siguiente, ya sereno, los pensamientos de la noche anterior suenan
en su cabeza y en un razonamiento enloquecido hace cuentas de las fechas y
llega a una conclusión. “<i style="mso-bidi-font-style: normal;">Puede ser hijo
mío</i>.” Obviamente no tiene ningún argumento ni prueba que pueda justificar
tal teoría, sin embargo, él es pertinaz y no parará hasta averiguar todo lo que
pueda sobre la existencia de ese chico rubio de ojos azules que es clavado a su
madre.</span></span></div>
<div style="margin: 0px;">
<span style="font-family: "comic sans ms"; margin: 0px;"><span style="font-size: large;"><br /></span></span></div>
<div style="margin: 0px;">
<span style="font-family: "comic sans ms"; margin: 0px;"><span style="font-size: large;">Marlene <span style="margin: 0px;"> </span>y Rebecca viajan a Colonia acompañadas del
pequeño para ultimar gestiones de registro y que Tomy conste como hijo de las
dos mujeres. Marlene se lo propuso la tarde que halló a Tristán en la
orangerie. Rebecca está eufórica con la idea, adora a su novia y estos gestos
hacia ella no hacen más que acrecentar su amor. La filiación de Tomy es
incompleta pues Marlene se negó a dar algún dato sobre la paternidad de su hijo
cuando nació. Ese dato en blanco será rellenado con el nombre y apellido de
Rebecca. Tomy Wolf completará su apellido con el de von Lahnstein. </span></span></div>
<div style="margin: 0px;">
<span style="font-family: "comic sans ms"; margin: 0px;"><span style="font-size: large;">En el castillo todo circula dentro de la
normalidad. Dana y Hagen se marcharon a su finca ecuestre. Sebastián continua
con la gestión del patrimonio y empresas de la familia, Tanja al frente de LCL
y Tristán manejando las finanzas bancarias, función en la que es un lince. Caso
aparte es Elena. Elena von Lahnstein ha tomado posesión de una plaza adjunta en
la Universidad de Colonia en la cátedra de Arqueología y está empezando con sus
primeras clases. En un primer momento pensó en quedarse a vivir en la ciudad,
viajando a Dusseldorf solo los fines de semana, pero, dada la corta distancia
entre las dos ciudades, apenas cuarenta kilómetros, desechó la idea, quedándose
a vivir en el castillo.</span></span></div>
<div style="margin: 0px;">
<span style="font-family: "comic sans ms"; margin: 0px;"><span style="font-size: large;">Después de realizar los trámites del
registro, Marlene y Rebecca regresan al castillo justo a la hora de dar el
almuerzo a Tomy, ellas comerán algo a continuación. Justus les sirve en el
comedor del castillo. Poco después aparecen Elena y Elisabeth que curiosean y
hacen bromas distrayendo al niño para que coma divertido. Tristán aparece poco
después con prisas. Justus le sirve un frugal almuerzo que devora en un
instante. Acabado se levanta de la mesa justo en el momento que le suena el
móvil, sale y se detiene en el recibidor para contestar la llamada. En el
comedor las mujeres charlan sin reparar en él. – <i style="mso-bidi-font-style: normal;">Esta mañana me ha parecido veros en Colonia. ¿Habéis estado allí? – </i>Pregunta
Elena. Marlene y Rebecca se miran sorprendidas. – <i style="mso-bidi-font-style: normal;">Pues sí. Hemos estado allí. – </i>Con inocencia Elisabeth pregunta el
motivo del viaje y Marlene le relata la tarea que han realizado en el registro.
Elena se llena de alegría, Elisabeth de satisfacción. No obstante, les ruegan
que no lo divulguen, que es un asunto personal y que, participarlo en estos
momentos no sería oportuno, forma parte sólo de un círculo de confianza dentro de la familia.
Mientras esto comentan no se percatan que el audaz oído de Tristán ha estado
escuchando detrás de la puerta una vez finalizó su conversación telefónica.</span><span style="font-family: "times new roman";"> </span></span><span style="font-family: "comic sans ms"; margin: 0px;"><span style="font-size: large;">Sin dudarlo un momento ya sabe lo que
quiere hacer y sale del castillo hacia su oficina. </span></span></div>
<br />
<div style="margin: 0px;">
<span style="font-family: "comic sans ms"; margin: 0px;"><span style="font-size: large;">Los planes de boda continúan sin
contratiempos y por fin consiguen fijar una fecha después de negociar con el
juzgado. Será tres días antes de regresar a Nueva York. La ceremonia será en
los jardines del Castillo y para la recepción montarán una carpa en el prado
contiguo con todo tipo de adornos románticos y flores, muchas flores. Rebecca
se encargará de los vestidos, Marlene deja que sea ella la que los diseñe.
Decidida entra en LCL una mañana y se dirige al despacho de Tanja. La relación con
su cuñada siempre ha sido algo tensa y nada afable, pero se veían en la
necesidad de entenderse por el bien del negocio. Rebecca entra sin llamar. - <i style="mso-bidi-font-style: normal;">¡Buenos Dias! – </i>Saluda seca. Tanja se
levanta de su asiento y extiende su mano con respeto. – <i style="mso-bidi-font-style: normal;">Buenos días. ¿Qué te trae por aquí Rebecca? – </i>Ella la mira con
gesto serio y crujiendo sus dientes. – <i style="mso-bidi-font-style: normal;">Diseñar
y confeccionar dos trajes de novia. Este es el lugar perfecto y espero de tu
colaboración para que Marlene y yo los podamos lucir el día que nos casemos. –</i>
Tanja sonríe discreta, con cierta ironía, pero accede a la petición de Rebecca,
no tiene excusa para negarse. Ambas salen del despacho y suben a la sala de
diseño. Allí le presenta a Marisa, una asistente de diseño que actualmente está
libre. Se saludan cordialmente y Tanja regresa a sus tareas. Enseguida Rebecca
consigue un bloc de dibujo y comienza febril a plasmar en papel el dibujo que
trae en su cabeza. Al cabo de media hora le enseña el dibujo a la asistente que
se queda boquiabierta al contemplar la obra de arte que Rebecca ha dejado
impresa en el papel. Como no podía ser menos el vestido por ella dibujado tiene
personalidad propia, y el rostro de Marlene figura como colofón al dibujo del modelo.
– <i style="mso-bidi-font-style: normal;">Es extraordinario. – </i>Expresa
Marisa. – <i style="mso-bidi-font-style: normal;">Ahora el mío.- </i>Le dice Rebecca.
Marisa pone cara de no entender y le pregunta si ella es la dama de honor.
Rebecca sonríe placentera. - <i style="mso-bidi-font-style: normal;">¡No! – </i>Le
responde con una sonrisa. <i style="mso-bidi-font-style: normal;"><span style="margin: 0px;"> </span>- Yo soy la novia y ella será mi esposa.-</i>
Le dice apuntando al dibujo del rostro de Marlene. La asistente no sale de su
asombro, nunca ha visto ni conocido una boda de dos mujeres, una boda
homosexual, es una novedad en su vida. Rebecca le explica en breves palabras
cual es la situación, ella escucha embobada ante un relato algo emocionante.
Mientras habla, Rebecca va dejando correr el lápiz por encima de una nueva hoja
en blanco diseñando otro vestido. Marisa no sabe a qué atender, si a las
hábiles manos de Rebecca o a la narración que le va contando mientras dibuja.
Está fascinada con ambas cosas y la cara de admiración permanece en ella
durante todo ese lapso de tiempo. Acabada la historia y el dibujo, lo muestra
para su contemplación. Este será el mío. – <i style="mso-bidi-font-style: normal;">¡Precioso!
Realmente precioso.- </i>Exclama Marisa admirada. – <i style="mso-bidi-font-style: normal;">Ahora vamos al almacén a elegir las telas y los accesorios. – </i>Con
presteza ambas mujeres se dirigen al almacén en busca de la materia prima que
Rebecca convertirá en sendos trajes para la ceremonia más esperada de su vida.</span></span></div>
<br />
<div style="margin: 0px;">
<span style="font-family: "comic sans ms"; margin: 0px;"><span style="font-size: large;">Durante días Rebecca y Marisa trabajan
febriles sobre las telas componiendo cada uno de los patrones, unirlos y
acomodando el conjunto sobre un maniquí. El traje de Marlene está a punto de
prueba, ella acude a LCL. Al ver el vestido sobre el armazón se queda parada y
emocionada. Rebecca sonríe y se acerca a ella. - <i style="mso-bidi-font-style: normal;">¿Te gusta?- </i>Pregunta nerviosa. Marlene no puede contestar embargada
por la emoción. - <i style="mso-bidi-font-style: normal;">¡Me encanta! – </i>Balbucea
más que habla. Tomy mira a sus dos madres y no entiende la situación, se acerca
a Rebecca y alza los brazos para que lo aúpe. Ella lo hace.<span style="margin: 0px;"> </span>–<i style="mso-bidi-font-style: normal;">
Ahora mama se va a vestir con ese traje. –</i> Marlene se dirige detrás del
Biombo, se quita la ropa de calle y con ayuda de Marisa se embute el traje de
novia. Cuando aparece a la vista, a Rebecca se le salta una lágrima emotiva al
contemplar en toda su belleza a Marlene. - <i style="mso-bidi-font-style: normal;">¿Has
visto que guapa está mama? – </i>Le dice al niño que aún permanece en sus
brazos. El extiende los suyos para acercarse a Marlene. Ella le da un beso en
la frente y deja que Rebecca compruebe el perfecto encaje del vestido con el
cuerpo, rodeando la figura de Marlene, Rebecca comprueba cada una de las
costuras y uniones del vestido. – <i style="mso-bidi-font-style: normal;">¡Está
perfecto! No necesita ninguna corrección. – </i>Le dice a Marlene, Marisa no
puede creerlo, la primera prueba es definitiva, nunca en sus pocos años en el
diseño había visto que un traje, tan complicado como el de una novia, encajase
en el cuerpo de su usuaria a la perfección. En ese momento dio por buenos los
comentarios que por LCL circulaban sobre la genialidad de Rebecca von
Lahnstein. Acaba de conocer a un auténtico genio del diseño. – <i style="mso-bidi-font-style: normal;">Mañana comenzaré con el mío.- </i>Expresa
Rebecca. Marlene se interesa por conocerlo, Rebecca se niega. – <i style="mso-bidi-font-style: normal;">Da mala suerte. – </i>Le dice seria. – <i style="mso-bidi-font-style: normal;">Pero tu ya conoces el mío. ¿Qué más da? – </i>La
provoca en tono de broma. - <i style="mso-bidi-font-style: normal;">¡Ya! Pero yo
soy la diseñadora y me arrogo el poder decidir sobre ello.- </i>Le responde en
un tono jocoso poniendo cara de payasa. Ambas ríen para regocijo de Tomy que
también se une a la fiesta de risas. Después de un tira y afloja alegre y
distendido, Rebecca muestra el diseño de su traje a Marlene. <i style="mso-bidi-font-style: normal;">– Siempre dije que eras un genio para los
demás, solo me faltaba ver que también lo eres para ti. ¡Te quiero! – </i>Marlene
besa a Rebecca provocando cierto pudor a Marisa que mira hacia otro lado y Tomy
aplaude al verlas en ese gesto cariñoso.</span></span></div>
<div style="margin: 0px;">
<span style="font-family: "comic sans ms"; margin: 0px;"><span style="font-size: large;">Tres días después Rebecca tiene completado
el vestido que lucirá en su boda. Marlene asiste a la segunda prueba, la
primera demuestra que Rebecca no se había tomado sus propias medidas muy
acertadamente. La impresión de Marlene al verla salir del vestidor es emocional.
Rebecca luce espléndida y su figura es lo más sensual que Marlene ha
contemplado en su novia. </span></span></div>
<br />
<div style="margin: 0px;">
<span style="font-family: "comic sans ms"; margin: 0px;"><span style="font-size: large;">De regreso al castillo se encuentran con
Tristán que aparca su vehículo y sale de él con claro gesto de enfado. Marlene
y Rebecca se dirigen a la cocina para preparar la comida de Tomy con la señora
Lenz. Tristán las intercepta en su caminar.<span style="margin: 0px;"> </span>– <i style="mso-bidi-font-style: normal;">¡Quiero hablar contigo Marlene!- </i>Les dice a modo de increpación.
Rebecca se adelanta. - <i style="mso-bidi-font-style: normal;">¿Qué ocurre
Tristán?- </i>Le pregunta con seriedad. <i style="mso-bidi-font-style: normal;">–
Esto no tiene nada que ver contigo, es con ella y ese niño. – </i>Le dice
señalando a Tomy. –<i style="mso-bidi-font-style: normal;"> Tomy no tiene nada
que ver contigo. – </i>Le dice Marlene muy drástica. - <i style="mso-bidi-font-style: normal;">¿Seguro? ¿Por qué entonces ha nacido en Colonia de padre desconocido?
Creo suponer que posiblemente sea yo su padre. Creo que tengo algún derecho si
es cierta mi suposición. – </i>Rebecca se acerca a él con mirada seria. – <i style="mso-bidi-font-style: normal;">Tu no tienes derecho ninguno, ese niño es
nuestro hijo y de nadie más. No busques lo que no vas a encontrar.- </i>Tristán
se enciende, Rebecca se interpone entre él y Marlene pero su hermano
no escucha, da un paso avanzando hacia ella empujando con el cuerpo a su
hermana. Ella se asusta de la mirada de Tristán y pretende dar un paso atrás,
pero tropieza con el banco de piedra que está detrás suya y cae de espaldas
sobre la cerca del jardín. Tristán se abalanza sobre Marlene y el niño sin
darse cuenta del desplome de Rebecca. Marlene grita al verla caer y a los ojos
enloquecidos de Tristán, corre hacia la entrada de la cocina. Justus aparece en
ese momento y Marlene le entrega al niño, ella se da la vuelta y empuja con
fiereza a Tristán que cae sentado con violencia en el suelo. Llega a lado de
Rebecca y comprueba que está aturdida.</span><span style="font-family: "times new roman";"> </span></span><span style="font-size: large;"><span style="font-family: "comic sans ms"; margin: 0px;">– <i style="mso-bidi-font-style: normal;">¡Llamar
a urgencias! Está inconsciente. – </i>Trata de despertarla en vano. Rebecca no
responde. <i style="mso-bidi-font-style: normal;"><span style="margin: 0px;"> </span>– ¡Marlene te quiero! – </i>Dice con la voz
apagándose. - <i style="mso-bidi-font-style: normal;">Rebecca estás despierta. –</i></span><span style="font-family: "calibri";">
</span><span style="font-family: "comic sans ms"; margin: 0px;">Sonríe forzadamente. – <i style="mso-bidi-font-style: normal;">No te preocupes es solo un susto.- </i>Dice
sin sentido. – <i style="mso-bidi-font-style: normal;">Mi espalda, me duele mi
espalda. - <span style="margin: 0px;"> </span></i>Marlene localiza
rápidamente la entrada de uno de los hierros de la verja en la espalda de
Rebecca y que comienza a sangrar. Con sus manos aplica presión para controlar la
hemorragia. Trata de controlar el llanto que empieza a cegarla. Rebecca sólo
puede mirar a Marlene. Sabe que el dolor es profundo en su espalda, pero por
alguna razón comienza a no sentirlo. Todo lo que siente es amor por la mujer en
cuyos brazos esta acurrucada<i style="mso-bidi-font-style: normal;">. - Mírame,
nena, sigue mirándome, mantente fuerte, quédate conmigo, Tristán busca ayuda,
por favor. -</i> Él se arrodilla al otro lado de Rebecca. Justus sale de la
cocina<i style="mso-bidi-font-style: normal;">.<span style="margin: 0px;">
</span>- La ayuda ya está en camino, estarán aquí en cualquier momento. – </i>Marlene
se desespera<i style="mso-bidi-font-style: normal;">. - ¡Deben estar aquí AHORA!-</i><span style="margin: 0px;"> </span>Marlene ya no puede controlar su devastación.
Sus lágrimas y su cuerpo tembloroso están incontrolables. Tiene la sensación
como si todo estuviera llegando a su fin. El amor de su vida está inmóvil en
sus brazos y cerca de la muerte. <span style="margin: 0px;"> </span><i style="mso-bidi-font-style: normal;">- Por favor, Rebecca, por favor, te ruego
que te mantengas fuerte, por favor no te dejes, no como esto, no como esto, lo siento
mucho, nunca debería haberte puesto en esta posición, nunca debería haber
vuelto. Si yo nunca hubiera vuelto esto no sucedería. -</i> <span style="margin: 0px;"> </span>Las fuerzas de Rebecca son suficientes para poner
suavemente los dedos sobre la boca de Marlene<i style="mso-bidi-font-style: normal;">. - Si no hubieras vuelto a mi vida, yo habría muerto de todos modos,
vivo muy feliz contigo, y lo haría todo de nuevo. Te quiero Marlene y siempre
será así. -</i><span style="margin: 0px;"> </span><span style="margin: 0px;"> </span>Marlene tira de Rebecca hacia ella. <i style="mso-bidi-font-style: normal;">- ¡Te quiero Rebecca! Sólo tú, siempre has
sido sólo tú.- </i>La mira con desesperación.<i style="mso-bidi-font-style: normal;"> - ¡Bésame! -</i><span style="margin: 0px;"> </span>Rebecca le
pide con un flojo aliento. Marlene besa sus labios con ternura. El rostro
manchado de lágrimas de Rebecca expresa una leve sonrisa, pero pronto es
interrumpido por un dolor penetrante en su herida, se estremece y comienza a
perder el control de su cuerpo. Marlene nota que se desmadeja escurriéndose
lentamente entre sus brazos<i style="mso-bidi-font-style: normal;">. <span style="margin: 0px;"> </span>- ¡Rebecca! -</i> La voz de pánico de Marlene
es desesperada. <i style="mso-bidi-font-style: normal;">- Rebecca, por favor,
quédate conmigo, no puedo perderte, no puedo ... Por favor, no me dejes, te
amo, te amo.</i> - Esos hermosos y grandes ojos marrones de Rebecca comienzan a
cerrarse lentamente y Marlene no puede contener la histeria que se produce en
su alma en ese momento. <i style="mso-bidi-font-style: normal;">- Rebecca, por
favor, nena, por favor, no te rindas, no te rindas, por favor, no sé qué haré
sin ti.</i> - Rebecca está luchando para quedarse. Luchando con toda la fuerza
que le queda. No está lista para irse. No está lista para dejar la vida que
tendría con Marlene, no quiere abandonar el futuro que siempre había soñado
tener con ella. Una boda, hijos y, lo que es más importante, una vida llena de
amor eterno. Está luchando contra la oscuridad que la está superando. Se
encuentra tan indefensa ante la oscuridad y antes de que estuviera lista, la
oscuridad se hace cargo de su última visión, la de la bella rubia, de ojos
azules, rubia que ha llegado a amar con cada pedacito de su ser, Marlene,
ella la mira con su último suspiro.</span></span></div>
<br />
<div style="margin: 0px 0px 10.66px;">
<br /></div>
<br />
<div style="margin: 0px;">
<br /></div>
<br />
<div style="margin: 0px;">
<br /></div>
<b></b><i></i><u></u><sub></sub><sup></sup><strike></strike><span style="font-size: large;"></span>Francisco Freijaneshttp://www.blogger.com/profile/07136887969142331609noreply@blogger.com2tag:blogger.com,1999:blog-7189587968703271148.post-26215591426118694402018-11-06T11:25:00.001+01:002018-11-06T11:25:42.709+01:0013ª Entrega<br />
<div style="margin: 0px 0px 10.66px;">
<span style="font-family: "comic sans ms"; margin: 0px;"><span style="font-size: large;"><span style="margin: 0px;"> </span><b style="mso-bidi-font-weight: normal;"><i style="mso-bidi-font-style: normal;">Lahnstein.</i></b></span></span></div>
<br />
<div style="margin: 0px;">
<span style="font-family: "comic sans ms"; margin: 0px;"><span style="font-size: large;">En la puerta del estudio Marlene y Rebecca
se detienen nada más traspasar el umbral. Cogidas de la mano miran con altivez
hacia el interior donde los demás charlan afables entre ellos. Tanja se percata
de su presencia e indica a Sebastián mire en su dirección. Elizabeth se acerca
y las abraza con afecto. Tristán observa desde el fondo con una copa en la mano
que apura con ansiedad. Elisabeth las llena de halagos después del primer
saludo, Sebastián se acerca con timidez a su hermana y le pregunta que tal
está, ella responde que recuperada y muy positivista. Tanja se dirige a Marlene
que la mira con ojos de seriedad. – <i style="mso-bidi-font-style: normal;">Espero
que no sigas enfadada conmigo.- </i>Le dice a cierta distancia, Marlene sonríe
hipócrita y le responde que no es rencorosa. –<i style="mso-bidi-font-style: normal;"> No, no lo estoy, soy feliz. La vida da y quita lo que cada uno se
merece. A mi me premia con lo que mas quiero en este mundo. ¿Y a ti? - </i>Tanja tuerce el gesto se da cuenta que ha
perdido a su amiga, es demasiado orgullosa para pedir perdón y no volverá su
amistad, ha herido su orgullo con lo sucedido con Rebecca y se alejará de ella
para siempre. </span></span></div>
<div style="margin: 0px;">
<span style="font-family: "comic sans ms"; margin: 0px;"><span style="font-size: large;">Tristán se acerca con reservas y da las
buenas noches como si de unas extrañas se tratara. Elisabeth le reprende por
esa actitud tan fría y distante, para colmo entra Asgard con su clásica ironía
para dar el toque de mal gusto aludiendo a la frustrada boda de Tristán con Marlene.
- <i style="mso-bidi-font-style: normal;">¡Ya está bien Asgard!- <span style="margin: 0px;"> </span></i>Elisabeth corta la frase.<i style="mso-bidi-font-style: normal;"> - Estamos aquí para celebrar que Rebecca
ya está recuperada y ha venido a vernos, es un motivo de alegría y no para
sacar las malas artes de las que hacéis gala a menudo. – </i>Desde el pasillo
Elena entra y abraza a su hermana. –<i style="mso-bidi-font-style: normal;">
Cuanto me alegro de verte y que te hayas recuperado.- </i>Rebecca se sorprende,
así lo manifiesta con cierta mirada espantada hacia su novia. - <i style="mso-bidi-font-style: normal;">¿De verdad te alegras o es algo forzado
Elena? – </i>Le responde con frialdad, Elena la mira algo compungida, baja la
vista hacia el suelo y a continuación levanta el rostro para mirar a su hermana
a los ojos . - <i style="mso-bidi-font-style: normal;">¡Lo siento! Lo siento
mucho Rebecca. Debo confesarte que en tus momentos difíciles no estuve a la
altura de una hermana, perdóname no era consciente de tus problemas y no hice
nada por ayudarte. De verdad que me arrepiento de ello. Eres mi hermana, la
única hermana que tengo y me he portado mal contigo.- </i>Rebecca la contempla
que casi está a punto de llorar y se enternece. La abraza casi con la misma
congoja. – <i style="mso-bidi-font-style: normal;">No te preocupes, todo está
bien, escribiremos una nueva vida desde hoy. Te quiero.- </i>Elena vuelve a
abrazarse con fuerza a ella. Marlene las mira con cariño y los demás miran
hacia abajo como reconocimiento del error cometido con Rebecca en el pasado.
Todos menos Tristán y Asgard, el uno pone gesto de enfado manifiesto y el otro
una medio sonrisa irónica, como si presenciase una escena cómica. </span></span></div>
<div style="margin: 0px;">
<span style="font-family: "comic sans ms"; margin: 0px;"><span style="font-size: large;">Durante la cena se habla de muchas cosas,
la moda, el banco, política etc. Elisabeth preside, a su derecha Rebecca al
lado de Marlene, Dana y Hagen a continuación. Por el otro lado de la mesa,
Elena ha usurpado el asiento a Asgard al lado de Elisabeth, quiere estar cerca
de Rebecca, Tanja y Sebastián a su lado frente a Marlene. Tristán cierra ese
lado. Asgard se sienta frente a Elisabeth entre Hagen y Tristán como queriendo
decir que también él, puede presidir algo en la familia. Elena se interesa por
el trabajo de Rebecca en N. York y Elisabeth entabla conversación con Marlene
sobre su carrera de actriz. Los hermanos varones no hablan más que de sus
respectivos negocios con Asgard mientras que Dana cuenta cosas y anécdotas sobre
sus caballos con Tanja.</span></span></div>
<div style="margin: 0px;">
<span style="font-family: "comic sans ms"; margin: 0px;"><span style="font-size: large;">A los postres Elisabeth le pide a Justus
unas copas de champán para brindar por el regreso de las dos hermanas y
Marlene, todos levantan sus copas deseando buenas nuevas para ellas, se
sientan, Rebecca permanece en pie y llama su atención. Con voz temblorosa comienza
a hablar.</span></span></div>
<div style="margin: 0px;">
<span style="font-family: "comic sans ms"; margin: 0px;"><span style="font-size: large;">– <i style="mso-bidi-font-style: normal;">Tengo…
bueno… Marlene y yo tenemos que daros una noticia sobre nuestro futuro. Como
sabéis en el pasado Marlene y yo convivimos juntas durante un tiempo. Aquello
se rompió por mis errores y egoísmos. Este verano nos encontramos por
casualidad, fue algo inesperado pero encantador y hemos retomado nuestra
relación de nuevo, era lo que necesitaba para cerrar un amargo capítulo de mi
vida. Ahora estamos bien y nos queremos con más pasión que nunca. – </i>Mira a
su novia y acaricia su rostro con el dedo pulgar, Marlene besa su mano. -<i style="mso-bidi-font-style: normal;"> <span style="margin: 0px;"> </span>Hace
unas semanas he propuesto a Marlene que se case conmigo y ella ha aceptado. Solo
quería participar nuestra felicidad con vosotros. – </i>Las caras de sorpresa
relativa en el seno de algunos miembros de la familia se transforma al segundo
siguiente en un cúmulo de felicitaciones, del que se aparta Tristán, no lo
soporta a pesar del tiempo transcurrido. Justus se suma a las felicitaciones
como uno más.</span></span></div>
<div style="margin: 0px;">
<span style="font-family: "comic sans ms"; margin: 0px;"><span style="font-size: large;"><br /></span></span></div>
<div style="margin: 0px;">
<span style="font-family: "comic sans ms"; margin: 0px;"><span style="font-size: large;">De vuelta a la orangerie Rebeca estalla a
llorar abrazando a Marlene con fuerza. Gime con fuerza sin tino, Marlene no
sabe que pensar. Consigue calmarla con paciencia y cariño. - <i style="mso-bidi-font-style: normal;">¿Qué te ha pasado? – </i>Le pregunta
inquieta. Rebecca se explica con voz balbuceante que había estado acumulando mucha
tensión. Tener enfrente a Tristan y Tanja era una presión insoportable y se
había estado conteniendo durante toda la velada. Marlene abraza a Rebecca con
la fuerza del cariño. – <i style="mso-bidi-font-style: normal;">Todo está bien.
Todo ha estado muy bien. Entiendo lo que has pasado y este desahogo te dejará
en paz. Has superado tus miedos, de ahora en adelante te sentirás menos
incómoda, aunque estén presentes. Recuerda que el odio se pasa, el amor nunca.
– </i>Hay sabiduría en las palabras de Marlene, siente el dolor de Rebecca como
propio y trata de que camine sin esa pesada lacra del rencor. Mira dulce a los
ojos de Rebecca y con suavidad besa sus labios en señal de apoyo y amor
incondicional. </span></span><span style="font-family: "comic sans ms"; margin: 0px;"><span style="font-size: large;"> </span></span></div>
<br />
<div style="margin: 0px;">
<span style="font-family: "comic sans ms"; margin: 0px;"><span style="font-size: large;">Han pasado varios días y en la familia
Lahnstein aún no conocen la existencia de Tomy. Todo este tiempo ha estado al
cuidado de Thomas y Biggy junto con el hermano de Marlene, otro Thomy con el
que juega continuamente. Marlene y Rebecca, mientras, comienzan a gestionar los
trámites para la boda. El día que regresen a Nueva York lo harán casadas, así
que se afaman en cumplimentar todos los pasos lo más pronto posible. Biggy y
Thomas acuden a la llamada de Marlene que les ha pedido acerquen a Tomy al castillo, ellas esperan en la orangerie. Al abrirse la puerta el niño se lanza a los brazos de su madre corriendo como un loco, luego
se cambia a los de Rebecca que lo recoge con alborozo. Poco después entran en
el estudio donde Sebastián y Elisabeth despachan algunos asuntos. Elisabeth se
sorprende al ver un crio rubio de ojos azules que se acerca de la mano de
ellas. – <i style="mso-bidi-font-style: normal;">Y ¿Quién es este personaje? – </i>Pregunta
con simpatía y algo inquisitoria. – <i style="mso-bidi-font-style: normal;">Es
nuestro hijo.- </i>Responde Marlene. Rebecca la mira con cara de pasmo. Es la
primera vez que escucha esa expresión de labios de Marlene. No es una idea que
se le haya ocurrido nunca, pero oído así, casi le parece perfecto lo dicho por
su novia. - <i style="mso-bidi-font-style: normal;">¿Qué tenéis un hijo? Pero…
¿Cómo…? -</i><span style="margin: 0px;"> </span>Sebastián está petrificado,
Elisabeth en estado de schok. – <i style="mso-bidi-font-style: normal;">Es una historia
que no merece la pena, un error de la vida, pero… ¿A que es guapo? - </i>Expresa
Marlene con jovialidad, Rebecca sonríe con satisfacción. No dan más explicaciones
sobre la existencia del pequeño. De pronto, aparece Elena a sus espaldas y
pregunta que está pasando, la cara de sorpresa que pone al conocer la noticia
es todo un poema. Rápidamente se abalanza a por el niño que pone en su rostro
una mueca, Rebecca se acerca y lo tranquiliza. Nadie hace preguntas solo
celebran el tener un miembro más en la familia. Tanja y Tristán están fuera de
esta situación. Poco tarda Sebastian en comunicarlo a su esposa. Tristán será
el último en saberlo cuando regrese de un viaje a Londres por unos asuntos de los
negocios.</span></span></div>
<div style="margin: 0px;">
<span style="font-family: "comic sans ms"; margin: 0px;"><span style="font-size: large;">La locura acude de nuevo al hermano de
Rebecca, Tristán. Nada más llegar a Koningbrunm. Elena le cuenta la buena
nueva. Marlene y Rebecca tienen un hijo. El rostro de Tristán se convierte en
lúgubre, por dentro siente sus entrañas revolverse. Que sean felices y con
familia propia es algo que colma su desdicha.</span></span></div>
<div style="margin: 0px;">
<span style="font-family: "comic sans ms"; margin: 0px;"><span style="font-size: large;">Recorre los pasillos hasta llegar al
comedor donde se sirve una copa que bebe de un trago, recarga el vaso y se
sienta con la mirada perdida y cargada de animosidad. Entra Elisabeth a buscar
una botella de agua y lo encuentra en sombría actitud sobre una silla. <i style="mso-bidi-font-style: normal;"><span style="margin: 0px;"> </span>-
¿Qué ocurre Tristán? –</i> Él no responde en principio, Elisabeth insiste en
saber cuál es el motivo de esa actitud tan poco templada. Tristán enloquece su
mirada. <i style="mso-bidi-font-style: normal;">- ¿Crees que conoces mi problema?
¡Pues nó! Nadie se interesa por mí. – </i>Elisabeth se espanta y da un paso
atrás ante los gritos de su hijastro. –<i>
No solo tienen que venir a restregarnos su felicidad por las narices. Ahora
resulta que también son madres. ¿Qué debo pensar? ¿Sentirme feliz y contento?
Sigo muy molesto y cada vez que están delante me dan ganas de…-</i> </span></span><span style="font-family: "comic sans ms"; margin: 0px;"><span style="font-size: large;">Elisabeth corta la frase de forma brusca. -
<i style="mso-bidi-font-style: normal;">¿Estas bebido? ¿Cómo se te ocurre
semejante cosa después de tanto tiempo? Tu sed de venganza no tiene límite.
Deberías olvidar y emprender una nueva vida. De esta manera solo conseguirás
arruinar tu propia existencia. Ellas están muy alejadas de ti y lo estarán toda
tu vida. – </i>Tristán se levanta, bebe el contenido del vaso y desencajado se
enfrenta a ella en un tono áspero. – <i style="mso-bidi-font-style: normal;">Nada
que digas tú o mis hermanos me hará cambiar lo que siento. Así que no me
sermonees, yo tomaré mis propias decisiones.- </i>Dicho lo cual abandona el
comedor con aire altivo como si fuera a comerse el mundo de un solo bocado.</span></span></div>
<br />
<div style="margin: 0px;">
<span style="font-family: "comic sans ms"; margin: 0px;"><span style="font-size: large;">A la tarde siguiente mientras Rebecca
escribe unos impresos sentada a la mesa en la orangerie, Marlene está en el parque
con su hermano y su hijo, suenan unos golpes en la puerta, se levanta y acude,
Tristán aparece firme delante de ella con la mirada fija en su rostro. - <i style="mso-bidi-font-style: normal;">¡Tristán! – </i>Él tarda en responder. - <i style="mso-bidi-font-style: normal;">¿Me puedes invitar a una copa? – </i>Pregunta
sin saludar. - <i style="mso-bidi-font-style: normal;">¡Pues claro! Entra, y
buenas tardes. – </i>Tristán se sienta en el sofá con la mirada algo perdida.
Le cuenta que ha visto salir a Marlene con los niños. <i style="mso-bidi-font-style: normal;">- … y he pensado que era el mejor momento para hablar con mi hermana
pequeña. – </i>Le expone sin preámbulos. - <i style="mso-bidi-font-style: normal;">¡Ah!<span style="margin: 0px;"> </span>No sabía que querías hablar conmigo. Y ¿De
qué se trata? – </i>Le cuestiona mientras sirve sendas bebidas.<span style="margin: 0px;"> </span>– <i style="mso-bidi-font-style: normal;">Quería preguntarte si no es demasiado precipitado eso de casaros. ¿Lo
has pensado bien? – </i>Rebecca no se precipita, entiende que la pregunta de su
hermano va con doble intención, algo que solo preocupa a su calenturienta
personalidad. - <i style="mso-bidi-font-style: normal;">¡No y sí! Es una decisión firme y no estoy
preocupada por nada de lo que puedas imaginar. Es la respuesta a todo lo que
deseo en este mundo, estar toda la vida con la persona que amo, Marlene. Nadie,
repito nadie me apartará de ella jamás. – </i>La respuesta no hace que él se
sienta retraído. -<i style="mso-bidi-font-style: normal;"> ¡Ya! Pero creo que te
precipitas, no sé si estás recuperada, todo esto puede ser fruto de tu
deficiencia mental después de lo que te ocurrió. Me agrediste. ¿Lo recuerdas? –
</i>Rebecca comienza a sentirse incómoda. Ve cual es la intención de su
hermano, aun pensando que se encuentre débil en presencia de Tristán saca su
carácter Lahnstein para defenderse lo mejor que sepa. <i style="mso-bidi-font-style: normal;">– Estoy completamente recuperada. Tomo mis propias decisiones sin injerencias
de nadie y no, no estoy condicionada por lo que me pasó. Lo único que puedo
decirte es que, lo siento. Siento haberte agredido de aquella manera, no era yo
en aquel momento. La ira se apoderó de mi y te pido disculpas por ello. ¿Qué
más quieres? – </i>Le pregunta con fuerza en el tono. Ante la respuesta
contundente de su hermana, Tristán se sorprende, en su interior pensaba que
todavía estaba bajo los efectos de la depresión y los medicamentos. - <i style="mso-bidi-font-style: normal;">¡Está bien! Acepto tus disculpas, comprendo
lo ocurrido y ya veo que has recuperado toda tu capacidad. – </i>Hace una
pausa, respira con tranquilidad. - <i style="mso-bidi-font-style: normal;"><span style="margin: 0px;"> </span>Me acabo de enterar que tenéis un hijo. ¿Qué
ha ocurrido? Me gustaría saber algo más. – </i>Rebecca sabe que no debe decir
nada sobre la paternidad de Tomy. Empieza a dudar. – <i style="mso-bidi-font-style: normal;">No creo que deba decirte nada de lo que nos ocupa a Marlene y a mí, es
nuestro hijo y no hay nada más que hablar.</i> – Contundente trata de zanjar el
tema. Tristán, sin embargo, de pronto se le enciende una luz de sospecha. Cree
que Rebecca trata de ocultarle alguna cosa, su actitud es defensiva y piensa
que debe haber detrás de todo esto algún secreto inconfesable. - <i style="mso-bidi-font-style: normal;">¡Está bien! Respeto tu planteamiento, es
asunto vuestro. – </i>En ese momento se abre la puerta y entra Marlene en
compañía de los dos niños. <i style="mso-bidi-font-style: normal;">- ¡Oh!
Tristán. ¿Qué haces aquí? – </i>Pregunta muy sorprendida de su presencia en la
orangerie. –<i style="mso-bidi-font-style: normal;"> Hemos aclarado algunas cosas…
como hermanos.- </i>Explica Rebecca adelantándose. - <i style="mso-bidi-font-style: normal;">¿Y lo habéis conseguido? – </i>Ambos responden afirmativamente, es un
asunto del que se alegra Marlene correspondiendo con una sonrisa de
conformidad. Tristán mira a los dos críos. – <i style="mso-bidi-font-style: normal;">Este es Thomy, tu hermano y este otro ¿Quién es? – </i>Pregunta con
cierta intriga. –<i style="mso-bidi-font-style: normal;"> Es mi hijo, y se llama
Tom, así se dice en California. – </i>Tristán sonríe satírico. – <i style="mso-bidi-font-style: normal;">¡Una aventura perdida! – </i>Lo dice en tono
de sarcasmo. Marlene se tensa algo antes de responder. – <i style="mso-bidi-font-style: normal;">Eso fue. Algo fallido. No suelo tener suerte con los hombres. – </i>Tristán
vuelve a sonreír irónico. – <i style="mso-bidi-font-style: normal;">Si se ve que
te van mejor las mujeres. – </i>Expresa mirando a su hermana. Se despide con
fría expresión y se marcha con diligencia. El rostro de Marlene se enciende de ira. - <i style="mso-bidi-font-style: normal;">¿A qué ha venido eso? – </i>Pregunta completamente aturdida. - <i style="mso-bidi-font-style: normal;">¡No lo sé! Me preguntó si no era precipitado
lo de la boda y después intentó sondearme sobre Tomy. No le he dicho nada, que
es nuestro hijo y nada más. – </i>Marlene está irritada, así lo hace ver con su
mirada. - <i style="mso-bidi-font-style: normal;">¡Venga! No te enfades solo ha venido a curiosear para llenar su ego si
encontraba algo con qué alimentarlo y no se ha llevado nada. – </i>Rebecca
trata de tranquilizarla y la acaricia en el hombro y baja con la mano hasta la
suya en un gesto de ternura. –<i style="mso-bidi-font-style: normal;"> Ya ves, le
he tenido delante a solas y lo he superado.- </i>Marlene sonríe agradecida y
complaciente. Le da un corto beso y acaricia su mejilla. - <i style="mso-bidi-font-style: normal;">¡Por cierto! Cuando dijiste a todos que es nuestro hijo. Me
desconcertaste, no me lo esperaba. ¿Se te ocurrió así de golpe? – </i>Rebecca
pregunta divertida mientras se sienta en el suelo al lado de los niños. <i style="mso-bidi-font-style: normal;">– Hace semanas que lo vengo pensando. No
tenía intención de hablarlo hasta que llegásemos a la boda. Ayer me salió sin
pensarlo, lo tenía interiorizado, y salió sin más.</i> – Le cuenta festiva.
Rebecca le indica con el dedo que se acerque, que se agache a su lado y de los
niños. Marlene obedece misteriosa y se coloca a su lado en cuclillas. Rebecca
acerca su rostro y la besa con profundidad. Los niños juegan y casi ni aprecian
el movimiento de las adultas. - <i style="mso-bidi-font-style: normal;">¡Te
quiero! – </i>Le musita al oído a Marlene y pronto se disponen a jugar como si
fueran otras dos niñas pequeñas. </span><i style="mso-bidi-font-style: normal;"></i></span></div>
<b></b><i></i><u></u><sub></sub><sup></sup><strike></strike><span style="font-size: large;"></span>Francisco Freijaneshttp://www.blogger.com/profile/07136887969142331609noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-7189587968703271148.post-51343606206167763462018-10-30T09:20:00.000+01:002018-10-30T09:20:02.163+01:0012ª Entrega
<br />
<div style="margin: 0px 0px 13.33px;">
<b style="mso-bidi-font-weight: normal;"><i style="mso-bidi-font-style: normal;"><span style="font-family: "Comic Sans MS"; line-height: 115%; margin: 0px;"><span style="font-size: large;">-
Hay que pensar.</span></span></i></b></div>
<br />
<div style="margin: 0px;">
<span style="font-family: "Comic Sans MS"; margin: 0px;"><span style="font-size: large;">Rebecca no sale de su letargo. Casi no ha descansado,
toda la noche pensando en la propuesta que hizo a Marlene la tarde del domingo.
El sosiego que disfruta en su nueva vida parece haberse alterado. Regresar a
Düsseldorf la inquieta, más de lo que podía imaginar. Marlene no se ha
percatado del nerviosismo que sacude su interior ante la perspectiva de volver
a su casa. Aquel lugar del que salió huyendo hace algo más de un año. El
conflicto con su familia está aún por resolver. Quizás ahora que se encuentre en
mejor situación anímica y puede afrontarlo sin daño imprevisto, pero duda.
Empieza a pensar como decirle a Marlene que no le apetece nada en absoluto
regresar al lugar del sufrimiento. Por otro lado, entiende sus razones. Ella no
tiene un conflicto familiar, es más, su familia es del todo adorable por la
relación tan sana que mantienen entre las hermanas y su padre. Que acepten la
relación amorosa de ambas le parece fuera de lo común, no es algo que se admita
tan natural en otros ámbitos, pero los Wolf lo han recibido sin ningún tapujo
cuando percibieron la felicidad en el rostro de Marlene. A veces siente cierta
envidia de ello, los Lanshtein son disfuncionales y la familia no está para
nada cohesionada. </span></span><span style="font-family: "Comic Sans MS"; margin: 0px;"><span style="font-size: large;">¿Cómo afrontará tener delante a Tristán y a
Tanja? Dos figuras que menosprecia. </span></span><span style="font-family: "Comic Sans MS"; margin: 0px;"><span style="font-size: large;">Aún conserva la Orangerie como refugio,
aunque a veces su hermano ha violado su intimidad de forma desaprensiva.
Tiembla ante la perspectiva de bregar con Sebastián y Elena que nada aportan a
su existencia, pero son insidiosos como para alterar su tranquilidad.<span style="margin: 0px;"> </span></span></span></div>
<div style="margin: 0px;">
<span style="font-family: "Comic Sans MS"; margin: 0px;"><span style="font-size: large;">“<i style="mso-bidi-font-style: normal;">Debo
pensar con claridad. Amo a Marlene, la necesito a mi lado, ella es lo único y
lo que más quiero en este mundo, es la mitad de mi misma. Quiero casarme y
quiero vivir toda mi vida a su lado. Que lo hagamos en Düsseldorf y lo haremos,
o en cualquier lugar, no hará que la defraude con mis caprichos, pero necesito estar
preparada y ser fuerte para enfrentarme a mi propia familia. No derrumbarme
cuando sienta sus incoherencias, sus desuniones, el trato de menosprecio y como
me apartaron de lo único que me quedaba.” </i></span></span></div>
<br />
<div style="margin: 0px;">
<span style="font-family: "Comic Sans MS"; margin: 0px;"><span style="font-size: large;">Todas las mañanas, antes de acudir a la
tienda de Stanton street, Rebeca continua con su rutina de correr por Central
Park, unos cuarenta minutos que estimulan su cuerpo y la hacen sentirse en
plena forma. Después de darse una ducha y tomar un desayuno ligero a base de
frutas y yogurt se encamina a su trabajo donde es feliz durante unas horas
haciendo lo que más le gusta, diseño y moda. Después del almuerzo se sienta en
su despacho a la dureza de las cuentas, las relaciones públicas y comerciales.
La última hora del día lo dedica a Marlene sentada delante del ordenador hablan
de todo lo que las inquieta e interesa. A veces aparece Tommy en brazos de
Marlene y juega con él a distancia. – <i style="mso-bidi-font-style: normal;">Estoy
pensando en que deberíamos viajar a Dusseldorf. Desde que me propusiste que nos
casáramos y tener nuestro propio espacio, no hago más que darle vueltas.- </i>Le
expone con cierta inquietud. – <i style="mso-bidi-font-style: normal;">No sé lo
que haré allí, no encuentro nada que me estimule a este viaje. – </i>Marlene
quisiera tener a Rebecca entre sus brazos para consolar esa apatía con la que
se expresa. Desde luego, no es una tarea fácil llegar a Koningsbrunm y
presentarse ante la familia Lahnstein. Para Rebecca es un esfuerzo ímprobo, no
le apetece nada encontrarse con la causa de sus males y su alejamiento. – <i style="mso-bidi-font-style: normal;">Se lo difícil que es Rebecca. Te entiendo,
pero nuestras familias están allí, por muy disfuncionales que seáis los
Lahnstein son tu familia. Además Elena ha regresado para quedarse definitivamente
en la Universidad de Colonia, ella será un buen apoyo.- </i></span></span></div>
<div style="margin: 0px;">
<span style="font-family: "Comic Sans MS"; margin: 0px;"><span style="font-size: large;">Durante días hablan sobre el tema sin que
Rebecca resuelva en tomar una decisión firme. </span></span></div>
<br />
<div style="margin: 0px;">
<span style="font-family: "Comic Sans MS"; margin: 0px;"><span style="font-size: large;">Cierto día que Rebecca despacha en su lugar
de trabajo, a media tarde recibe una llamada de Marlene, algo extraño, pues en
media hora o poco más, hablarían por las ondas. - <i style="mso-bidi-font-style: normal;">Dime, ¿Qué pasa?</i> – Expresa con preocupación al contestar. – <i style="mso-bidi-font-style: normal;">No te lo vas a creer, mañana voy a verte, me
traslado a Nueva York.- </i>Le expresa muy contenta. – <i style="mso-bidi-font-style: normal;">Te llamo porque después no podré. Estaré con Yakov en la agencia
arreglando papeles y no sé a que hora acabaremos. ¿Qué te parece la noticia? – </i>Rebecca
no sale de su asombro. Responde balbuceante que le parece muy bien. Por lo
inesperado de la noticia no sabe que decir. En un principio se alegra de que
Marlene regrese a la ciudad y está segura de que compartirán su vida durante un
tiempo. Para ella es una felicidad poder cumplir esa ilusión. El debut en
Brodway no se produciría hasta Enero. Llegará con dos meses de adelanto lo que
supone dos meses de felicidad anticipada.</span></span><span style="font-size: large;"><i style="mso-bidi-font-style: normal;"><span style="font-family: "Comic Sans MS"; margin: 0px;"><span style="margin: 0px;"> </span></span></i><span style="font-family: "Comic Sans MS"; margin: 0px;"><span style="margin: 0px;"> </span></span></span></div>
<br />
<div style="margin: 0px;">
<span style="font-family: "Comic Sans MS"; margin: 0px;"><span style="font-size: large;">La terminal del John F. Kennedy es un
bullicio enorme. Rebecca se ha desplazado hasta allí para recoger a Marlene,
Tommy y Roselyn que vienen acompañados de un voluminoso equipaje. Está
impaciente por verlas aparecer, el cartel anuncia que el avión ha aterrizado
hace ya treinta y cinco minutos y no hay signos de que aparezcan por la puerta
de salida. Por fin se abre la dichosa puerta y salen los tres. Marlene y
Roselyn con sendos carros llenos de maletas, Tommy va sentado encima de la
maleta más alta del carro que empuja Marlene. Rebecca mira con candor los ojos
de su novia embelesada. Se besan discretas y pronto Tommy se tira en brazos de
Rebecca y la abraza con fuerza. – <i style="mso-bidi-font-style: normal;">Te ha
cogido mucho cariño, cada vez que te ve es una fiesta para él.- </i>Le dice
Marlene, Roselyn sonríe y saluda con afecto a Rebecca. Acomodadas en el
todoterreno de Rebecca se trasladan al apartamento de la calle 78. Después del
esfuerzo de subir todo aquel equipaje y colocarlo en sitio conveniente, por fin
se sientan en la barra de la cocina a tomar un refresco. Tommy se tira a la
piscina de bolas según entra por la puerta y desaparece entre sus juegos.
Roselyn se dedica a colocar la ropa del niño y la suya en las habitaciones correspondientes.
La cara de cansancio de Marlene es evidente. De una maleta pequeña extrae una
carpeta y la abre. Le cuenta a Rebecca que ya tiene el contrato para Brodway.
Empezará los ensayos en cuatro semanas. <i>–
Yakov me ha dejado libre hasta entonces y lo primero que he pensado, es que
quiero estar contigo. En los Angeles no tenía nada que hacer y aquí me tienes.
Soy toda tuya. –</i> </span></span><span style="font-family: "Comic Sans MS"; margin: 0px;"><span style="font-size: large;">Rebecca es todo felicidad, besa, ahora sí,
amorosamente a Marlene.</span></span></div>
<div style="margin: 0px;">
<span style="font-family: "Comic Sans MS"; margin: 0px;"><span style="font-size: large;">Nada le gusta más que tener a su lado al
amor de su vida y la alegría que supone que en un tiempo no lejano estarán
casadas y unidas para siempre. Pero antes hay que pasar el trago Lahnstein,
algo poco apetecible para Rebecca pero a fin de cuentas necesario. </span></span></div>
<br />
<div style="margin: 0px;">
<span style="font-family: "Comic Sans MS"; margin: 0px;"><span style="font-size: large;">Después de cenar Marlene y Rebecca se
sientan cogidas de la mano en el diván frente a la cristalera mirando hacia
Central Park que ya luce con toda su iluminación artificial y al otro lado el
Uper West Side. Una copa de vino en la mano y miradas profundas, de vez en
cuando un beso y el deseo que crece en ambas, lentamente se van apoyando la una
en la otra. Marlene se tumba a lo largo del sofá apoyando su cabeza en las
piernas de Rebecca a modo de almohada. Durante un rato continúan hablando hasta
que Rebecca se da cuenta que habla sola, Marlene se ha dormido profundamente.
El cansancio de un día tan agitado y la emoción de estar de nuevo al lado de su
amada la ha relajado en exceso y ha caído en brazos de Morfeo de forma
estrepitosa. Cuidadosamente Rebecca se incorpora, coloca un cojín debajo de su
cabeza y la arropa con una manta ligera.<span style="margin: 0px;">
</span>- <i style="mso-bidi-font-style: normal;">¡Buenas noches amor mío! – </i>Besa
su frente con suave toque y apaga la poca luz que proporcionaba una pequeña
lámpara de mesa. Se retira al dormitorio y se acomoda en la cama después de
ponerse el pijama. Se dispone a leer, no tiene sueño y así puede matar el rato
hasta que el cansancio se apodere de ella. </span></span></div>
<div style="margin: 0px;">
<span style="font-family: "Comic Sans MS"; margin: 0px;"><span style="font-size: large;">Ya entrada la madrugada Rebecca nota que
alguien se cuela en la cama junto a ella, es un cuerpo desnudo y caliente que
se abraza a su espalda. – ¿<i style="mso-bidi-font-style: normal;">Creías que te
habías librado de mí? - </i>Le dice Marlene al oído al tiempo que muerde con
delicadeza la oreja de Rebecca. - <i style="mso-bidi-font-style: normal;">¡Holaaa!
Mi amor. -<span style="margin: 0px;"> </span></i>Despierta Rebecca y se da
la vuelta para poner su rostro frente a ella, la besa con dulce gesto y Marlene
le desabrocha el pijama, con rapidez la deja desnuda frente a ella. –<i style="mso-bidi-font-style: normal;"> Ahora estamos igual. ¿Qué te apetece hacer?
– </i>Obvia la respuesta pues Rebecca se enlaza a Marlene boca a boca, pecho
con pecho abdomen unidos y entrelazadas sus piernas comienzan a danzar sobre el
blanco de las sábanas. El baile es tranquilo pero rítmico, la respiración se
agita y esos gemidos apagados por la oclusión de sus labios suena como el
discurrir del agua por un arroyo brusco. Llegan al culmen con fragor contenido
y al poco se separan agotadas. Ambos cuerpos están humedecidos por el sudor
generado durante el acto, pero ellas sonríen de puro placer amoroso. </span></span><span style="font-family: "Comic Sans MS"; margin: 0px;"><span style="font-size: large;">– <i style="mso-bidi-font-style: normal;">Aunque
no es hora me daría una ducha relajante ahora mismo. – </i>Expone Rebecca, solo
la posibilidad de despertar a Tommy o que Roselyn las oiga retrae esa
propuesta. – <i style="mso-bidi-font-style: normal;">Si somos silenciosas no lo
rechazo. - </i>Apoya Marlene la idea. - <i style="mso-bidi-font-style: normal;">¿A
qué esperamos? – </i>Raudas se levantan y desnudas tal cual estaban se
incorporan al baño para allí continuar con esas caricias, besos y gestos de
amor entre ellas.</span></span><span style="font-family: "Comic Sans MS"; margin: 0px;"><span style="margin: 0px;"><span style="font-size: large;"> </span></span></span></div>
<br />
<div style="margin: 0px;">
<span style="font-family: "Comic Sans MS"; margin: 0px;"><span style="font-size: large;">En Central Park todo es bullicio, estamos
en otoño y la vegetación ha comenzado ese cambio hacia el ocaso de las hojas de
ciertas plantas y árboles que deciden invernar hasta la próxima primavera
desnudando sus ramas. Los ocres, amarillos y verdes se entremezclan por el césped
después de la caída de las hojas. El verde manto del suelo permanece
inalterable sirviendo de alfombrado. Marlene y Rebecca están sentadas sobre una
manta extendida sobre la hierba observando como Tommy corretea delante de
Roselyn a la que trae mareada con sus giros y cambios de dirección, todo es un
juego para él y se siente feliz, no hace más que reír. Rebecca mantiene el
gesto serio y algo pensativo. - <i style="mso-bidi-font-style: normal;">¿Qué te
ocurre cariño? – </i>Pregunta Marlene algo intrigada al percatase de la
expresión de su novia. Rebecca le dice que está pensando en Koningsbrunm.
Buscando una motivación para poder ir a su casa, pero que no la encuentra. Solo
ve dificultades y que tiene un miedo atroz a recaer en una depresión mayor que
la sufrida. – <i style="mso-bidi-font-style: normal;">Voy a estar a tu lado para
que eso no ocurra. Siempre te apoyaré y no permitiré que nada te afecte como
para que resultes dañada. – </i>Marlene le expresa su actitud de protección y
amparo. Acariciando con suavidad la mejilla de su novia le dice que entiende
sus motivos, pero que si afronta con serenidad la situación con su familia, las
consecuencias serán positivas, aunque ahora no lo tenga tan claro. - <i style="mso-bidi-font-style: normal;">¡Si! Pero me gustaría que lo contemplases
desde dentro de mí. Aún me siento hundida con respecto a mi familia.- </i>Marlene
la mira profundamente a los ojos. - <i style="mso-bidi-font-style: normal;">¡Estoy
dentro de ti! Tu sufrimiento es mi sufrimiento y nada deseo más que lo
erradiques de tu alma. Soy tu esposa ya en el corazón y cualquier sentimiento
que te afecte, me afecta a mí también. – </i>Le dice con dulzura mirando a sus
ojos marrones. Rebecca siente algo de inquietud por las palabras de Marlene,
una zozobra feliz por ese pensamiento tan cariñoso. <i>– Creo que todo saldrá bien si vamos juntas? – </i>Expresa Rebecca<i>, </i>Marlene la mira con
misterio.<span style="margin: 0px;"> </span><i style="mso-bidi-font-style: normal;">- ¿Vamos juntas a Dusseldorf? – </i>Le
pregunta con una sonrisa. <i style="mso-bidi-font-style: normal;">- ¡Sí! Sin
dudarlo, me parece una idea magnífica. – </i>Le responde con una sonrisa
complaciente. El gesto de preocupación en ambas desaparece por una mímica mas
gozosa. Enseguida comienzan a hacer planes de viaje. </span></span></div>
<div style="margin: 0px;">
<span style="font-family: "Comic Sans MS"; margin: 0px;"><span style="font-size: large;"><br /></span></span></div>
<div style="margin: 0px;">
<span style="font-family: "Comic Sans MS"; margin: 0px;"><span style="font-size: large;">El vuelo desde N.York a Colonia transcurre
con toda normalidad. Tommy ha dormido casi todo el tiempo, algo importante para
la adaptación del niño. A las 9,35 aterrizan y en la sala de espera se encuentra
Thomas deseando recibir a la feliz pareja.</span><span style="font-family: Times New Roman;"> </span></span><span style="font-family: "Comic Sans MS";"><span style="font-size: large;">E<span style="margin: 0px;">l encuentro no puede ser mas afectuoso,
Marlene abraza a su padre con efusión, el niño se cuelga materialmente de los
brazos de Rebecca, luego cede a los brazos de su abuelo para regresar de nuevo
con su madre. <i style="mso-bidi-font-style: normal;">- ¡Rebecca! Me alegro de
verte, es una buena noticia comprobar que te has recuperado.- </i>Le dice como
saludo a Rebecca, ella abraza a Thomas con fuerza. <i style="mso-bidi-font-style: normal;">- ¡Gracias Thomas! Estoy muy contenta de verte a ti también. – </i>El
padre de Marlene no sale de su asombro, nunca ella se había dignado a un afecto
tan pronunciado. Se alegra profundamente de ello, pero no le encuentra
justificación. Al salir del aeropuerto Marlene le indica que las lleve a<span style="margin: 0px;"> </span>Koningsbrunm. La cara de sorpresa que él
expresa, coloca a Marlene en situación de explicar la causa sobre semejante
decisión. Rebecca le exterioriza superficialmente que deben aclarar algunas
cosas con la familia Lahnstein y que han decidido quedarse en la orangerie. - <i style="mso-bidi-font-style: normal;">¿Y el niño? ¿Qué haréis con Tomy? Nadie de
esa familia sabe que existe.- </i>Marlene mira con seriedad a Rebecca. –<i style="mso-bidi-font-style: normal;"> He pensado que va siendo hora que se sepa
que tengo un hijo. La paternidad seguirá siendo un misterio para ellos. No debe
llegar a oídos de Tristán ni una sola sospecha. – </i>Marlene enfatiza esta
última frase, Thomas asiente certificando que ha recibido el mensaje. Koningsbrunm
está vacío, solo Justus les recibe en la entrada del invernadero. Viendo con
sorpresa la aparición del pequeño. Mientras se van acomodando aparece Elisabeth
que se apea del flamante Mercedes. El saludo entre ella y Rebecca es muy
afectuoso. Rebecca siempre ha considerado a Elisabeth como la madre que no tuvo
y es la única de la familia que ama sinceramente sin conflictos<span style="font-family: Times New Roman; font-size: small;">. </span></span></span></span><span style="font-family: "Comic Sans MS"; margin: 0px;"><span style="font-size: large;">El almuerzo en casa de los Wolf se
desarrolla con la acostumbrada alegría, Dana y Hagen así como Kim y Emilio
completan la mesa. Hagen está especialmente contento por ver a Rebecca
recuperada. Aunque él no entrara en conflicto con ella, siempre se ha
recriminado el hecho de no haber podido hacer más en aquella desgraciada
ocasión, Dana le tenía al tanto y eso le tranquilizaba, pero no se sintió
satisfecho en ningún momento. No lo ha manifestado personalmente aún, espera
poder confesarse con su hermana en algún momento. Acabada la comida, Dana saca
una botella de champán y unas copas. - <i style="mso-bidi-font-style: normal;">¿Hay
que celebrar algo? – </i>Pregunta Biggy. Todos se miran mientras Rebecca y
Marlene se miran con unas risas. Se cogen de la mano y Marlene toma la palabra.
– <i style="mso-bidi-font-style: normal;">Rebecca y yo nos hemos prometido, vamos
a casarnos.- </i></span></span><span style="font-family: "Comic Sans MS"; margin: 0px;"><span style="font-size: large;">La cara de sorpresa es manifiesta en todos
menos en Dana y Hagen. Ellos se limitan a hacer risas con todos. – <i style="mso-bidi-font-style: normal;">Hijas, no puedo más que felicitaros por
vuestro arrojo y decisión. Espero que seáis felices toda vuestra vida. </i>–
Dicho esto Thomas las abraza con brillo en los ojos, los demás hacen lo mismo
deseando felicidad a la nueva pareja.</span><span style="font-family: Times New Roman;"> </span></span><span style="font-family: "Comic Sans MS"; margin: 0px;"><span style="font-size: large;">Dana y Hagen siempre han estado informados
de todo lo que sucede con Marlene y Rebecca, antes de su encuentro y luego de
su vida en común. Recibieron la noticia del compromiso al día siguiente de la
declaración de Rebecca, ella y Marlene se lo notificaron personalmente a los
dos.</span></span></div>
<br />
<div style="margin: 0px;">
<span style="font-family: "Comic Sans MS"; margin: 0px;"><span style="font-size: large;">Koningsbrunm; Hogar de Rebecca durante
mucho tiempo, hoy lo siente como algo extraño y lejano. La orangerie, sin
embargo, es su casa, el lugar en el que desarrollaba su actividad febril de
diseño. Cuando su mente se distraía con la imagen de Marlene terminaba por
dibujar su rostro o su figura sobre la libreta de trabajo y se quedaba
embelesada contemplando esa imagen que había surgido de su mano diestra. Hasta
que otra cosa llamaba su atención. Podía pasar horas mirando el rostro de
Marlene expresado en el papel. Es tan grande la fuerza de su sentimiento por
ella que la abstrae de la realidad con una fuerza imposible de resistir. Descansa
en el salón mirando por la ventana hacia el castillo. Allí han de dirigirse
para cumplir en la cena con toda la familia. Marlene está vistiéndose en el
dormitorio, se coloca el último pendiente y se dirige al encuentro con Rebecca.<span style="margin: 0px;"> </span><i style="mso-bidi-font-style: normal;">-
¡Estás preciosa! – </i>Exclama Rebecca al verla aparecer con un vestido azul
claro que realza el oro de su pelo. <i style="mso-bidi-font-style: normal;">– Tú
si que estás preciosa, vas a impactar a toda tu familia.- </i>Le expresa con
dulzura y le da un corto beso muy cariñoso. Rebecca viste un traje verde oscuro
con los hombros al aire y sobre ellos un chal blanco hueso con flecos que
alargan su figura, destacan el pelo y sus ojos marrones sobre un collar de oro
de estilo renacentista. <i style="mso-bidi-font-style: normal;">- ¿Nos vamos? – </i>Marlene
indica que si. Salen por la puerta y atraviesan el jardín, Marlene cogida del
brazo de Rebecca le transmite seguridad y fuerza para sentarse entre sus
hermanos con confianza en sí misma. Entran por la puerta principal, en el
recibidor está Justus, después de dar la bienvenida, les indica que todos están
reunidos en el estudio esperando. </span></span></div>
<div style="margin: 0px;">
<span style="font-family: "Comic Sans MS"; margin: 0px;"><span style="font-size: large;">Con decisión enfilan el pasillo hasta la
puerta de la estancia y entran.</span></span></div>
<br />
<div style="margin: 0px;">
<br /></div>
<br />
<div style="margin: 0px;">
<span style="font-family: "Comic Sans MS"; margin: 0px;"><span style="margin: 0px;"><span style="font-size: large;"> </span></span></span></div>
<br />
<div style="margin: 0px 0px 13.33px;">
<br /></div>
<br />
<div style="margin: 0px 0px 13.33px;">
<br /></div>
<b></b><i></i><u></u><sub></sub><sup></sup><strike></strike><span style="font-family: calibri;"></span><span style="font-size: large;"></span>Francisco Freijaneshttp://www.blogger.com/profile/07136887969142331609noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-7189587968703271148.post-47238913884807649892018-10-26T07:52:00.000+02:002018-10-26T07:52:38.516+02:0011ª Entrega<br />
<div style="margin: 0px;">
<b style="mso-bidi-font-weight: normal;"><i style="mso-bidi-font-style: normal;"><span style="font-family: "comic sans ms"; line-height: 115%; margin: 0px;"><span style="font-size: large;">Un punto
de inflexión</span></span></i></b></div>
<br />
<div style="margin: 0px;">
<br /></div>
<br />
<div style="margin: 0px;">
<span style="font-family: "comic sans ms"; margin: 0px;"><span style="font-size: large;">Hacia las siete de la tarde Marlene y Rebecca
se marchan a cenar. El lugar elegido el Club A Steakhause, sitio del primer
encuentro en New York. <i style="mso-bidi-font-style: normal;">- ¡No podías
elegir mejor el restaurante! -</i> Rebecca ya tenía hecha la reserva desde hace
días. Pidió la mesita de la escalera, es la única que proporciona algo de
intimidad, a pesar de estar en medio del paso. Ella es cliente distinguida, y no
tuvo inconvenientes. Durante la cena hablan de muchas cosas. Cercano el postre Rebecca
pide Champán que les sirven en sendas copas<i style="mso-bidi-font-style: normal;">.
- ¿Y este dispendio?-</i> Pregunta Marlene<i style="mso-bidi-font-style: normal;">.
– Es para una ocasión especial. –</i> Rebecca se pone misteriosa. Con una
pícara sonrisa mete su mano en el bolso y extrae un pequeño paquetito envuelto
con un lazo violeta y que entrega a Marlene que pone cara de sorpresa, no sabe
que hay dentro. Con cierto nerviosismo lo desenvuelve y lentamente lo abre. Sus
azules ojos se abren como perlas brillantes al descubrir en el interior de la
cajita dos anillos coronados por <span style="margin: 0px;"> </span>pequeños
diamantes. Rebecca en ese mismo instante coge la mano izquierda de su amada y le
acaricia la piel con suavidad. <i style="mso-bidi-font-style: normal;">- ¿Quieres
casarte conmigo?-</i> Le pregunta en voz baja y tono aterciopelado que llega al
oído de Marlene como canto de sirena. No acierta a responder, se siente tan
sorprendida como alegre su corazón. La voz trémula<span style="margin: 0px;"> </span>espira un silencioso<i style="mso-bidi-font-style: normal;">… - ¡Sí!-</i> Apagado por la agitación de su alma. El corazón se
acelera y el resto del cuerpo tiembla de emoción. Rebecca espera y observa. <i style="mso-bidi-font-style: normal;">– ¡Te quiero cariño! Deseo compartir mi vida
contigo. Casarnos es mi apuesta por tu amor.-</i> Marlene aun no se ha repuesto
de la emoción. Rebecca no ha escuchado el sí entrecortado. <i style="mso-bidi-font-style: normal;">- ¡Rebecca! Eres lo mejor de mi vida. Yo también quiero pasar el resto
de ella a tu lado.-</i> Rebecca toma el anillo en su mano y delicadamente lo
coloca en el dedo de Marlene. <i style="mso-bidi-font-style: normal;">- ¿Y tú? ¿No
tienes anillo?-</i><span style="margin: 0px;"> </span>Con los nervios no
se ha percatado. <i style="mso-bidi-font-style: normal;">- ¡Ahí está! En la
cajita-</i> Marlene toma el otro anillo y repite el gesto en la mano de Rebecca.
</span></span></div>
<br />
<div style="margin: 0px;">
<span style="font-family: "comic sans ms"; margin: 0px;"><span style="font-size: large;">Después de la cena pasean tranquilas por la
quinta avenida hasta llegar a la calle sesenta y ocho. Entran en el portal y
suben al piso trece. En el ascensor Rebecca mira con fijeza a los ojos de
Marlene. <i style="mso-bidi-font-style: normal;">- No hay nada que yo quiera más,
que estar contigo y solo contigo, comenzar de nuevo a tu lado. ¡Te amo! - </i>Rebecca
sella su promesa con un profundo beso lleno renovada dedicación.</span></span><br />
<span style="font-size: large;"><i style="mso-bidi-font-style: normal;"><span style="font-family: "comic sans ms"; margin: 0px;">-
Es lo que deseaba porque no iba a dejarte hacer otra cosa.- </span></i><span style="font-family: "comic sans ms"; margin: 0px;">Marlene bromea mientras frota la nariz de
Rebecca con la suya. Entran en el apartamento. Marlene se quita la chaqueta y
la arroja al sofá. La canguro se despide, Tommy duerme plácidamente en su
cuarto. Rebecca desaparece en la habitación mientras Marlene investiga la
pequeña sala de estar. Se sonríe mientras contempla el espacio acogedor. Rebecca
recapacita sobre lo mucho que Marlene ha cambiado su vida.<span style="margin: 0px;"> </span>Rebecca había pensado en pasar una noche
romántica en un hotel, pero ahora este simple espacio era más grandioso que
cualquier hotel en el que había estado nunca, porque nunca estuvo más feliz que
ahora, está en su apartamento, en su hogar. Su sonrisa se engrandece al sentir
que los brazos de Marlene le envuelven la cintura por detrás apretándola contra
si. Se escita fácilmente al notarla aún más cerca. Siente que su cuerpo se
debilitaba cuando los labios de Marlene le rozan suavemente la nuca. Marlene puede
encender los deseos de Rebecca que no hace nada por resistir el tacto de su piel, le da la vuelta lentamente desabrochando la chaqueta de Rebecca que
pronto la tira al suelo. Marlene no puede resistir la oportunidad de besarla en
los labios con ingenuidad y toma a Rebecca de la mano.<i style="mso-bidi-font-style: normal;"> - Ven conmigo.- </i>Rebecca la sigue como una niña, está encantada con
la escena que sucederá a continuación, le parece perfecta y se deja llevar.</span><span style="font-family: "calibri";"> </span></span><br />
<span style="font-family: "comic sans ms"; margin: 0px;"><span style="font-size: large;">Marlene descubre que mientras su primera
impresión era que el apartamento estaba tranquilo y como lo habían dejado, su punto de vista cambia al
entrar en el dormitorio, parece una escena mágica. La habitación está débilmente
iluminada por velas estratégicamente colocados por la estancia. La cama <span style="margin: 0px;"> </span>cubierta de sábanas blancas y almohadas voluptuosas.<span style="margin: 0px;"> </span>Los jarrones de flores silvestres <span style="margin: 0px;"> </span>ocupan casi cada rincón, creando un ambiente
romántico como en el campo en primavera<i style="mso-bidi-font-style: normal;">. - ¿Te
gusta?-</i><span style="margin: 0px;"> </span>Rebecca susurra mientras
abraza frágil a Marlene. <i style="mso-bidi-font-style: normal;">- ¡Me gusta! -</i>
Responde con una sonrisa. <i style="mso-bidi-font-style: normal;">- Pero algo me
dice que me va a gustar aún más.</i> - La mirada de <span style="margin: 0px;"> </span>Rebecca se dirige de la habitación hacia <span style="margin: 0px;"> </span>la antigua bañera que se aprecia en el cuarto
de baño a través de la puerta al lado opuesto de la habitación. La pared superior
de la bañera son múltiples ventanas de cristal que proporcionan una visión
perfecta de las estrellas y la luna que adornan el cielo nocturno. Dos de ellas
permanecen abiertas y Rebecca podía sentir la cálida brisa que llena la
estancia. <i style="mso-bidi-font-style: normal;">- ¡Es hermoso, eres hermosa!</i>
- Rebecca es la que esta vez se acerca a Marlene. <i style="mso-bidi-font-style: normal;">- Debemos entrar antes de que el agua empiece a enfriarse. -</i>
Sugiere Marlene, lentamente comienza a desnudar a Rebecca quitando cada
artículo de ropa como si estuviera revelando una delicada pieza original de
arte de porcelana. Se queda sin respirar, paralizada por la belleza desnuda que
estaba ante ella. Rebecca pudorosa y vulnerable da un paso adelante hacia
Marlene y con suaves besos comienza a desnudarla. Se introducen en la
bañera y el vapor del agua se levanta en el aire. Rebecca se sienta en el calor
de la bañera, Marlene lo hace entre sus piernas y se apoya en los invitadores
brazos de Rebecca. Hay un largo silencio, sin embargo hablan sus cuerpos, lo
dicen por sus toques y caricias. Rebecca explora con suavidad la piel de
Marlene empezando primero con su cuello inclinado donde coloca muchos pequeños
besos, se encamina al oído,<span style="margin: 0px;"> </span>empuja los
lóbulos de su oreja. El sonido del placer de Marlene que escapa suavemente de
sus labios y alienta a Rebecca a seguir explorando el cuerpo de su amada.
Marlene no había sentido tanto placer en mucho tiempo. Mientras las manos de
Rebecca sondean tiernamente su cuerpo deseoso, siente la tensión reprimida de la
separación,<span style="margin: 0px;"> </span>ansía más del contacto de
Rebecca. Sentir que su cuerpo se entrega, le da a Rebecca la
renovada confianza que había perdido, y su deseo y necesidad de complacer a
Marlene en todos los sentidos y sus gestos de cariño se intensifican. Estimulados
sus sentidos. Con el pecho de Marlene en sus manos, la excita juguetonamente.
Marlene se está dejando llevar por los maestros caminos de Rebecca. El palpitar
de su sexualidad se hace insoportable. Está más que avivada<span style="margin: 0px;"> </span>y preparada para llegar al clímax al mínimo
contacto de las caricias de Rebecca. Ella <span style="margin: 0px;"> </span>tiene todo el control y Marlene está
pidiéndole que no se detenga. Oscilan sus caderas en un empuje rítmico que se
mantiene en un tempo musical de adaggio. Con cada paso diligente de sus cuerpos,
tanto Marlene como Rebecca sienten una pasión elevada que está a punto de
estallar. Sabiendo a Marlene en el punto de llegar al culmen, Rebecca se torna
más rítmica, aumenta la presión al pequeño montículo palpitante de Marlene,
consiguiendo el resultado que buscaba. Marlene ya no puede contener el placer
apasionado que las acciones de Rebecca consiguen liberar de su cuerpo<i style="mso-bidi-font-style: normal;">. - ¡Rebecca! ¡Oh, Dios! ¡Rebecca, voy a ...!
-</i> Marlene se queda sin aliento mientras su cuerpo explota por el deseo
acumulado que brota de su interior. Rebecca sostiene la temblorosa figura de su amada apretando en un abrazo, disfruta de cada pequeño temblor que ella experimenta.
Marlene finalmente comienza a relajarse y Rebecca se alegra de que esta vez fuese
ella quien la pudo traer hasta el punto de puro éxtasis. Sin embargo, cuando se
da cuenta de que Marlene está llorando en silencio en sus brazos, se llena de
preocupación.</span></span><span style="font-size: large;"><i style="mso-bidi-font-style: normal;"><span style="font-family: "comic sans ms"; margin: 0px;">-
Marlene, ¿Qué pasa? ¿Estás bien? ¿He hecho algo mal? - </span></i><span style="font-family: "comic sans ms"; margin: 0px;">Rebecca sintió una pequeña punzada de
pánico de que ella no estuviera tan satisfecha como había asumido. </span></span><span style="font-size: large;"><i style="mso-bidi-font-style: normal;"><span style="font-family: "comic sans ms"; margin: 0px;">-
¡No! -</span></i><span style="font-family: "comic sans ms"; margin: 0px;"> Marlene sacude su
cabeza y se vuelve hacia Rebecca besando cada rincón de su rostro<i style="mso-bidi-font-style: normal;">. - ¡No! Cariño,
cariño, cariño, no has hecho nada mal, de hecho ha sido todo perfecto y te amo por ello. ¡Lo
siento! No quería llorar. –</i> Marlene mira a Rebecca con tanto amor<i style="mso-bidi-font-style: normal;">. – ¡Entonces! ¿Por qué lloras? -</i>
Rebecca sostiene tiernamente el rostro de Marlene y le seca una lágrima<i style="mso-bidi-font-style: normal;">. - Porque nunca he estado tan feliz, el
hecho de que estemos aquí juntas de nuevo ... yo ...-</i> Marlene no puede
contener su necesidad de engullir a Rebecca en un apasionado beso, una vez
satisfecho su deseo, continúa. <i style="mso-bidi-font-style: normal;">- Hubo
tantas veces en las que pensé que estábamos perdidas, completamente perdidas,
que nunca volveríamos a tener momentos como éste, moría por dentro, nunca me
había sentido tan vacía e incompleta ... ¡Sí! Mientras estaba fuera, descubrí mi
fuerza profesionalmente , pero lo que también descubrí, es que, sin ti para
compartir mi vida, todos mis logros realmente no significan nada. -</i></span></span></div>
<br />
<div style="margin: 0px;">
<span style="font-family: "comic sans ms"; margin: 0px;"><span style="font-size: large;">Por la mañana del Domingo se despiertan
abrazadas en la misma posición que se durmieron después de hacer el amor con
pasión la noche anterior. Esta tarde Marlene ha de regresar a California de
nuevo<i style="mso-bidi-font-style: normal;">.- No tengo ganas de volver a Los
Ángeles. No después de lo de ayer.-</i> Verbaliza Marlene durante el desayuno. <i style="mso-bidi-font-style: normal;">– Si antes teníamos necesidad de hablar,
ahora lo es mucho más. ¿Porque son tan perturbadoras estas situaciones que te
hacen desear lo contrario de lo que debes hacer? -</i> Rebecca responde como airada.
<i style="mso-bidi-font-style: normal;">- ¡Eso pienso yo! De alguna forma es como
si nos dieran una moratoria para estar reunidas de nuevo.-</i> Le da un trago
al vaso del zumo. Tomy observa a las dos con curiosidad, no parece darse cuenta
de lo que sucede, pero tiene la sensación que debe ser interesante, no retira
la mirada de ellas mientras hablan. <i style="mso-bidi-font-style: normal;">-
¿Cuándo y dónde lo hacemos?-</i> Pregunta Marlene. <i style="mso-bidi-font-style: normal;">- ¿Casarnos? Pues no tenía nada pensado. Te lo he pedido por una
corazonada que tuve hace unos días. En mis planes está, pero sin una idea fija.
¡Lo vamos pensando poco a poco! Ahora no tenemos prisa, ya está decidido. -</i>
Marlene se inquieta, es un carácter más intranquilo que Rebecca y necesita
poner marcha al camino. Rebecca le propone que rebusque ideas durante el viaje
a Los Ángeles, mientras ella hará lo mismo y ya cambiaran opiniones en las
próximas semanas. Marlene parte a Los Ángeles a media tarde en compañía de
Tomy. Esta vez Rebecca no tiene esa sensación de pérdida al despedirla en el
aeropuerto, la siente abrazada a si como en una conexión cósmica entre sus
mentes.</span></span></div>
<br />
<div style="margin: 0px;">
<span style="font-family: "comic sans ms"; margin: 0px;"><span style="font-size: large;">Nada mas llegar a Los Ángeles Marlene llama
a Rebecca por internet.</span></span><span style="margin: 0px;"><span style="font-size: medium;"> </span></span><span style="font-family: "comic sans ms"; margin: 0px;"><span style="font-size: large;">-<i style="mso-bidi-font-style: normal;">¿Sabes
lo que he pensado? Creo que deberíamos casarnos en Düsseldorf. En nuestra casa,
quiero decir, con los nuestros alrededor. Haríamos muy<span style="margin: 0px;"> </span>feliz a mi padre. Siempre me está recordando
lo feliz que fui a tu lado.</i></span></span></div>
<b></b><i></i><u></u><sub></sub><sup></sup><strike></strike><span style="font-size: large;"></span>Francisco Freijaneshttp://www.blogger.com/profile/07136887969142331609noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-7189587968703271148.post-40193477446719886112018-10-23T13:43:00.001+02:002018-10-23T13:43:54.754+02:0010ª Entrega
<br />
<div style="margin: 0px 0px 13.33px;">
<b style="mso-bidi-font-weight: normal;"><i style="mso-bidi-font-style: normal;"><span style="font-family: "Comic Sans MS"; line-height: 115%; margin: 0px;"><span style="font-size: large;">Moratoria</span></span></i></b></div>
<br />
<div style="margin: 0px;">
<span style="font-family: "Comic Sans MS"; margin: 0px;"><span style="font-size: large;">Marlene se ha ido a Los Ángeles llevándose
con ella a Tomy con la cuidadora, y también alguna de las ilusiones de Rebecca.
Ha regresado a la soledad, pero algo ha cambiado, no es esa soledad absoluta
que vivía en los meses precedentes al encuentro con Marlene. Aunque hay miles
de kilómetros de distancia, la percibe cercana, mucho. Todos los días, cuando
Marlene despierta lo primero es acordarse de Rebecca. Sobre la mesilla hay una
fotografía idéntica a la de Rebecca en la piscina de “No Limits” Ambas parecen
felices jugando en el agua. Por internet pueden contemplarse a través de la
pantalla de un ordenador, y contarse todos los sucesos del día, los
pensamientos, las ideas y los proyectos. Algún fin de semana Rebecca viaja a
Los Ángeles. Lo propio hace Marlene a la inversa, cuando sus obligaciones se lo
permiten. Con este panorama se mantienen en contacto durante unos meses. No conviven
<span style="margin: 0px;"> </span>como lo hicieron en el pasado. Permanecen
alejadas en la distancia la mayor parte del tiempo, pero la sensación de
cercanía es grande y crece continuamente.<span style="margin: 0px;">
</span>Así cada encuentro es un cúmulo de alegrías de las que Tomy también
participa. Es un escenario que no hace cómoda una relación estable, pero ellas
creen en que el futuro les puede dar soluciones y viven con la esperanza de volver
a vivir unidas de forma permanente. Rebecca se refugia en el trabajo como
siempre, Marlene en los escenarios y el resto del día con su hijo. </span></span></div>
<br />
<div style="margin: 0px;">
<span style="font-family: "Comic Sans MS"; margin: 0px;"><span style="font-size: large;">Así va pasando el tiempo hasta que una
propuesta llega a Marlene. Yakov, su representante, le comunica que tiene una
oferta para trabajar actuando en revista en un teatro de Broadway. Es un papel
muy interesante que la puede promocionar en la ciudad de los rascacielos. Sería
un gran empuje en su carrera. El corazón se le altera porque piensa que podrá
vivir al lado de Rebecca un tiempo indefinido. Llena de ilusión y feliz por la
perspectiva, no quiere echar las campanas al vuelo. Le oculta la noticia a Rebecca
hasta que, confirmado por el teatro y Yakov tuvo cerrado el acuerdo, viaja a
New York el fin de semana siguiente con todo el proyecto convertido en una
realidad. Aunque ella misma estaba ilusionada con la idea, no quiso crearse o crearle
a Rebecca expectativas sin un fundamento sólido. </span></span><span style="font-family: "Comic Sans MS"; margin: 0px;"><span style="font-size: large;"> </span></span></div>
<br />
<div style="margin: 0px;">
<span style="font-family: "Comic Sans MS"; margin: 0px;"><span style="font-size: large;">Como es natural el rostro de Marlene es muy
claro en sus expresiones para Rebecca. Al verla salir por la puerta de la
terminal del aeropuerto sabe que algo agradable le sucede. Como siempre la
recibe con entusiasta alegría y la mirada llena de felicidad. Marlene trae en
brazos a su hijo, esta vez sin cuidadora. Tomy se abraza también a Rebecca,
para alivio de su madre, ya ha cumplido dos años y pesa como una roca. El niño ya
ha tomado confianza con ella. Rebecca también le ha preparado una pequeña
sorpresa a Marlene. Al llegar al apartamento de la calle 78, Rebecca abre la
puerta de una de las tres habitaciones que tiene la vivienda mostrando el interior.
La ha habilitado para Tomy, mobiliario infantil y juguetes de todo tipo para
disfrute del crio. <i style="mso-bidi-font-style: normal;">- ¡No tenías que
hacerlo!-</i> Le dice Marlene. <i style="mso-bidi-font-style: normal;">-¿Por qué
no? Será su habitación cuando estéis aquí. Y en el futuro será solo para él.-</i>
El niño se coloca en medio de todos aquellos artefactos de juego y desaparece
en una pequeña bañera de bolas situada en un rincón. <i style="mso-bidi-font-style: normal;">– Creo que está encantado. -</i> Dice Rebecca. <i style="mso-bidi-font-style: normal;">– Es casi igual a la suya de Los Ángeles. ¿La has reproducido para que
se sienta como en su casa?- </i>Pregunta. <span style="margin: 0px;"> </span><i style="mso-bidi-font-style: normal;">- Sí, y
tú ¿No tienes nada que contarme?-</i> Marlene abre los ojos con sorpresa. <i style="mso-bidi-font-style: normal;">- ¿Por qué debo contarte algo? Hablamos a
diario y ya lo sabes todo.-</i> Trata de justificarse con una medio sonrisa. Se
ha dado cuenta que Rebecca ha percibido alguna señal, aunque trate de
disimularlo, ella siempre encuentra algo diferente en la mirada, en los gestos
o el karma que transmite señales de forma inexplicable. Son pequeñas
sutilezas<span style="margin: 0px;"> </span>que no se aprecian con facilidad
en una pantalla de ordenador. La abraza por la cintura y besa sus labios con
pasión. <i style="mso-bidi-font-style: normal;">- Pues… aunque no veo motivo. Me
ha parecido apreciar que algo nuevo traes bajo esa sonrisa y esa mirada.-</i>
Responde Rebecca ya sin ocultar sus propias sensaciones. Marlene le provoca la
necesidad de ser sincera y no quiere ni puede evitar serlo. Ella era mucho más reservada
en el pasado, no tenía esa hambre de honestidad, su recato y mesura estaban en
concordancia de no mostrar su verdadera naturaleza, no quitarse la máscara. Con
Marlene al lado no tiene esa premura, sin embargo es su carácter. Era un
mecanismo defensivo. Virtud o defecto, con el tiempo se fue convirtiendo en una
constante que terminó por enturbiar todas sus relaciones. </span></span><span style="font-family: "Comic Sans MS"; margin: 0px;"><span style="font-size: large;">Marlene la mira con el rostro encendido de
alegría. <i style="mso-bidi-font-style: normal;">-¿Qué me dirías si te cuento que
me han ofrecido un trabajo en Broadway?-</i> Rebecca abre los ojos como dos portales de
cristal, expresa una sonrisa enorme y con un nerviosismo incontenible no
acierta a responder. <i style="mso-bidi-font-style: normal;">- ¿Qué, que… que vas
a trabajar aquí en New York? ¡No me lo creo! ¿Estás diciendo la verdad?-</i> Rebecca
está a punto de explotar. <i style="mso-bidi-font-style: normal;">- ¡Sí, sí! Es
cierto, me han ofrecido un papel para toda la temporada y si tiene éxito, ¡Otra
más! -</i> Rebecca abraza, besa y acaricia a Marlene como nunca. Besaría y la
amaría allí mismo de no ser por la presencia de Tomy. De pronto se pone muy
nerviosa, casi excitada de alegría, no sabe si volver a besarla o ponerse a
brincar de la emoción. </span></span></div>
<br />
<div style="margin: 0px;">
<span style="font-family: "Comic Sans MS"; margin: 0px;"><span style="font-size: large;">Por la tarde, una vez acostado el niño, se
sientan a cenar con tranquilidad. Sendas copas de vino en cada mano y un
brindis. <i style="mso-bidi-font-style: normal;">– ¡Por el éxito!-</i> Propone Rebecca.
<i style="mso-bidi-font-style: normal;">-¡Por el amor!-</i> Responde Marlene.
Durante la cena van desgranando los muchos proyectos para ese futuro inmediato
que se presenta prometedor. A principios de año Marlene se trasladará, pero aún
hay cosas que todavía no han hablado y va siendo el momento porque ya el tiempo
empieza a ser escaso. <i style="mso-bidi-font-style: normal;">– ¡Rebecca! Hay
algo que me gustaría comentar. No quiero que lo interpretes como algo
negativo.-</i> Rebecca pone toda su atención en las palabras de Marlene. <i style="mso-bidi-font-style: normal;">- ¿De qué se trata?-</i> Marlene baja la
mirada al plato y se muerde el labio inferior con suavidad, levanta la vista y
la fija en la mirada de Rebecca. <i style="mso-bidi-font-style: normal;">- ¡El
trabajo! Las horas, los días y las noches trabajando. ¿Eso sigue siendo igual?
–</i> Rebecca hace tiempo que esperaba se lo planteara. </span></span></div>
<div style="margin: 0px;">
<span style="font-family: "Comic Sans MS"; margin: 0px;"><span style="font-size: large;">Ha tenido mucho espacio para reflexionar
sobre la armonía en la existencia y lo imprescindible que es tener vida después
del trabajo. <i style="mso-bidi-font-style: normal;">- ¡Nó! Nada es igual desde
que salí de Düsseldorf.–</i> Le cuenta con mucho relajo. <i style="mso-bidi-font-style: normal;">– Todo lo negativo que me ha sucedido me ha hecho ver que necesito
vivir después del trabajo. ¡Si! ¡Es cierto! Mi trabajo es una forma de vida que
me llena. Sin embargo he comprendido que no lo es todo. Por culpa del trabajo
me pasó lo que me pasó. Es un proceso que nunca se acaba. Nunca daba por acabado
todo mi trabajo. Las consecuencias ya las conoces. No quiero que me vuelva a
ocurrir. Hasta me concedo descansos fuera de hora.-</i> A Marlene le agrada la
respuesta, le coge la mano. <i style="mso-bidi-font-style: normal;">– Me alegra
que pienses así. Recuerdo lo sola que me encontraba cuando trabajabas tantas
horas, de día y de noche. Me angustiaba entre las paredes de la Orangerie.-</i><span style="margin: 0px;"> </span>Rebecca asiente con una sonrisa.<span style="margin: 0px;"> </span><i style="mso-bidi-font-style: normal;">-
Tienes razón, te abandonaba por las telas. Pero eso no volverá a suceder.-</i> Rebecca
necesita volcar de nuevo su corazón sobre Marlene. Se encontró tan sola después
de la crisis que la necesidad de cariño se convirtió en aire para respirar. <i style="mso-bidi-font-style: normal;">- ¿Sabes? Si algo o todo te falla en la
vida, tus jefes o los clientes no serán quienes te ayuden. Lo que necesitas
solo te lo proporciona tu verdadera familia y los amigos auténticos. Las
personas que realmente te quieren. -</i><span style="margin: 0px;">
</span>Rebecca<span style="margin: 0px;"> </span>reflexiona con cariño. <i style="mso-bidi-font-style: normal;">- ¿Cómo Olli, Cristian, Ricardo… Dana?-</i>
Le pregunta Marlene, Rebecca levanta la mirada hacia ella, toma aire y hace un
momento de silencio. <i style="mso-bidi-font-style: normal;">– ¡Nunca podré devolverles todo el agradecimiento
que se merecen!<span style="margin: 0px;"> </span>-</i> Rebecca comprende
en ese momento que la ausencia de Marlene en aquellos momentos había sido vital
en su recuperación. Quizás las cosas no se habrían desbocado tanto o tal vez aquel
conflicto acabaría con ellas dos de forma definitiva. Ahora se siente feliz por
haberla recuperado. Pero algo más debe decirle para ahuyentar las dudas. <i style="mso-bidi-font-style: normal;">– ¡Marlene! ¡Tú eres mi familia, ese pequeñajo también! Y os voy a
dedicar todo el tiempo que me sea posible. El trabajo se acaba para mí al
concluir el espacio que le debo tributar. Regresaré a tiempo a casa porque quiero
tener una vida familiar a la que dedicarme y esa eres tú con Tomy.-</i> <span style="margin: 0px;"> </span>Entre las reflexiones que sostuvo tiempo atrás
entendió que los intereses de los clientes o de la empresa en la que trabajaba,
no son tan importantes como los intereses de una familia. <i style="mso-bidi-font-style: normal;">- No hemos estudiado y luchado en la vida para ser máquinas que
trabajen sin descanso. La vida no es ir al taller de costura, volver a casa y
luego dormir. Hay muchas más cosas en la vida que hacen que ésta no carezca de
sentido. <span style="margin: 0px;"> </span>La obsesión por las colecciones
se ha acabado para mí. Al menos en el sentido que tuvo en la LCL. Esas
histerias se terminaron el mismo día que me puse a trabajar en mi propia marca.
Me juré que jamás me volvería a suceder. Solo pensar que me dejes… ¡Si te
pierdo me muero!-</i><span style="margin: 0px;"> </span>Marlene escucha
inquieta las palabras de Rebecca en silencio, en el instante que no le cabe el
corazón en el pecho, se le salta una lágrima de emoción y con la voz
entrecortada.<span style="margin: 0px;"> </span><i style="mso-bidi-font-style: normal;">- ¡No puedo mirar hacia adelante sin ti! Es algo que pesaba en exceso.
Gracias por liberarme. Mi felicidad contigo es lo más importante, formas parte
de mi vida y quiero que sea siempre así.-</i> Rebecca se siente<span style="margin: 0px;"> </span>feliz de recuperar el amor de Marlene. El
tenerla cerca colma sus esperanzas y se encuentra en la nube perfecta de la
ilusión. Un prolongado y suave beso sella la conversación y acto seguido se
funden en un abrazo que perdura toda la noche. </span></span><span style="font-family: "Comic Sans MS"; margin: 0px;"><span style="font-size: large;"> </span></span></div>
<br />
<div style="margin: 0px;">
<span style="font-size: large;"><i style="mso-bidi-font-style: normal;"><span style="font-family: "Comic Sans MS"; margin: 0px;">-
¡Mamá! ¡Mamá!-</span></i><span style="font-family: "Comic Sans MS"; margin: 0px;"><span style="margin: 0px;"> </span>Grita Tomy con furia desde su habitación,
Marlene asustada corre hacia allí con el corazón en un puño. Tomy está
perfectamente, se encuentra en la bañera de bolas completamente feliz jugando.
Ha gritado buscando compañía para sus juegos. Sobresaltada, aparece Rebecca
también con cara de susto<i style="mso-bidi-font-style: normal;">.- ¿Qué ha
pasado?-</i> Pregunta al tiempo que observa la falsedad de la alarma. Son las
siete de la mañana del Sábado y no estaba previsto semejante madrugón. Las dos
con cara de sueño regresan al dormitorio. Rebecca acude al cuarto de baño
mientras Marlene se sienta en la cama tratando de recuperarse de la conmoción.
Luego, ya en la cocina con el desayuno entre manos y mucho más tranquila, le
cuenta a Rebecca que nunca había hecho nada parecido.<span style="margin: 0px;"> </span><i style="mso-bidi-font-style: normal;">-
¡Claro! Siempre está Roselyn que duerme en el cuarto de al lado, y yo no me
entero de nada. ¡Habrá que acostumbrarse!-</i> Después de desayunar solo un
café, Rebecca se ausenta con la disculpa de que tiene una cita. Marlene la mira
con gesto interrogante. <i style="mso-bidi-font-style: normal;">- ¡No tienes que
preocuparte! Es trabajo pero durará poco ¡Te lo prometo! - </i>Rebecca sale del
apartamento para regresar una hora más tarde con una sonrisa espectacular. Mientras
tanto Marlene desayuna con Tomy con parsimonia, lo baña y viste para dar un
paseo por el parque. Luego ella hace lo mismo. Se pone un atuendo deportivo y
se recoge el pelo en una coleta. Cuando se dispone a salir aparece Rebecca muy
sonriente. <i style="mso-bidi-font-style: normal;">- ¡Hola! Ya he llegado como te
prometí.-</i> Marlene sonríe al verla aparecer. <i style="mso-bidi-font-style: normal;">– Vamos al parque<span style="margin: 0px;"> </span>a jugar un
rato. ¿Vienes?-</i><span style="margin: 0px;"> </span>Le pregunta feliz. <i style="mso-bidi-font-style: normal;">- ¡Claro! ¿Qué podría hacer si no? Quiero
que estemos juntas todo el tiempo.-</i> Durante el resto de la mañana no hacen
otra cosa que jugar con el niño en Central Park. Sintiéndose una familia
alegre. Después de almorzar en un local de comida rápida regresan al
apartamento para que Tomy duerma una buena siesta agotado después de corretear por
todo el césped de Central Park. Ellas, también agotadas, se tumban en el sofá. <i style="mso-bidi-font-style: normal;">– ¿Salimos a cenar juntas?-</i> Pregunta Rebecca.
<i style="mso-bidi-font-style: normal;">- ¿Cómo vamos hacerlo con el niño? ¡Se
nos dormirá!-</i> Rebecca esboza una sonrisa. <i style="mso-bidi-font-style: normal;">– No te preocupes. Lo tengo todo arreglado. He contratado una cuidadora
por horas. ¿No te importa?-</i> Marlene está sorprendida<i style="mso-bidi-font-style: normal;">. - ¡Pero…! A Tomy le resultará <span style="margin: 0px;"> </span>extraño.-
</i><span style="margin: 0px;"> </span>Marlene duda.<span style="margin: 0px;"> </span><i style="mso-bidi-font-style: normal;">- No
te preocupes. Lo tengo todo controlado. Es alguien de confianza. ¡Tenemos algo
que celebrar! - </i>Marlene sonríe. <i style="mso-bidi-font-style: normal;">-
¡Si! Supongo que sí.-</i> A media tarde se presenta en la puerta María, una de
las planchadoras del taller de Rebecca, que en sus ratos libres hace de canguro
para sacarse un pequeño sobresueldo. </span></span></div>
<b></b><i></i><u></u><sub></sub><sup></sup><strike></strike><span style="font-size: large;"></span>Francisco Freijaneshttp://www.blogger.com/profile/07136887969142331609noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-7189587968703271148.post-20508641638627346092018-10-19T10:51:00.001+02:002018-10-19T10:51:28.730+02:009ª Entrega
<br />
<div style="margin: 0px 0px 13.33px;">
<b style="mso-bidi-font-weight: normal;"><i style="mso-bidi-font-style: normal;"><span style="font-family: "Comic Sans MS"; line-height: 115%; margin: 0px;"><span style="font-size: large;">Tenemos
que hablar</span></span></i></b></div>
<br />
<div style="margin: 0px;">
<span style="font-family: "Comic Sans MS"; margin: 0px;"><span style="font-size: large;">Han pasado tres días desde que Rebecca y
Marlene hablaron en el jardín de Shakespeare. Marlene se ha incorporado a las
representaciones en el teatro Delacorte. Después de que el telón caiga, cada
día busca con la mirada para tratar de ver si Rebecca está entre el público.
Los días se le van haciendo eternos. Esa larga espera comienza a ser de impaciencia.
A diario pasea por Central Park en compañía de Roselyn y Tommy, con él juega
divertida sobre el césped todas las mañanas, y por las tardes antes de
incorporarse al escenario. De vez en cuando mira hacia lo alto del nueve, seis,
nueve de la calle setenta y ocho en busca de una respuesta. A veces percibe esa
sensación de inquietud como cuando Rebecca está cerca, mira a su alrededor para
no encontrarla en el entorno. </span></span></div>
<div style="margin: 0px;">
<span style="font-family: "Comic Sans MS"; margin: 0px;"><span style="font-size: large;">En esta soleada tarde Rebecca observa desde
la espesura cercana. No quiere acercarse demasiado aún. No acaba de encajar el
hecho de ver a Marlene como madre. Observa a los dos, los gestos de afecto
materno y las risas de Tommy. Hay felicidad en el rostro de Marlene mientras juega
con su hijo, ella contempla con agrado la escena. Por fin se decide a salir de
la espesura y se acerca con expresión tímida. <i style="mso-bidi-font-style: normal;">- ¡Hola!-</i> Marlene abre los ojos expectante. <i style="mso-bidi-font-style: normal;">- ¡Hola!-</i> Se miran con gesto circunspecto. Marlene esboza una leve
sonrisa. <i style="mso-bidi-font-style: normal;">- ¡Rebecca!-</i> <span style="margin: 0px;"> </span>El corazón se le acelera ante la aparición <span style="margin: 0px;"> </span>sorpresiva, pero esperada de Rebecca. Es esa
sensación de inquietud de no saber qué pasará en los próximos minutos. <i style="mso-bidi-font-style: normal;">- ¡Marlene!-</i> Al acercarse, Marlene duda como
recibir a Rebecca, ella le quita las dudas, besa sus labios con dulzura, un
beso corto que deja en su boca la sensación de<span style="margin: 0px;">
</span>necesitar más. <span style="margin: 0px;"> </span>Rebecca rompe el
silencio<i style="mso-bidi-font-style: normal;">. – Veo que lo pasas muy
divertida con Tomy.-</i> Marlene no sabe que contestar. <i style="mso-bidi-font-style: normal;">- ¡Sí! Bueno, juego mucho con él. Es un amor de crio. ¿Y tú? ¿Pasabas
por aquí?-</i> <span style="margin: 0px;"> </span>Rebecca no quiere
confesarle que lleva un rato observándola, y que la ha espiado los dos días
anteriores, sin atrever a acercarse. <span style="margin: 0px;"> </span><i style="mso-bidi-font-style: normal;">– Me dirigía al teatro a buscarte. Te he
visto jugando con el niño y ¡Ya ves! Aquí estoy.-</i> <span style="margin: 0px;"> </span>Le dice con una sonrisa relajada.<span style="margin: 0px;"> </span><i style="mso-bidi-font-style: normal;">- ¡Que
bien! Pues ¿Me acompañas? Debo entrar en escena en media hora. Roselyn se lleva
a Tommy a la rutina de todas las noches.- </i>Con un buen achuchón Marlene
despide a su hijo. Mientras Roselyn se aleja con él en brazos, ambas contemplan
<span style="margin: 0px;"> </span>como el niño se despide agitando el
brazo. <i style="mso-bidi-font-style: normal;">– ¿Cómo estás? - </i>Pregunta
Marlene a Rebecca. Las sensaciones percibidas la tarde del impacto no fueron las
mejores para ella. Tuvo la sensación que Rebecca no aparecería. Esa última noticia
la dejó muy tocada, más en lo emocional a saber que el niño era hijo de
Tristán. Ahora la pregunta es ¿Cuál será su respuesta? Después de tres días de
espera. - <i style="mso-bidi-font-style: normal;">¡Marlene! ¿Te apetece salir a
cenar conmigo esta noche?- </i>Marlene respira hondo, siente un alivio grande.
Esta propuesta supone que hay esperanza. <i style="mso-bidi-font-style: normal;">-
¡Sí! ¡Por supuesto!-</i> No hace falta decir nada más. </span></span></div>
<br />
<div style="margin: 0px;">
<span style="font-family: "Comic Sans MS"; margin: 0px;"><span style="font-size: large;">Mientras Marlene realiza su trabajo personificando
un personaje de Shakespeare, Rebecca la contempla entre bambalinas. Desde el
escenario, en medio de la representación, Marlene efectúa varias miradas hacia ella.
Todas las veces se encuentra con una sonrisa franca y relajada de Rebecca.</span></span></div>
<div style="margin: 0px;">
<span style="font-family: "Comic Sans MS"; margin: 0px;"><span style="font-size: large;">Acabada la última escena, Marlene se
recompone lo mejor que puede y sale en busca de Rebecca que espera sentada en
un banco cercano. Se coge del brazo de Marlene, que a su vez aferra la mano con
fuerza como queriendo evitar que escape. Mientras caminan Rebecca habla,
poniendo su corazón en la mano. <i style="mso-bidi-font-style: normal;">- ¿Sabes?
¡Tenía un sueño! El sueño de vivir contigo de otra forma. Un sueño de felicidad
aquí en New York. Aquel proyecto de estar juntas toda la vida, era un sueño romántico.-</i>
Guarda silencio durante un momento. <i style="mso-bidi-font-style: normal;">- ¡Tengo
la sensación que el mundo se acaba si no estás tú!- </i>Marlene se para la mira
a los ojos con ternura. <i style="mso-bidi-font-style: normal;">– Yo también vivo
esa sensación, sigues siendo lo más importante de mi vida.- </i></span></span></div>
<div style="margin: 0px;">
<span style="font-family: "Comic Sans MS"; margin: 0px;"><span style="font-size: large;">A Rebecca se le agolpan los pensamientos,
los problemas y las situaciones sin resolver. En estos tres días no ha parado
de reflexionar sobre el amor de su vida. Aquel que vivieron la una al lado de
la otra, rodeadas de problemas de todo tipo. La vida ha alterado todo, para
ella y para Marlene, y ello exige también un cambio <span style="margin: 0px;"> </span>de las realidades respecto del pasado. <i style="mso-bidi-font-style: normal;">- ¡Ya! Tienes razón, debemos hablar de
muchas cosas.</i> <i style="mso-bidi-font-style: normal;">Todo lo que puedo crear
en mi vida solo tiene un sentido, todo mi amor está en aquellas cosas que hago,
las hago pensando en ti. Si no estás, me encuentro vacía. ¡Te quiero! Y te
necesito.-</i> Marlene se siente abrumada, pero feliz. Ella también necesita a Rebecca,
forma parte inseparable de su alma desde hace una eternidad y en este momento
posee las fuerzas que necesita para pelear por recuperar ese amor tan romántico
y tan pleno que vivieron juntas en Düsseldorf.</span><span style="font-family: Times New Roman;"> </span></span><span style="font-family: "Comic Sans MS";"><span style="font-size: large;">A<span style="margin: 0px;">l día siguiente vuelven a encontrase de
nuevo, y al otro, y al otro, los encuentros diarios son del todo reconfortantes.
Citas en el parque al atardecer, mientras Marlene y Roselyn juegan con el niño.
<span style="margin: 0px;"> </span>Rebecca se escapa de la tienda dejando,
incluso, cosas a medias y corre hacia Central Park a media tarde, o salen a
comer, a pasear y todo aquello que suponga estar la una al lado de la otra. Ha
descubierto que hay mayor felicidad en la relación familiar que en el trabajo. Es
la primera vez, <span style="margin: 0px;"> </span>en mucho tiempo, que Marlene
se halla radiante de alegría. Y percibe esa sensación de haber recuperado lo
mejor de su amor. Durante un buen rato charlan y juguetean con Tommy, hasta que
Marlene debe cumplir con sus obligaciones de actriz. Cuando se cierra la
función pasean y hablan de sí mismas.</span></span></span></div>
<div style="margin: 0px;">
<span style="font-family: "Comic Sans MS"; margin: 0px;"><span style="font-size: large;"><br /></span></span></div>
<div style="margin: 0px;">
<span style="font-family: "Comic Sans MS"; margin: 0px;"><span style="font-size: large;">Cogidas del brazo por el Parque o por las
calles camino de algún lugar donde guarecerse del mal tiempo, conversan de todo
lo imaginable. Ríen con soltura. <span style="margin: 0px;"> </span>Aunque
sus mundos han cambiado, los sentimientos no. Quizás sea lo mejor que les ha
podido suceder, un lugar nuevo, una vida nueva pero<span style="margin: 0px;"> </span>el amor de siempre. <i style="mso-bidi-font-style: normal;">-
¡Sabes! Nunca imaginé que pudiéramos tener un hijo. Me había instalado en la
comodidad de nuestra vida sin pensar más allá.-</i> Rebecca se dirige a Marlene
con animosidad. <i style="mso-bidi-font-style: normal;">- ¡A mi tampoco se me
había ocurrido! Eso dice mucho de la inmadurez de nuestro idilio.-</i> Es
cierto, siempre se mantuvieron en un romance continuo pensando la una en la
otra, pero nunca tuvieron un proyecto de futuro orientado en una dirección
determinada. Casi siempre fue vivir en la inmediatez del presente. El tener un
hijo plantea que hay un futuro en el que pensar y por supuesto, proyectar. Ser
madres es una situación que cambia la vida de forma radical. Eso pensó Rebecca
en la soledad de su apartamento, después que dejó plantada a Marlene en el
jardín de Shakespeare. <i style="mso-bidi-font-style: normal;">- ¿Por qué no me
lo contaste?-</i> Marlene está confusa. Sabe el por qué, pero duda la
respuesta. <i style="mso-bidi-font-style: normal;">– Hemos hablado de honestidad
y sinceridad. Hay dos razones. La primera tiene que ver con Tristán y su
personalidad. Sus respuestas emocionales son inimaginables, recuerda todo lo
que nos hizo pasar. No tengo duda alguna que en este caso se comportaría de
forma desastrosa también.</i>- Rebecca escucha con gesto serio. <i style="mso-bidi-font-style: normal;">– La segunda tiene que ver contigo. Eres dulce
y adorable pero, cuando se trata de dar una respuesta en situaciones desfavorables
eres un pequeño demonio, aunque luego te arrepientas. La situación después de
separarnos no era, precisamente serena. Temí que lo que quedase de cariño entre
las dos desaparecería por un malentendido. Pensé en el aborto como solución. Mi
memoria me aterró. Todavía recuerdo aquello con horror.-</i> Marlene se detiene
para inspirar aire con profundidad. <i style="mso-bidi-font-style: normal;">– Tu
apoyo entonces fue vital. Te eché de menos muchísimo en esta ocasión.-</i> A Rebecca
se la saltan las lágrimas. <i style="mso-bidi-font-style: normal;">– No sé cómo
explicarme. Te fuiste y no supe más de ti hasta muy tarde.-</i> Marlene le cuenta
su experiencia de ser madre<i style="mso-bidi-font-style: normal;">. - El
embarazo no fue ninguna complicación, el estado de ánimo sí. Sentía una gran
nostalgia y un gran dolor por la separación. No tener a nadie en quien apoyarse
en una aventura tan apasionante como ser madre, es complicado. Si hubo un
momento en el que te echara de menos con auténtica necesidad, fue durante la
gestación, haberla compartido contigo me hubiese llenado de alegría. Luego el
nacimiento de Tomy. Dana estuvo conmigo en todo el proceso del nacimiento y
primeras semanas después de haber nacido. Ocurrió en Colonia antes de aparecer,
regrese a Düsseldorf con la promesa de mi familia de no revelar a nadie el
secreto. Oculté a mi hijo por miedo. –</i> </span></span></div>
<br />
<div style="margin: 0px;">
<span style="font-family: "Comic Sans MS"; margin: 0px;"><span style="font-size: large;">Dana cumplió su palabra con Marlene igual
que hizo con Rebecca. No debió ser fácil estar callada sabiendo, que una
palabra suya las hubiese reunido de una forma u otra. Se sentía a gusto consigo
misma por la palabra cumplida. Aunque a veces pensaba… ¿Que hubiese sucedido de
haber contado a Marlene la depresión de Rebecca o a ésta lo del embarazo de
Marlene? Se sentía como una celestina en potencia, papel que no le iba nada, lo
suyo son los caballos. Los dos meses que Marlene permaneció en su casa de
Düsseldorf mantuvo al niño oculto a las miradas de conocidos y familiares. El
regresar a Los Ángeles fue una decisión tomada a la sombra de mantener oculto a
su hijo sobre todo de Tristán, de quien solo se espera comportamientos
problemáticos y no estaba dispuesta a soportar otra vez un acoso por su parte.</span></span></div>
<br />
<div style="margin: 0px;">
<br /></div>
<br />
<div style="margin: 0px;">
<span style="font-family: "Comic Sans MS"; margin: 0px;"><span style="font-size: large;">El tiempo es un cruel acompañante que al
final nos transmite, que hay que seguir viviendo, seguir viviendo cada cual en
el lugar que le corresponde. </span></span><span style="font-family: "Comic Sans MS"; margin: 0px;"><span style="font-size: large;">Terminan las representaciones de
Shakespeare en Central Park y Marlene debe regresar a su lugar, a Los Ángeles,
a su casa y a los estudios de cine. Rebecca espera este momento con temor. No
ha querido hablar de ello pero el final se acerca y hay que apartar los temores
y enfrentarse a la realidad.<span style="margin: 0px;"> </span><i style="mso-bidi-font-style: normal;">– ¡Marlene! ¿Ahora que ha de pasar?-</i> <span style="margin: 0px;"> </span>Rebecca comienza a mostrarse nostálgica antes
de tiempo. <i style="mso-bidi-font-style: normal;">– Tengo una semana libre.
¿Vienes a California con nosotros?-</i> <span style="margin: 0px;"> </span>Le propone unas vacaciones. <i style="mso-bidi-font-style: normal;">- En estas fechas es imposible. <span style="margin: 0px;"> </span>¡No puedo!-</i> <span style="margin: 0px;"> </span>Responde lacónica. <i style="mso-bidi-font-style: normal;">- ¿El desfile de Otoño?-</i> Con un gesto de conformidad asiente
mostrando una mueca queriendo decir, “me apetece”. <i style="mso-bidi-font-style: normal;">– Está bien, lo entiendo, son fechas importantes…<span style="margin: 0px;"> </span>¿Me das alojamiento? He de dejar el hotel
una vez acabada la temporada.-</i> El rostro de Rebecca se ilumina con una
sonrisa. <i style="mso-bidi-font-style: normal;">– ¡Por supuesto!- </i>Marlene da
un paso enorme, después de semanas de estar al lado de Rebecca. No lo piensa,
solo decide que quiere estar unida a ella y se deja llevar por el corazón. En
su interior sabe los riesgos que corre, pero está dispuesta a luchar por el
amor de Rebecca.</span></span></div>
<b></b><i></i><u></u><sub></sub><sup></sup><strike></strike><span style="font-size: large;"></span>Francisco Freijaneshttp://www.blogger.com/profile/07136887969142331609noreply@blogger.com1tag:blogger.com,1999:blog-7189587968703271148.post-10475457833596994332018-10-16T12:03:00.001+02:002018-10-16T12:03:38.339+02:008ª Entrega<br />
<div style="margin: 0px 0px 13.33px;">
<b style="mso-bidi-font-weight: normal;"><i style="mso-bidi-font-style: normal;"><span style="font-family: "comic sans ms"; line-height: 115%; margin: 0px;"><span style="font-size: large;">Recuperarse</span></span></i></b></div>
<br />
<div style="margin: 0px;">
<span style="font-family: "comic sans ms"; margin: 0px;"><span style="font-size: large;">Marlene regresa a New York a los cinco días
de haber partido, su cabeza no hace más que dar vueltas. Rebecca se ha
convertido en una gran obsesión. La visita familiar y a sus amistades en
Düsseldorf ha levantado una inquietud inesperada en su corazón, algo tenebroso
acecha su mente y le es imposible desprenderse de esa sensación.</span></span></div>
<div style="margin: 0px;">
<span style="font-family: "comic sans ms"; margin: 0px;"><span style="font-size: large;">Con las largas conversaciones que ha
mantenido con Rebecca durante tres semanas, en su pensamiento se fijó la idea
de que habían aclarado mucho los conflictos del pasado y creía firmemente que
habían dejado pocas cosas pendientes que pudieran interponerse entre ellas. Salvo
aquello que ella misma le comentó que debía contarle. De nuevo Marlene tiene la
sensación que Rebecca se esconde de sí misma. Dana se lo ocultó de forma
deliberada. No podía reprochárselo, había empeñado su palabra. La propia Rebecca
le obligó a ocultarlo. Ahora Marlene se enfrenta a un doble reto; explorar las
causas del trastorno sufrido antes de continuar el camino de la reconciliación.
Y después contarle su propio secreto, algo oculto que es importante darle a
conocer.</span></span></div>
<div style="margin: 0px;">
<span style="font-family: "comic sans ms"; margin: 0px;"><span style="font-size: large;">A su llegada a New York espera en el aeropuerto
su representante Yakov. <span style="margin: 0px;"> </span>Marlene le pide
que retrase todo compromiso si no es importante. Le comenta que debe hacer algo
ineludible esa misma mañana, sin precisar nada del asunto.</span></span></div>
<div style="margin: 0px;">
<span style="font-family: "comic sans ms"; margin: 0px;"><span style="font-size: large;"><br /></span></span></div>
<div style="margin: 0px;">
<span style="font-family: "comic sans ms"; margin: 0px;"><span style="font-size: large;">Después de instalarse de nuevo en el hotel.
Toma un taxi a la calle Stanton donde se encuentra la tienda de Rebecca. Baja
del vehículo frente al escaparate. Rebecca trabaja afanosa sobre unos patrones
al tiempo que apunta algo en el cuaderno. Levanta la vista pensando o buscando
inspiración. Al dirigir la mirada a la calle contempla la figura de Marlene que
cruza desde el lado opuesto en dirección hacia ella. Suelta todo lo que tiene
entre manos y corre hacia la puerta para abrazarla y cubrirla de besos de
bienvenida.</span></span></div>
<div style="margin: 0px;">
<span style="font-family: "comic sans ms"; margin: 0px;"><span style="font-size: large;">La alegría es contagiosa, las personas que
están dentro de la tienda esbozan una sonrisa mirándose. <i style="mso-bidi-font-style: normal;">– Ven, vamos.-</i> Rebecca conduce a Marlene hasta el despacho, cierra
las cortinillas y se dan un prolongado y apasionado beso, abrazadas con fuerza.
Marlene acaricia el rostro de Rebecca, que la contempla con cara de inocencia y
una sonrisa de felicidad. <i style="mso-bidi-font-style: normal;">– Te he echado
mucho de menos.-</i> Le dice al tiempo que toma <span style="margin: 0px;"> </span>su rostro con las manos. <i style="mso-bidi-font-style: normal;">- ¡Yo también, corazón, yo también.-</i> Durante unos instantes solo se
miran con ternura. Marlene está confusa. Las incógnitas asaltan su mente y su
expresión la delata. <i style="mso-bidi-font-style: normal;">- ¿Ocurre algo
cariño?-</i> Le pregunta. Conoce muy bien sus expresiones y esa mirada indica
algo de misterio.<span style="margin: 0px;"> </span><i style="mso-bidi-font-style: normal;">- ¡No, no! No pasa nada. Debe ser el
cansancio. Acabo de llegar.-</i> Rebecca no la cree. <i style="mso-bidi-font-style: normal;">-¿Seguro?-</i> Marlene se inquieta y aparta la mirada. <i style="mso-bidi-font-style: normal;">– ¡Tenemos que hablar!-</i> Rebecca se
sorprende. <i style="mso-bidi-font-style: normal;">– Lo hemos estado haciendo.
¿Qué sucede ahora? </i>- Rebecca sospecha que en Düsseldorf ha pasado algo.
Marlene es muy transparente,<span style="margin: 0px;"> </span>y reconoce en
ella los signos con facilidad. Siempre ha leído con claridad los gestos y
expresiones de Marlene. <i style="mso-bidi-font-style: normal;">– Marlene. ¿Hay
algo que deba saber?-</i> Marlene fija la mirada en la de su amante. <i style="mso-bidi-font-style: normal;">- ¡Creo que sí! ¡Y yo! ¿Hay algo que debiera
saber y aún no me has contado?-</i> Le responde que no. Que no hay nada
importante que contar. <i style="mso-bidi-font-style: normal;">- ¡Escucha Rebecca!
Amar significa confiar. He venido hasta aquí, desde el aeropuerto, porque deseo
confiarte algo que aún desconoces. Te dije que algo más debía decirte. Pero tú
no lo has hecho, y creo que hay algo que yo debería saber.-</i></span></span></div>
<br />
<div style="margin: 0px;">
<span style="font-family: "comic sans ms"; margin: 0px;"><span style="font-size: large;">Es un instante tenso. Rebecca es reacia a
contar sus debilidades. Así lo ha considerado siempre. La depresión pasada
es<span style="margin: 0px;"> </span>para ella una impotencia de su
personalidad. No desea que Marlene la perciba como un ser débil. Siempre se
consideró una mujer fuerte, con personalidad y un claro sentido de lo que desea
en su vida. <span style="margin: 0px;"> </span>“<i style="mso-bidi-font-style: normal;">Düsseldorf es la causa de esta situación. ¡Seguro! Marlene ya debe saberlo
o lo intuye.”</i> <span style="margin: 0px;"> </span>Rebecca piensa que no
tiene más remedio que confesarlo, pero para ella es un problema expresar
aquello de repente y sin meditar. En este momento, su carácter se impone y le
pide dar una salida hacia adelante.<span style="margin: 0px;"> </span><i style="mso-bidi-font-style: normal;">- ¿Y tú? ¿Qué tienes que contarme que yo no
conozca?-</i><span style="margin: 0px;"> </span>Marlene no se sorprende,
está preparada para estos cambios de dirección en las conversaciones. <i style="mso-bidi-font-style: normal;">– ¡Está bien! Las dos tenemos algo que
confesar. Pero, al contrario que tú, yo si creo conocer ese secreto. El mío es
un misterio para ti ¿Por dónde empezamos? - </i>Rebecca pone gesto de
indisposición y mira frenética a Marlene. Como siempre realiza un gesto
habitual en ella, esconderse. <i style="mso-bidi-font-style: normal;">-¡Tengo
mucho que hacer!-</i> Suelta la mano de Marlene que la sigue y salen por la
puerta. Sabe que en este momento no va a progresar en la conversación. Llega a
su vera, Rebecca se gira y la mira con frialdad. La situación vuelve a
tensarse. Le propone encontrarse más tarde en un lugar lejos de la mirada de
sus empleadas, donde poder charlar con tranquilidad. Rebecca asiente con gesto
turbado. Marlene la besa, un beso corto apenas, la punta de sus labios tocan
los de Rebecca, que acto seguido esboza una ligera sonrisa. Marlene le responde
con el mismo gesto.</span></span></div>
<div style="margin: 0px;">
<span style="font-family: "comic sans ms"; margin: 0px;"><span style="font-size: large;"><br /></span></span></div>
<br />
<div style="margin: 0px;">
<span style="font-family: "comic sans ms"; margin: 0px;"><span style="font-size: large;">Esa misma tarde pasean por Central Park,
cerca del teatro de marionetas y el jardín de Shakespeare. Detrás se encuentra
el Teatro Delacorte donde Marlene representa “Mucho ruido y pocas nueces” un
pequeño papel pero permanece en el escenario una buena parte de la obra. Rebecca
y Marlene caminan cogidas de la mano. Rebecca ha llegado tarde a la cita. La
responsabilidad del trabajo la lleva a olvidarse del tiempo y los compromisos.
Marlene se irrita cuando la llama por el móvil para disculparse. <span style="margin: 0px;"> </span><i style="mso-bidi-font-style: normal;">– El trabajo,
siempre el trabajo. Se ha vuelto adicta de nuevo. No sé cómo luchar contra eso.-</i>
Antes de que se desespere Rebecca aparece. Está a punto de sermonearla, pero
desiste. La importancia del momento no aconseja ingredientes que agrien el entorno. En actitud
humilde y casi queriendo arrodillarse, le suplica<i style="mso-bidi-font-style: normal;">. - ¡Perdona! No me he dado cuenta de la hora. ¡Lo siento!- </i>Marlene
acepta las disculpas. Por otro lado piensa que no tiene otro remedio, aprecia
sinceridad en el gesto. El paseo por el jardín Shakespeare resulta delicioso.
El aire fresco y el aroma de la vegetación de esta tarde de Junio transportan a
Rebecca lejos de los patrones y las telas de su tienda. <i style="mso-bidi-font-style: normal;">– Recuerdo las veces que pensamos venir a ésta ciudad a buscar una
nueva vida.-</i> Marlene responde que en ambas ocasiones fue a causa de
situaciones de conflicto. <i style="mso-bidi-font-style: normal;">- Todos esos
problemas <span style="margin: 0px;"> </span>no han hecho más que
fortalecer nuestros sentimientos.-</i> Esa visión positiva anima a Rebecca a
abrirse. <span style="margin: 0px;"> </span><i style="mso-bidi-font-style: normal;">- Siempre sentí la necesidad de ser agresiva, como si tuviera que
demostrar algo a mi familia. No me importaba, cuántas veces caminaran por
encima de mí, me empeñé en demostrarles mi valía y <span style="margin: 0px;"> </span>me dejé llevar por mi egoísmo.- </i><span style="margin: 0px;"> </span>Marlene espera más. – <i style="mso-bidi-font-style: normal;">Perdí el control de mi misma y te perdí. Jamás pensé que volvería a
verte. Cuando volviste a Los Ángeles desapareció toda esperanza de mi
corazón.<span style="margin: 0px;"> </span></i>Rebecca comienza así una confesión
muy difícil. </span></span><span style="font-size: large;"><i style="mso-bidi-font-style: normal;"><span style="font-family: "comic sans ms"; margin: 0px;">- ¡Sin
yo saberlo! Mis sentimientos hacia ti, tan intensos y profundos, tu ausencia y
la soledad fueron minando mi alma, fue uno de los motivos que me hundieron.-</span></i><span style="font-family: "comic sans ms"; margin: 0px;"> Todo había empezado antes de que<span style="margin: 0px;"> </span>Marlene regresara <span style="margin: 0px;"> </span>a Los Ángeles sin conocer lo que sucedía con
Rebecca. <i>– Entonces no era consciente de
lo que me estaba ocurriendo, pero repercutió en mi creatividad. No te echo la
culpa, no eras tu la causa, de verdad, era yo que no miraba mas allá de mi
misma, era yo quien se culpaba de todo. Mi creatividad se fue diluyendo de mi
mente y al final no tenía nada en la cabeza. Mi familia me fue arrinconando, en
LCL igual. Quise buscarte pero te habías ido. ¡Me sentí abandonada, perdida,
insignificante! La vida dejó de tener sentido, todo era negro a mí alrededor.
No hice otra cosa que lamentarme de mi mala suerte. Me faltaba lo más querido y
necesitado, mi amor y mi trabajo. Lo había perdido todo. No sé cuánto tiempo
permanecí alejada de la realidad.-</i> </span></span><span style="font-family: "comic sans ms"; margin: 0px;"><span style="font-size: large;">Rebecca no hace responsable a nadie de lo
que le ocurrió. El refugiarse en el trabajo y tanto estrés la agotaron al extremo.
Luego sintió que estaba sola. El único soporte firme en el que apoyarse estaba
lejos, demasiado. <i style="mso-bidi-font-style: normal;">-Tampoco se me ocurrió
volar hasta ti. Estaba muy ofuscada. Pensé que me recibirías de forma hostil…
Dejé de ser creativa, de relacionarme y rechazaba cualquier ayuda que los más
cercanos me ofrecían.<span style="margin: 0px;"> </span>¡Pobre Ricardo! Le
hice la vida imposible. –</i> Rebecca comienza a notar alivio en su espíritu y
se anima a continuar hablando.<span style="margin: 0px;"> </span><i style="mso-bidi-font-style: normal;">- En plena fase aguda de aquella depresión
agredí a Tristán produciéndole varias heridas y arañazos. Fuera de mí, me
ingresaron en una clínica especializada, dónde permanecí varias semanas. La
convalecencia la hice en la Orangerie. Estuve bajo la tutela de nuestro amigo
Ricardo y de Justus que no me quitaba ojo, hasta que recobré algo mi ánimo.
Cuando consideré superado el problema emocional, decidí levantar el campamento
y trasladarme a New York, aunque aún no estaba del todo bien, <span style="margin: 0px;"> </span>la recuperación no progresaba. Meses después
que te marcharas me vine aquí para respirar y emprender una nueva aventura. Y a
fe que lo he conseguido. Esta ciudad me ha devuelto la vida, y tú has
regresado. No puedo pedir más. <span style="margin: 0px;"> </span>¡Bien! Ya
sabes mi secreto. Querías oír de mis labios lo que han debido contarte en
Düsseldorf.-</i> Marlene respira tranquila. Se ha confesado sin presión. Sabe
lo que le cuesta a Rebecca poner sus debilidades al descubierto. <i style="mso-bidi-font-style: normal;">- ¿Qué importa lo que me hayan contado? Ahora me importa que me lo cuentes tú.
Necesitamos confianza, decirnos todo lo que llevamos dentro.-</i> Hacen una
pausa. Rebecca tiene la sensación de haberse desprendido de una pesada carga.
Nunca había creído que vaciando sus inquietudes en la persona que ama fuese tan
liberador. <i style="mso-bidi-font-style: normal;">- ¿Sabes una cosa? Cuando
llegué a New York todavía tomaba unas pastillas para mantenerme tranquila y equilibrada,
para poder dormir y esas cosas. Desde que nos hemos encontrado, he dejado de tomarlas, no me acuerdo de ellas, no
las necesito. ¡Tú eres mi equilibrio y mi sosiego! -</i> Rebecca muestra una
paz interior de la que no disfrutaba desde hace mucho tiempo. <i style="mso-bidi-font-style: normal;">– ¡Ahora te toca! ¿Cuál es tu secreto?- </i>Marlene
la mira con una medio sonrisa.<i style="mso-bidi-font-style: normal;"> – ¡No te
lo voy a decir! ¡Te lo voy a mostrar! -</i> Los secretos, siempre trataron de
evitarlos, pero en el presente forman parte de la existencia de ambas y<span style="margin: 0px;"> </span>tienen el propósito de ponerlos al
descubierto. Como siempre la verdad, igual que el corcho en el agua, siempre
sale a la superficie. <i style="mso-bidi-font-style: normal;">-¡Quiero
presentarte a alguien!-</i> Le dice Marlene con cierto misterio. Hace una señal
a una mujer morena, que está acompañada de un niño de corta edad muy rubio y de
ojos azules, para que se acerque. Ha permanecido a corta distancia de ellas en
todo momento, mientras jugaba con el pequeño. <i style="mso-bidi-font-style: normal;">-¿Ves esa mujer con un niño en brazos?- </i>Vuelve a mover la mano
hacia ella. <i style="mso-bidi-font-style: normal;">- Pero ¿Qué haces?-</i> <span style="margin: 0px;"> </span>Le dice a Marlene pensando en que se ha vuelto
loca. <i style="mso-bidi-font-style: normal;">– Tranquila. Ahora lo vas a
comprender.-</i> Al llegar a su altura el niño se lanza hacia los brazos de
Marlene y la abraza con efusión. <i style="mso-bidi-font-style: normal;">– ¡Este
es Tomy! ¡Mi hijo! Tomy ésta es Rebecca.-</i> La expresión de Rebecca es todo
un poema. <i style="mso-bidi-font-style: normal;">- ¿Qué es tu hijo? –</i> Marlene
responde con naturalidad. <i style="mso-bidi-font-style: normal;">- ¡Sí! Acaba de
cumplir año y medio. ¡Éste es mi secreto! ¿No te parece guapo?</i>- <span style="margin: 0px;"> </span>Rebecca está estupefacta. <i style="mso-bidi-font-style: normal;">- ¡Pero, pero! ¿Cómo…?-</i> Marlene no acaba de ver claro algo en la
respuesta de Rebecca. <i style="mso-bidi-font-style: normal;">– ¿Te ha
sorprendido? –</i> Con gesto de enfado Rebecca se levanta y con enojo responde.
<i style="mso-bidi-font-style: normal;">- ¡Por supuesto! Pero ¿Qué es esto? Te
presentas con un niño y me dices que quieres estar conmigo. ¿Qué broma es
esta?-</i> Marlene entrega el niño a Roselyn. <i style="mso-bidi-font-style: normal;">- ¡Deja que te explique!-</i> <span style="margin: 0px;"> </span>Rebecca
muy airada no escucha. Se da media vuelta con el fin de alejarse. Marlene la
sigue insistiendo que tiene que escuchar sus explicaciones. Rebecca se da media
vuelta para gritarle. <i style="mso-bidi-font-style: normal;">- ¡Maldita sea!
¿Cómo te atreves?-</i> No atiende a razones y continua caminando. Se queda fría
al oír de nuevo a Marlene. <i style="mso-bidi-font-style: normal;">- ¡Es hijo de
Tristán! –</i> Rebecca se detiene en seco. Se da media vuelta con los ojos
abiertos, todo lo que su anatomía permite, y clava su mirada en Marlene.<span style="margin: 0px;"> </span><i style="mso-bidi-font-style: normal;">–
Consecuencia de lo que pasó entre nosotras cuando nos separamos.-</i></span></span></div>
<br />
<div style="margin: 0px;">
<span style="font-family: "comic sans ms"; margin: 0px;"><span style="font-size: large;">Cuando Marlene salió de Düsseldorf la
primera vez rumbo a Los Ángeles, viajaba embarazada, algo que no podía saber en
ese momento, lo descubrió estando ya en California. Tristán hizo la última
fechoría cuando Marlene se enzarzó sexualmente con él en “No Limits” después de
romper con Rebecca. La dejó embarazada, consecuencia, el pequeño Tomy, que nació en Colonia y en secreto.
Nadie de su familia supo nada hasta que ella se lo dijo a su padre con la
promesa de no divulgarlo. Solo Dana, su hermana Kim y Biggy estuvieron enteradas.
<i style="mso-bidi-font-style: normal;">– Ella me acompañó en el tramo final del
embarazo y las semanas siguientes al parto. ¡No sabes lo que pensé en ti en
aquel momento! También le hice jurar a mi hermana que mantendría el secreto
hasta que yo<span style="margin: 0px;"> </span>lo desvelara. <span style="margin: 0px;"> </span>¡Pobre Dana! Hubo de aguantar doble secreto. ¡Es
una gran persona!-<span style="margin: 0px;"> </span></i>Le dice a Rebecca.<i style="mso-bidi-font-style: normal;"> – En eso te doy la razón. También estuvo a
mi lado en momentos difíciles, ella y Kim se preocuparon mucho por mi. -</i> Marlene
se siente orgullosa de sus hermanas. Luego le narra las sensaciones encontradas
de lo que sucedió con Tristán, aquel amargo día en que rompieron.</span></span></div>
<br />
<div style="margin: 0px;">
<span style="font-family: "comic sans ms"; margin: 0px;"><span style="font-size: large;">Ha pasado un buen rato con ambas sentadas
en un banco del parque con la mirada hacia adelante y sin pronunciar palabra.
La una al lado de la otra sin contacto, aunque sus manos permanecen muy cerca
deseando entrar en unión. Rebecca toma la iniciativa. <i style="mso-bidi-font-style: normal;">- ¡Perdóname! Me he descontrolado. ¡Lo siento, de verdad, lo siento!- </i>Marlene
la mira con timidez. <i style="mso-bidi-font-style: normal;">– No me imaginé que
lo fueses a encajar así. Yo podía haber sido más cauta. -</i> Rebecca mira con
fijeza a Marlene. <i style="mso-bidi-font-style: normal;">- ¿Lo sabe? ¿Tristán,
lo sabe?-</i> <span style="margin: 0px;"> </span>Le pregunta. <i style="mso-bidi-font-style: normal;">- ¡No! No le he dicho nada</i>.- Responde
Marlene con la vista perdida. <span style="margin: 0px;"> </span><i style="mso-bidi-font-style: normal;">- ¿Piensas contárselo?-</i> Rebecca
investiga<i style="mso-bidi-font-style: normal;">. - De momento, nó. Tengo muchas
dudas. Por no decir todas las dudas.-</i> Marlene responde con firmeza. <i style="mso-bidi-font-style: normal;">- Yo también las tendría.-</i><span style="margin: 0px;"> </span>El impacto es tremendo para Rebecca. Marlene
piensa que debía haber preparado el terreno. No se le ocurrió. Tampoco sabía
cuando le iba a dar la noticia que tenía un hijo llamado Tomy, cuyo padre,
ignorante de su existencia, era Tristán. No calculó las consecuencias y el impacto
en sus emociones. Ha reaccionado de forma brusca e incontenible.<span style="margin: 0px;"> </span><i style="mso-bidi-font-style: normal;">–
Necesito pensar.-</i> <span style="margin: 0px;"> </span>Le dice Rebecca. <i style="mso-bidi-font-style: normal;">- ¡Está bien! Lo entiendo.-</i> Marlene
siente que huye y que no volverá a verla. <i style="mso-bidi-font-style: normal;">-
¿Vas a alejarte?- </i>Pregunta con timidez, sabe cuál es el riesgo, Rebecca es
muy drástica, casi tajante<i style="mso-bidi-font-style: normal;">. – Si no
quieres que volvamos a…-</i> <span style="margin: 0px;"> </span>Rebecca
corta la frase de Marlene, sabe lo que quiere decirle. <i style="mso-bidi-font-style: normal;">– No. No es eso. No pienses que quiero abandonarte. Ha sido todo un
impacto. Necesito pensar, me he desequilibrado. Esto es completamente nuevo para
mí.- </i>Coge la mano de Marlene y mira sus ojos. <i style="mso-bidi-font-style: normal;">- Te quiero más que a nada en el mundo. Te llamaré, lo prometo. Ahora
debo irme.-</i> Marlene se queda sola. A los pocos minutos rompe a llorar. Cree
que no volverá a ver a Rebecca y la invade la tristeza.</span></span></div>
<br />
<div style="margin: 0px;">
<span style="font-family: "comic sans ms"; margin: 0px;"><span style="font-size: large;">Al entrar en el apartamento, presa de un
gran nerviosismo, Rebecca se dirige a la búsqueda de sus medicinas. La sacudida
que ha supuesto el cambio de situación de Marlene la ha descentrado de ese
equilibrio y sosiego que le mencionó en el parque. Necesita recuperar esa paz,
pensar con calma como conectar con esta nueva realidad. <i style="mso-bidi-font-style: normal;">-¿Qué es lo que debo hacer?</i>- Una vez las pastillas están en su
mano, y dispuesta a engullirlas de un solo golpe, se detiene en la intención.
De sus ojos brotan dos lágrimas emotivas.</span></span></div>
<br />
<div style="margin: 0px;">
<span style="font-family: "comic sans ms"; margin: 0px;"><span style="font-size: large;">Marlene se encuentra de nuevo con Roselyn y
Tomy. Con alegría abraza a su hijo y lo llena de ternura con lágrimas en los
ojos. No cree en las promesas de Rebecca, muchas veces las ha incumplido
mientras estaban juntas, ¿Por qué iba a ser ahora diferente? Rebecca es una
Lanhstein y lo será toda su vida.</span></span></div>
<b></b><i></i><u></u><sub></sub><sup></sup><strike></strike><span style="font-size: large;"></span>Francisco Freijaneshttp://www.blogger.com/profile/07136887969142331609noreply@blogger.com1tag:blogger.com,1999:blog-7189587968703271148.post-32531676930132669472018-10-12T09:59:00.000+02:002018-10-12T09:59:50.071+02:007ª Entrega<br />
<div style="margin: 0px 0px 13.33px;">
<b style="mso-bidi-font-weight: normal;"><i style="mso-bidi-font-style: normal;"><span style="font-family: "comic sans ms"; line-height: 115%; margin: 0px;"><span style="font-size: large;">En
casa</span></span></i></b></div>
<div style="margin: 0px 0px 13.33px;">
<b style="mso-bidi-font-weight: normal;"><i style="mso-bidi-font-style: normal;"><span style="font-family: "comic sans ms"; line-height: 115%; margin: 0px;"><span style="font-size: large;"><br /></span></span></i></b></div>
<br />
<div style="margin: 0px;">
<span style="font-family: "comic sans ms"; margin: 0px;"><span style="font-size: large;">Dana espera en el vestíbulo de la terminal
del aeropuerto de Düsseldorf. El vuelo en el que viaja Marlene ha llegado sin
contratiempos. Debería surgir pronto por<span style="margin: 0px;">
</span>la puerta de salida de viajeros. Aparece sonriente, muy alegre se abraza
a su hermana. Se desplazan hasta Düsseldorf por la autopista al encuentro del
padre de ambas. Mientras circulan por la autopista, Dana aprecia cierta alegría
en el rostro de su hermana, le pregunta cual es el motivo de esa cara de
felicidad. <i style="mso-bidi-font-style: normal;">– ¡He visto a Rebecca!-</i>
Dana se sorprende poniendo gesto serio. Marlene aprecia un gesto extraño en su
hermana. <i style="mso-bidi-font-style: normal;">- ¿Pasa algo que deba saber?-</i>
Pregunta Marlene con algo de asombro<i style="mso-bidi-font-style: normal;">.-
¡No! ¡Nada! Es que no me lo esperaba. ¿Te la has encontrado así de repente?-</i>
Dana responde dubitativa. <i style="mso-bidi-font-style: normal;">- ¡Sí! Fue toda
una sorpresa. ¿Sabes que tiene un éxito tremendo con su nueva marca?<span style="margin: 0px;"> </span>M&R.-</i> Le dice. <i style="mso-bidi-font-style: normal;">- ¿M&R?-</i> Pregunta Dana con gesto de asombro. <i style="mso-bidi-font-style: normal;">- Marlene y Rebecca.-</i> Dana se siente
incómoda, le intranquiliza seguir con la conversación. <i style="mso-bidi-font-style: normal;">- No quiero saber nada. No creo que sea buena idea seguir hablando de
ello.-</i> Marlene no entiende la respuesta de su hermana. <i style="mso-bidi-font-style: normal;">- ¿Porqué? ¿Es que me he perdido algo?-</i> Dana no contesta a la
pregunta de Marlene. Se escuda en un mutismo inacabable. <i style="mso-bidi-font-style: normal;">- ¡Ya me lo contarás!-</i> <span style="margin: 0px;"> </span>Mira
muy extrañada a su hermana.</span></span></div>
<div style="margin: 0px;">
<span style="font-family: "comic sans ms"; margin: 0px;"><span style="font-size: large;"><br /></span></span></div>
<div style="margin: 0px;">
<span style="font-family: "comic sans ms"; margin: 0px;"><span style="font-size: large;">Marlene había reaparecido diez meses
después de romper con Rebecca. Hasta entonces no tuvo noticia de ella. El
primer encuentro entre ambas sucedió en el cumpleaños de Dana, nada más llegar
a Düsseldorf. Un saludo un poco frio, Rebecca extendió su mano, Marlene la tomó
del brazo y se acercó hasta el contacto de un ligero abrazo. Un suave abrazo
que despertó el sentimiento en ambas. Rebecca se estremeció entre sus brazos,
pero no fue capaz de exteriorizarlo, Marlene tuvo la misma sensación, pero la
percibió alejada y mantuvo una distancia discreta.<span style="margin: 0px;"> </span>Demasiados acontecimientos en ese día, en el
corto espacio que lleva del aeropuerto a la casa de su padre. Marlene se había
reencontrado con Hagen, al que daban por muerto y después Rebecca. Regresaba a la
casa familiar después de mucho tiempo y algunas vicisitudes que no debía
mostrar. <i style="mso-bidi-font-style: normal;">- ¿Cómo estás? –</i> Le dijo
Marlene.. <i style="mso-bidi-font-style: normal;">- ¡No muy bien!-</i> Rebecca no
podía mentirle. - <i style="mso-bidi-font-style: normal;">¿El trabajo, acaso?-</i>
Volvió a preguntar. <i style="mso-bidi-font-style: normal;">-¡Sí, si! -</i>
¡Mentía! Estaba encubriendo sus sentimientos. Aquel encuentro fue una sorpresa
para Rebecca, creyó esperanzada igual que Marlene, que algo más podría ocurrir.
¡Pero no! Todo siguió un guión de distancia que parecía premeditada. No fueron
capaces de dar un paso adelante. Rebecca estaba muy estresada por el trabajo y
el estado de euforia de Marlene no le permitió detectar esas señales que
siempre fue capaz de descubrir con una simple mirada a los ojos de Rebecca.<span style="margin: 0px;"> </span></span></span></div>
<div style="margin: 0px;">
<span style="font-family: "comic sans ms"; margin: 0px;"><span style="font-size: large;">En los dos meses siguientes
en que Marlene permaneció en Düsseldorf se encontraron en diversos sitios. Cada
encuentro estaba rodeado de una cierta nostalgia. Las miradas mutuas se notaban
alegres por haberse visto, a veces se cortejaban sin darse cuenta de ello,<span style="margin: 0px;"> </span>mostrando que algún rescoldo quedaba de una
relación tan intensa. Marlene volvió a trabajar para la Lahnstein Corp. Esta
vez en un cargo ejecutivo a la sombra de Hagen y que nada tenía que ver con Rebecca.
Poco a poco se fueron distanciando de nuevo, la vida no les facilitó
relacionarse con más asiduidad. Mientras Marlene entraba en una fase de trabajo
absorbente, Rebecca abandonaba el suyo poco a poco. Al poco tiempo su hermano
Sebastián a propuesta de Tania prescindió de su labor. Ella abandonó el taller
de costura de la LCL y se recluyó en la Orangerie. Poco antes Marlene había
decidido regresar a Los Ángeles, el tener cerca a Rebecca y no poder estar a su
lado resultaba un fastidio, a veces angustioso, sobre todo cuando se
encontraban en algún acontecimiento y no aparecían síntomas ni propósitos para
emprender una nueva aventura romántica. Aquella situación no despegaba ni había
indicios que fuese a ocurrir. <span style="margin: 0px;"> </span>Con esta<span style="margin: 0px;"> </span>ausencia de señales, pensó que lo mejor era regresar
a California e intentar olvidar. Han pasado casi dos años desde aquel nuevo
distanciamiento. Hoy todo es distinto, después de lo sucedido en New York, el
reencuentro no ha podido ser más prometedor. <span style="margin: 0px;"> </span></span></span></div>
<br />
<div style="margin: 0px 0px 13.33px;">
<span style="font-size: large;"><i style="mso-bidi-font-style: normal;"><span style="font-family: "comic sans ms"; margin: 0px;">– Que maravilla de día me recibe mi tierra.
–</span></i><span style="font-family: "comic sans ms"; margin: 0px;"> Pensaba durante el viaje
a casa. Al día siguiente de su llegada visita a Olly en el nuevo “No Limits”.
El local es ahora de Olly en sociedad con Tristán, sigue estando igual, nada ha
cambiado desde que se marchara por segunda vez. Al entrar es él quien primero
repara en su presencia desde detrás de la barra. Deja todo y se acerca
corriendo para abrazarla. La levanta del suelo y gira con ella en brazos. La
alegría es mutua. Al momento se acerca Jessie, la camarera, que también la
recibe muy afectuosa. Tanto jaleo atrae la atención de Tristán que está detrás de
la barra revisando unos papeles. Se pone de pie<span style="margin: 0px;">
</span>y se acerca hacia ellos para reconocer la figura sonriente de Marlene. Al
llegar a su altura. <i style="mso-bidi-font-style: normal;">- ¡Marlene!-</i> Ella
le responde con frialdad. <i style="mso-bidi-font-style: normal;">- ¡Hola
Tristán!-</i> Estrechan sus manos como buenos amigos. <i style="mso-bidi-font-style: normal;">– ¡Mucho tiempo! –</i> Exclama él. <i style="mso-bidi-font-style: normal;">–
¡Sí!-</i> Responde ella. <i style="mso-bidi-font-style: normal;">- ¿Cómo te va
por Los Angeles?-</i> Pregunta con cierta curiosidad. <i style="mso-bidi-font-style: normal;">–
Bien, muy bien.-</i> Le contesta. <i style="mso-bidi-font-style: normal;">- ¡Ajá!-</i>
La conversación se desenvuelve en un tono de <span style="margin: 0px;"> </span>frialdad. No hay motivo de calidez entre
ambos. El pasado todavía cuenta y tanto él como ella no olvidan. Marlene le
cuenta lo <span style="margin: 0px;"> </span>del mundo del teatro. Como
llegó a ello y lo a gusto que trabaja. Al nombrarle New York, Tristán le cuenta
que Rebecca se había marchado a esa ciudad dejando todo empantanado en la Lahnstein
Corp. Con sus dotes de actriz ya más experta le contesta. <i style="mso-bidi-font-style: normal;">- ¿No me digas? No tengo noticias suyas desde que regresé a California.-</i>
Tristán la mira con escepticismo. Rebusca en su mente fases del pasado. <i style="mso-bidi-font-style: normal;">- ¿Estás segura? Con tus dotes de actriz nunca
me he convencido cuando actúas o nó.-</i> Marlene le mira con indolencia<i style="mso-bidi-font-style: normal;">.- Puedes pensar lo que quieras. No he
venido para discutir.- </i>Con una cínica sonrisa le responde que sabe cual es el
motivo de la visita. <i style="mso-bidi-font-style: normal;">– Tengo tu
liquidación de la venta del negocio preparada desde hace tiempo. Me lo recordó
Dana un día. Supongo que la enviaste para eso.- </i>Y es cierto, en una ocasión
hizo ese encargo a su hermana. Que se lo sugiriera con discreción, para no
herir la susceptibilidad de Tristán. Pero se ve que a él no se le escapa ningún
detalle. Después de todos los sucesos ocurridos a partir de la fallida boda. Siempre
ha tenido la sensación que, aparte de muy inteligente, era un poco
esquizofrénico. <i style="mso-bidi-font-style: normal;">- ¿Sabes que Rebecca
estuvo en tratamiento psiquiátrico después que te marchaste?-</i> Tristán no puede
dejar de vengarse de Marlene. Cualquier cosa que le pueda hacer daño es una
fiesta <span style="margin: 0px;"> </span>para él. Todo lo que se refiera a
su propia hermana lo emplea como arma arrojadiza en contra suya.<span style="margin: 0px;"> </span>Marlene se detiene un segundo. Eso no lo
sabe, tampoco Rebecca se lo relató<i style="mso-bidi-font-style: normal;">. – Mi
hermana me ha tenido informada. ¡Si lo sé!-</i> En este momento tiene que
inventarse el embuste y miente bellacamente. No quiere darle el placer de
sentirse vencedor en esta ni en ninguna contienda con él. No busca tampoco un
enfrentamiento innecesario y si no le da importancia a lo que le diga, para
agredir su sensibilidad, piensa que dejará de hacerlo.<span style="font-family: "times new roman"; font-size: small;"> </span></span></span><span style="font-family: "comic sans ms"; margin: 0px;"><span style="font-size: large;">Las pocas dudas que tiene sobre su actitud
se despejan, Tristán no le ofrece garantías. Su comportamiento agresivo y
vengativo significa que sigue sin recuperarse a pesar del tiempo pasado. Tiene
la sensación que cada vez que se halla cerca, a él se le nubla el pensamiento y
actúa con una sola intención ¡Hacerle daño! No lo soporta y se alegra que se
cierre este último capítulo económico, el único que aún les vinculaba de alguna
forma. Todavía alberga en su corazón una última cuestión, pero nunca se lo
desvelará.</span></span></div>
<br />
<div style="margin: 0px;">
<span style="font-family: "comic sans ms"; margin: 0px;"><span style="font-size: large;">Liquidados los papeles y cerrado el
contrato que aún les ligaba en aquel negocio. Marlene abandona el local muy
satisfecha, y con una buena liquidación. Después de que<span style="margin: 0px;"> </span>Tristán le contara ese posible <span style="margin: 0px;"> </span>problema de Rebecca,<span style="margin: 0px;"> </span>germina en su ánimo un sentimiento de curiosidad
y preocupación por ella, necesita saber que le ha pasado. Antes de salir del
local acuerda con Olly y Cristhian cenar esa noche en Schneiders. </span></span><span style="font-family: "comic sans ms"; margin: 0px;"><span style="font-size: large;">Ya fuera del local toma el teléfono y hace
una llamada. <i style="mso-bidi-font-style: normal;">- ¿Ricardo? ¡Sí, soy yo!-</i>
Empieza una nueva charla con Méndez, quien fuese el portador de las peores
noticias para una cantante como ella. Comunicarle que había perdido su voz.</span><span style="font-family: "times new roman";"> </span></span><span style="font-family: "comic sans ms"; margin: 0px;"><span style="font-size: large;">Hoy compartirá cena con sus mejores amigos.
También Dana se unirá a la cena. Son pocos días y hay que aprovecharlos para
compartir con los amigos.</span></span></div>
<br />
<div style="margin: 0px;">
<span style="font-family: "comic sans ms"; margin: 0px;"><span style="font-size: large;">La cena en Schneiders resulta de lo más
agradable. Cristhian y Olly siguen siendo los mismos, amables, dicharacheros,
una compañía especial y unos amigos de verdad. Ricardo si ha cambiado algo en
lo físico. Ha adelgazado y se le vé más sereno y maduro. Viste con mejor estilo
y por fin va siempre bien afeitado. <i style="mso-bidi-font-style: normal;">-¿Y
cómo te va con el teatro?- </i>Le pregunta Cristhian con curiosidad<i style="mso-bidi-font-style: normal;">.- Me voy identificando. No es lo mismo que
la revista musical pero empiezo a disfrutar con este trabajo. – </i></span></span><span style="font-family: "comic sans ms"; margin: 0px;"><span style="font-size: large;">De repente se pone misteriosa. Quiere hablar
de Rebecca para enterarse de cuan cierto es lo que Tristán le ha comentado. <i style="mso-bidi-font-style: normal;">- ¿Sabéis quien ha asistido a mi estreno de
Shakespeare en Central Park?- </i>Los tres varones se miran entre sí
completamente despistados, luego a ella y a Dana, que no puede evitar una
sonrisa a comprobar que su hermana quiere hablar de Rebecca. <i style="mso-bidi-font-style: normal;">- ¿Alguien famoso? ¿El presidente?- </i>Sin
esperar más opiniones lo dice resuelta. <i style="mso-bidi-font-style: normal;">-
¡Rebecca!-</i> La mirada de sorpresa manifiesta lo inesperado. <i style="mso-bidi-font-style: normal;">-¿Rebecca? ¿Nuestra Rebecca? ¿Tu Rebecca?-</i>
No comprende la cara de sorpresa de ellos. <i style="mso-bidi-font-style: normal;">-
¡Claro Olly! Mi Rebecca. No hay otra.-</i> Ricardo es quien le dice. <i style="mso-bidi-font-style: normal;">- Pues nos acabas de alegrar la noche.-</i> Mirando
con aire serio a Dana, que hace un gesto de disculpa mirando a Marlene. Les
cuenta lo ocurrido antes y después del estreno. Todo lo que concierne a sus
sentimientos y las sensaciones que experimentó. La tienda de M&R, y los
infinitos paseos por la ciudad hablando de si mismas. En un momento de la
charla, Marlene le pregunta a Ricardo si era cierto el problema psicológico de Rebecca.
<span style="margin: 0px;"> </span><i style="mso-bidi-font-style: normal;">-
Tristán me ha dicho algo de psiquiatra.-</i> Ricardo mira a Dana que asiente y él
responde con gesto preocupado. <i style="mso-bidi-font-style: normal;">- ¡Sí!
Durante un tiempo me tuvo muy nervioso.-</i> Marlene se pone inquieta pero pausada.
<span style="margin: 0px;"> </span><i style="mso-bidi-font-style: normal;">–
¿Qué le pasó? -</i> En este punto mira a Dana con gesto recriminatorio. Ella
esconde la mirada como queriendo huir. Ricardo y Olly le van contando de forma
alternativa todo lo ocurrido. <i style="mso-bidi-font-style: normal;">- Al
principio solo era apatía, después desidia y más adelante se volvió muy regresiva
y violenta. Agredió a Tristán en un acceso de ira. Le echaba a él la culpa de
todo lo malo que le ocurría. Incluso de que tú la abandonaras. ¡Se fue de la
realidad! Dejó de ser creativa para convertirse en autodestructiva. Ahora nos
haces felices al saber que está <span style="margin: 0px;"> </span>bien.
Que os halláis encontrado,<span style="margin: 0px;"> </span>puede ser el
fin de su letargo.-</i> Olly quiere quitarle el desasosiego a Marlene. <i style="mso-bidi-font-style: normal;">- Cuando se marchó a New York, en teoría
estaba bastante equilibrada, aunque sin interés por la vida. No sé nada de ella
desde entonces. Me alegra saber que está bien. –</i> Marlene quiere saber más. <span style="margin: 0px;"> </span><i style="mso-bidi-font-style: normal;">-
¿Alguna vez os habló de mi? Alguna cosa, ¡O que se yo! -</i> Pregunta. Marlene
necesita saber si es ella la causa de todo el problema.<span style="margin: 0px;"> </span>Se siente inquieta, quiere conocer el motivo
de tanto desequilibrio. El tono de su voz es de nerviosismo. Los demás lo
captan, Cristhian le cuenta.<span style="margin: 0px;"> </span><i style="mso-bidi-font-style: normal;">– Ni mucho ni poco. Cuando lo hacía se
expresaba desde la nostalgia. A veces terminaba llorando. Te nombraba con todo
el cariño del que era capaz. Siempre pensé que seguía enamorada de ti y te echaba
de menos.-</i> <span style="margin: 0px;"> </span>Ella necesita más. <i style="mso-bidi-font-style: normal;">- ¿Cuándo empezó a estar así de mal?-</i>
Ricardo le cuenta que en la LCL comenzaron <span style="margin: 0px;"> </span>a dejarla de lado cuando su veta creativa
empezó a apagarse. Dejó de tener el protagonismo anterior y poco a poco la
fueron marginando. Entró en crisis a partir de una pelea verbal con Sebastián y
Tania. Después le siguió un capítulo depresivo de carácter leve para
transformarse en poco tiempo en severo. Sus ataques de nervios la llevaron a
agredir violentamente a Tristán en “No Limits”. A lo que siguió un ingreso en
una clínica psiquiátrica. Allí estuvo varios días hasta que se recuperó. <span style="margin: 0px;"> </span>Marlene quiere culparse sin sentido de ello. <i style="mso-bidi-font-style: normal;">-Y yo la abandoné pensando que ya no le
interesaba.- </i>Olly se fija en el cristalino de Marlene, está a punto de
lágrima. <span style="margin: 0px;"> </span><i style="mso-bidi-font-style: normal;">– No debes pensar eso. No podías saber lo que ocurrió. Por entonces ya
te habías marchado. Ella estaba en pleno conflicto por su situación en la LCL.
- <span style="margin: 0px;"> </span></i>Marlene vuelve a intervenir. <i style="mso-bidi-font-style: normal;">- ¡Desconocía esa situación! Tal vez si
hubiese estado mas cerca…- </i>Cristhian le aclara. <i style="mso-bidi-font-style: normal;">– Tampoco habrías podido hacer nada. Ese nuevo enfrentamiento con sus
hermanos le hizo mucho daño psicológico y afectivo, era el enésimo y no pudo
soportarlo, tu ausencia era en aquel momento lo menos importante para ella.-</i>
Marlene insiste en su idea. <i style="mso-bidi-font-style: normal;">– Si hubiese
podido estar a su lado… -</i> Esta vez es Olli quien rebate a Marlene. <i style="mso-bidi-font-style: normal;">- No puedes saberlo. Es posible que hubiese
sido bueno, pero también peligroso, en su estado mental también te podría haber
arrastrado. Las cosas son como vienen. Ya no puedes cambiarlas. Ahora toca
recoger los pedazos después del desastre. –</i> Ricardo intercede.<span style="margin: 0px;"> </span><i style="mso-bidi-font-style: normal;">- Quizás fuese bueno que no estuvieses entonces pero estés ahora.-</i>
Se muestra como un amigo leal y le hace ver que el futuro puede ser más
esperanzador ahora que hace un año. Continuaron hablando hasta que el
restaurante prácticamente cerró. Cuando se quedó a solas con su hermana, no
hizo falta preguntarle, Dana se confesó sin que Marlene se lo pidiera. Nunca le
dijo nada de todo lo acontecido con Rebecca por expreso deseo de la propia Rebecca.
Aun sabiendo que estaba mal no quería que su sufrimiento fuera la causa de un
regreso que quizás Marlene no desease hacer. No quería obligarla. <i style="mso-bidi-font-style: normal;">– ¡Dana! Estoy enamorada de Rebecca. La
quiero como no he querido a nadie. Respeto tu honestidad para con ella. Pero ¡Debiste
decírmelo! ¡Soy tu hermana!-</i> <span style="margin: 0px;"> </span>Dana
trata de ser honesta. <i style="mso-bidi-font-style: normal;">- ¡Lo sé! Me
arrepentí en el mismo momento que le hice esa promesa a Rebecca. Pero ¿Qué
podía hacer?-</i> </span></span></div>
<br />
<div style="margin: 0px;">
<br /></div>
<br />
<div style="margin: 0px;">
<span style="font-family: "comic sans ms"; margin: 0px;"><span style="font-size: large;">En este último año Marlene es la primera
visita que efectúa a Düsseldorf. Los<span style="margin: 0px;">
</span>trabajos en el teatro han alargado la ausencia más tiempo del que ella
misma hubiese deseado. No conocer, en su momento, el lamentable estado
emocional de Rebecca le causa una gran perturbación. Cuando regrese a New York se
ocupará de <span style="margin: 0px;"> </span>ello. </span></span></div>
<div style="margin: 0px;">
<span style="font-family: "comic sans ms"; margin: 0px;"><span style="font-size: large;">Una visita ineludible es la que realiza antes
de partir a LCL. No podía dejar de visitar a su amiga Tania antes de regresar a
New York. Su amiga y perturbación constante. Cuando se presenta en la puerta
del despacho, Tania frunce el entrecejo. <i style="mso-bidi-font-style: normal;">-
¡No puedo creer lo que estoy<span style="margin: 0px;"> </span>viendo! La
amiga pródiga regresa a casa.-</i> Marlene no oculta cierta frialdad pero se
abrazan con afabilidad. <i style="mso-bidi-font-style: normal;">– ¡Yo también te
quiero!-</i> Le dice con ironía. Marlene acerca una silla hacia la mesa de
Tania. Durante un rato charlan sobre la vida de Marlene en Los Angeles y Tania
le cuenta cosas de la familia Lahnstein, las conspiraciones y los escándalos de
algunos de sus miembros, como de costumbre. En un momento de la conversación
surge el nombre de Rebecca. Tania se pone tensa. <span style="margin: 0px;"> </span><i style="mso-bidi-font-style: normal;">– Dejó
de ser la gran diseñadora que era. Se convirtió en un mero espécimen que vagaba
por el castillo y de vez en cuando venía por aquí a dar la lata. La tuve que
despedir. No la he vuelto a ver. Sé que se ha marchado, una alegría para
Düsseldorf.-</i> Marlene se encoleriza. <i style="mso-bidi-font-style: normal;">-
¿Sabes que tuvo una depresión y ha estado en tratamiento psiquiátrico? -</i> Marlene
le pregunta con agresividad. <i style="mso-bidi-font-style: normal;">-¡Sí! ¡Lo
sé! Pero no le sirvió de nada. Se fue hecha una mierda.-</i> De nuevo el
cólera, Marlene se sosiega<i style="mso-bidi-font-style: normal;">. - ¡La he
visto en New York! Está perfectamente y triunfando como diseñadora.-</i> Tania
abre los ojos sorprendida mirando con actitud despreciativa. <span style="margin: 0px;"> </span><i style="mso-bidi-font-style: normal;">- ¡No lo
sabía! Me alegro que le vaya bien.-</i> Marlene toma aire<span style="margin: 0px;"> </span>en profundidad. Está muy indignada por los
comentarios de la que ya considera su ex amiga. La mirada no puede ser mas
hostil. No tolera ese comportamiento en alguien que siempre había apreciado y
respetado<i style="mso-bidi-font-style: normal;">. - Como siempre el sello de los
Lahnstein. Nadie fue capaz de ayudarla cuando lo necesitó. Pero la compañía, si
que la necesitaba para su propio beneficio. La habéis explotado hasta la extenuación
y, cuando es ella la que os necesita, la abandonáis para que se pudra por
improductiva. Ella sola vale mas que todos vosotros juntos. Ella sola,
¿Entiendes? Se ha levantado sin ayuda de nadie. Cuando me he encontrado con
ella la he visto cambiada sí, pero feliz de no teneros cerca.-</i> Tania se
percata de la indignación de Marlene. El tono de su reprimenda le indica que
puede ser el fin de su relación. <i style="mso-bidi-font-style: normal;">- ¿Sabes
una cosa? Cuando quisiste meterme en uno de tus escándalos para promocionar le
empresa, me importó menos, que lo que le habéis hecho a Rebecca tú y sus
hermanos. Sabes que la amo y que me importa más ella que yo misma. Comprenderás
que mi indignación sea grandiosa. Hasta ahora he querido ser correcta en
nuestra amistad con todo la que has intentado,<span style="margin: 0px;">
</span>pero lo que siempre has estado cosechando, ya lo has conseguido. ¡Da por
finalizada nuestra amistad! Y a los Lahnstein que les den. -</i> Sin más
explicaciones se levanta de la silla y sale del despacho con aire decidido. Al
llegar a la puerta se da la vuelta y con tono de desagrado le espeta. <i style="mso-bidi-font-style: normal;">– Por cierto ¡Coloca tu la silla! Y cierra
la puerta.-</i> Dando un giro con gran altivez, se aleja con paso firme.</span></span></div>
<b></b><i></i><u></u><sub></sub><sup></sup><strike></strike><span style="font-size: large;"></span>Francisco Freijaneshttp://www.blogger.com/profile/07136887969142331609noreply@blogger.com1